-
Dioses y diosasPerspicacia para comprender las Escrituras, volumen 1
-
-
Deidades de Medo-Persia. Hay indicios de que los reyes del Imperio medopersa eran seguidores de Zoroastro. Aunque no se puede probar ni refutar que Ciro el Grande se adhiriese a las enseñanzas de Zoroastro, desde el tiempo de Darío I las inscripciones de los monarcas mencionan repetidas veces a Ahura Mazda, la deidad principal del zoroastrismo. Darío I se refería a Ahura Mazda como el creador del cielo, la Tierra y el hombre, y reconocía a este dios como el que le había otorgado sabiduría, poder, destreza y, además, el reino.
Un rasgo característico del zoroastrismo es el dualismo, o sea, la creencia en dos seres divinos independientes, uno bueno y otro malo. A Ahura Mazda se le consideraba el creador de todas las cosas buenas, y a Angra Mainyu, el creador de todo lo que es malo. Se creía que este último podía ocasionar terremotos, tormentas, enfermedades y la muerte, así como provocar disturbios y guerras. También se pensaba que había espíritus inferiores que ayudaban a estos dos dioses a desempeñar sus funciones.
El símbolo de Ahura Mazda era muy parecido al del dios asirio Asur: un disco alado del que en algunos casos sobresalía la figura de un hombre con barba y con una cola vertical de ave.
Tal vez Ahura Mazda haya formado parte de una tríada, idea que parece advertirse en la invocación de Artajerjes Mnemón, pidiendo la protección de Ahura Mazda, Anahita (diosa del agua y la fertilidad) y Mitra (dios de la luz), deidades a cuya gracia atribuye la reconstrucción de la Sala de las Columnas del palacio real de Susa.
-
-
Dioses y diosasPerspicacia para comprender las Escrituras, volumen 1
-
-
El libro sagrado del zoroastrismo es el Avesta, una colección en la que hay oraciones dirigidas al fuego —llamado el hijo de Ahura Mazda—, al agua y a los planetas, así como a la luz del Sol, la Luna y las estrellas.
-