-
CanonPerspicacia para comprender las Escrituras, volumen 1
-
-
Respondiendo a unos adversarios en su obra Contra Apión (libro I, sec. 8), el historiador judío Josefo confirmó, alrededor del año 100 E.C., que el canon de las Escrituras Hebreas había sido fijado hacía mucho tiempo. Escribió: “Por esto entre nosotros no hay multitud de libros que discrepen y disientan entre sí; sino solamente veintidós libros, que abarcan la historia de todo tiempo y que, con razón, se consideran divinos. De entre ellos cinco son de Moisés, y contienen las leyes y la narración de lo acontecido desde el origen del género humano hasta la muerte de Moisés. [...] Desde Moisés hasta la muerte de Artajerjes, que reinó entre los persas después de Jerjes, los profetas que sucedieron a Moisés reunieron en trece libros lo que aconteció en su época. Los cuatro restantes ofrecen himnos en alabanza de Dios y preceptos utilísimos a los hombres”.
-
-
CanonPerspicacia para comprender las Escrituras, volumen 1
-
-
Josefo da testimonio de esta opinión general judía sobre los escritos apócrifos cuando dice: “Desde el imperio de Artajerjes hasta nuestra época, todos los sucesos se han puesto por escrito; pero no merecen tanta autoridad y fe como los libros mencionados anteriormente, pues ya no hubo una sucesión exacta de profetas. Esto evidencia por qué tenemos en tanta veneración a nuestros libros. A pesar de los siglos transcurridos, nadie se ha atrevido a agregarles nada, o quitarles o cambiarles. Todos los judíos, ya desde su nacimiento, consideran que ellos contienen la voluntad de Dios; que hay que respetarlos y, si fuera necesario, morir con placer en su defensa”. (Contra Apión, libro I, sec. 8.)
-