-
La ciudad esplendorosaApocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!
-
-
“Y ya no habrá ninguna maldición. Pero el trono de Dios y del Cordero estará en la ciudad, y sus esclavos le rendirán servicio sagrado;
-
-
La ciudad esplendorosaApocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!
-
-
Cuando el sacerdocio israelita se corrompió, experimentó la maldición de Jehová. (Malaquías 2:2.) Jesús pronunció abandonada la “casa” sin fe de Jerusalén. (Mateo 23:37-39.) Pero en la Nueva Jerusalén “ya no habrá ninguna maldición”. (Compárese con Zacarías 14:11.) Todos sus habitantes han sido sometidos al fuego de pruebas intensas aquí en la Tierra, y tras salir victoriosos se habrán ‘vestido de incorrupción e inmortalidad’. En su caso Jehová sabe, como supo en el caso de Jesús, que nunca apostatarán. (1 Corintios 15:53, 57.)
-