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Quería ser como la hija de JeftéLa Atalaya 2011 | 1 de diciembre
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“Sigue mejorando tus habilidades”
Al cabo de unos dos años y medio nos enviaron de vuelta a Bombay. Elizabeth siguió con su labor evangelizadora. Pero a mí me pidieron que ayudara a mi padre, que era el único traductor de nuestras publicaciones bíblicas a la lengua kannada. Como él tenía numerosas responsabilidades en la congregación, agradeció mucho mi ayuda.
En 1966, mis padres decidieron regresar a Uduppi, nuestro antiguo hogar. Al irse de Bombay, papá me dijo: “Sigue mejorando tus habilidades, hija mía. Traduce de forma sencilla y clara. No confíes demasiado en ti misma, mantente humilde. Apóyate en Jehová”. Estos fueron los últimos consejos que me dio, pues falleció poco después de regresar a Uduppi. Desde entonces me he esforzado por hacer justo eso en mi labor de traductora.
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Quería ser como la hija de JeftéLa Atalaya 2011 | 1 de diciembre
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[Ilustración de la página 29]
Trabajando con otros traductores
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