Pastoreando el rebaño de Dios

1. ¿Qué instrucción da el apóstol Pedro a los superintendentes de la congregación?

EL APÓSTOL Pedro dió instrucciones: “Por lo tanto, a los hombres de mayor edad entre ustedes les doy esta exhortación, . . . Pastoreen la grey de Dios bajo su custodia, no por fuerza, sino voluntariamente, tampoco por amor de ganancia deshonrosa, sino con anhelo, ni como enseñoreándose de los que son la herencia de Dios, sino haciéndose dechados de la grey. Y cuando haya sido manifestado el pastor principal, ustedes recibirán la corona inmarcesible de gloria.” (1 Ped. 5:1-4) Penetren estas palabras profundamente en su mente; repáselas vez tras vez hasta que las haya hecho suyas, porque esta exhortación dada por el apóstol tiene que ser obedecida por todo pastor en la organización de Dios. De otra manera será descalificado y desaprobado.

2. ¿A quién pertenecen las ovejas? Explique.

² Los hermanos dedicados son el rebaño de Dios. Ellos son su herencia. Se confía un gran depósito a los pastores que reciben la custodia del rebaño de Dios. Estas ovejas han sido redimidas por la sangre preciosa del Cordero de Dios, su Hijo unigénito; de modo que son una posesión comprada, un tesoro cuyo dueño es Jehová. Las ovejas no son propiedad del subpastor, sino que las coloca en su custodia el Pastor Principal. Por lo tanto hay que cuidarlas como algo que se hace a Jehová mismo. Todos los que han sido nombrados como pastores (o superintendentes) sobre cualquier parte del rebaño tienen que darse cuenta de la tremenda responsabilidad que tienen ante Jehová Dios y Cristo Jesús. Recuerden cómo Jehová mismo se encargó de sus propias ovejas, alimentándolas, conduciéndolas, protegiéndolas, soportándolas con paciencia a todo tiempo. También, tengan ustedes siempre presente cómo nuestro Señor Jesús cuidó las ovejas de su Padre, no perdiendo ninguna de ellas y sirviendo continuamente en el temor de Dios, aunque servía en amor y por amor.

3. ¿Cómo tienen que tratar a las ovejas los pastores?

³ Las ovejas tienen que ser tratadas por los subpastores de la misma manera que las trató el Pastor Principal. Esto tiene que ser por medio de conducir las ovejas a praderas donde sean alimentadas espiritualmente y así se hagan fuertes y con el tiempo puedan ayudar a las más débiles. Hay que estimularlas a asistir a las reuniones semanales de congregación, así como a las asambleas, y ayudarlas a predicar la verdad con sermones eficaces de puerta en puerta y de revisitas. Hay que mantenerlas dentro de los arreglos teocráticos de la sociedad del nuevo mundo. Trátenlas gentilmente con amor y gran consideración, porque las ovejas se asustan fácilmente y corren; y con ternura, porque las magulla el tratamiento áspero o tosco. No tienen ningún medio de defensa, como otros animales, cuando se les ataca. Lo único que hacen es correr, y a veces se meten en mayores peligros.

4. ¿Cómo se nombra a los pastores, y por qué tienen que vivir en el temor de Jehová?

⁴ Los pastores son una dádiva a la congregación de Dios. Son dádiva de Dios. El apóstol Pablo escribió: “Dió algunos como apóstoles, . . . algunos como pastores.” (Efe. 4:11) A tales pastores él dijo: “Presten atención a ustedes mismos y a todo el rebaño, entre quienes el espíritu santo los ha nombrado superintendentes, para apacentar a la congregación de Dios, que él compró con la sangre del [Hijo] suyo.” (Hech. 20:28) Si, ahora, usted es un pastor entre las ovejas, hágase usted mismo la pregunta: ¿Estoy prestando atención al rebaño sobre el cual soy responsable? Usted fué nombrado como pastor por espíritu santo; por lo tanto usted no debe descuidar dicho nombramiento. Usted no debe pecar contra el espíritu. Jesús dijo: “La blasfemia contra el espíritu no será perdonada. . . . a cualquiera que hable contra el espíritu santo, no le será perdonado.” (Mat. 12:31, 32) Usted no se atreve a contrariar el espíritu santo, ¿no es verdad? Pues se le considerará responsable. Por lo tanto usted tiene causa para temer si no está cuidando de sus deberes de manera apropiada. Interróguese a usted mismo para ver si usted está viviendo en temor de Jehová Dios, ¿o no se le ha metido a fuerzas en la mente que él lo hace a usted responsable del trabajo de pastor? ¿Verdaderamente teme usted a Dios?

5. ¿Significa trabajo duro el pastorear? ¿Qué aprendemos de la experiencia de Jacob?

⁵ El trabajo del pastor era muy arduo. No era para alfeñiques. Conectadas con él había tales dificultades como ataques de leones, osos, lobos, ladrones que a veces asesinaban más bien que arriesgarse a ser identificados, el estar expuestos a toda clase de tiempo, manteniendo las ovejas en el redil y buscando las que se perdían—siempre estando alerta contra el peligro. La experiencia que Jacob tuvo hace mucho es esclarecedora, porque verdaderamente da una idea del trabajo de pastor. Él dijo a su suegro Labán: “Sus ovejas hembras y sus cabras no sufrieron abortos, y nunca me comí los carneros padres de su rebaño. Si algún animal era desgarrado no lo llevaba a usted. Yo mismo sufría la pérdida de él. Si uno era robado de día o era robado de noche, usted lo reclamaba de mi mano. Mi experiencia ha sido que de día el calor me consumía y el frío de noche, y el sueño se me huía de los ojos.” (Gén. 31:3.8-40) Igualmente hoy el cuidar ovejas no es tarea liviana.

6, 7. Cuando un pastor ama a sus ovejas, ¿qué hace? Y ¿cómo se muestra el cuidado de ellas en el Salmo 23?

⁶ Las ovejas no saben cuántas horas tienen que dedicarse al trabajo de pastorear. No saben del cuidado y la vigilancia constantes que se exigen del superintendente fiel que las vigila como vigilan los padres a sus hijitos. Un padre amoroso no repite continuamente a un hijo cuán duro tiene que trabajar para proveer un hogar, alimento y ropa, ¿no es verdad? Él quiere que sus hijos sean alegres y felices, aunque dándose cuenta de cierta cantidad de responsabilidad. Debido al amor que le tienen a la familia, el padre y la madre le sirven largas horas a ésta y no esperan recompensa alguna. Así también sucede con el fiel pastor y sus ovejas. Sirva usted a causa de que usted ama.

⁷ Usted no quiere perder ninguna de las ovejas que tiene a su cuidado, ¿no es verdad? La seguridad de las ovejas estriba en que se mantengan dentro del redil y dependan del pastor verdadero y propio que las vigila. El Salmo 23 nos asegura: “Jehová es mi Pastor. Nada me faltará. . . . Aunque ande en el valle de sombra intensa, nada malo temo, porque estás conmigo.” Por lo tanto usted tiene que vigilar que las ovejas no se extravíen del redil. Su trabajo es no dejar entrar a los merodeadores. Vele por las ovejas. Cuídese de los lobos con piel de oveja. Hoy multitudes de personas están afluyendo a la sociedad del nuevo mundo y hombres de toda clase están viniendo a ella. Queremos ayudar a hombres de toda clase a limpiarse y a dedicar su vida a Jehová Dios. A los que no lo hagan, y estén determinados a no hacerlo, ustedes tienen que vigilarlos, para protección de las ovejas. Pastores, vigilen el rebaño de Dios que está entre ustedes.

8. Muestre que un pastor debe abstenerse de agobiar a las ovejas.

⁸ Ustedes tienen que conducir las ovejas a las praderas, de otro modo se debilitarán y morirán. Muestren a las ovejas dónde pueden herbajar de la Palabra de Jehová. Enséñenlas a estudiar. Desmenúcenles el alimento mientras son jóvenes. Denles las explicaciones necesarias para que entiendan. Más tarde las masticarán por sí solas. Muéstrenles las verdades preciadas de la Palabra de Dios. Desplieguen ante ellas los propósitos de Jehová. Al comer querrán ir de un lado a otro de los pastos. Muéstrenles cómo pueden ellas ayudar a todavía ‘otras ovejas’ a comer buen alimento y a hacerse fuertes. Entrénenlas a predicar constantemente. Condúzcanlas en el camino en que deben andar. No las agobien con los problemas que ustedes tienen. Más bien, consideren sus problemas con otros pastores, y si ellos no los pueden ayudar a ustedes, lleven sus problemas al Buen Pastor y al Pastor Principal, Jehová Dios. ‘Arrojen toda su ansiedad sobre él, porque él los cuida. No pierdan su juicio, sean vigilantes.’ (1 Ped. 5:7, 8) Él tomará la carga de ustedes y contestará sus oraciones, pero ciertamente lleven sus propias cargas y no las descarguen en las ovejas. Lleven ustedes la carga y manténganlas felices y en buena salud espiritual.

9. Relate cómo Pedro fué salvado por el cuidado y oración de su Pastor.

⁹ Recuerden la experiencia del apóstol Pedro, cuando Jesús le dijo: “Simón, Simón, ¡mira! Satanás ha demandado tenerlos a ustedes para zarandearlos como trigo. Pero yo he rogado por ti para que tu fe no ceda; y tú, una vez que hayas vuelto, da sostén a tus hermanos.” (Luc. 22:31, 32) Pedro fué salvado del poder de Satanás por la súplica de su Pastor a favor de él. Jesús no podía ayudarlo a causa de su propia prueba y muerte que se acercaban; de modo que oró al Pastor Principal, Jehová. Jehová oyó y contestó la oración haciendo que Pedro recobrara el juicio, y Pedro llegó a ser una torre de fortaleza para sus hermanos. La consideración que el Señor Jesús le mostró a Pedro en este caso debe hacer muy feliz a usted, pues “Jesucristo es el mismo ayer y hoy, y eternamente.” (Heb. 13:8) Él es nuestro Intercesor. Cuando usted vea que viene peligro, ore a Jehová por Sus ovejas, para que no se pierdan. Si una de Sus ovejas está pasando una prueba grande, no empeore la situación, sino que trate de aliviarla con buen ánimo, recordándole la buena Palabra de promesa de Dios. Ore por sus hermanos pidiendo que Satanás no los zarandee como trigo. Cierto es que tenemos que ocuparnos de nuestros propios asuntos, pero tenemos que ayudar a otros en lo espiritual. Ése es el asunto de usted; si no, ¿por qué es usted pastor?

10. ¿Cómo tiene que hallarse el pastor ‘gastando y siendo gastado’?

¹⁰ Nuestro servicio como pastores debe ser liberal. El apóstol Pablo, un pastor fiel, no pensó en sus comodidades personales. Lea sus experiencias en 2 Corintios 11:21-33. Fué golpeado con varas, fué apedreado, estuvo en peligro por parte de su propia raza, por parte de las naciones, estuvo en peligros en el mar, en las ciudades, pasó noches en desvelo—y ¿por qué? Para poder rendir buenas cuentas a Jehová Dios, quien, por medio de Cristo, le había dado instrucciones: “Te estoy enviando, para que les abras los ojos, para volverlos de las tinieblas a la luz y de la autoridad de Satanás a Dios.” (Hech. 26:17, 18) Él dijo: “Por mi parte, muy gozosamente gastaré y seré completamente gastado por sus almas.” (2 Cor. 12:15) ¿Evita usted tener que dar su fuerza y su tiempo o sufrir, o renunciar a sus comodidades por las ovejas? ¿Está usted ‘gastando y siendo gastado’ por el rebaño de Dios? Todos los apóstoles gastaron y fueron gastados.

11, 12. ¿Cómo es posible perder ovejas? Y ¿cómo puede evitar esto el pastor?

¹¹ El Señor Jesucristo puso el ejemplo para todos, y su hoja de servicios es perfecta. Como fiel pastor no perdió una sola oveja. Examine usted su propia hoja de servicios. ¿Ha sido usted culpable de perder alguna de las ovejas de Dios? Se sabe que algunos se apartan porque no tienen el corazón fijo en Jehová, y algunos tal vez se marchen hablando injuriosamente. Pero, ¿qué hay de todos los otros? ¿Ha perdido usted algunos a causa de su descuido o negligencia, o por haberlos ofendido, o por no haberlos conducido en los caminos y ministerio de Jehová y Cristo? ¿Ha habido algún descuido en alimentarlos, no atendiéndolos con revisitas, no conduciendo estudios bíblicos con ellos, no ayudándolos en las reuniones? Cuando han estado débiles, ¿ha ido usted rápidamente en su ayuda, o sólo ha mostrado indiferencia? Si han estado enfermos espiritualmente, ¿los ha atendido usted? Que cada uno se examine a sí mismo y considere este trabajo de pastorear más cabal y más cuidadosamente en lo que concierne a él mismo, y no a otro.

¹² A veces la condición deplorable de las ovejas exige ayuda urgente. Demuestre que usted es un pastor verdadero y fiel del rebaño. ¿Ha tratado usted de entender el problema que los del rebaño tienen, de considerar su verdadera dificultad, su educación, circunstancias domésticas, u oposición en el hogar? ¿Se hallan a la intemperie? Si usted puede, ayúdelos personalmente o por medio de alguna otra persona. Si usted no puede llegar a ellos, siempre tenga presente que usted puede orar. Nuestro Señor Jesús oró por Pedro cuando no podía ayudar a Pedro personalmente. No tenga en poco el poder de la oración. Las Escrituras declaran: “Y la oración de fe sanará al indispuesto, y Jehová lo levantará. También si ha cometido pecados, se le perdonará. Por lo tanto confiesen abiertamente sus pecados los unos a los otros y oren los unos por los otros, para que sean curados. La súplica de un hombre justo cuando está en acción tiene mucha fuerza.” (Sant. 5:15, 16) Siempre tenga presente cuán considerados y tiernos han sido para con usted Jehová, el Gran Pastor, y Jesús, el Pastor Propio.

RECOGIMIENTO DURANTE EL “TIEMPO DEL FIN”

13. ¿Cómo recogerá el Gran Pastor todas sus ovejas?

¹³ El Gran Pastor prometió que en el “tiempo del fin” recogería todas sus ovejas. Serían recogidas de todas partes del mundo. (Eze. 34:11-16, Mod) Los subpastores de Jehová tienen que hallar estas ovejas perdidas. Las ovejas conocen la voz del pastor; de modo que usted tiene que seguir llamándolas. No puede ser cualquier voz, pues las ovejas no responden a una voz extraña. Jesús dijo: “Las ovejas le siguen, porque conocen su voz. A un extraño de ningún modo le seguirán sino que huirán de él, porque no conocen la voz de los extraños. . . . Yo soy el pastor propio, y conozco a mis ovejas y mis ovejas me conocen a mí, así como el Padre me conoce y yo conozco al Padre.” Luego tocante a las “otras ovejas” él dijo esto: “A ésas también tengo que traer, y escucharán mi voz, y llegarán a ser una sola manada, un solo pastor.”—Juan 10:4-16.

14, 15. ¿Cuál es la voz del Pastor Propio? ¿Cómo está siendo amplificada?

¹⁴ Hoy la voz del Pastor Propio está siendo amplificada por todas partes en más de 160 países. ¿Qué es esa voz? Pues, la buena Palabra de Jehová y de Cristo Jesús. No sólo nuestra publicación de la santa Palabra misma, sino el hacer nosotros que hable por medio de mostrar nosotros su cumplimiento en las condiciones existentes entre el pueblo de Dios y en el mundo. Recuerde la primera vez que usted percibió que la Palabra de Dios estaba siendo cumplida. ¿No se le regocijó el corazón? Usted sabía que hay un Dios en el cielo. Existe realmente. Posiblemente usted haya tenido dudas, pero ahora usted sabe que Dios es. ¡Qué gozo y felicidad! La Palabra le estaba hablando a usted. Era viva, una Palabra viviente, con poder para hacer que usted pensara y obrara.

¹⁵ Multitudes se están congregando a los testigos de Jehová hoy día, y estas personas de buena voluntad están entrando tan aprisa que es difícil cuidarlas a todas. ¿Por qué vienen? Porque han oído la “voz” del Pastor Propio. Han oído que Dios está con la organización pastoral verdadera. Entonces, nuestro trabajo como pastores fieles, es estar seguros de que se oiga la voz, y para hacer eso tenemos que transmitir esa voz a todo lugar posible. Las ovejas están perdidas, por eso hay que buscarlas y seguir llamando en voz alta para que sepan que el Pastor Propio está cerca. Ellas quieren estar con él, pero andan perdidas.

16. Describa lo que aprendemos hoy día de la ilustración de la “oveja perdida.”

¹⁶ Si supiésemos dónde hallar a estas ovejas perdidas sería comparativamente fácil, ¿no es verdad? Pero tenemos que buscarlas de casa en casa, de calle en calle, de aldea en aldea, de ciudad en ciudad. Verdaderamente hay gran felicidad cuando uno las halla. Jesús dió la ilustración de un pastor que tenía cien ovejas, y una se perdió. De modo que dejó a las noventa y nueve y fué tras de la que se había perdido. “Y cuando la ha hallado se la pone sobre los hombros y se regocija. Y cuando llega a casa convoca a sus amigos y a sus vecinos, diciéndoles: ‘Regocíjense conmigo, porque he hallado mi oveja que estaba perdida.’” (Luc. 15:4-7) A menudo requiere fuerza, tiempo y dinero el seguir buscando las ovejas perdidas, ¡pero qué gran gozo cuando uno las halla! Sigan haciendo sonar fuertemente el mensaje de la verdad de Jehová, haciendo que sea oída la voz de Su alabanza. Usted oyó su voz y ahora es feliz. Por eso siga buscando las otras ovejas perdidas. Sea un pastor fructífero y consiga aprobación.

CARACTERÍSTICAS DE LAS OVEJAS VERDADERAS

17. ¿Cuál es la primera responsabilidad de una oveja verdadera?

¹⁷ Consideremos ahora a las ovejas mismas. Al leer usted estas palabras, ¿por qué no se pregunta usted mismo: ¿Soy una de las “otras ovejas” del Señor? ¿Soy parte del rebaño de Dios? Si su respuesta es afirmativa, entonces usted es una persona muy privilegiada por pertenecer a tan maravillosa herencia. Como oveja de Dios usted no es posesión de ningún hombre, sino que pertenece a Jehová Dios y a Su amado Hijo. Por lo tanto su primera responsabilidad es oír y seguir la “voz” de ellos, y ciertamente usted no escuchará la voz de persona alguna que no hable con la autoridad de ellos. No vaya en pos de una “voz” extraña. El Pastor Propio ciertamente lo conducirá a usted por descansaderos donde abunda el agua, refrescando su alma, untándole la cabeza con aceite, haciéndolo recostar en praderas herbosas en seguridad. Nunca le faltará a usted cosa alguna.—Salmo 23.

18, 19. ¿Qué arreglo hace el Pastor Propio para pastorear al rebaño, y cómo pueden distinguir las ovejas quiénes son los “pastores verdaderos”?

¹⁸ El Señor Jesucristo, el Pastor verdadero y propio, es invisible a la vista de usted, pero no se le deja a usted sin sus pastores visibles, a quienes él ha dado para que se encarguen de cuidar los intereses del rebaño. Siga a los pastores fieles. Jamás lo descarriarán a usted, ni harán que le sobrevenga algún daño. Pero, usted pregunta, ¿cómo puede uno identificar a los pastores verdaderos? Lo de la mayor importancia es que ellos tienen que ser nombrados al puesto por Jehová Dios y Cristo Jesús, y tienen que tener la aprobación de ellos, y eso significa que ellos tienen el espíritu de Dios. Usted conocerá esto por medio de la fe de ellos y su comportamiento y obras. Una persona que sólo profesa ser un pastor no lo es necesariamente. Los pastores del Señor Dios no han de ser identificados por alguna indumentaria peculiar ni por algún título altisonante ni por haber conseguido algunos grados de enseñanza superior. Ellos tienen que ser “enseñados de Dios.” Usted puede confiar en los pastores verdaderos y fieles, pero no puede confiar en los que sólo profesan serlo. Usted tiene que tener cuidado, porque su vida podría estar en peligro. Los pastores falsos pueden descarriarlo a usted. Ellos están buscando adelantar, no los intereses de usted, sino sus propios intereses. El pastor “asalariado” correrá cuando venga el peligro; el pastor verdadero permanecerá con usted y estará pensando sólo en cómo puede ayudarle a usted a estar en paz y a vivir para el servicio de Jehová Dios. De modo que nunca escuche una “voz” extraña.

¹⁹ Los pastores verdaderos son siervos fieles del Señor Jesucristo. Son predicadores de la verdad, estudiantes sinceros y honrados de la santa Palabra de Dios. Están sirviendo al Altísimo Dios y a Cristo Jesús, no por lo que puedan sacar de su servicio, sino por lo que puedan dar a Jehová en gratitud por lo que ha hecho. Toda su conversación es hacia la justicia, hacia la santidad y hacia la paz. Estos pastores sufrirán gozosamente por las ovejas. Aguantarán persecución y aun estarán preparados para morir por las ovejas. Los pastores verdaderos nombrados por Jehová Dios tienen su aprobación, y esto se hace manifiesto por su vida dedicada. Éstos son los que lo conducirán a usted a las “praderas herbosas” y lo ayudarán a adquirir un conocimiento verdadero y acertado del Creador Eterno y de su Hijo, el Cordero de Dios. Lo ayudarán a usted a alabar y a magnificar el nombre de Jehová y a ensalzar el nombre de su Hijo como Rey de reyes y Señor de señores. Usted puede depender de pastores como éstos, porque ellos están sirviendo en pureza y en amor.

20. Las ovejas verdaderas no tendrán ¿qué características? ¿Qué tienen que hacer ellas?

²⁰ Como oveja del Señor, usted tiene que tener la disposición o actitud mental correcta, porque usted tiene que reconocer su servicio al Gran Pastor y a su Hijo en el cielo. ¿Cuál es la disposición de usted, su actitud mental? ¿Es usted orgulloso? ¿Es usted presuntuoso? ¿Tiene usted el espíritu de un jactancioso? ¿Es usted una persona que siempre está fanfarroneando? ¿Es usted egoísta, haciendo a un lado a otros a empujones para que usted pueda salir adelante? ¿Se inclina usted hacia el materialismo? ¿Sólo se preocupa usted de usted mismo? ¿Es usted desagradecido, ingrato, una persona que no tiene aprecio por toda la bondad inmerecida de Jehová? ¿Desestima usted a otros? ¿Tiende usted siempre a estar criticando, humillando a otros, refunfuñando por lo que usted tiene que hacer? Si usted tiene la disposición o actitud mental cabría que refleja alguna de estas características, entonces usted tendrá que cambiar, porque usted no hallará felicidad, ni hallará paz o contentamiento con las ovejas del Señor mientras permanezca en dicha condición. No, usted tendrá que rehacer su mente.

21. Describa las características y la protección doble de (a) las ovejas naturales; (b) las “otras ovejas.”

²¹ Consideremos las ovejas naturales. Son criaturas inofensivas, ¿no es verdad? A menudo son tontas, pero son inofensivas, dóciles y por completo carecen de engaño. Responden a la bondad y son obedientes a la llamada de su pastor. Lo único que el pastor tiene que hacer es pronunciar el nombre de las ovejas, y las ovejas corren hacia él. Las ovejas son bastante indefensas de por sí, sin embargo están expuestas a muchos peligros, como fieras, ladrones, etc. ¿En qué hallan defensa, entonces? Primero, en mantenerse juntas con las otras ovejas en el redil, y, segundo, en confiar en un pastor fiel que las vigila. Igual sucede con las ovejas del Señor al tiempo presente. Ustedes verdaderamente no conocen medios de defenderse contra los ataques de hombres y organizaciones feroces de este mundo. ¿Dónde está entonces su defensa? Está en permanecer con el rebaño de Dios, dentro del redil, y en confiar con todo su corazón en Jehová Dios, el Pastor del Israel espiritual, y en el Señor Jesucristo, el Pastor Propio, y en sus hermanos fieles que son nombrados para ser pastores del rebaño.

22. El pertenecer a la sociedad del nuevo mundo, ¿qué significa? Y ¿cómo se le protege a usted?

²² Hoy Jehová Dios tiene una organización teocrática. El Señor Jesús es el Pastor Rey y Superintendente de toda esa organización, y los que son nombrados en la organización para ser superintendentes tienen la responsabilidad de cuidar las ovejas que pertenecen a la sociedad del nuevo mundo. Los que han sido iluminados y a quienes se les han abierto los ojos para entender la verdad conocen el arreglo bendito creado hoy para que se asocien en este redil teocrático, la organización del pueblo de Dios, los testigos de Jehová, que son gobernados por pastores fieles que trabajan bajo la junta administrativa jurídica de esta organización, la Sociedad Watch Tówer Bible and Tract. Manténganse dentro de sus límites. Recuerden, no hay protección aparte de la provisión que Jehová Dios ha hecho para su pueblo. A veces hombres mal intencionados tratarán de aprovecharse de ustedes; los pastores fieles estarán alerta y se lo impedirán. Organizaciones de este mundo a veces tratarán de introducirse a fuerza y causar daño, pero todavía ustedes están protegidos por los Pastores en el cielo, y ellos tienen a su mando los ángeles, que son “millones de millones.” Por lo tanto, ustedes están protegidos por hombres fieles aquí y por las fuerzas invisibles bajo la dirección del Señor Jesucristo. Ustedes no tienen por qué temer, porque ustedes son el rebaño de Dios.

CONFIANDO EN PASTORES FIELES

23. (a) ¿Por qué puede usted confiar en los pastores fieles? (b) Si un Pastor se hace infiel, ¿qué pasos se dan para protegerlo a usted?

²³ ¿Pueden ustedes confiar en sus hermanos fieles? Sí, por esta razón: No los nombrarán para ser pastores los que tienen la responsabilidad en la organización del Señor a menos que reúnan los debidos requisitos. Tienen que elevarse a la altura de las normas correctas y tener la debida habilidad para servir como pastores del rebaño. En primer lugar, tienen que pastorear el rebaño en el temor de Dios. Si verdaderamente no temen a Jehová Dios y a Cristo Jesús, entonces no son pastores verdaderos, y no se les nombrará para cuidar el rebaño de Dios. A veces puede suceder que la persona nombrada a tal puesto no haya estado cuidando el rebaño, y quizás haya estado oprimiendo. Si éste es el caso, y si el rebaño ha sufrido daño de manera alguna, primero se le aconseja a él y se le corrige y disciplina, y si ese pastor no cambia sus métodos será quitado del puesto a que se le ha nombrado como pastor y otro será nombrado en su lugar. ¿Por qué debe ser así? Ustedes son el rebaño de Dios, y en su asociación con el pueblo de Dios en la sociedad del nuevo mundo ustedes no serán perjudicados, pues sólo pastores fieles continuarán sirviendo. Esto significa que sus hermanos en la verdad están sumamente interesados en el bienestar de ustedes. Ellos quieren que ustedes consigan la vida eterna. Ellos no los arrearán, ni se enseñorearán de ustedes, porque ustedes son la herencia de Dios. Cualquiera que les haga daño a ustedes está haciendo daño a los intereses de Dios, y tendrá que habérselas con Dios y no con hombres.

24. (a) ¿Cómo es que no somos “servidores de hombres” y no obstante servimos bajo hombres? (b) Y ¿qué actitud correcta debe tomarse para con estos pastores?

²⁴ También, ustedes tal vez hayan oído a algunos decir: “Nosotros no servimos a hombres. Servimos a Jehová Dios y a Cristo.” ¿Significa esto, entonces, que usted puede pasar por alto a los hombres? ¿Puede usted servir a Dios sin servir bajo hombres? No. Aun en los días del Israel natural, Israel sirvió bajo Moisés su medianero, así como también bajo otros hombres fieles. En los días de los apóstoles, ¿no sirvieron las ovejas bajo los apóstoles? “Dios ha colocado a los miembros respectivos en la congregación.” (1 Cor. 12:28) El apóstol Pablo mandó: “Ahora les pedimos, hermanos, que estimen a los que trabajan duro entre ustedes y presiden sobre ustedes en el Señor y les dan amonestación, y muestren aun más que consideración extraordinaria para con ellos en amor por causa de su trabajo. Sean pacíficos unos con otros.” (1 Tes. 5:12, 13) Otra vez: “Que los de mayor edad que presiden de manera correcta sean considerados dignos de doble honra, especialmente los que trabajan con ahínco en hablar y enseñar.” (1 Tim. 5:17) De estos textos claramente se ve que sería incorrecto pasar por alto a los siervos del Señor, o aun tratarlos a la ligera, o sólo de manera ordinaria, porque son personas nombradas de Jehová. Han sido escogidos para servir al rebaño de Dios. Por lo tanto, el pensar que uno puede pasar por alto a los superintendentes entre el rebaño deshonra a Dios, y llevará a uno a sendas incorrectas.

25. ¿Por qué tienen que ser sumisas y obedientes las ovejas para con los que gobiernan?

²⁵ Las ovejas tienen una grande responsabilidad para con el pastor, que no puede ser pasada por alto o evitada. Las ovejas no sólo tienen que ser sumisamente obedientes a Jehová Dios y a Cristo Jesús sino que también tienen que ser sumisas y obedientes a los que están gobernando al rebaño. No es prerrogativa del subpastor hacer reglas para las ovejas, sino que él tiene que explicar y aplicar la voluntad de Jehová para ellas. Escuche el buen consejo del apóstol Pablo: “Sean obedientes a aquellos que los están gobernando y sean sumisos, porque ellos están vigilando por sus almas como los que han de dar cuenta, para que hagan esto con gozo y no con suspiros, por cuanto esto sería perjudicial para ustedes.”—Heb. 13:17.

26. ¿En el temor de quién ha gobernado la clase del “esclavo fiel y discreto,” y por qué?

²⁶ Es sumamente vital entender que los intereses del Reino pertenecientes a la tierra han sido colocados enteramente en la custodia de la clase del “esclavo fiel y discreto.” (Mat. 24:45-47) Este siervo tiene que vigilar por todas las ovejas constantemente. ¡Qué responsabilidad tan tremenda! Las almas de todos estos centenares de miles de ovejas se han puesto bajo el cuidado de la clase pastoral de Dios en la tierra, el “esclavo fiel y discreto.” Esa clase tiene que rendir cuentas a Jehová Dios por su trabajo de pastorear. No vaya a pensar ninguna oveja que los que componen la clase pastoral tratan a la ligera esta gran responsabilidad. Ellos saben con absoluta certeza que Jehová Dios y Cristo Jesús los consideran responsables de la vida de las ovejas. Los que hoy día están sirviéndoles y cuidándolos a ustedes son hombres temerosos de Dios que reconocen que la manera en que los tratan a ustedes está bajo el escrutinio constante de los que están en el cielo. Ellos son “como enviados de Dios, a la vista de Dios, en compañía con Cristo.” (2 Cor. 2:17) Sí, los de la clase del “esclavo fiel y discreto” al servirles a ustedes que son las ovejas, lo hacen en el temor de Jehová Dios. Ustedes son un rebaño de ovejas protegido. Ningún daño les vendrá de parte de sus hermanos fieles.

27. ¿De qué manera han protegido, conducido y alimentado a las ovejas la junta administrativa espiritual y las personas que ha nombrado?

²⁷ La junta administrativa espiritual de los testigos de Jehová, asociada con la Sociedad Watch Tówer Bible and Tract de Pensilvania, ha ejecutado su servicio en el temor de Jehová. Las personas que este cuerpo gobernante ha nombrado, siguiendo el ejemplo del Pastor Propio, han estado haciendo la misma cosa y también han avanzado y ejecutado su trabajo en el temor de Dios. Y ¿no se ha cuidado de las ovejas? Sí, se ha cuidado de ellas. Las ovejas han sido alimentadas todos estos años con rico alimento espiritual. No ha habido hambre entre ellas. Nunca han tenido que pasarla las ovejas sin una sola comida espiritual. Los que componen la clase fiel de pastores en la tierra nunca han tomado la gloria para ellos mismos, ni han tratado de dirigir el corazón y la mente de las ovejas hacia ellos mismos, sino que siempre los han dirigido hacia los Pastores celestiales. Las ovejas han sido protegidas de doctrinas falsas y errores. Se nos ha advertido respecto a los planes malignos de Satanás. Las ovejas han sido protegidas de descarriarse a la inmoralidad, al materialismo, a la adoración de criaturas, a las amistades con el mundo inicuo, de tantísimos otros peligros demasiado numerosos para mencionarlos. Pero, ¿por qué se ha hecho esto? La respuesta es: Por causa de ustedes estos hermanos han dado gozosamente todo lo que tienen para servir a ustedes que son las ovejas, para que vivan en la paz y el favor de Jehová Dios.

28, 29. ¿Por qué se consideran tan bendecidas las ovejas? ¿Qué resultará en mayor aumento?

²⁸ Las ovejas han sido ayudadas por los pastores fieles a saber cómo servir a Jehová Dios y a Cristo Jesús de un modo aceptable, cómo predicar las buenas nuevas del Reino, cómo ‘decir las buenas nuevas de salvación por él,’ cómo decir su alabanza, cómo contar sus actos gloriosos a los hijos de los hombres, cómo publicar la paz, cómo dar a conocer los maravillosos propósitos de nuestro Padre celestial y su Hijo Cristo Jesús. (Sal. 96:2) Las ovejas han sido entrenadas a hacer estas cosas ellas mismas y se les ha enseñado a entrenar a todavía otras a hacerlas. Las ovejas han sido unidas, y las ovejas perdidas han sido introducidas en el redil. ¡Benditas ovejas! ¡Cuán maravillosamente favorecidos son ustedes por ser las ovejas de Dios y por ser cuidados por los pastores fieles, y por estar tranquilos con confianza al saber que ellos son hombres probados, fieles! Rebaño de Dios, ustedes están protegidos de daño, porque sus pastores fieles en la tierra tienen que rendir cuentas a Jehová Dios y a Cristo Jesús a favor de ustedes.

²⁹ Ha llegado el tiempo de hacer aumentar el rebaño. Todas las ovejas han de ser recogidas, y Jehová Dios ha mandado que su pueblo las traiga desde el norte y el sur y el oriente y el occidente. (Isa. 43:1-7, Mod) Hoy se hace resonar la voz del Pastor Propio en más de 160 países, expresando consuelo a todavía más de las personas semejantes a ovejas descarriadas. Vendrán en grandes cantidades. Ha llegado el día en que todas han de ser recogidas. La prosperidad del rebaño se promueve mejor cuando los pastores tienen presente su gran responsabilidad a Jehová Dios y a Cristo Jesús. Los miembros de la organización, las ovejas del Señor, facilitan el cumplir estos deberes mediante obediencia y sumisión.

30. Para permanecer protegidas, ¿qué tienen que continuar haciendo las ovejas?

³⁰ El rebaño de Dios se mantiene junto. No se extravía de la sociedad del nuevo mundo. En la organización del viejo mundo hay trampas y peligros. Los peligros se hallan en todas partes. Hombres y organizaciones se aprovecharán de ustedes, y ustedes no tendrán protección. Manténganse dentro de la organización de Dios. Para hacer esto tienen que aprender la voluntad de Dios. Tienen que hacerse obedientes a los requisitos teocráticos. Tienen que seguir la paz y obedecer la justicia. Tienen que ser guiados y pastoreados por los que han sido nombrados para ser los pastores. Al hacer estas cosas ustedes serán entrenados en el camino correcto para que puedan ofrecer alabanza al Dios Todopoderoso en el cielo, cuyo nombre Jehová es digno de toda nuestra alabanza. Regocíjense en su liberación del viejo mundo y su entrada en la sociedad del nuevo mundo, y estén felices por todas las cosas que Jehová Dios ha hecho por ustedes y está ejecutando ahora a favor de ustedes, y por las cosas maravillosas que tiene almacenadas para ustedes cuando sea introducido el nuevo mundo después de la batalla del Armagedón. Ustedes que son de este rebaño feliz, regocíjense en este Gran Pastor del Israel espiritual y en su Pastor Propio, y sepan que ningún daño les sobrevendrá a ustedes, sino que para siempre Él los conducirá por praderas herbosas y por descansaderos donde abunda el agua, todo por causa de Su nombre.