-
Jehová cuida con ternura a sus siervos de edad avanzadaLa Atalaya 2008 | 15 de agosto
-
-
Por ejemplo, una hermana que llevaba en la verdad más de cincuenta años empezó a tener graves problemas de salud y no le era nada fácil asistir a las reuniones. En cierta ocasión, mientras recordaba lo mucho que hacía cuando era precursora regular, se le saltaron las lágrimas. Agachando la cabeza, se lamentó entre sollozos: “Ahora ya no puedo hacer nada”.
-
-
Jehová cuida con ternura a sus siervos de edad avanzadaLa Atalaya 2008 | 15 de agosto
-
-
Veamos el caso de un superintendente cristiano de 80 años llamado Juan, que se pasa el día cuidando de su fiel esposa Sara, que está inválida.f Varias hermanas se turnan para quedarse con Sara de modo que él pueda asistir a las reuniones y participar en el ministerio. Sin embargo, hace poco Juan, muy abrumado por la situación, empezó a pensar que debía dejar de ser superintendente. “¿Qué sentido tiene seguir siendo anciano? —dijo con lágrimas en los ojos—. Ya no hago nada útil en la congregación.” Los demás ancianos lo animaron a pensarlo mejor, asegurándole que aunque pudiera hacer poco, necesitaban contar con alguien de su experiencia. Fortalecido por aquellas palabras, Juan decidió seguir siendo superintendente, para alegría de la congregación.
-