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Atendiendo tu bienestar físicoTu juventud... aprovechándola de la mejor manera
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te digan que debes estar acostado a cierta hora, comprende lo correcto de esa guía que te dan. El que obtengas suficiente sueño cada noche mejorará la calidad y velocidad de tu trabajo. La vida se te hará más agradable y tendrás menos quejas.
18 Si apreciamos el don de la vida del cual disfrutamos en nuestro cuerpo, entonces debemos usarlo para honra de nuestro Hacedor y también para la de Su Hijo, que dio su vida para que pudiéramos adquirir vida eterna. Nunca debemos usar mal o descuidar nuestros cuerpos por simple negligencia o estupidez o por razones egoístas. Esto mostraría falta de respeto a Aquel a quien debemos nuestra vida. Más bien, sigamos este consejo bíblico: “Sea que estén comiendo, o bebiendo, o haciendo cualquier otra cosa, hagan todas las cosas para la gloria de Dios.” Él te recompensará abundantemente y te bendecirá por el aprecio que muestres a sus amorosas provisiones.—1 Corintios 10:31.
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Lo que dicen tu ropa y apariencia... de tiTu juventud... aprovechándola de la mejor manera
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Capítulo 7
Lo que dicen tu ropa y apariencia... de ti
1-4. ¿Por qué la manera en que nos vestimos dice algo acerca de cómo somos por dentro? Da ejemplos.
¿HAS admirado alguna vez las agradables variedades de color de un campo cubierto de flores en la primavera o te has maravillado ante los hermosos matices de color que se observan entre los peces tropicales? El ver estas cosas nos convence de que nuestro Creador aprecia la variedad y la belleza. No quiere que todo presente apariencia deslustrada, gris o monótona. ¡Y qué interesante es ver la gran variedad de estilos de la ropa entre la gente alrededor del mundo! Pero ¿te has puesto a pensar alguna vez cuánto dice en cuanto a lo que eres por dentro la apariencia que presentas por fuera?
2 Cuando eras de muy tierna edad tu ropa probablemente no decía mucho acerca de la clase de persona que eras. Tus padres seleccionaban la ropa para ti y te peinaban. Pero a medida que creciste ellos te permitieron tener más voz en cuanto a la selección de tu ropa, la manera de arreglarte el pelo y cosas por el estilo. Ahora entró en juego tu propia selección. Tu apariencia llegó a reflejar con claridad cada vez mayor lo que eres interiormente, tu propia personalidad. ¿Qué dicen acerca de ti tu ropa y apariencia?
MANTENIÉNDOTE EN EQUILIBRIO
3 Por lo general las personas que se enorgullecen mucho de sí mismas lo muestran por medio de prestar extremada atención a la moda. Siempre quieren “destacarse” entre todas las demás por su ropa o apariencia. Pero también se puede revelar orgullo y egoísmo con ser muy descuidado en cuanto a la ropa. ¿Por qué? Porque aunque quizás la persona de apariencia descuidada en su ropa simplemente sea perezosa, también pudiera tener la actitud egoísta del individuo a quien “poco le importa” el efecto que su apariencia tenga en otros. Entre estos dos extremos está la persona que no se cree demasiado grande y que se interesa en otros. Su apariencia mostrará eso por su buen gusto y moderación.
4 Hay jóvenes que creen que tienen que estar a la moda con todos los últimos estilos para no parecer anticuados. Pero entre ser persona “ultra conservadora” y exageradamente “moderna” hay una posición intermedia. Si te quedas en esa posición, entonces siempre serás una persona bien vestida y no tendrás que estar cambiando junto con todo cambio de la moda, como un títere que respondiera a cada tirón que se diera a una cuerda.
5-7. (a) ¿Quién realmente se beneficia cuando alguien trata de lucir siempre todos los últimos estilos de la moda? (b) Hasta cuando la persona no tiene mucho dinero, ¿cómo puede mostrar la ropa que lleva que esa persona tiene dignidad personal? (c) ¿Cómo pudieran aplicarse los principios que se encuentran en Filipenses 2:3, 4 y Romanos 15:2 a la manera en que nos vestimos?
5 Pregúntate: Al fin, ¿quién se beneficia de que yo siempre quiera lucir la última moda? Es el mundo comercial el que fundamentalmente fija los estilos y estimula a la gente a usarlos. Este es el gran interés de esas personas: sacar dinero. Si siempre haces lo que quieren las beneficiarás, pero en realidad tú no te beneficiarás de manera verdadera.
6 Aparentemente el andar con la ropa desaseada y descuidada no te costaría mucho dinero, pero te puede costar mucho de otras maneras. Puede costarte un empleo o costarte el respeto de las demás personas. Hasta cuando la ropa de alguien no es costosa, el que esa persona la mantenga limpia y nítida muestra que tiene dignidad personal. Las demás personas respetan más a esta persona y confían más en ella.
7 Una buena regla para todos los asuntos de la vida se encuentra en la Biblia en Romanos 15:2: “Cada uno de nosotros agrade a su prójimo en lo que es bueno para su edificación.” Las otras personas nos miran más de lo que nosotros nos miramos a nosotros mismos. Por eso, ¿no deberíamos tratar de darles algo que les sea agradable mirar? No algo que las perturbe en cuanto a su propia apariencia, sino algo que muestre que tomamos en consideración lo que piensan y sienten.
EL VESTIDO IDENTIFICA
8-11. (a) ¿Cómo se identifica a diferentes grupos o tipos de personas por la vestidura? (b) Por eso, ¿a qué conclusión pudiera llegar la gente según la manera en que se vista una persona, y cómo pudiera presentar problemas esto?
8 Tu manera de vestir dice algo acerca de ti en otro sentido. Te puede identificar con cierto grupo o clase. Esto era verdad aun miles de años atrás, cuando se estaba escribiendo la Biblia. Por ejemplo, en el libro de Segundo de los Reyes leemos acerca de unos mensajeros que regresaron para traer un informe al rey Ocozías y que le dijeron que se habían encontrado con un hombre que les dio cierto mensaje. El rey preguntó: “¿Cuál era la apariencia del hombre?” Cuando ellos describieron las prendas de vestir de éste, el rey dijo inmediatamente: “Fue Elías.” ¿Cómo sabía eso? Porque Elías llevaba puesto el vestido distintivo de un profeta.—2 Reyes 1:2, 5-8.
9 El ser identificado como profeta era una cosa honorable. Pero otro ejemplo bíblico muestra que el vestido de una persona también pudiera conectarla con lo que es deshonroso. Para lograr cierto propósito, Tamar, la nuera de Judá, se quitó las vestiduras que la identificaban como viuda y se puso un chal y un velo y se sentó al lado del camino. Cuando Judá pasó por allí, el registro dice que “al instante la tomó por ramera, porque se había cubierto el rostro [con el velo].” El traje que ella llevaba le daba la apariencia de una ramera de aquel tiempo.—Génesis 38:13-15.
10 Hoy, como en aquel tiempo, la manera en que nos vestimos puede conectarnos con ciertas clases de personas, aunque quizás no practiquemos lo que ellas practican ni creamos lo que ellas creen. La gente supone que por lo menos simpatizamos con la clase de personas que se visten así. ¿Pudiéramos culpar a la gente por eso?
11 La manera de vestir no solo distingue a los policías, los bomberos o las enfermeras; también distingue a personas cuya ocupación no es honorable. Hoy las rameras rara vez usan chales o velos como lo hacían en Canaán hace unos tres mil quinientos años. Sin embargo, la ropa muy reveladora y sugestiva que usan ahora señala aun más claramente la profesión que practican. Entre los hombres, los que favorecen las revueltas o la acción política radical también han usado estilos distintivos de ropa, y lo mismo hacen algunos homosexuales. ¿Queremos que se nos conecte con cualquiera de estas clases de personas? Si nos vestimos como ellas y como resultado de eso nos metemos en problemas —como al tratar de conseguir empleo o calificar para ciertos privilegios en la congregación cristiana— ¿debería sorprendernos esto?
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