-
BeliceAnuario de los testigos de Jehová 2010
-
-
Priscilian Sho, que para entonces tenía 20 años, era una publicadora no bautizada que deseaba de corazón predicar a sus vecinos. En cierta ocasión, Priscilian estaba haciendo revisitas con una de sus cuñadas, Amalia Sho, cuando, de pronto, se vieron ante un grave problema.
Priscilian recuerda: “No le había dicho a mi padre que iba a salir a predicar porque me lo había prohibido y yo le tenía miedo. Aquel domingo por la mañana, durante el ministerio, vi a mi padre delante de la iglesia bautista a la que asistía. Al principio, Amalia y yo nos agachamos entre la hierba para que no nos viera. Pero entonces le dije: ‘¿Sabes qué? Jehová nos está viendo. Debemos sentir temor de desagradar a Jehová, no a mi padre’”.
Aunque él se puso muy furioso, Priscilian sabía que todavía le esperaba algo mucho más difícil, pues su padre se oponía con violencia a que ella se hiciera testigo de Jehová. Estuvo orando mucho al respecto hasta el día antes de la asamblea en la que iba a bautizarse. Entonces se armó de valor y le dijo a su padre:
—Mañana voy a ir a la ciudad de Belice.
—¿Qué vas a hacer? —preguntó él.
—Me voy a bautizar —respondió Priscilian—. Voy a hacer lo que Jehová desea que haga. Yo te quiero mucho, pero también tengo que amar a Jehová.
—¿Vas a bautizarte? —replicó airadamente.
—Así es —contestó Priscilian—. Hechos 5:29 dice que tengo que obedecer a Dios más bien que al hombre.
Él se marchó airado. Priscilian recuerda: “No me sentí segura hasta que me subí al camión, lista para marcharme a la asamblea. No sabía lo que mi padre me iba a hacer cuando regresara de la asamblea, pero lo que sí sabía era que para entonces ya me habría bautizado. Así que aunque me matara, yo habría hecho lo correcto”.
Si bien el padre de Priscilian no le hizo daño cuando volvió a casa, posteriormente la amenazó de muerte. “Pero se dio cuenta de que sus amenazas no iban a detenerme —añade Priscilian—, y desde entonces se ha ablandado bastante.”
-
-
BeliceAnuario de los testigos de Jehová 2010
-
-
[Ilustraciones y recuadro de las páginas 235 y 236]
Unos mayas que aman a Jehová
JORGE Y NICOLAS SHO (CON SU HERMANA, PRISCILIAN)
-