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Cómo ver “el bien por todo su duro trabajo”“Manténganse en el amor de Dios”
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DISCERNIMIENTO AL ELEGIR EMPLEO
14-16. ¿Qué dos preguntas básicas debemos plantearnos al elegir empleo?
14 La Biblia no indica con lujo de detalles qué es permisible y qué no lo es en el campo laboral. Pero eso no significa que pueda aceptarse cualquier trabajo, sin importar sus implicaciones. Las Escrituras nos ayudan a seleccionar ocupaciones que sean honestas y útiles y que, sobre todo, no ofendan a Dios (Proverbios 2:6). ¿Cómo podemos determinar si un empleo en particular le desagrada? Planteándonos dos preguntas básicas.
15 ¿Se trata de una actividad condenada en la Biblia? La Palabra de Dios desaprueba categóricamente el robo, la mentira y la fabricación de ídolos (Éxodo 20:4; Hechos 15:29; Efesios 4:28; Revelación 21:8). Por esta razón, rechazamos cualquier puesto que nos pida que hagamos cosas como esas. El amor a Jehová nos impide aceptar empleos que exijan violar sus mandamientos (1 Juan 5:3).
16 ¿Me convertiría incuestionablemente en cómplice o promotor de malas prácticas? Pensemos en una oferta para ser recepcionista. Este oficio no tiene en sí mismo nada de malo. Pero ¿y si fuéramos a atender la recepción de una clínica especializada en abortos? Es cierto que no participaríamos de forma directa en la interrupción de los embarazos. Sin embargo, al trabajar regularmente allí, ¿no estaríamos respaldando a una institución dedicada a prácticas antibíblicas? (Éxodo 21:22-24.) Por amor a Jehová, no queremos vínculos estrechos con nada que se condene en las Escrituras.
17. a) ¿Qué factores conviene evaluar para tomar buenas decisiones en materia laboral? (Véase el recuadro “¿Debería aceptar este empleo?”.) b) ¿Cómo lograremos que la conciencia nos ayude a tomar decisiones que agraden a Dios?
17 Para tomar buenas decisiones en materia laboral, bastará en muchos casos con analizar a fondo las dos preguntas de los párrafos 15 y 16. Pero hay otros factores que conviene evaluar detenidamente.b No podemos esperar que el esclavo fiel y discreto fije reglas para toda situación posible. Es aquí donde entra en juego el discernimiento personal. Ya vimos en el capítulo 2 que debemos educar la conciencia estudiando la Palabra de Dios y analizando cómo aplicarla a la vida diaria. Así, “mediante el uso”, tendremos nuestras “facultades perceptivas entrenadas”, y la conciencia nos ayudará a tomar decisiones que agraden a Dios y nos mantengan en su amor (Hebreos 5:14).
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