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Obedezcamos a los pastores nombrados por JehováLa Atalaya 2013 | 15 de noviembre
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Obedezcamos a los pastores nombrados por Jehová
“Sean obedientes a los que llevan la delantera entre ustedes, y sean sumisos, porque ellos están velando por las almas de ustedes.” (HEB. 13:17)
1, 2. ¿Qué nos revela Jehová al compararse a un pastor?
JEHOVÁ se compara a sí mismo a un pastor (Ezeq. 34:11-14). Esta imagen nos ayuda a entender cómo es él. Un pastor afectuoso se siente responsable de que las ovejas que cuida no sufran ningún daño y estén bien atendidas. Las guía a buenos pastos y a lugares donde puedan beber (Sal. 23:1, 2); las vigila día y noche (Luc. 2:8); las protege de los depredadores (1 Sam. 17:34, 35); lleva en brazos a las recién nacidas (Is. 40:11); busca a las que se han perdido y cuida a las que están heridas (Ezeq. 34:16).
2 Como los israelitas de la antigüedad formaban una sociedad principalmente agrícola y ganadera, podían comprender con facilidad el alcance de esa comparación. Las ovejas necesitan cuidados y atenciones y, en sentido espiritual, con las personas sucede lo mismo (Mar. 6:34). Sin buena atención y dirección espiritual, la gente sufre. Se vuelve vulnerable y se extravía moralmente, tal como las “ovejas que no tienen pastor” acaban esparcidas (1 Rey. 22:17). Pero Jehová satisface amorosamente las necesidades de sus siervos.
3. ¿De qué tratará este artículo?
3 La comparación de Jehová a un pastor sigue siendo acertada hoy día. Él sigue sosteniendo a sus siervos, semejantes a ovejas. Veamos cómo los dirige y satisface sus necesidades, y también cómo deben responder ellos al interés amoroso que les demuestra.
EL PASTOR EXCELENTE PROPORCIONA PASTORES
4. ¿Qué función desempeña Jesús en cuidar a las ovejas de Jehová?
4 Jehová ha nombrado a Jesús Cabeza de la congregación cristiana (Efes. 1:22, 23). Jesús es “el pastor excelente” y tiene los mismos intereses, propósitos y cualidades que su Padre. Llegó al punto de “[entregar] su alma a favor de las ovejas” (Juan 10:11, 15). El sacrificio redentor de Cristo es una gran bendición para la humanidad (Mat. 20:28). De hecho, el propósito de Jehová es que “todo el que ejerce fe en [Jesús] no sea destruido, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16).
5, 6. a) ¿A quién ha nombrado Jesús para cuidar a sus ovejas? b) ¿Qué tienen que hacer las ovejas para beneficiarse de los pastores que Jesús ha nombrado? c) ¿Cuál debe ser el motivo principal para obedecer a los ancianos?
5 ¿Cómo demuestran las ovejas que aceptan a Jesucristo como su Pastor? Él mismo dijo: “Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen” (Juan 10:27). Escuchar la voz del Pastor Excelente significa seguir su guía en todo, lo que incluye colaborar con los pastores espirituales que él ha nombrado. Jesús indicó que sus apóstoles y discípulos tendrían que continuar la obra que él había comenzado. Debían enseñar y apacentar a sus “ovejitas” (Mat. 28:20; lea Juan 21:15-17). Cuando las buenas nuevas se difundieron y el número de discípulos aumentó, Jesús se encargó de que cristianos maduros pastorearan las congregaciones (Efes. 4:11, 12).
6 El apóstol Pablo les dijo a los superintendentes de la congregación de Éfeso del siglo primero que el espíritu santo los había nombrado “para pastorear la congregación de Dios” (Hech. 20:28). Lo mismo puede decirse de los superintendentes de hoy, pues para que sean nombrados deben cumplir requisitos bíblicos que fueron inspirados por el espíritu santo. Por lo tanto, al obedecerlos a ellos demostramos respeto por Jehová y Jesús, los dos mayores Pastores (Luc. 10:16). Sin duda, este debe ser el principal motivo para ser sumisos a los ancianos. Sin embargo, no es el único.
7. ¿Cómo le ayudan a usted los ancianos a mantener una buena relación con Jehová?
7 Al guiar a sus hermanos en la fe, los ancianos los animan y aconsejan con las Escrituras mismas o basándose en principios bíblicos. Su objetivo cuando proporcionan esa dirección no es decirles cómo deben vivir su vida (2 Cor. 1:24). Más bien, es darles pautas bíblicas para ayudarles a tomar buenas decisiones y para fomentar el orden y la paz en la congregación (1 Cor. 14:33, 40). Los ancianos están “velando por las almas” de sus hermanos. Esto muestra que desean que todos ellos mantengan una buena relación con Jehová. Por consiguiente, prestarán ayuda enseguida si notan que un hermano va a dar —o ya ha dado— “algún paso en falso” (Gál. 6:1, 2; Jud. 22). ¿Verdad que estas son buenas razones para ser “obedientes a los que llevan la delantera”? (Lea Hebreos 13:17.)
8. ¿Cómo defienden los ancianos al rebaño de Dios?
8 El apóstol Pablo, que también era un pastor espiritual, escribió a sus hermanos de Colosas: “Cuidado: quizás haya alguien que se los lleve como presa suya mediante la filosofía y el vano engaño según la tradición de los hombres, según las cosas elementales del mundo y no según Cristo” (Col. 2:8). Esta advertencia destaca otra buena razón para prestar atención a los consejos basados en la Biblia que dan los ancianos. Ellos defienden al rebaño al ponerlo en guardia contra cualquiera que trate de extraviarlo. Pedro advirtió que habría “falsos profetas” y “falsos maestros” que intentarían “[cautivar] almas inconstantes” para llevarlas a pecar (2 Ped. 2:1, 14). Los ancianos de la actualidad deben dar advertencias similares cuando sea preciso. Son hombres maduros que tienen experiencia en la vida. Además, antes de ser nombrados demostraron que comprendían bien las Escrituras y que estaban capacitados para enseñar la verdad (1 Tim. 3:2; Tito 1:9). En resumen, su madurez, su equilibrio y su sabiduría basada en la Biblia les permiten dirigir hábilmente al rebaño.
Como un pastor protege a su rebaño, los ancianos protegen a las ovejas que se les han confiado (Vea el párrafo 8)
EL PASTOR EXCELENTE ALIMENTA Y PROTEGE A LAS OVEJAS
9. ¿Cómo es dirigida y alimentada la congregación cristiana hoy?
9 A través de su organización, Jehová proporciona gran abundancia de alimento espiritual a toda la hermandad mundial. En nuestras publicaciones se ofrecen muchos consejos basados en las Escrituras. Además, a veces la organización da instrucciones directamente a los ancianos, ya sea por carta o mediante los superintendentes viajantes. Por todos estos medios se dirige y alimenta a la congregación cristiana.
10. ¿Qué responsabilidad tienen los pastores espirituales en el caso de quienes se han apartado del rebaño?
10 Los ancianos tienen la responsabilidad de proteger a los miembros de la congregación y cuidar su salud espiritual, sobre todo en el caso de quienes se han debilitado espiritualmente o han cometido errores graves (lea Santiago 5:14, 15). Algunas de estas ovejas se han apartado del rebaño y han dejado de participar en las actividades cristianas. ¿No haría un anciano amoroso todo lo que estuviera en su mano por encontrar a cada una de ellas y animarla a regresar al redil, es decir, a la congregación? ¡Claro que sí! Jesús explicó: “No es cosa deseable a mi Padre que está en el cielo el que uno de estos pequeños perezca” (Mat. 18:12-14).
¿CÓMO DEBEMOS VER LAS FALTAS DE LOS PASTORES NOMBRADOS?
11. ¿Por qué es posible que a algunos hermanos les cueste seguir la guía de los ancianos?
11 Jehová y Jesús son pastores perfectos; en cambio, los pastores humanos a quienes han confiado el cuidado de las congregaciones no lo son. Por eso, a algunos hermanos quizás les cueste seguir su guía. Puede que piensen: “Son tan imperfectos como yo. ¿Por qué tienen que decirme lo que debo hacer?”. Y es verdad, los ancianos son imperfectos. Pero no deberíamos centrarnos en sus faltas y debilidades.
12, 13. a) ¿Qué puede decirse de los defectos de algunos hombres a quienes Jehová utilizó en puestos de responsabilidad? b) ¿Por qué se registraron en la Biblia los defectos de algunos hombres nombrados por Jehová?
12 Las Escrituras registran con toda sinceridad las faltas de personas que Jehová utilizó para dirigir a su pueblo en el pasado. Por ejemplo, David fue ungido rey y líder de Israel. No obstante, cedió a la tentación y se convirtió en adúltero y asesino (2 Sam. 12:7-9). Pensemos también en el apóstol Pedro. Aunque se le confiaron muchas responsabilidades en la congregación cristiana del siglo primero, cometió graves errores (Mat. 16:18, 19; Juan 13:38; 18:27; Gál. 2:11-14). La realidad es que, a excepción de Jesús, desde Adán y Eva ningún ser humano ha sido perfecto.
13 ¿Por qué se encargó Jehová de que en la Biblia se incluyeran relatos que reflejan los defectos de hombres a quienes él había nombrado? Entre otras razones, para mostrar que puede utilizar hombres imperfectos para guiar a su pueblo. De hecho, siempre ha sido así. Por consiguiente, no deberíamos usar las imperfecciones de quienes nos dirigen como excusa para quejarnos de ellos o menospreciar su autoridad. Jehová espera que los respetemos y obedezcamos (lea Éxodo 16:2, 8).
14, 15. ¿Qué aprendemos de la manera en que Jehová se comunicaba con su pueblo en el pasado?
14 Es vital que obedezcamos a quienes hoy nos dirigen. Pensemos en el conducto que empleó Jehová para comunicarse con su pueblo en momentos trascendentales. Cuando los israelitas salieron de Egipto, recibieron instrucciones de Jehová por medio de Moisés y Aarón. Para sobrevivir a la décima plaga, tenían que celebrar una cena especial y salpicar sobre el marco de la puerta de su casa algo de la sangre de una oveja degollada. No fue una voz del cielo la que les dijo lo que debían hacer. Más bien, tuvieron que escuchar a los ancianos de Israel, los cuales, a su vez, habían recibido instrucciones específicas de Moisés (Éx. 12:1-7, 21-23, 29). En aquellas circunstancias, Moisés y los ancianos fueron los portadores de los mandatos divinos. Y hoy los ancianos cristianos cumplen una función igualmente vital.
15 Lo más seguro es que recordemos muchas otras ocasiones registradas en la Biblia en las que Jehová envió representantes angélicos o humanos con instrucciones para la salvación de sus siervos. En todos esos casos, a Dios le pareció bien delegar algo de su autoridad. Los mensajeros hablaron en su nombre y le dijeron al pueblo lo que tenía que hacer para no perder la vida. ¿Acaso Jehová no podría hacer algo parecido cuando llegue el Armagedón? Claro está, todo anciano a quien hoy se le concede el honor de representar a Jehová o a su organización debe tener muchísimo cuidado de no abusar de la autoridad que se le ha confiado.
“UN SOLO REBAÑO, UN SOLO PASTOR”
16. ¿A qué “palabra” tenemos que prestar atención?
16 El pueblo de Jehová constituye “un solo rebaño” bajo el “un solo pastor”, Jesucristo (Juan 10:16). Jesús les aseguró a sus discípulos que estaría con ellos “todos los días hasta la conclusión del sistema de cosas” (Mat. 28:20). ¿De qué forma está cumpliendo esa promesa? Como Rey celestial, controla por completo todos los sucesos que llevarán a la ejecución de la sentencia contra el mundo de Satanás. Si queremos permanecer unidos y seguros dentro del rebaño de Dios, tenemos que prestar atención a la “palabra detrás de [nosotros]” que nos indica el camino en que debemos andar. Esa “palabra” incluye lo que dice el espíritu santo mediante las páginas de la Biblia y lo que dicen Jehová y Jesús mediante los pastores que han nombrado (lea Isaías 30:21 y Revelación 3:22).
Los ancianos se esfuerzan por proteger de las compañías dañinas a las familias monoparentales (Vea los párrafos 17 y 18)
17, 18. a) ¿Qué peligro amenaza al rebaño? b) ¿De qué podemos estar seguros? c) ¿Qué veremos en el próximo artículo?
17 El apóstol Pedro dijo que Satanás anda “como león rugiente, procurando devorar a alguien” (1 Ped. 5:8). Lo mismo que una fiera hambrienta, está acechando al rebaño, esperando la oportunidad para abalanzarse sobre los que se hallan desprevenidos y los que se han extraviado. Esta es otra razón de peso para mantenernos cerca del rebaño y de Jehová, el “pastor y superintendente de [nuestras] almas” (1 Ped. 2:25). Revelación 7:17 nos asegura que a los sobrevivientes de la gran tribulación, Jesús, “el Cordero, [...] los pastoreará, y los guiará a fuentes de aguas de vida. Y Dios limpiará toda lágrima de los ojos de ellos”. ¿Podría haber una promesa mejor?
18 Ahora que hemos visto el papel esencial que desempeñan los ancianos cristianos como pastores espirituales, la siguiente pregunta es muy oportuna: “¿Cómo pueden estos hombres nombrados asegurarse de tratar del modo debido a las ovejas de Jesús?”. Lo invitamos a ver la respuesta en el próximo artículo.
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Pastores, imiten a Jehová y JesúsLa Atalaya 2013 | 15 de noviembre
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Pastores, imiten a Jehová y Jesús
“Cristo sufrió por ustedes, dejándoles dechado para que sigan sus pasos con sumo cuidado y atención.” (1 PED. 2:21)
1, 2. a) ¿Qué sucede cuando las ovejas están bien atendidas? b) En tiempos de Jesús, ¿por qué eran como ovejas sin pastor muchas personas?
EL REBAÑO crece sano cuando el pastor se preocupa por su bienestar. Según cierto manual sobre la cría de ovejas, “si el pastor únicamente las lleva a pastar y no les presta más atención, es muy probable que en pocos años se encuentre con que muchas de ellas están enfermas y no les puede sacar ningún beneficio”. Sucede todo lo contrario cuando las ovejas se atienden como es debido.
2 De modo similar, la salud espiritual de la congregación en conjunto depende de cómo los pastores del rebaño de Dios cuidan a cada oveja que se les ha confiado. Recuerde que Jesús se compadecía de las multitudes “porque estaban desolladas y desparramadas como ovejas sin pastor” (Mat. 9:36). ¿Por qué se hallaban en ese estado tan lastimoso? Porque los que tenían la responsabilidad de enseñar la Ley al pueblo eran hipócritas, ásperos y exigentes. En vez de ayudar y alimentar a las ovejas de su rebaño, los líderes religiosos de Israel les ponían “cargas pesadas” sobre los hombros (Mat. 23:4).
3. ¿Qué deben recordar los ancianos de congregación mientras cumplen su labor de pastores espirituales?
3 Los pastores cristianos de nuestros días —los ancianos nombrados— tienen una gran responsabilidad. Las ovejas que atienden son de Jehová y de Jesús, quien se llamó a sí mismo “el pastor excelente” (Juan 10:11). Jesús pagó por ellas un precio muy alto: su propia “sangre preciosa” (1 Cor. 6:20; 1 Ped. 1:18, 19). Él las ama tanto que sacrificó voluntariamente su vida por ellas. Los ancianos siempre deben recordar que son pastores que trabajan bajo la supervisión del amoroso Hijo de Dios, Jesucristo, el “gran pastor de las ovejas” (Heb. 13:20).
4. ¿Qué veremos en este artículo?
4 Por consiguiente, ¿cómo deben tratar a las ovejas los pastores cristianos? A los miembros de la congregación se les pide que “sean obedientes a los que llevan la delantera” entre ellos. Por otra parte, a los ancianos cristianos se les anima a no estar “enseñoreándose de los que son la herencia de Dios”, a no ser dominantes (Heb. 13:17; lea 1 Pedro 5:2, 3). Ahora bien, ¿cómo pueden dirigir los ancianos al rebaño sin ser dominantes? En otras palabras, ¿cómo pueden satisfacer las necesidades de las ovejas sin abusar de la autoridad que Dios les ha concedido?
“EN SU SENO LOS LLEVARÁ”
5. ¿Qué nos enseña sobre Jehová la imagen que describe Isaías 40:11?
5 Con respecto a Jehová, el profeta Isaías dijo: “Como pastor pastoreará su propio hato. Con su brazo juntará los corderos; y en su seno los llevará. Conducirá con cuidado a las que están dando de mamar” (Is. 40:11). Esta imagen transmite la idea de que Jehová satisface las necesidades de los miembros débiles y vulnerables de la congregación. Tal como un pastor conoce lo que cada oveja necesita y está listo para atenderlas a todas, Jehová está al tanto de las necesidades de los miembros de la congregación y con gusto les presta los cuidados que requieren. Y lo mismo que un pastor lleva a un corderito recién nacido en el pliegue de su ropa cuando es preciso, Jehová —“el Padre de tiernas misericordias”— nos llevará a nosotros en los momentos difíciles. Nos consolará y dará fuerzas cuando nos enfrentemos a pruebas severas o tengamos alguna necesidad especial (2 Cor. 1:3, 4).
6. ¿Cómo puede un anciano seguir el ejemplo de Jehová en su función de pastor espiritual?
6 ¡Qué gran ejemplo es nuestro Padre celestial para los pastores espirituales! Al igual que Jehová, ellos deben estar atentos a las circunstancias de las ovejas. ¿Por qué? Porque si conocen las dificultades que las ovejas atraviesan y sus necesidades inmediatas, podrán brindarles el ánimo y el apoyo que necesitan (Prov. 27:23). Es obvio, pues, que los ancianos deben tener una buena comunicación con sus hermanos en la fe. Aunque respetan su intimidad, se interesan en lo que ven y oyen en la congregación y se ofrecen bondadosamente a “prestar ayuda a los que son débiles” (Hech. 20:35; 1 Tes. 4:11).
7. a) ¿Qué clase de trato recibían las ovejas de Dios en los días de Ezequiel y Jeremías? b) ¿Qué les enseña a los ancianos el hecho de que Jehová condenara a los pastores infieles?
7 Pensemos en la actitud de los pastores espirituales de los días de Ezequiel y Jeremías, a los que Dios condenó por no haber cuidado a su rebaño. Como nadie vigilaba a las ovejas, estas caían en las garras de depredadores o se extraviaban. En lugar de apacentarlas, aquellos pastores las explotaban para seguir “apacentándose a sí mismos” (Ezeq. 34:7-10; Jer. 23:1). Jehová ha rechazado a los líderes de la cristiandad por esas mismas razones. Por eso, ¡qué importante es que los ancianos cristianos cuiden con amor al rebaño!
“YO LES HE PUESTO EL MODELO”
8. ¿Qué magnífico ejemplo dio Jesús a la hora de corregir malas actitudes?
8 Debido a la imperfección, a algunas ovejas de Dios quizás les cueste entender lo que él espera de ellas. Tal vez no sigan algún consejo bíblico o hagan algo que revele falta de madurez espiritual. ¿Qué deben hacer los ancianos en esos casos? Imitar la paciencia que Jesús tuvo con sus discípulos cada vez que discutían sobre quién de ellos sería el mayor en el Reino: en lugar de perder la calma, Jesús siguió enseñándoles y aconsejándoles que fueran humildes (Luc. 9:46-48; 22:24-27). Y al lavarles los pies, les demostró lo que significa la humildad, cualidad que todo superintendente cristiano debe tener (lea Juan 13:12-15; 1 Ped. 2:21).
9. ¿Cómo corrigió Jesús a sus discípulos?
9 El punto de vista de Jesús en cuanto a la labor de un pastor espiritual era distinto del que una vez manifestaron los apóstoles Santiago y Juan. Ambos buscaron asegurarse un puesto prominente en el Reino. Pero Jesús los corrigió así: “Ustedes saben que los gobernantes de las naciones actúan como dictadores y los que ocupan cargos abusan de su autoridad. Pero no será así entre ustedes. Al contrario, el que de ustedes quiera ser grande, que se haga el servidor de ustedes” (Mat. 20:25, 26, La Biblia Latinoamérica, 2011). Los apóstoles tenían que reprimir el deseo de dominar a sus compañeros, de andar dándoles órdenes.
10. a) ¿Cómo quiere Jesús que los ancianos traten al rebaño? b) ¿Qué ejemplo de humildad dejó Pablo?
10 Jesús espera que los ancianos cristianos traten al rebaño de la misma forma que él lo trató. Deben estar dispuestos a ser los siervos de sus hermanos, no sus amos. Pablo manifestó esa humildad, como lo demuestran estas palabras que les dirigió a los ancianos de Éfeso: “Bien saben ustedes cómo desde el primer día que puse pie en el distrito de Asia estuve con ustedes todo el tiempo, sirviendo como esclavo al Señor con la mayor humildad mental”. El apóstol deseaba que aquellos ancianos ayudaran a los demás con entrega y humildad. Luego les dijo: “En todas las cosas les he exhibido que por medio de laborar así tienen que prestar ayuda a los que son débiles” (Hech. 20:18, 19, 35). En otra ocasión les escribió a los cristianos corintios que él no era amo de su fe, sino un humilde colaborador que quería ayudarles a servir a Jehová con gozo (2 Cor. 1:24). En efecto, Pablo dejó un magnífico ejemplo de humildad y laboriosidad para los ancianos de hoy.
“QUE SE ADHIERA FIRMEMENTE A LA FIEL PALABRA”
11, 12. ¿Cómo puede un anciano ayudar a un hermano a tomar una decisión?
11 Es necesario que el anciano de congregación “se adhiera firmemente a la fiel palabra en lo que toca a su arte de enseñar” (Tito 1:9). Pero debe hacerlo “con espíritu de apacibilidad” (Gál. 6:1). Más bien que tratar de obligar a un hermano a actuar de cierta forma, un buen pastor espiritual piensa en cómo apelar a su corazón. Puede indicarle qué principios bíblicos debe tener en cuenta para tomar una decisión importante, así como repasar con él lo que se ha publicado sobre el tema. Puede animarlo a reflexionar en el efecto que tendrían en su relación con Jehová las distintas opciones. También puede resaltar la importancia de orar a Dios para pedirle su guía antes de decidir (Prov. 3:5, 6). Pero después de tratar estos asuntos con el hermano, dejará que él tome su propia decisión (Rom. 14:1-4).
12 La única fuente en la que pueden basarse los ancianos para aconsejar y enseñar es la Biblia. Por lo tanto, es esencial que sepan utilizar las Escrituras y que se atengan a lo que estas enseñan. Así evitarán cualquier posible abuso de poder. Al fin y al cabo, solo son pastores subordinados, y cada miembro de la congregación tendrá que rendir cuentas de sus decisiones a Jehová y Jesús (Gál. 6:5, 7, 8).
“EJEMPLOS DEL REBAÑO”
Los ancianos ayudan a su familia a prepararse para el ministerio (Vea el párrafo 13)
13, 14. ¿En qué campos deben ser los ancianos ejemplos del rebaño?
13 Después de exhortar a los ancianos de la congregación a no andar “enseñoreándose de los asignados por Dios” a ellos, el apóstol Pedro los animó a hacerse “ejemplos del rebaño” (1 Ped. 5:3, nota). ¿Cómo puede un anciano seguir ese consejo? Examinemos dos de los requisitos que debe cumplir todo hombre que esté “procurando alcanzar un puesto de superintendente”: tener “juicio sano” y “[presidir] su propia casa excelentemente”. Para llegar a ser anciano, debe tener “juicio sano”, es decir, entender claramente los principios divinos y saber aplicarlos en su propia vida. Tiene que ser una persona sensata y no apresurarse en sus juicios. Además, si tiene familia, debe ser un buen cabeza, ya que “si de veras no sabe algún hombre presidir su propia casa, ¿cómo cuidará de la congregación de Dios?” (1 Tim. 3:1, 2, 4, 5). Los miembros de la congregación se sienten impulsados a confiar en los ancianos cuando ven estas cualidades en ellos.
14 Otro campo en que los superintendentes tienen que ser ejemplos para sus hermanos es la predicación. Jesús les puso el modelo, pues predicar las buenas nuevas fue un aspecto importante de su ministerio en la Tierra. Además, les mostró a sus discípulos cómo llevar a cabo esta obra (Mar. 1:38; Luc. 8:1). En nuestros días, para los publicadores es muy alentador predicar con los ancianos, ver su entusiasmo por esta obra salvadora y aprender sus métodos de enseñanza. Cuando la congregación ve que los ancianos dedican su tiempo y energías a predicar pese a su apretado horario, todos sus miembros se sienten impulsados a imitarlos. Los ancianos también dan un buen ejemplo preparándose para las reuniones y participando en ellas y en otras actividades relacionadas, como la limpieza y mantenimiento del Salón del Reino (Efes. 5:15, 16; lea Hebreos 13:7).
Los superintendentes dan el ejemplo en la predicación (Vea el párrafo 14)
“DEN SU APOYO A LOS DÉBILES”
15. Mencione algunas razones por las que los ancianos hacen visitas de pastoreo.
15 Un buen pastor actúa con rapidez cuando alguna oveja está herida o se enferma. De manera parecida, los ancianos deben atender sin demora a cualquier miembro de la congregación que esté sufriendo o precise asistencia espiritual. Los de edad avanzada y los enfermos pueden necesitar ayuda relacionada con su condición física, pero sobre todo necesitan ánimo y ayuda espiritual (1 Tes. 5:14). Por su parte, los jóvenes quizás afronten otros retos, como luchar contra “los deseos que acompañan a la juventud” (2 Tim. 2:22). De modo que pastorear a los miembros de la congregación exige visitarlos cada cierto tiempo con el objetivo de comprender las situaciones que atraviesan y animarlos con textos bíblicos oportunos. Cuando los problemas se tratan a tiempo, en muchos casos pueden resolverse antes de que se agraven.
16. Cuando algún miembro de la congregación precisa ayuda espiritual, ¿qué deben hacer los ancianos?
16 Pero ¿y si los problemas de algún hermano crecen hasta el punto de amenazar su salud espiritual? El discípulo Santiago escribió: “¿Hay alguno enfermo entre ustedes? Que llame [...] a los ancianos de la congregación, y que ellos oren sobre él, untándolo con aceite en el nombre de Jehová. Y la oración de fe sanará al indispuesto, y Jehová lo levantará. También, si hubiera cometido pecados, se le perdonará” (Sant. 5:14, 15). Aunque alguien que está enfermo espiritualmente no llame a los ancianos, ellos deben acudir en su ayuda en cuanto se enteren de la situación. Cuando los superintendentes oran a Dios con sus hermanos y a favor de ellos y los apoyan cuando lo necesitan, demuestran ser buenos pastores espirituales que reconfortan a las ovejas puestas a su cuidado (lea Isaías 32:1, 2).
17. ¿Qué resultados se obtienen cuando los ancianos imitan al “gran pastor”?
17 Los ancianos cristianos se esfuerzan por imitar al “gran pastor”, Jesucristo, en todas sus labores. La ayuda de esos hombres beneficia enormemente al rebaño y contribuye a su progreso espiritual. Contar con ellos nos impulsa a dar gracias y alabar a Jehová, nuestro incomparable Pastor.
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