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Un rey profana el santuario de JehováLa Atalaya 1993 | 1 de noviembre
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Y tocante a los que tienen perspicacia entre el pueblo, impartirán entendimiento a los muchos. Y ciertamente se les hará tropezar por espada y por llama, por cautiverio y por saqueo, durante algunos días.” (Daniel 11:32b, 33.) Aunque los cristianos que viven en lugares dominados por el rey del norte se han mantenido debidamente “en sujeción a las autoridades superiores”, no han sido parte de este mundo. (Romanos 13:1; Juan 18:36.) Al mismo tiempo que se esmeraban en pagar a César las cosas de César, también daban a “Dios las cosas de Dios”. (Mateo 22:21.) Por esta razón, se puso a prueba su integridad. (2 Timoteo 3:12.)
17 ¿Cuál fue el resultado? ‘Prevalecieron’ y ‘tropezaron’. Tropezaron en el sentido de que fueron objeto de persecución y sufrieron muchísimo; a algunos incluso se les dio muerte. Sin embargo, prevalecieron en el sentido de que la mayoría de ellos permanecieron fieles. Sí, conquistaron el mundo, tal como hizo Jesús. (Juan 16:33.) Además, nunca dejaron de predicar, no importa que se les recluyera en una prisión o en un campo de concentración. De esta manera, ‘impartieron entendimiento a los muchos’. A pesar de la persecución, aumentó la cantidad de testigos de Jehová en la mayoría de los países que estaban bajo el control del rey del norte. Gracias a la fidelidad de “los que tienen perspicacia”, ha aparecido en esos países un sector en continuo aumento de la “gran muchedumbre”. (Revelación 7:9-14.)
18. ¿Qué “poco de ayuda” ha recibido el resto ungido que vive bajo el dominio del rey del norte?
18 El ángel predijo lo siguiente respecto a la persecución del pueblo de Dios: “Pero cuando se les haga tropezar serán ayudados con un poco de ayuda”. (Daniel 11:34a.) ¿Cómo sucedió esto? En primer lugar, la victoria del rey del sur en la segunda guerra mundial resultó en gran alivio para los cristianos que vivían en los dominios del rey rival. (Compárese con Revelación 12:15, 16.) Luego, los que fueron perseguidos por el rey sucesor recibieron alivio de vez en cuando, y al acercarse a su fin la Guerra Fría, muchos gobernantes se dieron cuenta de que los cristianos fieles no suponen ninguna amenaza, y, por lo tanto, les otorgaron reconocimiento legal.c La creciente gran muchedumbre, que ha respondido a la fiel predicación de los ungidos y ha colaborado con ellos, como se muestra en Mateo 25:34-40, ha aportado mucha ayuda también.
Una limpieza del pueblo de Dios
19. a) ¿Cómo ‘se unieron a ellos por medio de melosidad’ algunas personas? b) ¿Qué significa la expresión “hasta el tiempo del fin”? (Véase nota.)
19 No todos los que mostraron interés en servir a Dios durante ese tiempo tenían buenos motivos. El ángel advirtió: “Muchos ciertamente se unirán a ellos por medio de melosidad. Y a algunos de los que tienen perspicacia se les hará tropezar, para que se haga una obra de refinación debido a ellos, y para que se haga una limpieza y para que se haga un emblanquecimiento, hasta el tiempo del fin; porque es todavía para el tiempo señalado”.d (Daniel 11:34b, 35.) Algunos mostraron interés en la verdad, pero no estaban dispuestos a hacer una dedicación sincera para servir a Dios. Otros que parecían haber aceptado las buenas nuevas resultaron ser en realidad espías al servicio de las autoridades. Un informe de cierto país dice: “Algunos de estos individuos sin escrúpulos eran comunistas declarados que habían entrado sigilosamente en la organización del Señor, habían mostrado mucho celo por la verdad e incluso habían recibido posiciones de mucha responsabilidad en la organización”.
20. ¿Por qué permitió Jehová que los impostores hipócritas ‘hicieran tropezar’ a algunos cristianos fieles?
20 Estos impostores hicieron que algunos fieles cayeran en manos de las autoridades. ¿Por qué permitió Jehová que sucediera esto? Para que hubiera un refinamiento, una limpieza. Tal como Jesús “aprendió la obediencia por las cosas que sufrió”, aquellos fieles hermanos aprendieron el aguante por las pruebas de su fe. (Hebreos 5:8; Santiago 1:2, 3; compárese con Malaquías 3:3.) De este modo fueron ‘refinados, limpiados y emblanquecidos’. Estos fieles se regocijarán en gran manera cuando llegue el tiempo señalado para que se recompense su aguante.
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Un rey profana el santuario de JehováLa Atalaya 1993 | 1 de noviembre
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“Realmente volverá y arrojará denunciaciones contra el pacto santo y actuará eficazmente; y tendrá que volver, y dará consideración a los que dejan el pacto santo.” (Daniel 11:30.) Así profetizó el ángel, y así resultó ser.
El rey actúa eficazmente
9. ¿Qué llevó al poder a Adolf Hitler, y en qué sentido ‘actuó eficazmente’?
9 Después de la guerra, en 1918, los aliados vencedores impusieron a Alemania un tratado de paz punitivo que parecía tener el propósito de mantener a los alemanes en una condición precaria por tiempo indefinido. Como consecuencia, después de algunos años de inestabilidad y mucha angustia, Alemania estaba lista para el acceso al poder de Adolf Hitler. Este obtuvo plenos poderes en 1933, y enseguida lanzó un ataque cruel contra “el pacto santo”, representado por los hermanos ungidos de Jesucristo. De este modo, actuó eficazmente contra estos cristianos leales y persiguió con crueldad a muchos de ellos.
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Hitler tuvo tanto éxito que declaró la guerra, como bien había predicho el ángel. “Y habrá brazos que se levantarán, procedentes de él; y realmente profanarán el santuario, la plaza fuerte, y removerán el rasgo constante.” (Daniel 11:31a.) En el Israel antiguo, el santuario era parte del templo de Jerusalén. Sin embargo, cuando los judíos rechazaron a Jesús, Jehová los rechazó a ellos y a su templo. (Mateo 23:37–24:2.) Desde el siglo primero, el templo de Jehová ha sido en realidad un templo espiritual, con el santísimo en los cielos y un patio espiritual en la Tierra, donde sirven los hermanos ungidos de Jesús, el Sumo Sacerdote. A partir de los años treinta, la gran muchedumbre ha adorado a Jehová junto con el resto ungido; por eso se dice que sirven en ‘el templo de Dios’. (Revelación 7:9, 15; 11:1, 2; Hebreos 9:11, 12, 24.) La implacable persecución del resto ungido y sus compañeros en los países dominados por el rey del norte profanó el patio terrestre del templo. La persecución fue tan severa que se removió el rasgo constante, es decir, el sacrificio de alabanza público al nombre de Jehová. (Hebreos 13:15.) No obstante, la historia muestra que, a pesar del terrible sufrimiento, los fieles cristianos ungidos siguieron predicando en la clandestinidad junto con las “otras ovejas”. (Juan 10:16.)
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