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El Jubileo de Jehová, un tiempo para regocijarnosLa Atalaya 1987 | 1 de enero
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Los judíos no veían que el Jubileo del pacto de la Ley de Moisés tipificaba o representaba un Jubileo mayor. (Colosenses 2:17; Efesios 2:14, 15.) Este Jubileo para los cristianos implica “la verdad” que puede libertar a los seres humanos... esa verdad que tiene como centro al Hijo, Jesucristo. (Juan 1:17.) ¿Cuándo empezó a celebrarse este Jubileo mayor que podía traer libertad hasta del pecado y sus efectos? Fue en la primavera de 33 E.C., en el día del Pentecostés. Esto fue diez días después de haber ascendido Jesús al cielo para presentar a Jehová Dios el mérito de su sacrificio. (Hebreos 9:24-28.)
12, 13. ¿Qué sucedió después de la muerte de Jesús que pronto resultó en una experiencia singular para sus discípulos?
12 Antes de Jesús, ninguna criatura había resucitado de entre los muertos para continuar viviendo para siempre. (Romanos 6:9-11.) Más bien, todas dormían en la muerte y continuarían durmiendo hasta que llegara el tiempo para la resurrección de la familia humana. Mediante su resurrección por el poder de Dios, Jesucristo llegó a ser lo que lo llaman las Escrituras inspiradas: “Las primicias de los que se han dormido en la muerte”. (1 Corintios 15:20.)
13 Cincuenta días después de su resurrección hubo prueba de que Jesucristo como persona resucitada había ascendido a los cielos y había entrado en la presencia de Jehová Dios con el valor de su sacrificio humano perfecto y lo había aplicado a favor de la humanidad. Esto fue en el día del Pentecostés de 33 E.C. En obediencia a instrucciones que habían recibido de Jesús, unos 120 discípulos se reunieron en Jerusalén. Entonces Cristo derramó espíritu santo sobre estos discípulos en cumplimiento de Joel 2:28, 29. Lenguas como de fuego se posaron sobre sus cabezas, y ellos empezaron a hablar en lenguajes que les eran extranjeros. (Hechos 2:16-21, 33.) Esto fue prueba de que el resucitado Jesucristo había ascendido a los cielos y había entrado en la presencia de Dios con el valor de un sacrificio humano perfecto para aplicarlo a favor de la humanidad.
14. a) ¿En qué situación se hallaron los discípulos de Cristo en cuanto a pactos? b) ¿Qué bendición sobresaliente vino como resultado del nuevo pacto?
14 ¿Qué resultado tuvo aquel acto en aquellos discípulos? Entre otras cosas, quedaron libres del pacto de la Ley de Moisés, que Dios había hecho con la nación del Israel natural, pero que ahora había cancelado, clavándolo al madero de tormento de Jesús. (Colosenses 2:13, 14; Gálatas 3:13.) Un nuevo pacto, no hecho con la nación del Israel natural, sino con la nueva “nación” del Israel espiritual, tomó el lugar de aquel pacto anterior. (Hebreos 8:6-13; Gálatas 6:16.) Este nuevo pacto, predicho en Jeremías 31:31-34, fue puesto en vigencia mediante un mediador mayor que el profeta antiguo Moisés. Nuestro interés en la libertad debería llevarnos a notar con particularidad cierto rasgo del nuevo pacto. El apóstol Pablo llamó atención a esto al escribir: “‘Éste es el pacto que pactaré para con ellos después de aquellos días [...] de ningún modo recordaré más sus pecados y sus desafueros’. Ahora bien, donde hay perdón de éstos, ya no hay ofrenda por el pecado”. (Hebreos 10:16-18.)
15. ¿Por qué podemos decir que en el Pentecostés de 33 E.C. comenzó el Jubileo cristiano para los ungidos? (Romanos 6:6, 16-18.)
15 Jesús señalaba a esta liberación del pecado cuando dijo: “Si el Hijo los liberta, serán realmente libres”. (Juan 8:36.) Imagínese... ¡libertad del pecado, hecha posible sobre la base del sacrificio de Cristo! Empezando en el día del Pentecostés, Dios declaró justos a los creyentes y entonces los adoptó como hijos espirituales que tenían la perspectiva de reinar con Cristo en el cielo. Pablo explica: “Porque ustedes no recibieron un espíritu de esclavitud que ocasione temor de nuevo, sino que recibieron un espíritu de adopción como hijos [...] Pues, si somos hijos, también somos herederos: herederos por cierto de Dios, pero coherederos con Cristo”. (Romanos 8:15-17.) No cabe duda de que el Jubileo cristiano había empezado para los cristianos ungidos.
16. ¿Qué bendiciones y perspectivas adicionales afectaron a los que celebraban el Jubileo cristiano?
16 Por eso, en aquel día del Pentecostés del año 33 E.C. comenzó la nueva nación del Israel espiritual. Estaba compuesta de humanos cuyos pecados habían sido perdonados sobre la base de la sangre del sacrificio de Cristo. (Romanos 5:1, 2; Efesios 1:7.) ¿Quién de nosotros podría negar que aquellos primeros miembros del Israel espiritual aceptados en el nuevo pacto experimentaron una maravillosa liberación cuando se les perdonaron sus pecados? Dios los constituyó en “‘una raza escogida, un sacerdocio real, una nación santa, un pueblo para posesión especial, para que declaren en público las excelencias’ de aquel que los llamó de la oscuridad a su luz maravillosa”. (1 Pedro 2:9.) Es verdad que sus cuerpos carnales todavía eran imperfectos y que ellos morirían con el tiempo. Pero ahora que Dios los había declarado justos y los había adoptado como hijos espirituales, su muerte carnal era solo una “liberación” que permitía que fueran resucitados a la vida en el “reino celestial” de Cristo. (2 Timoteo 4:6, 18.)
17, 18. ¿Por qué era más valiosa la liberación del Jubileo cristiano que la libertad preliminar que proclamó Jesús?
17 El paso inicial o preliminar de librar de nociones y prácticas equivocadas a los judíos creyentes tenía mucho valor. Sin embargo, hemos visto que Jesús ejecutó más que solo aquella liberación espiritual. Desde el Pentecostés de 33 E.C. en adelante, libertó de “la ley del pecado y de la muerte” a los humanos creyentes. (Romanos 8:1, 2.) Así empezó el Jubileo cristiano para los cristianos ungidos. En verdad esta era una liberación mucho más valiosa, porque incluía la perspectiva de alcanzar vida en el cielo como coherederos con Cristo.
18 Hasta ahora hemos considerado los aspectos de la libertad cristiana en el primer siglo, y es innegable que fueron base para regocijo. Y los creyentes del primer siglo ciertamente se regocijaron. (Hechos 13:44-52; 16:34; 1 Corintios 13:6; Filipenses 4:4.) Esto sucedió especialmente con relación a su participación en el Jubileo cristiano, que les abrió el camino para recibir bendiciones eternas en los cielos. (1 Pedro 1:3-6; 4:13, 14.)
19. ¿Qué preguntas quedan para los cristianos que no han sido engendrados por espíritu, y qué indica que participarán en una liberación provista por Dios?
19 Pero ¿dónde entran en este cuadro la mayoría de los cristianos verdaderos de hoy, puesto que no han sido declarados justos para vida y ungidos con espíritu santo? Hay razón bíblica para buscar una liberación de gran alcance a favor de ellos como parte del Jubileo cristiano. Recuerde Hechos 3:20, 21: “Jesús, a quien el cielo, en verdad, tiene que retener dentro de sí hasta los tiempos de la restauración de todas las cosas de que habló Dios por boca de sus santos profetas de tiempo antiguo”. (Compárese con Hechos 17:31.) Por el mismo estilo, Juan, un apóstol ungido que ya disfrutaba del Jubileo cristiano, escribió lo siguiente acerca de Jesucristo: “Él es un sacrificio propiciatorio por nuestros pecados, pero no solo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”. (1 Juan 2:2.)
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El Jubileo cristiano culmina en el MilenioLa Atalaya 1987 | 1 de enero
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¡Un sacrificio para todos!
3. ¿Cuán eficaz y duradero es el sacrificio de Jesús?
3 Antes del cristianismo los beneficios del Día de Expiación anual duraban solo un año. Los beneficios del sacrificio de rescate del Señor Jesucristo son continuos, perpetuos. Por eso Jesús, el Sumo Sacerdote antitípico, no tiene que volver a ser hombre, sacrificarse y regresar entonces al cielo para presentar el valor de ese sacrificio año tras año en el Santísimo de Jehová Dios. Como declaran las Escrituras: “Cristo, ahora que ha sido levantado de entre los muertos, ya no muere; la muerte ya no es amo sobre él”. (Romanos 6:9; Hebreos 9:28.)
4, 5. a) ¿En qué ha resultado la aplicación del sacrificio de Jesús desde el Pentecostés de 33 E.C.? b) ¿Qué indicación tenemos de que su sacrificio tendrá más extensa aplicación?
4 Por lo tanto, en los años que han transcurrido desde el Pentecostés de 33 E.C., los creyentes que han llegado a ser discípulos del glorificado Señor Jesús y han sido engendrados por espíritu han empezado a celebrar el Jubileo cristiano. Una vez que se les ha ‘libertado de la ley del pecado y de la muerte’, han disfrutado de una estimulante libertad. (Romanos 8:1, 2.) También han proclamado el mensaje cristiano para que otros más puedan recibir el perdón de sus pecados, ser ungidos y llegar a ser hijos espirituales de Dios. No obstante, si uno no es de ese grupo que ha sido limitado a 144.000 personas, ¿significa eso que no puede experimentar gozosa liberación ahora?
5 Las palabras del apóstol Pablo en Romanos 8:19-21 son significativas a este respecto: “La expectación anhelante de la creación aguarda la revelación de los hijos de Dios. Porque la creación fue sujetada a futilidad [pues era pecadora y no podía eliminar el pecado]”. Luego Pablo enfatizó que hay “esperanza de que la creación misma también será libertada de la esclavitud a la corrupción y tendrá la gloriosa libertad de los hijos de Dios”. Tal libertad, por lo tanto, no se limita a los que llegan a ser “hijos de Dios” en el cielo. Las palabras bien conocidas de Juan 3:16 confirman eso. Además, como se ha mencionado, el apóstol ungido Juan dijo que Cristo había muerto “por nuestros pecados, pero no solo por los nuestros, sino también por los de todo el mundo”. (1 Juan 2:2.)
1919... una liberación inicial
6, 7. ¿Qué clase de liberación se ha proclamado desde 1919, y por qué especialmente desde entonces?
6 En la actualidad los ungidos que celebran el Jubileo cristiano han estado declarando las buenas nuevas de la liberación especialmente desde 1919. ‘¿Por qué desde entonces?’, quizás se pregunte usted si nació en un año posterior a ese. Consideremos esto, teniendo presente que en ello está implicado el que usted disfrute de liberación.
7 Por décadas antes de esa fecha los ungidos de Jehová publicaron verdades bíblicas, como en la famosa serie de Estudios de las Escrituras (1886-1917). También distribuyeron muchos folletos y tratados informativos. Durante la I Guerra Mundial experimentaron oposición, pruebas y zarandeos, y sus actividades aflojaron. Pero en 1919 el resto ungido salió con celo renovado a proclamar las verdades bíblicas. Tal como Jesús pudo decir en 30 E.C. que había sido ungido para predicar “una liberación a los cautivos y un recobro de vista a los ciegos”, lo mismo podían decir los ungidos de la actualidad. Después de una emocionante asamblea del 1 al 7 de septiembre de 1919a, con empuje adelantaron en la predicación de verdades que libertaron a innumerables personas. (Lucas 4:18.)
8, 9. ¿En qué sentido han recibido libertad muchos, y qué ayudas se han utilizado para proclamar tal liberación?
8 Considere, por ejemplo, El arpa de Dios (1921), una ayuda para estudiar la Biblia que presentó verdades vitales como si fueran diez cuerdas de un arpa. En el libro se reconoció que “por temor, muchos no se han atrevido a estudiar la Biblia” debido a la doctrina de que “el castigo para los inicuos [...] es el tormento eterno en un infierno [que arde con] fuego inapagable y con azufre”. Los lectores de los casi 6.000.000 de ejemplares de este libro aprendieron que esta doctrina “no [podría] ser cierta, a lo menos por cuatro razones separadas y distintas: 1) porque es irrazonable; 2) porque es repugnante a la justicia; 3) porque es contraria a los principios del amor; y 4) porque es netamente antibíblica”. ¡Imagínese la libertad que experimentaron las personas que habían sido criadas en temor al tormento eterno del infierno o a la agonía del purgatorio!
9 Sí, la predicación celosa de la verdad bíblica que efectuaron estos ungidos liberó por todo el mundo a personas que habían estado esclavizadas a enseñanzas falsas, supersticiones y prácticas antibíblicas (como la práctica de adorar a los antepasados, el temer a fantasmas o espíritus inicuos y la explotación financiera por el clero). Los mismos títulos de algunas de las ayudas para estudiar la Biblia reflejan la influencia libertadora que estos ungidos ejercieron en millones de personasb. Así han resultado ser ciertas las palabras que dijo Jesús en el sentido de que sus discípulos ‘harían obras mayores’ que las de él. (Juan 14:12.) En comparación con la obra de liberación espiritual preliminar que Jesús efectuó al predicar “una liberación a los cautivos”, los siervos de Dios de hoy día han efectuado una obra mucho mayor, alcanzando a muchos millones de personas por todo el mundo.
10. ¿Por qué podemos esperar que se experimente una liberación adicional y mayor?
10 No obstante, recuerde que en el primer siglo hubo una liberación adicional que comenzó en el Pentecostés de 33 E.C. En aquella ocasión empezó el Jubileo cristiano para el “rebaño pequeño” a quienes se les perdonarían sus pecados, lo que llevaría a que llegaran a ser “hijos de Dios” en el cielo. ¿Qué se puede decir en cuanto a nuestro tiempo? ¿Podrían ser libertados de la esclavitud al pecado los otros millones de cristianos devotos y así celebrar un gran Jubileo? Sí, y el apóstol Pedro indicó esto cuando habló de “los tiempos de la restauración de todas las cosas de que habló Dios por boca de sus santos profetas de tiempo antiguo”. (Hechos 3:21.)
Un Jubileo para millones
11. ¿Cómo indica el capítulo 25 de Levítico que podemos esperar una liberación que se extienda a más allá del Israel espiritual?
11 Es de notar que en el capítulo 25 de Levítico a los israelitas se les recordó dos veces que desde el punto de vista de Jehová ellos eran sus “esclavos” a quienes él había libertado de Egipto. (Le 25 Versículos 42 y 55.) Este capítulo del Jubileo también menciona a los “pobladores” y a los ‘forasteros entre ellos’. Estos tienen un paralelo hoy día en la “gran muchedumbre” que participa con los israelitas espirituales en proclamar las buenas nuevas cristianas.
12. ¿Qué feliz desenvolvimiento ha estado en progreso desde 1935?
12 Desde 1935 el “pastor excelente” Jesucristo ha puesto en asociación activa con el resto ungido a las personas a quienes se refirió llamándolas las “otras ovejas”. Él tenía que “traer” a estas, y ellas habrían de formar “un solo rebaño” bajo “un solo pastor”. (Juan 10:16.) Las “otras ovejas” ahora se cuentan en millones. Si usted es parte de esa feliz multitud, ya se le cuenta justo como amigo de Dios, y como parte de la creación humana usted espera ‘ser libertado de la esclavitud a la corrupción’ durante los venideros “tiempos de la restauración de todas las cosas” en la Tierra. Esta no es una esperanza mal fundada. (Romanos 8:19-21; Hechos 3:20, 21.)
13. ¿Qué bendición en particular debemos esperar que acontezca después de la “gran tribulación”?
13 Después que el apóstol Juan vio a 144.000 que disfrutan del Jubileo cristiano junto con un destino celestial, pasó a describir a una “gran muchedumbre”, diciendo: “Éstos son los que salen de la gran tribulación, y han lavado sus ropas largas y las han emblanquecido en la sangre del Cordero. Por eso están delante del trono de Dios; y le están rindiendo servicio sagrado día y noche en su templo”. (Revelación 7:14, 15.)
14, 15. ¿Por qué tienen razón especial para regocijarse ahora los de la “gran muchedumbre”?
14 Hasta en la actualidad, antes de la gran tribulación, estos ejercen fe en la sangre derramada de Cristo y de esta manera se benefician de su muerte en sacrificio. También se regocijan por haber sido libertados de Babilonia la Grande, por tener una buena conciencia ante Jehová Dios, y por tener el privilegio de participar en el cumplimiento de Mateo 24:14 al predicar las buenas nuevas del Reino antes que venga el fin.
15 Sin embargo, ¿qué hay de la perspectiva de que la gran muchedumbre sea libertada del pecado y la imperfección innatos? ¿Está cerca ese tiempo? Tenemos buena razón para creer que todavía están con nosotros algunos de la generación de que Jesucristo predijo que no habría de pasar hasta que se cumplieran todas las cosas predichas. (Mateo 24:34.) Por eso, el gran final de “la conclusión del sistema de cosas” debe estar muy cerca. (Mateo 24:3.)
Rasgos coronadores del Jubileo cristiano
16. ¿Dónde nos encontramos en el cumplimiento del propósito de Dios, y qué sucederá dentro de poco?
16 “La guerra del gran día de Dios el Todopoderoso” se acerca rápidamente, y los del resto del “rebaño pequeño”, así como la “gran muchedumbre” de compañeros fieles y leales, mantendrán su integridad hacia Jehová Dios y esperan recibir la protección divina. Ansiosamente esperan la derrota aplastante de todas las fuerzas enemigas por Jehová para Su vindicación como Soberano Universal. ¡Qué rasgo coronador será este para la liberación cristiana de que disfrutan! (Revelación 16:14; 19:19-21; Habacuc 2:3.)
17. ¿Cómo han de recibir liberación todavía en un gran Jubileo millones de personas?
17 Tras esto vendrá el reinado del victorioso Rey Jesucristo sobre la Tierra ya limpiada del mal, cuando se habrá reafirmado la soberanía universal de Jehová, y Jesucristo tendrá plena gobernación de la Tierra como Rey de reyes y Señor de señores. Entonces él aplicará directamente el mérito de su sacrificio a los millones de humanos, incluso a los muertos resucitados que ejerzan fe y acepten de buena gana el perdón de pecados que Dios proveerá mediante Cristo. Esto se manifestará cuando Dios limpie ‘toda lágrima de los ojos de ellos, y la muerte no sea más, ni exista ya más lamento ni clamor ni dolor’. (Revelación 21:3, 4.) Si eso no es verdadera liberación, ¿qué lo es?
18. Como rasgo comparable con un aspecto del Jubileo de la antigüedad, ¿qué le acontecerá a la Tierra en el nuevo sistema?
18 Además, la Tierra ya no será controlada, contaminada ni arruinada por individuos, corporaciones ni gobiernos humanos avarientos. (Revelación 11:18.) Más bien, será devuelta a los adoradores verdaderos. A ellos se les encargará la deleitable tarea de participar en el cumplimiento literal de esta profecía de Isaías: “Ciertamente edificarán casas, y las ocuparán; y ciertamente plantarán viñas y comerán su fruto. No edificarán y otro lo ocupará; no plantarán y otro lo comerá [...] No se afanarán para nada, ni darán a luz para disturbio; porque son la prole que está compuesta de los benditos de Jehová”. (Isaías 65:21-25.) Para el fin del Reinado Milenario todos los vestigios del pecado y la imperfección heredados habrán sido borrados, y las personas leales a Dios en la Tierra estarán celebrando la culminación completa que marca el fin del Jubileo. De esta manera se habrá cumplido la liberación prefigurada por el Jubileo. (Efesios 1:10.)
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