-
Una vida llena de alegrías sirviendo de misioneraBiografías de testigos de Jehová
-
-
Una noche, mientras estábamos en la reunión, se desató un tiroteo entre los guerrilleros sandinistas y las fuerzas de seguridad del Gobierno. Tuvimos que echarnos al suelo del Salón del Reino para que no nos alcanzara una bala.a
En otra ocasión, mientras estaba predicando, me encontré a un sandinista enmascarado disparándole a un guardia. Yo intenté escapar, pero más hombres enmascarados aparecieron. Seguí corriendo, pero parecía que no había escapatoria. Literalmente estaban lloviendo balas que se disparaban desde los helicópteros del Gobierno. De repente, un hombre abrió la puerta de su casa, me agarró y me metió dentro. ¡Sentí que Jehová me había rescatado!
¡Nos deportan!
El 20 de marzo de 1982 fue un día que nunca olvidaré; fue el último día que pasé en Masaya. Esa mañana, cuando otros cinco misioneros y yo estábamos a punto de desayunar, vimos entrar por la parte de atrás de la casa a un grupo de soldados sandinistas con ametralladoras. De repente, entraron en nuestro comedor y uno de ellos nos dijo con dureza: “Tienen una hora. Preparen una maleta y vengan con nosotros”.
Los soldados nos llevaron a una granja. Allí estuvimos detenidos varias horas. Después, nos metieron a cuatro de nosotros en un pequeño autobús y nos llevaron a la frontera con Costa Rica. Nos echaron del país, y no fuimos los únicos. Al final, 21 misioneros fuimos expulsados de Nicaragua.
-
-
Una vida llena de alegrías sirviendo de misioneraBiografías de testigos de Jehová
-
-
a El Frente Sandinista de Liberación Nacional se hizo popular en Nicaragua a final de los años 70. Finalmente, acabó con la dinastía que había estado en el poder durante más de 40 años.
-