En 1933 los testigos de Jehová comenzaron a emplear otro innovador medio de predicar. Se usó una máquina sonora portátil con amplificador y altavoz para poner en salones, parques y otras zonas públicas discos de 33 1/3-rpm que contenían grabaciones de discursos radiados del hermano Rutherford. También se utilizaron automóviles y barcos con altavoces para proclamar el mensaje del Reino.

Barco con altavoces difundiendo el mensaje en el río Támesis (Londres, Inglaterra) (arriba)