-
Siempre quise que Jehová fuera el centro de mi vidaBiografías de testigos de Jehová
-
-
Jehová no me deja sola en la prisión
Los soldados me llevaron a una oficina donde me interrogaron durante varias horas. Me preguntaban: “¿Quién les está dando el dinero a los testigos de Jehová? ¿Trabajas para el Frente de Liberación de Eritrea? ¿Colaboran tú o tu padre con el Gobierno de Estados Unidos?”. Aunque estaba bajo mucha presión, me sentía tranquila. Jehová estaba conmigo (Filipenses 4:6, 7).
Después del interrogatorio, los soldados me llevaron a una casa que estaban usando como prisión. Me pusieron en una celda que solo tenía 28 metros cuadrados (300 pies cuadrados). ¡Estaba abarrotada! Conmigo había 15 presas políticas, y todas eran jóvenes.
-
-
Siempre quise que Jehová fuera el centro de mi vidaBiografías de testigos de Jehová
-
-
A veces, los guardias interrogaban y golpeaban a los presos. Un día, como a las once de la noche, vinieron a buscarme. Durante el interrogatorio, no paraban de acusarme. Decían que yo no apoyaba al Gobierno. Y, como me negué a repetir un eslogan político, dos guardias me golpearon. Pasé por este tipo de interrogatorios varias veces. En cada ocasión, le oraba a Jehová con todas mis fuerzas, y siempre sentía que él me ayudaba a aguantar.
-