Las normas de Jehová nos ayudan
“Que te dé conforme a tu corazón, y todo tu consejo te lo cumpla.” (SALMO 20:4.)
1. ¿Qué clase de patrones o normas son comunes (Deuteronomio 25:15)?
EN 1266 el rey Enrique III, de Inglaterra, decretó que un penique equivaldría al peso de 32 granos de trigo. Así estableció un patrón o norma. Una incontable cantidad de cosas a nuestro alrededor también están relacionadas con patrones o normas. Sintonizamos nuestro radio o nuestro televisor en un punto fijo (canal) para recibir una transmisión en una frecuencia patrón o normal. Otras normas demuestran la pericia; la destreza de un estudiante en su lectura puede medirse por medio de un examen normalizado o uniforme.
2. ¿Qué otra clase de normas no son comunes, y por qué?
2 Sin embargo, algo que es de mayor importancia que esos patrones o tipos son las normas relacionadas con los valores morales y la conducta moral. Sin éstas es inútil tener las normas del primer tipo. Por ejemplo, cierto consejo de educación superior halló que de 25.000 estudiantes, casi 50 por 100 dijeron que sus compañeros sacaron notas satisfactorias, no porque hubieran estudiado, sino debido a emplear medios poco honrados. ¿Qué hay de las normas de los funcionarios públicos? ¿Pueden los jóvenes de hoy día aprender normas relacionadas con los valores morales al observar a la mayoría de los líderes? La historiadora Barbara Tuchman hizo este comentario: “Se ha renunciado a la jefatura moral en el sentido de que se ha generalizado la actitud de no querer formular normas”.
3. ¿Por qué deberíamos esperar que Jehová tenga normas morales?
3 Pero ¿qué hay de Jehová Dios? Él tiene normas, así como un padre humano tiene valores y requisitos de conducta en el hogar y al tratar con otras personas. En la Biblia, Jehová, el Juez, Dador de Estatutos y Rey del universo, suministra leyes, reglas o principios claramente enunciados que dan a conocer Sus normas morales y lo que Él espera de los seres humanos... pautas en cuanto a cómo debemos andar. (Salmo 25:4, 5; 86:10, 11; Isaías 33:22.)
4. ¿Por qué deberíamos interesarnos en las razones por las cuales debemos aceptar las normas de Dios?
4 ¿Quién de entre nosotros negaría el valor de las normas de Jehová? Sin embargo, tal vez nos enfademos a causa de ellas cuando interfieren con algún deseo personal. Quizás minimizemos sus normas u objetemos al respecto, pensando que la nuestra es una situación excepcional o que exige un ajuste en las reglas. Por lo tanto, examinemos algunas razones por las cuales debemos aceptar las normas morales de Dios y cómo podemos beneficiarnos de ellas.
Las normas de Dios en comparación con las del hombre
5, 6. ¿Qué podemos aprender de lo que Jehová logró durante los primeros seis días creativos?
5 Después de los seis días creativos, Dios declaró que su obra era ‘muy buena’ (Génesis 1:31). Todo había sido creado en orden lógico y sin defecto. Las plantas y los animales ocupaban sus respectivos lugares y se reproducían de acuerdo con su género, sin tener que evolucionar hasta convertirse en nuevos géneros (Génesis 1:25). Pregúntese: ¿Con quién tuvo que consultar, o qué tuvo que consultar, Jehová para recibir instrucciones relacionadas con su obra creativa? Está claro que contenía en sí mismo el conocimiento y la sabiduría para hacerlo todo. No solo para hacerlo, sino para hacerlo perfectamente, de tal modo que estableciera normas físicas (Isaías 40:12-14). Gracias a las normas de Dios podemos clasificar y reconocer a una gran cantidad de géneros de plantas, peces, aves y animales terrestres.
6 En cierta ocasión Jehová planteó algunas preguntas que pueden ayudarnos a comparar el conocimiento, las aptitudes y las normas de Dios con los del hombre. Dios preguntó a Job: “¿Dónde te hallabas tú cuando yo fundé la tierra? Infórmame, si de veras conoces el entendimiento”. Los científicos solo pueden calcular aproximadamente la edad del universo. Obviamente, los humanos no estuvieron presentes para saber cuándo creó Dios la Tierra o cómo la hizo. “¿Fue —preguntó Dios— desde tus días en adelante que diste órdenes a la mañana? ¿Hiciste tú que el alba conociese su lugar?” Los físicos estudian la rotación de la Tierra, tratan de imitar la fusión mediante la cual nuestro Sol produce la energía que sostiene la vida, y trabajan con fórmulas complicadas para explicar la naturaleza de algo tan común como la luz. ¿Qué se nota al comparar los logros de ellos con los de Dios? Jehová pasó a decir: ‘¿Has llegado a conocer los estatutos de los cielos? ¿Puedes alzar tu voz siquiera a la nube, para que una masa agitada de agua misma te cubra? ¿Puedes enviar relámpagos?’. Finalmente Job admitió: “¡Mira! Yo he llegado a ser de poca importancia. ¿Qué te responderé?”. “He llegado a saber que tú todo lo puedes, y no hay idea que te sea irrealizable.” ¿Comparte usted personalmente este mismo parecer? (Job 38:4, 12, 33-35; 40:4; 42:2.)
7, 8. Como criatura humana, ¿cómo da usted testimonio tocante a los logros de Dios?
7 La suprema creación terrestre de Dios fue el hombre. La mejor cámara fotográfica moderna es una imitación inferior de un modelo superior, el ojo humano. El sistema digestivo y el metabolismo del hombre superan cualquier cosa que los ingenieros químicos y los biólogos hayan producido alguna vez. Aunque vemos variedad entre nosotros, el maravilloso cuerpo que tenemos prueba que hay normas vitales. Si un cirujano tuviera que operarle a uno el apéndice, ¿tendría que preocuparse de que él hallara en el abdomen las amígdalas o el cerebro? No, el que haya uniformidad (en la creación de Dios) hace posible que el cirujano estudie la anatomía para poder efectuar la cirugía necesaria.
8 En el cráneo, no en el abdomen, tenemos una computadora que es inmensamente superior, cuando se considera su adaptabilidad y capacidad, al ordenador electrónico más avanzado. El cerebro permite que uno se haga preguntas y se maraville ante la creación de Dios, la cual incluye los miles de millones de soles en los millones de galaxias de los cielos. Dios ha establecido leyes para el movimiento ordenado y exacto de los cuerpos celestes para que podamos usarlos como normas al contar el tiempo, para demarcar el día y la noche, las estaciones y los años. (Génesis 1:14; Salmo 8:3, 4.)
9. Al comparar los logros y las normas de Dios con los del hombre, ¿a qué conclusión podemos llegar?
9 Compare los logros de Dios con lo que el hombre ha hecho. A pesar de que los gobiernos han establecido toda clase de normas regulatorias, los humanos han contaminado el agua y el aire, han exterminado una gran cantidad de géneros de fauna silvestre, han dividido a los pueblos en sentido político, religioso y racial, y han dejado a la humanidad con razones para preocuparse de que una guerra, la contaminación del ambiente o el hambre eliminen completamente la vida humana de la Tierra. Está claro que Dios no estaba exagerando cuando dijo acerca del hombre: “Como los cielos son más altos que la tierra, así mis caminos son más altos que los caminos de ustedes, y mis pensamientos que los pensamientos de ustedes” (Isaías 55:9). Entonces ¿no es apropiado que, en vez de apoyarnos en los puntos de vista humanos tocante a las normas a que debemos atenernos, nos interesemos en las instrucciones o normas de Jehová? (Proverbios 16:25; Isaías 30:21.)
10. ¿Qué nos muestra la creación material tocante a acudir a Dios en busca de normas morales?
10 La creación material confirma que ‘toda actividad de Dios es perfecta’. Sin embargo, Deuteronomio 32:4 pasa a mencionar los atributos morales de Jehová. En vista de Sus logros y normas en el campo de lo físico —desde las estrellas hasta las partículas atómicas, desde los microorganismos hasta el cuerpo humano— ¿no deberíamos acudir a él con confianza en lo que se refiere a sus normas morales? El hecho es que él ha provisto normas morales excelentes que suministran guía en nuestros tratos con él y con nuestro prójimo. (Miqueas 6:6-8.)
11. ¿En qué esferas de actividad pudieran beneficiar a uno las normas de Dios?
11 Jehová no limita su consejo a un aspecto limitado de nuestra vida, tal como a ciertas creencias doctrinales o ritos ceremoniales. Las normas morales de él abarcan todo aspecto de la vida, incluso los asuntos de familia, tratos comerciales, cómo considerar a personas del otro sexo y cómo comportarse con ellas, la actitud para con compañeros cristianos y la participación en la adoración (Isaías 48:17; Santiago 1:25). En Isaías 55:11 Jehová dijo que ‘la palabra que sale de su boca tendrá éxito seguro’. Es igualmente seguro que, si nos esforzamos vigorosamente por aplicar las normas de él, tendremos mayor éxito, y lo que logremos será de mayor provecho y hallaremos más felicidad.
Ayuda de las pautas seguras de Dios
12, 13. ¿Cómo se relaciona con las normas de Dios sobre la moralidad sexual cierto suceso reciente que tiene que ver con la salud?
12 Las normas de Dios pueden ayudarnos de muchas maneras en sentido físico y directo. Por ejemplo, The New York Times Magazine (6 de febrero de 1983) informó acerca de una enfermedad nueva que los ‘investigadores médicos están llamando la epidemia más virulenta del siglo’. Se trata del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (SIDA). Esta enfermedad resulta en el derrumbamiento del sistema de inmunidad, de modo que la persona queda vulnerable a formas raras de cáncer (sarcoma de Kaposi), pulmonía y otras enfermedades extrañas. ¿Cuán mortífero es el SIDA? Se dice que en el transcurso de dos años el índice de mortalidad fue de más de 65 por 100.
13 Los científicos opinan que el SIDA se propaga mediante secreciones corporales (particularmente el semen) y la sangre. Hasta ahora mayormente los homosexuales lo han contraído por causa de su promiscuidad sexual o modo de vivir inmoral, pero se ha extendido a compañeros heterosexuales también. Cierto homosexual confesó: “Es como estar en tiempo de guerra. No sabemos cuándo va a caer la bomba. En el pasado año y medio, 18 de mis amigos han muerto del SIDA. Otros 12 de mis compañeros están gravemente enfermos”. El artículo dijo: “A medida que van consumiéndose con la enfermedad, muchos pacientes que tienen el SIDA se ponen a reflexionar en la vida que han llevado y a veces les parece que se les está castigando por su derrotero imprudente y su hedonismo”. No hay duda de que las normas morales de Dios, como las que se mencionan en 1 Corintios 6:9, 10, nos ayudan. ¡Nos protegen!
14. ¿De qué otras maneras demuestra el problema del SIDA que las normas de Dios son provechosas (Deuteronomio 12:23-25)?
14 Pero hay más en cuanto a este asunto. Se ha hallado que muchas personas de la zona del Caribe han contraído el SIDA. El Dr. Sheldon Landesman explicó: ‘Sabemos que en muchos casos nuestros pacientes practican el vudú y el espiritismo’. Parece que el SIDA se transmite durante sus ritos. La enfermedad también está relacionada con las transfusiones de sangre y los productos derivados de la sangre. “El SIDA ha llegado a ocupar el segundo lugar entre las principales causas de muerte —segundo en importancia a las hemorragias incontrolables— entre los hemofílicos, y, recientemente, pacientes que se han sometido a intervenciones quirúrgicas y han recibido transfusiones de sangre han contraído el SIDA, lo cual ha hecho surgir temores entre algunos observadores tocante a los suministros nacionales de sangre.” Parece que el período de incubación varía de seis meses a dos años. Por eso, antes de que algunas personas se den cuenta de que padecen del SIDA, “tal vez, sin saberlo, hayan infectado a centenares de otras personas... mediante las relaciones sexuales, donaciones de sangre o por algún otro medio que todavía no se han imaginado”. Las normas de Dios tocante a la moralidad sexual, el evitar el espiritismo y ‘abstenerse de la sangre’ nos ayudan a mantenernos libres de esta enfermedad y de otras. (Deuteronomio 18:10-12; Proverbios 5:18-23; Hechos 15:29; 21:25.)
15. ¿Cómo resulta útil la norma de Dios tocante a las bebidas alcohólicas?
15 Como otra prueba de lo útiles que son las normas de Jehová, recuerde el hecho de que él condena la borrachera. Hasta desaprueba el que ‘uno se dé a mucho vino’ (1 Timoteo 3:3, 8; Romanos 13:13). Muchas personas que hacen caso omiso de las normas de Dios sufren de enfermedades causadas o agravadas por el beber en exceso. Algunos cristianos han pasado por alto el consejo que Pablo dio de usar solo “un poco de vino”, y han adoptado la práctica de beber mucho como ‘ayuda para sentirse relajados’ (1 Timoteo 5:23). Gradualmente puede desarrollarse el desorden habitual del alcoholismo (con sus aspectos físicos, emocionales y morales). Resultan muchos problemas, incluso la pérdida del respeto, la tensión familiar (si es que no se desbarata la familia), el desperdicio del salario y la pérdida del empleo. ¿No sirven de protección en estos asuntos las normas divinas tocante al uso del alcohol?
16. En asuntos financieros, ¿cómo han ayudado a los testigos de Jehová las normas de Dios?
16 Las normas de Dios han resultado prácticas en asuntos financieros también. Él exhorta a los cristianos a ser honrados y a trabajar duro. (Efesios 4:28; Colosenses 3:23; compare con Lucas 16:10-12.) Informes procedentes de todas partes de la Tierra muestran que muchos testigos de Jehová han podido mantener su empleo cuando a otras personas se les ha despedido, o hasta han recibido ascensos por ser honrados y diligentes. ¿Sabe usted de algunos ejemplos al respecto? Por supuesto, si alguien está empleado, tendrá menos problemas durante tiempos difíciles. El evitar vicios y hábitos que violen principios bíblicos resulta también en beneficios económicos. Puede leer más información sobre esto en el capítulo “Problemas en cuanto al dinero... ¿qué ayuda hay?” del libro La felicidad... cómo hallarlaa. Sin duda usted puede pensar en otros ejemplos que ilustren lo prácticas que son las normas de Dios en lo relacionado con asuntos financieros.
17. ¿Qué instrucciones da Dios tocante a la expulsión, y por qué es prudente seguirlas?
17 Las normas de Jehová respecto a la congregación cristiana han resultado también sabias y útiles. Por ejemplo, Dios da instrucciones de que se expulse de la congregación al cristiano que practique el pecado y no quiera arrepentirse. Los demás deben ‘cesar de mezclarse en la compañía de cualquiera que llamándose hermano sea fornicador, o avariento, o idólatra, o injuriador, o borracho, o que practique extorsión, ni siquiera comiendo con tal hombre’. Aunque de acuerdo con las normas de algunas personas esto tal vez parezca mostrar falta de amor, Dios sabe que no es así. Protege de modo amoroso a la congregación limpia, puesto que “un poco de levadura hace fermentar toda la masa” (1 Corintios 5:11, 6). El siguiente comentario que hizo el Dr. A. L. McGinnis, autor de The Friendship Factor (El factor de la amistad), ilustra lo sabio que es lo que Dios dice tocante a no comer con personas expulsadas:
“Una de las mejores maneras de hacer más estrecha una amistad es por medio de comer juntos. Hay algo casi sagrado en cuanto a compartir pan con otra persona. Por ejemplo, ¿ha notado usted alguna vez lo difícil que es cenar con un enemigo y seguir siendo enemigos?”.
18. ¿Cómo pudiera resultar beneficiosa la norma de Dios en cuanto a los apóstatas?
18 El adherirse a las normas de Dios también ayuda a impedir que se esparzan enseñanzas y puntos de vista falsos. En el primer siglo, Himeneo y Fileto se volvieron apóstatas y trataron de subvertir la fe de otros cristianos. La norma de Dios era: ‘Eviten tales vanas palabrerías que violan lo que es santo’ (2 Timoteo 2:16-19). Los cristianos que se adhirieran a esta norma no habrían estado interesados en escuchar a apóstatas ni en obtener los escritos perniciosos que tales personas distribuyeran “por causa de la ganancia falta de honradez”. ¿Por qué hemos de financiar la iniquidad de ellos mediante comprar su literatura (Tito 1:11)? Como cristianos leales, adhirámonos a las normas de Dios y alimentemos nuestra mente con lo que es verdadero y justo, a la vez que nos adherimos con aprecio y lealtad al conducto por medio del cual aprendimos por primera vez la verdad bíblica. (Compare con 1 Timoteo 4:16.)
19. ¿De qué otras maneras pudieran proveer ayuda las normas de Jehová?
19 Las normas de Dios ayudan a los testigos de Jehová de muchísimas otras maneras. En el matrimonio contribuyen al amor, respeto y unidad en un tiempo en que las normas relajadas de moralidad y las peticiones de mayor libertad están resultando en altos índices de divorcio. Las normas de Jehová ayudan a los hijos cristianos a aceptar la dirección de los padres y a no estar prestos a rebelarse como sucede en el caso de muchos de sus condiscípulos. En vez de mostrar resentimiento debido a la autoridad de los padres y dejar el hogar antes de tiempo, los jóvenes que aprecian las normas de Dios se complacen en sacar provecho del consejo que se basa en la Biblia y de la ayuda que los padres cristianos pueden proveer. (Colosenses 3:18-21.)
Acepte obedientemente las normas de Jehová
20-22. ¿Qué debemos tener presente con relación a las normas de Dios?
20 Pudiéramos considerar una multitud de otras maneras en las que las normas de Jehová pueden ayudarnos. Tal vez usted tenga presentes algunos puntos específicos en cuanto a cómo le han ayudado a usted personalmente. ¡Excelente! Éstas son cosas buenas y animadoras que puede incluir en sus conversaciones con otros cristianos.
21 Sin embargo, es preciso que todos tengamos presente que es sumamente fácil dejarnos desviar de las normas de Dios. Pero recuerde que Jehová dijo a los israelitas en el monte Sinaí: “Si ustedes obedecen estrictamente mi voz y verdaderamente guardan mi pacto, entonces ciertamente llegarán a ser mi propiedad especial de entre todos los demás pueblos”. Con entusiasmo ellos respondieron: “Todo cuanto ha hablado Jehová estamos dispuestos a hacerlo”. Sin embargo, ¡qué opuesto fue el derrotero que tomaron en los años subsiguientes! (Éxodo 19:5, 8; Números 14:1-4, 10.)
22 Por lo tanto, ¡aceptemos las normas de Jehová y adhirámonos a ellas! Pues ciertamente el derrotero sabio que lleva a la felicidad consiste en apegarnos estrechamente a las normas incomparables que Jehová ha provisto para ayudarnos a guiar nuestra vida. (Salmo 19:7-11.)
[Nota a pie de página]
a Publicado por la Sociedad Watchtower Bible and Tract de Nueva York, Inc.
¿Recuerda usted?
◻ ¿Qué evidencia provee la creación material en cuanto al hecho de que Jehová es una fuente de normas?
◻ ¿Por qué debemos acudir a Jehová en busca de normas morales?
◻ ¿Qué ejemplos puede usted dar para ilustrar cómo las normas de Jehová pueden ayudarle?
◻ ¿Qué opina usted tocante a aplicar las normas de Dios?
[Ilustración en la página 11]
La creación, desde lo minúsculo hasta lo mayúsculo, da testimonio en cuanto a la aptitud de Jehová como proveedor de normas
[Recuadro en la página 13]
SIDA... epidemia de los años ochenta
“Casi tres cuartas partes de las personas que fueron entre las primeras en contraer la enfermedad han muerto. Algunos investigadores opinan que nadie la sobrevive.” Se trata de la enfermedad llamada Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, o SIDA. (Science 83, marzo.)
Cierto médico comentó: “Se puede comparar a una máquina. Una vez que se pone en marcha, se sabe que no hay manera de detenerla. Se puede observar cómo el sistema de inmunidad va deteriorándose. Tan pronto se termina el tratamiento de una infección, otra se presenta. Puede suceder que el paciente padezca de pulmonía, luego de herpes, entonces de un hongo cerebral, luego de un virus que ataca al colon”. Uno de sus pacientes era un boxeador semiprofesional y jugador de tenis, que también levantaba pesas. Este hombre “tenía novia y había tenido relaciones homosexuales en una sola ocasión seis meses antes de caer enfermo”. ¿Qué le sucedió? “Seis semanas después que se diagnosticó la enfermedad, el hombre murió de un intestino perforado, a los 30 años de edad.”
¿Qué se está haciendo para descubrir los quién, qué, cuándo y dónde con relación al SIDA? El CDC (siglas en inglés para Centro para el Control de Enfermedades) está situado en Atlanta, Georgia (E.U.A.). El 13 de febrero de 1983 uno de los periódicos principales de Atlanta informó: “El CDC nunca ha asignado tanto personal —unas 100 personas hasta la fecha— para investigar un problema de sanidad pública por tan largo período. El trabajo del grupo es uno de los más continuos e intensos esfuerzos de investigación médica de la historia [...] Teniendo presente que están buscando un virus —y aun esto no es seguro— los científicos del CDC están tratando de cultivar el microbio en animales o en tubos de ensayo”. Pero, puesto que el período de incubación del SIDA puede ser de entre seis meses y dos años, es posible que las pruebas que se hagan ahora no revelen nada sino hasta 1985. Actualmente, a los expertos en virología y microbiología del CDC “les parece que están tan lejos de descubrir el agente [que causa el SIDA] como cuando empezaron su investigación hace más de un año”.
En enero el CDC celebró una conferencia para considerar el SIDA. Según se informó en el Journal of the American Medical Association, el Dr. D. Armstrong, del Centro de Cáncer Memorial Sloan-Kettering, dijo a los que asistieron a la conferencia: “No tengo duda alguna de que el SIDA se transmita mediante las relaciones sexuales y los productos de sangre”. La publicación Science 83 expresó el siguiente parecer en términos generales: “Los científicos opinan que se transmite por ‘contacto íntimo’... como por compartir agujas para inyectarse drogas, o el tener relaciones sexuales. Esto indica que se está tratando con algo que se transmite por medio de la sangre. Y esto preocupa a muchos oficiales de sanidad debido a los millones de personas que donan sangre y los que la reciben”.
En la actualidad no hay ninguna prueba que se pueda llevar a cabo para detectar quiénes padecen del SIDA, de modo que los bancos de sangre no pueden determinar qué donantes tienen la enfermedad. Se ha sugerido que no se acepten donaciones de personas que figuran entre los que corren mucho riesgo de tener la enfermedad, particularmente los homosexuales. Pero éstos han respondido diciendo que se está discriminando contra ellos y violando sus derechos. (¿Quién se preocupa por los derechos de las personas que reciban tal sangre?) Además, un representante de la Fuerza Nacional de Homosexuales dijo en una reunión del CDC: “Muchos homosexuales no se identifican como tales y no responderán al cuestionario”. En Sudáfrica se oyeron protestas parecidas a éstas, cuando se sugirió que se seleccionara a los donantes, después que murieron dos tripulantes de una línea aérea de Sudáfrica.
Las pruebas más recientes muestran que mujeres que tienen relaciones sexuales con hombres que padecen del SIDA pueden contraer la enfermedad. Otro nuevo grupo de víctimas son los niños. Algunos infantes evidentemente han llegado a ser víctimas después de recibir transfusiones de sangre y componentes de sangre para tratar problemas relacionados con el factor Rh después que nacieron. Otros bebés tal vez hayan contraído la enfermedad en el vientre de la madre o como resultado de algún contacto íntimo con el padre o la madre o con otra víctima del SIDA.
Dado que la cantidad de casos que se han informado ha ido duplicándose cada seis meses, ciertamente estaremos oyendo mucho más acerca de esta horrible epidemia de los años ochenta. (Gálatas 6:7, 8.)