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El Día del Juicio de Dios... ¡su gozoso resultado!Apocalipsis... ¡se acerca su magnífica culminación!
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“Y vi a los muertos, los grandes y los pequeños, de pie delante del trono, y se abrieron rollos.” (Revelación 20:12a.) La expresión “los grandes y los pequeños” abarca a las personas prominentes así como a las de menos importancia que han vivido y muerto en esta Tierra durante los pasados 6.000 años. En el Evangelio que escribió el apóstol Juan poco después de escribir el libro de Apocalipsis o Revelación, Jesús dijo que el Padre “ha dado [a Jesús] autoridad para hacer juicio, por cuanto es Hijo del hombre. No se maravillen de esto, porque viene la hora en que todos los que están en las tumbas conmemorativas oirán su voz y saldrán”. (Juan 5:27-29.) ¡Qué magnífico proyecto!... ¡lo opuesto de las muertes y los entierros que ha habido durante toda la historia! Es de esperarse que la resurrección de esos incontables millones de personas que Dios tiene en la memoria se efectuará gradualmente, para que la gran muchedumbre —que son muy pocos en comparación— pueda encargarse de los problemas que pudieran surgir debido a que al principio los resucitados quizás tiendan a seguir su viejo estilo de vida, con sus debilidades y actitudes carnales.
¿A quiénes se resucita y juzga?
7, 8. a) ¿Qué rollo se abre, y qué sucede después de eso? b) ¿Para quiénes no habrá resurrección?
7 Juan añade: “Pero se abrió otro rollo; es el rollo de la vida. Y los muertos fueron juzgados de acuerdo con las cosas escritas en los rollos según sus hechos. Y el mar entregó los muertos que había en él, y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos, y fueron juzgados individualmente según sus hechos”. (Revelación 20:12b, 13.) ¡Ciertamente un espectáculo asombroso! Tanto ‘el mar como la muerte y el Hades’ desempeñan su papel, pero note que estos términos no se excluyen uno a otroa. Jonás, cuando estuvo en el vientre de un pez y por eso en medio del mar, dijo que se hallaba en el Seol o Hades. (Jonás 2:2.) Si alguien está en las garras de la muerte adámica, entonces puede que también esté en el Hades. Estas palabras proféticas dan gran seguridad de que no se pasará por alto a nadie.
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Por otra parte, algunas personas serán favorecidas de modo especial en la resurrección. El apóstol Pablo indicó esto cuando dijo: “Tengo esperanza en cuanto a Dios [...] de que va a haber resurrección así de justos como de injustos”. (Hechos 24:15.) Respecto a la resurrección terrestre, entre ‘los justos’ estarán hombres y mujeres fieles de la antigüedad —Abrahán, Rahab y muchos otros— que fueron declarados justos por su amistad con Dios. (Santiago 2:21, 23, 25.) En este mismo grupo estarán las justas otras ovejas que hayan muerto en fidelidad a Jehová en nuestros días. Es probable que todas estas personas íntegras sean resucitadas a principios del Reinado Milenario de Jesús. (Job 14:13-15; 27:5; Daniel 12:13; Hebreos 11:35, 39, 40.) No hay duda de que a muchos de estos justos resucitados se les asignarán privilegios especiales de superentender la tremenda obra de restauración que se efectuará en el Paraíso. (Salmo 45:16; compárese con Isaías 32:1, 16-18; 61:5; 65:21-23.)
10. De todos los que han de ser resucitados, ¿quiénes son ‘los injustos’?
10 Sin embargo, ¿quiénes son ‘los injustos’ mencionados en Hechos 24:15? Entre estos estarían las grandes masas de la humanidad que han muerto durante toda la historia, particularmente los que vivieron en ‘tiempos de ignorancia’. (Hechos 17:30.) Estos, debido al lugar donde nacieron o el tiempo en que vivieron, no tuvieron la oportunidad de aprender obediencia a la voluntad de Jehová. Además, puede que algunos sí oyeran el mensaje de la salvación, pero que no respondieran de lleno en aquel tiempo, o quizás murieron antes de haber llegado al punto de dedicarse y bautizarse. En la resurrección estos tendrán que hacer ajustes adicionales en su modo de pensar y en su derrotero para poder beneficiarse de esa oportunidad de adquirir vida eterna.
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