-
Asesinos sueltos¡Despertad! 1993 | 8 de diciembre
-
-
Asesinos sueltos
MARGARET buscó desesperadamente un remedio eficaz para su hijo Tito cuando este contrajo la malaria. Se le administraron tres medicamentos, entre ellos la cloroquina, un fármaco muy alabado. Sin embargo, el niño murió cuando solo tenía nueve meses.
Tragedias como esta suceden con mucha frecuencia en Kenia, el país natal de Margaret. La revista “Newsweek” dice: “En esta parte del mundo, el mosquito ‘Anopheles gambiae’ —la principal especie de mosquito portador de la malaria— aumenta en número, pero los niños no. El 5% de ellos mueren víctimas de la malaria antes de llegar a la edad escolar”.
-
-
¿Por qué vuelven a causar estragos las “enfermedades curables”?¡Despertad! 1993 | 8 de diciembre
-
-
La malaria amenaza a casi la mitad del mundo
Actualmente, casi cuarenta años después de haberse dictaminado su casi total erradicación, la malaria representa una grave amenaza en Afganistán, Brasil, Camboya, China, India, Indonesia, Sri Lanka, Tailandia, Vietnam y diversas partes de África. “Dos niños mueren de [malaria] cada minuto”, dice el periódico francés Le Figaro. La cifra anual de víctimas mortales es de dos millones, una cantidad mucho mayor que la de los muertos por el sida.
Cerca de 270 millones de personas están infectadas con el parásito de la malaria, pero se cree que el grupo de riesgo lo componen 2.200 millones de personas. “¿Cómo es posible que la malaria, en un tiempo eliminada o sumamente controlada para el 90% de la población mundial, amenace ahora a más del 40% de la humanidad?”, pregunta Phyllida Brown en la revista New Scientist. Hay múltiples razones.
Deforestación y colonización. Los asentamientos en las regiones de la pluviselva infestadas de mosquitos han provocado un brote de malaria en Brasil. “Se trata de una invasión del medio ambiente del mosquito”, dice el inmunólogo Claudio Ribeiro. Y añade que los colonos “no tenían ninguna experiencia con la malaria ni resistencia alguna contra la enfermedad”.
Inmigración. Refugiados en busca de trabajo procedentes de Myanmar llegan en tropel a las minas de piedras preciosas de Borai, un pequeño municipio de Tailandia. “Su constante ir y venir imposibilita el control de la malaria”, comenta la revista Newsweek. Todos los meses se informan unos diez mil casos tan solo entre los mineros.
Turismo. Muchas personas que visitan regiones infestadas de malaria vuelven a su casa con la enfermedad; de ahí que en 1991 se diagnosticaran unos mil casos en Estados Unidos y 10.000 en Europa. Cada año centenares de canadienses regresan a su país infectados después de haber realizado algún viaje de turismo o de trabajo. Un caso trágico fue el de dos niños que empezaron a tener fiebre poco después de que la familia regresó de África. El médico no sospechó que tuviesen malaria. “Cuando los padres los llevaron al hospital, ya era demasiado tarde —publicó el periódico Globe and Mail, de Toronto (Canadá)—. Ambos murieron con pocas horas de diferencia.”
Cepas resistentes a los fármacos. La OMS informa que por toda el África tropical se han extendido cepas resistentes a los fármacos. En el sudeste asiático —dice la revista Newsweek—, “la resistencia a los medicamentos está avanzando tan deprisa que pronto algunas cepas podrían llegar a ser incurables”.
Falta de recursos. En algunos lugares los consultorios carecen del instrumental necesario para realizar un sencillo análisis denominado frotis sanguíneo. En otros sitios, gran parte del presupuesto destinado a la sanidad se necesita para otras emergencias, lo que resulta en escasez de insecticidas y medicamentos. A veces es una cuestión de lucro. “Las enfermedades tropicales no dan dinero —admite New Scientist— porque, en general, los afectados no tienen medios para comprar las medicinas.”
-
-
¿Por qué vuelven a causar estragos las “enfermedades curables”?¡Despertad! 1993 | 8 de diciembre
-
-
“La situación de la malaria en todo el mundo es grave y está empeorando”, señala el Dr. Hiroshi Nakajima, de la OMS (Organización Mundial de la Salud).
-