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¿Qué significa para usted la Cena del Señor?La Atalaya 2003 | 15 de febrero
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7. ¿Por qué sabían los cristianos del siglo I que debían participar de los emblemas de la Conmemoración?
7 Los cristianos verdaderos del siglo I fueron ungidos por espíritu santo, y muchos pudieron utilizar uno o más de sus dones milagrosos, como hablar en lenguas. Por tal razón no debió de resultarles difícil saber que tenían la unción del espíritu y que debían participar de los emblemas de la Conmemoración. Sin embargo, en el presente, dicha condición puede determinarse sobre la base de palabras inspiradas como estas: “Todos los que son conducidos por el espíritu de Dios, estos son los hijos de Dios. Porque ustedes no recibieron un espíritu de esclavitud que ocasione temor de nuevo, sino que recibieron un espíritu de adopción como hijos, espíritu por el cual clamamos: ‘¡Abba, Padre!’” (Romanos 8:14, 15).
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¿Qué significa para usted la Cena del Señor?La Atalaya 2003 | 15 de febrero
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13, 14. ¿Por qué pudiera suponer alguien equivocadamente que tiene el llamamiento celestial?
13 ¿Por qué pudiera alguien suponer equivocadamente que posee el llamamiento celestial? La muerte del cónyuge u otra tragedia pudiera hacerle perder el interés en la vida en la Tierra; o quizás desee tener el mismo destino que un amigo íntimo que afirma ser cristiano ungido. Está claro que Dios no ha designado a nadie para que reclute a las personas a quienes se favorece con dicho privilegio, ni tampoco unge a los herederos del Reino haciendo que escuchen voces que se lo anuncien.
14 La doctrina falsa de que todos los buenos van al cielo tal vez lleve a alguien a creer que tiene el llamamiento celestial, motivo por el que no debemos permitir que las creencias erróneas del pasado u otros factores influyan en nosotros. Por ejemplo, algunos podrían preguntarse: “¿Utilizo medicamentos que me afectan las emociones? ¿Tiendo a dejarme llevar por la emotividad?”.
15, 16. ¿Por qué pudieran algunos concluir erróneamente que son ungidos?
15 Otros tal vez pudieran preguntarse: “¿Deseo ser prominente? ¿Tengo ambición de poder, ya sea ahora o como un futuro coheredero de Cristo?”. Cuando se llamó a los herederos del Reino en el siglo I, no todos ocupaban puestos de responsabilidad en la congregación; tampoco los animaban las ansias de prominencia ni se jactaban de ser ungidos. Por el contrario, demostraban la humildad característica de quienes poseen “la mente de Cristo” (1 Corintios 2:16).
16 Algunos cristianos quizás hayan concluido que tienen la llamada celestial por el gran caudal de conocimiento bíblico que han adquirido. Sin embargo, la unción con espíritu no lleva aparejado un entendimiento extraordinario, pues Pablo se vio en la necesidad de instruir y aconsejar a ciertos ungidos (1 Corintios 3:1-3; Hebreos 5:11-14). Dios ha dispuesto un medio para proporcionar alimento espiritual a todo su pueblo (Mateo 24:45-47). Por consiguiente, nadie debe pensar que por ser un cristiano ungido posee mayor sabiduría que los que abrigan la esperanza terrenal. La unción con espíritu no se manifiesta en la habilidad para responder preguntas bíblicas, predicar o pronunciar discursos, pues hay cristianos con la esperanza terrenal que también son muy diestros en estos aspectos.
17. ¿De qué y de quién depende la unción por espíritu?
17 Si un hermano en la fe pregunta sobre la llamada celestial, un anciano u otro cristiano maduro puede tratar el asunto con él; no obstante, este es un campo en el que nadie puede decidir por otro. Quien de verdad tiene dicho llamamiento no necesita que los demás se lo confirmen. A los ungidos “se les ha dado un nuevo nacimiento, no de semilla corruptible, sino de semilla reproductiva incorruptible, mediante la palabra del Dios vivo y duradero” (1 Pedro 1:23). Mediante su espíritu y Palabra, Dios implanta la “semilla” que convierte a la persona en “una nueva creación”, con la esperanza celestial (2 Corintios 5:17). Y es Jehová quien hace la elección. La unción “no depende del que desea ni del que corre, sino de Dios” (Romanos 9:16). Entonces, ¿cómo puede alguien estar seguro de que tiene el llamamiento celestial?
Por qué están seguros
18. ¿Cómo da el espíritu de Dios testimonio con el espíritu de los ungidos?
18 El testimonio del espíritu de Dios convence a los cristianos ungidos de que tienen la perspectiva celestial. “Ustedes [...] recibieron un espíritu de adopción como hijos —escribió Pablo—, espíritu por el cual clamamos: ‘¡Abba, Padre!’. El espíritu mismo da testimonio con nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Pues, si somos hijos, también somos herederos: herederos por cierto de Dios, pero coherederos con Cristo, con tal que suframos juntamente para que también seamos glorificados juntamente.” (Romanos 8:15-17.) Bajo la influencia del espíritu santo, el espíritu —o actitud dominante— de los ungidos los impele a aplicarse a sí mismos lo que las Escrituras dicen tocante a los hijos espirituales de Jehová (1 Juan 3:2). El espíritu de Dios les comunica un sentido de filiación respecto a Él y engendra en ellos una esperanza singular (Gálatas 4:6, 7). La vida eterna en la Tierra como seres humanos perfectos rodeados de la familia y los amigos sería algo espléndido, sí, pero esa no es la esperanza que Dios les ha otorgado. Por medio de su espíritu, él les ha implantado una esperanza celestial tan fuerte que están dispuestos a sacrificar todo vínculo y perspectivas terrestres (2 Corintios 5:1-5, 8; 2 Pedro 1:13, 14).
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