“Un rayo de luz en una era de tinieblas”
Por el corresponsal de ¡Despertad! en Alemania
ASÍ describió un historiador la historia de los testigos de Jehová durante la era nazi. La ocasión fue el estreno mundial del documental Los testigos de Jehová se mantienen firmes ante el ataque nazi, que tuvo lugar en el Museo Conmemorativo de Ravensbrück (Alemania). Esta videocinta recoge el conmovedor testimonio de valor y fe de veinticuatro sobrevivientes, y los comentarios de diez especialistas en historia y religión.
En un tiempo, centenares de Testigos estuvieron recluidos en el campo de concentración de Ravensbrück. Algunos de los supervivientes, a quienes los nazis aprisionaron hace más de cincuenta años, asistieron al acto. Tanto ellos como historiadores y funcionarios del Estado rememoraron los tenebrosos días en que el régimen nazi sembró el terror en toda Europa. El auditorio, compuesto de unas trescientas cincuenta personas, escuchó los inspiradores relatos sobre la integridad cristiana de centenares de Testigos que prefirieron arrostrar la muerte antes que renegar de su fe.
Los medios de comunicación toman nota
La mañana del estreno, el 6 de noviembre de 1996, se convocó una rueda de prensa en un hotel de Berlín. Los periodistas vieron fragmentos del vídeo y luego escucharon los discursos de especialistas que comentaron la importancia del nuevo documental al contar un aspecto poco conocido, pero importante, de la historia. El doctor Detlef Garbe, director del Museo Conmemorativo de Neuengamme, explicó: “Seamos o no testigos de Jehová, no debemos olvidar la historia de los prisioneros del triángulo púrpura [el símbolo que llevaban puesto los Testigos]. Fue un rayo de luz en una era de tinieblas”.
Varios Testigos sobrevivientes que figuraban en la cinta estuvieron presentes y narraron sus experiencias. ¿Estaban amargados por los sufrimientos? Sus rostros serenos y radiantes indicaban que no.
Al cabo de una sesión de preguntas y respuestas se invitó a los reporteros al estreno del documental en el Museo Conmemorativo de Ravensbrück, a unos 65 kilómetros de distancia. Prácticamente todos aceptaron la invitación.
El estreno
El cielo gris y la llovizna de aquel frío día otoñal dieron paso a la atmósfera de animación que se respiraba en el interior del recién renovado salón junto al Museo Conmemorativo de Ravensbrück. El profesor Jürgen Dittberner, entonces director de la Fundación para los museos conmemorativos de Ravensbrück, Sachsenhausen y Brandeburgo, envió un mensaje, que fue leído. En él expresó: “Debemos respetar el valor moral que mostraron los testigos de Jehová bajo el nacionalsocialismo. [...] Honramos la memoria de estas personas que no traicionaron su fe y, por ende, tuvieron que sufrir e incluso morir”.
Angelika Peter, ministra de la educación, la juventud y el deporte de Brandeburgo, declaró: “Es importante que recordemos hoy la firmeza ejemplar de los testigos de Jehová”. La doctora Sigrid Jacobeit, directora del Museo Conmemorativo de Ravensbrück, dijo: “He esperado este estreno con gran interés y júbilo. Considero que hoy es un día especial para todos nosotros”.
Entonces se apagaron las luces para dar inicio a la proyección. No solo los sobrevivientes venidos de ocho países, sino todos los espectadores, revivieron durante setenta y ocho minutos la tragedia y el triunfo de este doloroso capítulo de la historia alemana. A muchos les costó trabajo contener las lágrimas mientras estas personas comunes relataban los extraordinarios actos de amor y fe que realizaron en medio de las más espantosas condiciones.
Después del atronador aplauso del público, el historiador Joachim Görlitz leyó las últimas palabras de un Testigo que fue ejecutado en Brandeburgo. Görlitz había encontrado la nota apenas dos semanas antes, mientras hacía investigaciones en el archivo del Museo Conmemorativo de Brandeburgo, del cual es director. Su voz se quebró de emoción al leer las palabras de este fiel cristiano que animaba a sus hermanos en la fe a mantenerse fieles al Señor. Görlitz concluyó: “Señores y señoras, creo que la película de los testigos de Jehová será una notable contribución a nuestra labor docente”.
El historiador Wulff Brebeck manifestó que “mediante esta película se ha añadido un nuevo tesoro significativo: las voces de los sobrevivientes que muy pocas veces se han oído, y [...] las voces de los que no sobrevivieron”. El doctor Garbe añadió: “Estas son experiencias importantes de seres humanos cuya fe en Dios y cuya confianza en las promesas de la Biblia les dieron las fuerzas necesarias para resistir durante aquella horrible época”.
Como conclusión adecuada al programa, varios de los Testigos sobrevivientes se dirigieron nuevamente al público. Era claro para todo el auditorio que aquellos fieles cristianos aún conservaban la misma fe sólida que los sostuvo durante sus múltiples pruebas.
Desde el estreno, los periódicos de toda Alemania han publicado más de 340 artículos sobre los testigos de Jehová y el documental Se mantienen firmes. Asimismo, la radio ha transmitido excelentes reportajes, uno de ellos a través de una emisora nacional.
Este documental aparecerá a la larga en por lo menos veinticuatro idiomas. También se producirá en el futuro una versión editada para las aulas escolares. Desde su presentación, cada vez más educadores han comenzado a emplearlo como parte del currículo con el fin de ayudar a los jóvenes a examinar temas importantes, como el prejuicio, la presión de los compañeros y la voz de la conciencia.
En este mundo tan dividido por el odio y la traición, ¡qué oportuno resulta dar a conocer al público esta historia de integridad! No cabe duda de que los sufrimientos de estos fieles cristianos no fueron vanos. (Hebreos 6:10.)
[Ilustración de la página 15]
La rueda de prensa de Berlín. Desde la izquierda: el doctor Detlef Garbe; Simone Liebster y Franz Wohlfahrt, sobrevivientes del Holocausto, y el historiador Wulff Brebeck