Capítulo 10

¡Se ha acercado lo que Dios juró hacer por la humanidad!

1, 2. a) ¿En qué sentido jura Dios, y por qué? b) ¿Qué dice Dios en Isaías 45:23? c) ¿Con qué declaraciones hechas por el profeta Isaías deberíamos poder concordar?

¿JURA Dios? Sí, Dios jura, pero no lo hace profanamente, en alguna explosión de cólera en la que pierda el dominio de sí mismo. Siempre que él jura lo hace para reforzar la declaración de su propósito. Eso hace que los que han de ser afectados por lo que él se propone lo esperen con mayor seguridad. Por eso, toda la humanidad hace bien en dar atención a Sus palabras registradas en Isaías 45:23: “Por mí mismo he jurado —de mi propia boca en justicia ha salido la palabra, de modo que no volverá— que ante mí toda rodilla se doblará, a mí toda lengua jurará”.

No solo su palabra por sí sola es completamente confiable, sino que lo es con mucha más razón cuando Jehová jura en cuanto a ella —añade su juramento— para confirmar los asuntos.

Dios interviene con un juramento

5. ¿Cómo explica Hebreos 6:13-18 la intervención de Dios con un juramento en la promesa que le hizo a Abrahán?

⁵ Acerca de esto leemos en Hebreos 6:13-18: “Porque cuando Dios hizo su promesa a Abrahán, puesto que no podía jurar por nadie mayor, juró por sí mismo, diciendo: ‘De cierto, bendiciendo te bendeciré, y multiplicando te multiplicaré’. Y así, después que Abrahán hubo mostrado paciencia, obtuvo esta promesa. Porque los hombres juran por el que es mayor, y su juramento es el fin de toda disputa, ya que para ellos es una garantía legal. De esta manera, Dios, cuando se propuso demostrar más abundantemente a los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, intervino con un juramento, a fin de que, mediante dos cosas inmutables en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos nosotros, los que hemos huido al refugio, fuerte estímulo para asirnos de la esperanza puesta delante de nosotros”.

6. a) ¿Qué motivo hubo para que Dios jurara por sí mismo respecto a la promesa que le hizo a Abrahán? b) ¿Cómo podía Jehová utilizar a su “amigo”?

⁶ Por lo general hay motivo de peso para jurar, para hacer un juramento. Eso es cierto, en especial, cuando Dios jura espontáneamente, voluntariamente. Se suministró tal motivo en este caso en que, según se informa, Jehová juró, sí, juró por sí mismo. La promesa sostenida por juramento que Jehová le hizo a Abrahán, su “amigo”, nos afecta a todos hoy. Jehová apreció el que Abrahán obrara en armonía con la invitación divina y abandonara su tierra nativa para ir a la tierra que Jehová daría a los descendientes de Abrahán como posesión. Sin correr riesgo alguno, Jehová podía engrandecer el nombre de su “amigo” y utilizar a su amigo para bendecir a otros. Bien podía decirle Jehová: “Y ciertamente bendeciré a los que te bendigan, y al que invoque mal sobre ti lo maldeciré, y ciertamente se bendecirán por medio de ti todas las familias del suelo”. (Génesis 12:3; Isaías 41:8.)

7. a) ¿Con qué milagro favoreció Dios a Abrahán cuando su esposa tenía 90 años de edad? b) ¿Cómo demostró Abrahán su fe y obediencia de manera singular?

⁷ Cuando Sara, la esposa de Abrahán, tenía 90 años de edad —y por eso ya había pasado por mucho de la edad que le permitiría tener hijos— Dios la favoreció milagrosamente con darle a Abrahán su amado hijo, Isaac, para adelanto de la maravillosa promesa de Dios a Abrahán. Abrahán resultó estar presto hasta para ofrecer a este precioso hijo como sacrificio humano en obediencia al mandato de su Dios, Jehová. Esta singular demostración de fe y obediencia tuvo tal efecto en Jehová que él dijo a su “amigo”, Abrahán:

8, 9. a) ¿Cómo respondió Jehová a esta demostración de la fe y la obediencia de Abrahán? b) ¿Ante quién se hizo Dios responsable?

⁸ “‘Por mí mismo de veras juro —es la expresión de Jehová— que por motivo de que has hecho esta cosa y no has retenido a tu hijo, tu único, yo de seguro te bendeciré y de seguro multiplicaré tu descendencia como las estrellas de los cielos y como los granos de arena que hay en la orilla del mar; y tu descendencia tomará posesión de la puerta de sus enemigos. Y mediante tu descendencia ciertamente se bendecirán todas las naciones de la tierra debido a que has escuchado mi voz’”. (Génesis 22:15-18.)

⁹ Este es el primer lugar de la Biblia donde hay registro de un juramento por Jehová. Porque no podía jurar por nadie mayor, juró por sí mismo y se obligó a lo jurado. De este modo se hizo responsable solamente a sí mismo. Es para su propia honra que cumple el propósito que él mismo ha declarado.