Por qué cambian de religión algunas personas
Para muchas personas, la religión no es más que una etiqueta. Puede indicar adónde van de vez en cuando los domingos, dónde se casan y dónde serán enterradas. Pero no dice la clase de personas que son ni lo que saben y creen. Por ejemplo, una encuesta reveló que el 50% de los llamados cristianos no sabían quién pronunció el Sermón del Monte, algo curioso, pues hasta el famoso guía hindú Mohandas Gandhi lo sabía.
¿ES SORPRENDENTE que las personas dejen la religión teniendo en cuenta que muchas de ellas conocen muy poco de su fe? No, no lo es. Pero tampoco es inevitable. Los que han aceptado ayuda para conocer la Biblia suelen sorprenderse de comprender cuánto les beneficia. La Biblia misma dice: “Yo, Jehová, soy tu Dios, Aquel que te enseña para que te beneficies a ti mismo, Aquel que te hace pisar en el camino en que debes andar” (Isaías 48:17).
¿Qué deberían hacer los que no han saciado su hambre espiritual? No deberían renunciar a servir a Dios, sino investigar la Biblia y ver lo que Dios mismo pone a su disposición.
Respuestas a preguntas difíciles
A los siete años de edad, Bernd vio morir a su madre.a Durante el resto de su niñez se preguntó: “¿Dónde está mi madre? ¿Por qué tengo que crecer sin ella?”. En la adolescencia estuvo muy entregado a su Iglesia. Como le preocupaba el sufrimiento de la humanidad, esperaba llegar a ser cooperante en el extranjero. No obstante, aún le perturbaban preguntas a las que su Iglesia no daba respuestas satisfactorias.
Entonces Bernd habló con un condiscípulo que resultó ser testigo de Jehová. Este joven le mostró con la Biblia que su madre estaba inconsciente, dormida en la muerte. Bernd aprendió muchos versículos bíblicos que lo dicen, como Eclesiastés 9:5: “En cuanto a los muertos, ellos no tienen conciencia de nada en absoluto”. De modo que no había razón para que se preocupara de que su madre estuviera sufriendo en un purgatorio o en un lugar peor. Aunque la mayoría de las religiones enseñan la doctrina del alma inmortal, Bernd vio en la Biblia que el alma humana es sencillamente la persona. Cuando esta muere, muere el alma. “El alma que peca... ella misma morirá.” (Ezequiel 18:4.)
Bernd también aprendió cuál es la maravillosa perspectiva que hay para los muertos. Él mismo leyó en el libro bíblico de Hechos: “Va a haber resurrección así de justos como de injustos” (Hechos 24:15). ¡Cuánto le emocionó descubrir que esa resurrección acontecerá en la Tierra, donde Dios restaurará el Paraíso! (Salmo 37:29; Revelación [Apocalipsis] 21:3, 4.)
Al poco tiempo, el auténtico conocimiento bíblico sació las necesidades espirituales de Bernd. Él no renunció a la religión, sino que dejó la Iglesia que no podía satisfacer su hambre y adoptó una forma de adoración basada firmemente en la Biblia. Dice: “Di ese paso hace catorce años y no me he arrepentido jamás. Ahora sé que el Creador no es el causante del sufrimiento. Satanás es el dios de este sistema y el culpable de las condiciones que nos rodean. Pero dentro de poco Dios corregirá todo el daño que el mundo de Satanás ha ocasionado. Mi madre también volverá en la resurrección. ¡Qué alegría tendré cuando ocurra!”.
A propósito, Bernd consiguió su objetivo de ayudar al prójimo en el extranjero. Trabaja en otro país ayudando a las personas a conocer el Reino de Dios, la verdadera solución a su sufrimiento. Igual que Bernd, millones de seres humanos han aprendido que Dios pronto pondrá fin al sufrimiento del hombre. Les emociona descubrir que hay una religión que satisface su necesidad espiritual (Mateo 5:3).
¿Qué propósito tiene la vida?
Ante la creciente secularización del mundo occidental, muchos se preguntan: “¿Qué propósito tiene la vida?”. La respuesta ha de encontrarse en la Biblia, como descubrió Michael. A mediados de los setenta, Michael deseaba entrar en un grupo terrorista. Solo tenía un objetivo en la vida: atacar a quienes consideraba responsables de las injusticias del sistema capitalista. “Nunca salía de casa sin mi arma —dice—. Mi propósito era matar a todos los políticos y capitalistas que pudiese. Hubiera dado la vida por la causa.”
Michael pertenecía a una Iglesia, pero en ella nadie podía explicarle el verdadero propósito de la vida. Por tanto, cuando los testigos de Jehová lo visitaron en su casa y le mostraron las respuestas de la Biblia a sus preguntas, Michael escuchó atentamente. Comenzó a asistir a las reuniones para adorar a Dios en el Salón del Reino de los testigos de Jehová de su localidad.
A sus amigos les despertaba la curiosidad su reciente interés en la Biblia. “Vengan a la reunión este domingo —les dijo—, y quédense un rato. Si no les gusta lo que escuchan, váyanse a casa.” Y así fue; tras el discurso bíblico de cuarenta y cinco minutos, se fueron del Salón todos sus amigos, salvo uno: Susan. A esta joven le fascinó lo que escuchó. Tiempo después, Michael y Susan se casaron y se bautizaron como testigos de Jehová. “Ahora sé por qué estamos en la Tierra —dice Michael—. Jehová nos creó. Nuestro verdadero propósito en la vida es llegar a conocerlo y hacer su voluntad. Eso es lo que causa verdadera satisfacción.”
Millones de personas tienen la misma convicción que Michael. Toman a pecho estas palabras de la Biblia: “La conclusión del asunto, habiéndose oído todo, es: Teme al Dios verdadero y guarda sus mandamientos. Porque este es todo el deber del hombre” (Eclesiastés 12:13).
Cómo hacer frente a los problemas de la vida
Todos experimentamos el cumplimiento de la profecía de 2 Timoteo 3:1: “En los últimos días se presentarán tiempos críticos, difíciles de manejar”. Nadie puede librarse de los problemas de estos “tiempos críticos”. Pero la Biblia nos ayuda a hacerles frente.
Veamos el caso del matrimonio compuesto por Steven y Olive. Cuando se pusieron a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová, tenían, como muchas otras personas, problemas maritales. “Nos estábamos distanciando —dice Steven—. Nuestros objetivos e intereses eran distintos.” ¿Qué les ayudó a seguir juntos? “Los testigos de Jehová nos indicaron cómo aplicar en la vida los principios bíblicos —sigue diciendo Steven—. Por primera vez aprendimos lo que significa no ser egoísta e interesarse en la otra persona. La aplicación de los principios de la Biblia fortaleció nuestra unión. Ahora tenemos un matrimonio feliz y estable.”
Una relación estrecha con Dios
Una encuesta Gallup reciente reveló que el 96% de los estadounidenses creen en Dios, y la mayoría de estos le oran. No obstante, otra encuesta indicó que la asistencia a las iglesias y las sinagogas es en este momento la más baja de la última mitad del siglo. Aproximadamente un 58% de los estadounidenses dicen que van a la iglesia una vez al mes o menos. Está claro que la religión no los ha acercado más a Dios. Y este problema no se circunscribe a Estados Unidos.
Linda se crió en Baviera. Era católica practicante y rezaba con regularidad. Al mismo tiempo, le atemorizaba el futuro. No sabía nada del propósito de Dios para el hombre. Cuando solo tenía 14 años, Linda conoció a los testigos de Jehová. Ella nos cuenta: “Lo que me dijeron fue interesante, así que acepté dos ayudas para estudiar la Biblia y las leí inmediatamente”. Dos años más tarde, Linda se puso a estudiar la Biblia con los testigos de Jehová. “Todo lo que aprendía sobre Dios en la Biblia tenía sentido”, dice. Renunció a su Iglesia y se bautizó como testigo de Jehová a los 18 años.
¿Qué motivó a Linda a cambiar de religión? Ella contesta: “Mi Iglesia me ayudó a ver que Dios existe, y aprendí a creer en él. Pero era impersonal y lejano para mí. El estudio de la Biblia no solo me confirmó mi creencia en Dios, sino que también me ayudó a conocerle y amarle. Ahora tengo una inestimable relación con él, lo más valioso que puede haber”.
La religión verdadera merece la pena
¿Le suministra su religión guía espiritual y le indica de qué forma le ayuda la Biblia a hacer frente a las inquietudes de la vida? ¿Le enseña la esperanza bíblica para el futuro? ¿Le ayuda a entablar una relación estrecha y personal con el Creador, basada en un conocimiento exacto de la Biblia? Si no es así, no se dé por vencido. En lugar de abandonar la religión, busque la forma de adoración que se basa firmemente en la Biblia. Entonces, usted será como aquellos de los que se profetiza en el libro bíblico de Isaías: “Esto es lo que ha dicho el Señor Soberano Jehová: ‘¡Miren! Mis propios siervos comerán [...]. Mis propios siervos beberán [...]. Mis propios siervos se regocijarán [...]. Mis propios siervos clamarán gozosamente a causa de la buena condición de corazón’” (Isaías 65:13, 14).
[Nota]
a Se han cambiado algunos nombres de este artículo.
[Ilustraciones de las páginas 4 y 5]
La Biblia nos ayuda a llegar a conocer y amar a Dios