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El rey y sus príncipesLas profecías de Isaías, una luz para toda la humanidad I
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Gobiernan para justicia y derecho
3. ¿Qué administración se profetiza en los libros de Isaías y Revelación?
3 El capítulo 32 de Isaías comienza con una emocionante profecía que se está cumpliendo en nuestros días de una forma excepcional: “¡Mira! Un rey reinará para justicia misma; y en cuanto a príncipes, gobernarán como príncipes para derecho mismo” (Isaías 32:1). La exclamación “¡Mira!” nos recuerda otra parecida que se encuentra en el último libro profético de la Biblia: “Aquel que estaba sentado en el trono dijo: ‘¡Mira!, voy a hacer nuevas todas las cosas’” (Revelación [Apocalipsis] 21:5). Tanto el libro bíblico de Isaías como el de Revelación, escritos con unos novecientos años de diferencia, ofrecen una descripción alentadora de una nueva administración —“un nuevo cielo”, compuesto del Rey, Cristo Jesús, entronizado en los cielos en 1914, y 144.000 personas “[compradas] de entre la humanidad” para reinar con él— y “una nueva tierra”, una sociedad humana mundial y unidaa (Revelación 14:1-4; 21:1-4; Isaías 65:17-25). Todo esto es posible gracias al sacrificio redentor de Cristo.
4. ¿Cuál es el núcleo, ya existente, de la nueva tierra?
4 El apóstol Juan explica qué vio en una visión después de contemplar cómo se sellaba definitivamente a estos 144.000 cogobernantes: “Vi, y, ¡miren!, una gran muchedumbre, que ningún hombre podía contar, de todas las naciones y tribus y pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero”. He ahí el núcleo de la nueva tierra: una gran multitud que ya asciende a millones de personas, a quienes se ha reunido al lado del reducido resto de los 144.000, en su mayoría de edad avanzada. Esta gran muchedumbre sobrevivirá a la gran tribulación ya muy cercana, y en la Tierra paradisíaca se le unirán los resucitados, tanto los que fueron fieles como los miles de millones que recibirán la oportunidad de manifestar fe. Cuantos así lo hagan serán bendecidos con vida eterna (Revelación 7:4, 9-17).
5-7. ¿Cuál es el papel de los predichos “príncipes” en el rebaño de Dios?
5 No obstante, mientras exista el mundo actual lleno de odio, los miembros de la gran muchedumbre necesitan protección, y la reciben en buena medida a través de los “príncipes” que ‘gobiernan para derecho mismo’. Sin duda, una espléndida provisión. La profecía de Isaías sigue describiendo a estos “príncipes” con palabras reconfortantes: “Cada uno tiene que resultar ser como escondite contra el viento y escondrijo contra la tempestad de lluvia, como corrientes de agua en país árido, como la sombra de un peñasco pesado en una tierra agotada” (Isaías 32:2).
6 En vista de las condiciones angustiosas que reinan hoy en el mundo, se necesitan “príncipes”, sí, ancianos que “presten atención [...] a todo el rebaño”, que cuiden de las ovejas de Jehová y administren justicia en armonía con Sus rectos principios (Hechos 20:28). Tales “príncipes” deben satisfacer los requisitos consignados en 1 Timoteo 3:2-7 y Tito 1:6-9.
7 En su gran profecía que describe las penalidades de “la conclusión del sistema de cosas”, Jesús dijo: “Vean que no se aterroricen” (Mateo 24:3-8). ¿Por qué no aterrorizan a los discípulos de Jesús las peligrosas condiciones mundiales? Una razón es que los “príncipes” —ungidos o de las “otras ovejas”— protegen con lealtad al rebaño (Juan 10:16). Cuidan valerosamente de sus hermanos aun ante atrocidades como guerras étnicas y genocidios. En un mundo estéril en sentido espiritual, semejante a una tierra agotada, se ocupan de que las almas abatidas reciban consuelo mediante las alentadoras verdades de la Palabra de Dios, la Biblia.
8. ¿Cómo está preparando y utilizando Jehová a los “príncipes” que son de las otras ovejas?
8 Durante los pasados cincuenta años se ha podido distinguir claramente quiénes son los “príncipes”. A los pertenecientes a las otras ovejas, que constituyen la clase del “principal” en formación, se les está preparando para que algunos de ellos, después de la gran tribulación, puedan desempeñar funciones administrativas en la “nueva tierra” (Ezequiel 44:2, 3; 2 Pedro 3:13). Dan dirección espiritual y consuelo a la vez que toman la iniciativa en el servicio del Reino; así demuestran ser “como la sombra de un peñasco pesado”, pues confortan al rebaño en lo relativo a la adoración que rinde.b
9. ¿Qué condiciones indican que hoy día se necesitan “príncipes”?
9 En estos peligrosos últimos días del mundo inicuo de Satanás, los cristianos dedicados necesitan imperiosamente tal protección (2 Timoteo 3:1-5, 13). Soplan fuertes vientos de doctrinas falsas y propaganda engañosa. Estallan tempestades en la forma de guerras civiles y entre naciones, así como en la de ataques directos contra los adoradores fieles de Jehová Dios. En un mundo que sufre sequía espiritual, las corrientes de agua de la verdad pura y sin adulterar son imprescindibles para que los cristianos sacien su sed espiritual. Felizmente, Jehová ha prometido que su Rey entronizado, a través de sus hermanos ungidos y los “príncipes” de las otras ovejas que los apoyan, estimulará y guiará a los que se abaten y desaniman en estos tiempos difíciles. De este modo, Jehová se encargará de que triunfe la justicia.
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El rey y sus príncipesLas profecías de Isaías, una luz para toda la humanidad I
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[Ilustraciones de la página 333]
Cada ‘príncipe’ es como un escondite contra el viento, un refugio contra la lluvia, como agua en el desierto y una sombra que protege del sol
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