Panamá

Ramiro, un profesor de Educación Física, empezó en 2004 a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová. Para ese tiempo atendía a seis grupos de alumnos con los que trabajaba doce horas a la semana. Sin embargo, como se esperaba que trabajara con ellos veinticuatro horas semanales, el director de la escuela le mandó que ocupara las otras doce horas en darles clases de religión. “Solo háblales de Dios, de Jesús y de la Biblia”, le dijo. De modo que Ramiro les enseñó lo que él mismo estaba aprendiendo. En ese año usó el libro El conocimiento que lleva a vida eterna con 150 alumnos de entre 12 y 14 años. Y al siguiente año, cuando se publicó el libro ¿Qué enseña realmente la Biblia?, Ramiro ya había progresado hasta el punto de ser publicador no bautizado. Así que siguió dando las clases, pero ahora con el libro Enseña. La cantidad de estudiantes aumentó a 160, que seguían distribuidos en seis grupos. ¿Cuáles han sido los resultados? Ramiro y otros publicadores de la congregación visitan a varios alumnos en sus hogares y les dirigen estudios bíblicos. Los padres de algunos le han expresado su agradecimiento a Ramiro por los cambios positivos que han visto en la conducta de sus hijos. Varios padres han asistido a las reuniones de la congregación, e incluso a algunas de nuestras asambleas. En cuanto a Ramiro, se bautizó en noviembre del año 2006, y, con el mismo entusiasmo, sigue aprovechando toda oportunidad para enseñar las verdades bíblicas.

[Ilustración de la página 50]

Ramiro, con un ejemplar del libro Enseña