-
No dejemos lugar para el DiabloLa Atalaya 2006 | 15 de enero
-
-
No imitemos al gran calumniador
4. ¿Cómo calumnió el “inicuo” a Dios?
4 El “inicuo” merece ser llamado el Diablo por ser un calumniador. Una calumnia es una declaración falsa, maliciosa y difamatoria que se hace contra una persona. Dios ordenó a Adán: “En cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo, no debes comer de él, porque en el día que comas de él, positivamente morirás” (Génesis 2:17). Eva conocía este mandamiento, pero mediante una serpiente, el Diablo le dijo: “Positivamente no morirán. Porque Dios sabe que en el mismo día que coman de él tendrán que abrírseles los ojos y tendrán que ser como Dios, conociendo lo bueno y lo malo” (Génesis 3:4, 5). Aquello fue una maliciosa calumnia contra Jehová Dios.
-
-
No dejemos lugar para el DiabloLa Atalaya 2006 | 15 de enero
-
-
Y la Biblia presenta a Satanás como “el acusador de nuestros hermanos, que los acusa día y noche delante de nuestro Dios” (Revelación 12:10). Estos hermanos a quienes se acusa falsamente son cristianos ungidos que viven en la Tierra en estos últimos días.
-