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  • Los superintendentes viajantes: dádivas en hombres
    La Atalaya 1996 | 15 de noviembre
    • Los superintendentes viajantes: dádivas en hombres

      “Cuando ascendió a lo alto se llevó cautivos; dio dádivas en hombres.” (EFESIOS 4:8.)

      1. ¿Qué nueva obra anunció esta revista en 1894?

      HACE más de un siglo, La Atalaya anunció una novedad. La denominó “otra faceta de la obra”. ¿Qué entrañaba esta nueva actividad? Era la inauguración en tiempos modernos de la obra de los superintendentes viajantes. El número del 1 de septiembre de 1894 de esta revista explicó que, en lo sucesivo, hermanos cualificados visitarían los grupos de Estudiantes de la Biblia ‘con el propósito de edificarlos en la verdad’.

      2. ¿Cuáles son los deberes de los superintendentes de circuito y distrito?

      2 En el siglo I E.C., superintendentes como Pablo y Bernabé visitaban las congregaciones cristianas. El objetivo de estos hombres fieles era ‘edificar’ las congregaciones. (2 Corintios 10:8.) En la actualidad gozamos del beneficio de miles de hermanos que efectúan esta obra de manera sistemática. El Cuerpo Gobernante de los testigos de Jehová los ha nombrado superintendentes de circuito y distrito. El superintendente de circuito sirve a unas veinte congregaciones y pasa una semana con cada una de ellas unas dos veces al año. Examina los archivos, pronuncia discursos y participa en el ministerio del campo con los publicadores del Reino. El superintendente de distrito preside cada una de las asambleas de circuito anuales de varios circuitos. También participa en el ministerio del campo con las congregaciones anfitrionas y pronuncia discursos bíblicos animadores.

      Espíritu abnegado

      3. ¿Por qué necesitan tener los superintendentes viajantes un espíritu abnegado?

      3 Estos superintendentes viajan constantemente. Este hecho en sí mismo requiere un espíritu abnegado. Trasladarse de una congregación a otra puede resultar difícil, pero estos hombres y sus esposas lo hacen con alegría. Un superintendente de circuito dijo: “Mi esposa me ayuda mucho y no se queja [...]. Ella merece mucho encomio por su espíritu abnegado”. Algunos superintendentes de circuito viajan más de 1.000 kilómetros de una congregación a otra. Muchos viajan en automóvil, pero otros utilizan el transporte público o van en bicicleta, a caballo o a pie. Un superintendente de circuito africano tiene incluso que vadear un río con su esposa a cuestas para llegar a una congregación. En sus viajes misionales el apóstol Pablo tuvo que pasar calor y frío, hambre y sed, noches sin dormir, y enfrentarse a diferentes peligros y a la persecución violenta. También sintió “inquietud por todas las congregaciones”, una experiencia común a los superintendentes viajantes de la actualidad. (2 Corintios 11:23-29.)

      4. ¿Cómo pueden afectar los problemas de salud la vida de los superintendentes viajantes y sus esposas?

      4 Los superintendentes viajantes y sus esposas sufren a veces problemas de salud, como le sucedió a Timoteo, el compañero de Pablo. (1 Timoteo 5:23.) Esto los somete a más presión. La esposa de un superintendente de circuito explica: “Estar siempre con los hermanos me somete a presión cuando no me encuentro bien. Me ha resultado especialmente difícil al comenzar la menopausia. Tener que hacer las maletas todas las semanas y mudarnos a otro lugar es un verdadero desafío. A menudo tengo que detenerme y orar a Jehová para que me dé las fuerzas a fin de seguir adelante”.

      5. ¿Qué espíritu manifiestan los superintendentes viajantes y sus esposas pese a pasar por diferentes pruebas?

      5 A pesar de los problemas de salud y las pruebas, los superintendentes viajantes y sus esposas obtienen gozo de su servicio y demuestran un amor abnegado. Algunos han arriesgado la vida para dar ayuda espiritual en tiempo de persecución o guerra. Visitan las congregaciones con un espíritu similar al de Pablo, que dijo a los cristianos tesalonicenses: “Nos hicimos amables en medio de ustedes, como cuando una madre que cría acaricia a sus propios hijos. Así, teniéndoles tierno cariño, nos fue de mucho agrado impartirles, no solo las buenas nuevas de Dios, sino también nuestras propias almas, porque ustedes llegaron a sernos amados”. (1 Tesalonicenses 2:7, 8.)

      6, 7. ¿Qué influencia positiva pueden ejercer los superintendentes viajantes que trabajan duro?

      6 Como otros ancianos de la congregación cristiana, los superintendentes viajantes “trabajan duro en hablar y enseñar”. Se debe tener a todos estos ancianos “por dignos de doble honra”. (1 Timoteo 5:17.) Su ejemplo puede sernos de provecho si ‘imitamos su fe’ después de ‘contemplar detenidamente en lo que resulta la conducta de ellos’. (Hebreos 13:7.)

      7 ¿Qué efecto han tenido algunos ancianos viajantes en la vida de otras personas? “El hermano P. fue una maravillosa influencia en mi vida —escribió un testigo de Jehová—. Fue superintendente viajante en México desde 1960. De pequeño, yo esperaba sus visitas con anhelo y gozo. Cuando contaba 10 años de edad, me dijo: ‘Tú también serás superintendente de circuito’. Durante los difíciles años de la adolescencia, solía recurrir a él porque siempre tenía palabras de sabiduría que ofrecer. Su principal preocupación en la vida era pastorear el rebaño. Ahora que soy superintendente de circuito, siempre intento dedicar tiempo a los jóvenes y poner ante ellos metas teocráticas como él hizo conmigo. Hasta los últimos años de su vida, y pese a sus problemas de corazón, el hermano P. siempre procuró tener una palabra de ánimo. El día antes de su fallecimiento, en febrero de 1995, me acompañó a un día especial de asamblea y puso ante un hermano que es arquitecto metas excelentes. El hermano inmediatamente presentó una solicitud para el servicio de Betel.”

      Se les aprecia

      8. ¿Quiénes son las “dádivas en hombres” que se mencionan en el capítulo 4 de Efesios, y cómo benefician a la congregación?

      8 A los superintendentes viajantes y a otros ancianos a quienes por la bondad inmerecida de Dios se ha favorecido con asignaciones de servicio se les llama “dádivas en hombres”. Como representante de Jehová y Cabeza de la congregación, Jesús ha proporcionado a estos hombres espirituales para que seamos edificados individualmente y alcancemos la madurez. (Efesios 4:8-15.) Toda dádiva merece agradecimiento, especialmente si nos fortalece para seguir sirviendo a Jehová. De modo que, ¿cómo podemos demostrar nuestro agradecimiento por la obra de los superintendentes viajantes? ¿De qué manera podemos mostrar que ‘seguimos teniendo aprecio a hombres de esa clase’? (Filipenses 2:29.)

      9. ¿Cómo podemos mostrar aprecio a los superintendentes viajantes?

      9 Cuando se anuncia la visita del superintendente de circuito, podemos empezar a hacer planes para participar de lleno en las actividades de la congregación esa semana. Quizá podamos apartar más tiempo para apoyar el servicio del campo durante la visita, o incluso ser precursores auxiliares ese mes. Sin duda, debemos poner en práctica las sugerencias del superintendente de circuito a fin de mejorar nuestro ministerio. Este espíritu receptivo nos beneficiará, y él se sentirá satisfecho al constatar la utilidad de su visita. Sí, los superintendentes viajantes visitan a la congregación para edificarnos, pero ellos también necesitan que se les edifique espiritualmente. Hubo momentos en los que Pablo necesitó ánimo, y a menudo pidió a sus compañeros cristianos que oraran por él. (Hechos 28:15; Romanos 15:30-32; 2 Corintios 1:11; Colosenses 4:2, 3; 1 Tesalonicenses 5:25.) Los superintendentes viajantes de la actualidad igualmente necesitan nuestras oraciones y ánimo.

      10. ¿Cómo podemos contribuir a que el superintendente viajante tenga gozo en su obra?

      10 ¿Hemos dicho al superintendente de circuito y a su esposa cuánto agradecemos sus visitas? ¿Le damos las gracias por el consejo útil que nos ofrece? ¿Le hacemos saber que sus sugerencias sobre el servicio del campo incrementan nuestro goce del ministerio? En tal caso, contribuiremos a que la obra sea un gozo para él. (Hebreos 13:17.) Un superintendente de circuito de España comentó lo mucho que él y su esposa aprecian las notas de agradecimiento que reciben después de visitar las congregaciones. “Las guardamos y las leemos cuando nos sentimos desanimados —dice él—. Son una fuente de verdadero ánimo.”

      11. ¿Por qué deberíamos hacer saber a las esposas de los superintendentes de circuito y distrito que las amamos y las tenemos en gran estima?

      11 La esposa del superintendente de circuito sin duda se beneficia de las palabras de encomio. Ella hace muchos sacrificios para apoyar a su esposo en esta faceta del servicio. Estas hermanas fieles se privan del deseo natural de poseer su propio hogar y, en muchos casos, de tener hijos. La hija de Jefté fue una sierva de Jehová que voluntariamente renunció al derecho de casarse y tener familia por un voto que hizo su padre. (Jueces 11:30-39.) ¿Cómo se consideró su sacrificio? Jueces 11:40 dice: “De año en año las hijas de Israel iban a dar encomio a la hija de Jefté el galaadita, cuatro días en el año”. Es muy importante que nos esforcemos por decir a las esposas de los superintendentes de circuito y distrito que las amamos y las tenemos en gran estima.

      “No olviden la hospitalidad”

      12, 13. a) ¿Qué base bíblica hay para recibir con hospitalidad a los superintendentes viajantes y sus esposas? b) Ilustre cómo dicha hospitalidad puede ser de beneficio mutuo.

      12 Ser hospitalario es otro modo de mostrar amor y aprecio a los superintendentes viajantes cristianos. (Hebreos 13:2.) El apóstol Juan elogió a Gayo por recibir con hospitalidad a los que visitaban la congregación como misioneros viajantes. Juan escribió: “Amado, estás haciendo trabajo fiel en cualquier cosa que haces para los hermanos —y hasta siendo extraños— que han dado testimonio de tu amor delante de la congregación. A estos tendrás la bondad de poner en camino de una manera digna de Dios. Pues fue a favor del nombre de él que salieron, sin tomar nada de la gente de las naciones. Nosotros, por lo tanto, estamos obligados a recibir hospitalariamente a tales personas, para que lleguemos a ser colaboradores en la verdad”. (3 Juan 5-8.) En la actualidad podemos promover la predicación del Reino recibiendo de igual manera con hospitalidad a los superintendentes viajantes y sus esposas. Los ancianos locales deben asegurarse de que el alojamiento sea satisfactorio; sin embargo, un superintendente de distrito dijo: “Nuestra estancia con los hermanos no debería depender de quién está en condición de hacer algo por nosotros. No deberíamos ni siquiera dar esa impresión. Debemos estar dispuestos a aceptar la hospitalidad de cualquiera de nuestros hermanos, sea rico o pobre”.

      13 La hospitalidad puede reportar beneficios mutuos. “Mi familia tenía la costumbre de hospedar a los superintendentes viajantes en casa —recuerda Jorge, un anterior superintendente de circuito que ahora sirve en Betel—. Creo que esas visitas me ayudaron más de lo que entonces me daba cuenta. En la adolescencia tuve problemas espirituales. Mi madre se preocupó, pero no sabía cómo ayudarme, y por ello le pidió al superintendente de circuito que hablara conmigo. Al principio lo evité, pues temía que me reprendiera. Pero con su amabilidad, finalmente se ganó mi confianza. Me invitó a comer con él un lunes, y le abrí el corazón porque estaba seguro de que me entendía. Me escuchó con atención. Sus recomendaciones prácticas surtieron efecto, y empecé a progresar espiritualmente.”

      14. ¿Por qué debemos apreciar, y no criticar, a los ancianos viajantes?

      14 El superintendente de circuito intenta brindar ayuda espiritual tanto a jóvenes como a mayores. Por ello deberíamos agradecer su esfuerzo, y no criticar sus debilidades ni compararlo desfavorablemente con otros que han visitado la congregación, pues esto pudiera descorazonarlo. A Pablo no le animó oír que se criticaba su obra. Al parecer, algunos cristianos corintios hablaban con desprecio de su apariencia y su oratoria. Él mismo citó a estos críticos que decían: “Sus cartas son de peso y enérgicas, pero su presencia en persona es débil, y su habla desdeñable”. (2 Corintios 10:10.) Afortunadamente, los superintendentes viajantes suelen oír palabras de amor y aprecio.

      15, 16. ¿Cómo afectan a los superintendentes viajantes y sus esposas el amor y el celo de sus compañeros creyentes?

      15 Un superintendente de circuito de Latinoamérica recorre a pie todo el día caminos lodosos para visitar a los hermanos espirituales que viven en una zona controlada por la guerrilla. “Es conmovedor ver cómo los hermanos agradecen la visita —escribe—. Aunque tengo que hacer un gran esfuerzo para llegar allí y enfrentarme a muchos peligros y dificultades, todo ello es recompensado por el amor y el celo que muestran los hermanos.”

      16 Un superintendente de circuito de África escribe: “Debido al amor que los hermanos nos demostraron, nos encantó el territorio de Tanzania. Los hermanos estaban dispuestos a aprender de nosotros, y se sentían felices de tenernos en casa”. El apóstol Pablo y el matrimonio Áquila y Prisca, del siglo primero, disfrutaban de una relación afectuosa y feliz. De hecho, Pablo dijo de ellos: “Den mis saludos a Prisca y a Áquila mis colaboradores en Cristo Jesús, los cuales por mi alma han arriesgado su propio cuello, a quienes no solo yo, sino todas las congregaciones de las naciones, dan gracias”. (Romanos 16:3, 4.) Los superintendentes viajantes y sus esposas están agradecidos de tener como amigos a Áquilas y Priscas modernos que se esfuerzan de manera especial por ser hospitalarios y buenos compañeros.

      Fortalecen a las congregaciones

      17. ¿Por qué puede decirse que la provisión de los superintendentes viajantes es sabia, y dónde consiguen ellos la instrucción?

      17 Jesús dijo: “La sabiduría queda probada justa por sus obras”. (Mateo 11:19.) La sabiduría de la provisión de los superintendentes viajantes se hace evidente porque fortalece a las congregaciones del pueblo de Dios. Durante el segundo viaje misional de Pablo, él y Silas ‘pasaron por Siria y Cilicia, fortaleciendo a las congregaciones’. El libro de los Hechos nos dice: “A medida que iban viajando por las ciudades entregaban a los de allí, para que los observaran, los decretos sobre los cuales habían tomado decisión los apóstoles y ancianos que estaban en Jerusalén. Por lo tanto, en realidad, las congregaciones continuaron haciéndose firmes en la fe y aumentando en número de día en día”. (Hechos 15:40, 41; 16:4, 5.) Los superintendentes viajantes de hoy en día reciben instrucción espiritual a través de las Escrituras y las publicaciones del “esclavo fiel y discreto”, como todos los demás cristianos. (Mateo 24:45.)

      18. ¿Cómo fortalecen a las congregaciones los superintendentes viajantes?

      18 En efecto, los ancianos viajantes deben seguir alimentándose de la mesa espiritual de Jehová. Deben familiarizarse bien con los métodos y las directrices de la organización de Dios. Así estos hombres pueden resultar en una verdadera bendición para los demás. Su excelente ejemplo en el servicio del campo puede ayudar a sus compañeros creyentes a mejorar su ministerio cristiano. Los discursos bíblicos que pronuncian estos ancianos visitantes edifican espiritualmente a los oyentes. Al ayudar a otros a observar el consejo de la Palabra de Dios, a actuar unidamente con el pueblo de Jehová por todo el mundo y a poner en práctica las provisiones espirituales que Dios suministra a través del ‘esclavo fiel’, los superintendentes viajantes fortalecen a las congregaciones que tienen el privilegio de visitar.

      19. ¿Qué preguntas quedan por contestar?

      19 Cuando la organización de Jehová instituyó la obra de los ancianos viajantes entre los Estudiantes de la Biblia, hace unos cien años, esta revista dijo: “Estamos a la espera de los resultados y confiamos en la dirección del Señor”. La dirección de Jehová se ha manifestado con claridad. Debido a su bendición y a la supervisión del Cuerpo Gobernante, esta obra se ha potenciado y refinado a lo largo de los años. Por ello, las congregaciones de los testigos de Jehová alrededor del mundo se han hecho firmes en la fe y su número sigue aumentando de día en día. Evidentemente, Jehová ha bendecido el espíritu abnegado de estas dádivas en hombres. ¿Pero cómo pueden los superintendentes viajantes llevar a cabo su trabajo con éxito? ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Cómo pueden lograr el mayor bien?

  • Los superintendentes viajantes son mayordomos fieles
    La Atalaya 1996 | 15 de noviembre
    • Los superintendentes viajantes son mayordomos fieles

      “En proporción al don que cada uno haya recibido, úsenlo al ministrarse unos a otros como excelentes mayordomos de la bondad inmerecida de Dios expresada de diversas maneras.” (1 PEDRO 4:10.)

      1, 2. a) ¿Cómo definiría la palabra “mayordomo”? b) ¿Quiénes se cuentan entre los mayordomos que usa Dios?

      JEHOVÁ usa a todos los cristianos fieles como mayordomos. Los mayordomos suelen ser siervos que tienen a su cargo una casa. También es posible que administren los negocios de su amo. (Lucas 16:1-3; Gálatas 4:1, 2.) Jesús llamó a su cuerpo de ungidos leales en la Tierra “el mayordomo fiel”. Ha encargado a este mayordomo “todos sus bienes”, entre ellos la predicación del Reino. (Lucas 12:42-44; Mateo 24:14, 45.)

      2 El apóstol Pedro dijo que todos los cristianos eran mayordomos de la bondad inmerecida de Dios expresada de diversas maneras. Todo cristiano tiene un lugar en el que puede desempeñar su fiel mayordomía. (1 Pedro 4:10.) Los ancianos cristianos nombrados son mayordomos, y entre ellos se cuentan los superintendentes viajantes. (Tito 1:7.) ¿Cómo debe considerarse a estos ancianos viajantes? ¿Qué cualidades y objetivos deben tener? Y ¿cómo pueden conseguir el mayor bien?

      Agradecidos por su servicio

      3. ¿Por qué puede llamarse “excelentes mayordomos” a los superintendentes viajantes?

      3 Un matrimonio cristiano escribió a un superintendente viajante y a su esposa: “Quisiéramos agradecerles todo el tiempo y amor que nos han brindado. Nuestra familia se ha beneficiado mucho del ánimo y el consejo que nos han ofrecido. Sabemos que tenemos que seguir creciendo espiritualmente, pero con la ayuda de Jehová y con hermanos como ustedes, los problemas inherentes al crecimiento se hacen más fáciles”. Comentarios como este son frecuentes debido a que los superintendentes viajantes se interesan personalmente por sus compañeros creyentes, tal como un buen mayordomo atiende con esmero las necesidades de la casa. Algunos son oradores sobresalientes; muchos destacan en la predicación, y a otros se les conoce por ser cariñosos y comprensivos. Cuando los superintendentes viajantes cultivan y utilizan estos dones al ministrar a otros, se les puede llamar con propiedad “excelentes mayordomos”.

      4. ¿Qué pregunta analizaremos a continuación?

      4 “Lo que se busca en los mayordomos es que al hombre se le halle fiel”, escribió el apóstol Pablo. (1 Corintios 4:2.) Ministrar a compañeros cristianos en una congregación diferente semana tras semana es un privilegio singular y gozoso. No obstante, es también una responsabilidad de peso. ¿Cómo pueden, entonces, los superintendentes viajantes desempeñar su mayordomía satisfactoria y fielmente?

      Cómo desempeñar la mayordomía satisfactoriamente

      5, 6. ¿Por qué son tan importantes la confianza en Jehová y la oración en la vida del superintendente viajante?

      5 La oración y la confianza en Jehová son esenciales para que los superintendentes viajantes sean buenos mayordomos. Debido a su horario y sus muchas obligaciones, es posible que en ocasiones se sientan agobiados. (Compárese con 2 Corintios 5:4.) De modo que es necesario que obren en armonía con la canción del salmista David: “Arroja tu carga sobre Jehová mismo, y él mismo te sustentará. Nunca permitirá que tambalee el justo”. (Salmo 55:22.) También reconfortan las siguientes palabras de David: “Bendito sea Jehová, que diariamente nos lleva la carga”. (Salmo 68:19.)

      6 ¿De dónde obtuvo la fuerza Pablo para cumplir con sus obligaciones espirituales? “Para todas las cosas tengo la fuerza en virtud de aquel que me imparte poder”, escribió. (Filipenses 4:13.) Sí, Jehová Dios era la Fuente de la fuerza de Pablo. De igual manera, Pedro aconsejó: “Si alguno ministra, que ministre como dependiendo de la fuerza que Dios suministra; para que en todas las cosas Dios sea glorificado mediante Jesucristo”. (1 Pedro 4:11.) Un hermano que fue superintendente viajante por muchos años recalcó la necesidad de confiar en Dios, al decir: “Siempre confíen en Jehová para resolver los problemas y busquen la ayuda de su organización”.

      7. ¿Por qué desempeña un papel importante el equilibrio en la obra del superintendente viajante?

      7 El superintendente viajante necesita equilibrio para tener éxito. Como los demás cristianos, procura ‘asegurarse de las cosas más importantes’. (Filipenses 1:10.)a Cuando los ancianos locales tienen preguntas sobre un asunto en particular, es prudente que consulten con el superintendente de circuito. (Proverbios 11:14; 15:22.) Sus observaciones equilibradas y su consejo bíblico probablemente les sean de gran utilidad para seguir tratando el asunto cuando el superintendente viajante se vaya de la congregación. A este tenor, Pablo dijo a Timoteo: “Las cosas que oíste de mí con el apoyo de muchos testigos, estas cosas encárgalas a hombres fieles, quienes, a su vez, estarán adecuadamente capacitados para enseñar a otros”. (2 Timoteo 2:2.)

      8. ¿Por qué son fundamentales el estudio bíblico, la investigación y la meditación?

      8 El estudio bíblico, la investigación y la meditación son indispensables para dar buen consejo. (Proverbios 15:28.) Un superintendente de distrito dijo: “Cuando nos reunimos con los ancianos, no debemos tener miedo de admitir que no sabemos la respuesta a una determinada pregunta”. Si nos esforzamos por tener “la mente de Cristo” sobre cualquier asunto, podremos dar consejo bíblico que ayude a otros a cumplir la voluntad de Dios. (1 Corintios 2:16.) En ocasiones es necesario que el superintendente viajante escriba a la Sociedad Watch Tower para recibir instrucciones. En cualquier caso, la fe en Jehová y el amor a la verdad son mucho más importantes que la imagen o la elocuencia. En vez de ir “con extravagancia de habla o de sabiduría”, Pablo empezó su ministerio en Corinto “en debilidad y en temor y con mucho temblor”. ¿Fue por esto menos eficiente? Al contrario: ayudó a los corintios a no poner fe “en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios”. (1 Corintios 2:1-5.)

      Otras cualidades fundamentales

      9. ¿Por qué necesitan empatía los superintendentes viajantes?

      9 La empatía ayuda a los superintendentes viajantes a conseguir buenos resultados. Pedro instó a todos los cristianos a ‘compartir sentimientos como compañeros’, es decir, a ser “compasivos”. (1 Pedro 3:8, Nuevo Testamento Interlineal Griego-Español.) Cierto superintendente de circuito siente la necesidad de ‘interesarse por cada miembro de la congregación y ser realmente atento’. Con un espíritu similar, Pablo escribió: “Regocíjense con los que se regocijan; lloren con los que lloran”. (Romanos 12:15.) Tal actitud motiva a los superintendentes viajantes a esforzarse sinceramente por entender los problemas y las circunstancias de sus compañeros creyentes. De ese modo están en condición de ofrecer consejo bíblico edificante que puede ser muy provechoso si se aplica. Un superintendente de circuito que sobresale en esta cualidad recibió la siguiente carta de una congregación de los alrededores de Turín (Italia): “Si quieres interesar a otros, interésate por otros; si quieres agradar, sé agradable; si quieres que te amen, sé amoroso; si quieres que te ayuden, sé servicial. Esto es lo que hemos aprendido de usted”.

      10. ¿Qué han dicho algunos superintendentes de circuito y distrito sobre la humildad, y qué ejemplo dio Jesús al respecto?

      10 Ser humilde y accesible ayuda a los superintendentes viajantes a lograr mucho bien. Un superintendente de circuito observó: “Es muy importante mantener una actitud humilde”. Advertía a los nuevos superintendentes viajantes: “No permitan que les influya indebidamente lo que los hermanos más acaudalados hagan por ustedes, ni limiten su amistad solo a esos hermanos, sino esfuércense por tratar a todos con imparcialidad”. (2 Crónicas 19:6, 7.) Además, el superintendente viajante que es verdaderamente humilde no tiene un concepto exagerado de su propia importancia como representante de la Sociedad. Un superintendente de distrito comentó convenientemente: “Sean humildes y estén dispuestos a escuchar a los hermanos. Sean siempre accesibles”. Dado que Jesucristo fue el hombre más grande de todos los tiempos, pudo haber hecho que la gente se sintiera incómoda; pero fue tan humilde y accesible que hasta los niños se sentían a gusto en su presencia. (Mateo 18:5; Marcos 10:13-16.) Los superintendentes viajantes quieren que los niños, los adolescentes, los mayores, en realidad, todos los miembros de la congregación, se sientan libres de acudir a ellos.

      11. ¿Qué efecto puede tener una disculpa cuando es necesaria?

      11 Por supuesto, “todos tropezamos muchas veces”, y ningún superintendente viajante se libra de cometer errores. (Santiago 3:2.) Cuando yerran, una disculpa sincera da a otros ancianos un ejemplo de humildad. Según Proverbios 22:4, “el resultado de la humildad y del temor [reverencial] de Jehová es riquezas y gloria y vida”. ¿Y no necesitan todos los siervos de Dios ‘andar humildemente con su Dios’? (Miqueas 6:8, Versión Moderna.) Cuando se le preguntó a un superintendente de circuito qué consejo daría a un nuevo anciano viajante, contestó: “Respeta y ten en gran estima a todos los hermanos y considera que son mejores que tú. Aprenderás mucho de ellos. Manténte humilde. Sé tú mismo. No te comportes de manera afectada”. (Filipenses 2:3.)

      12. ¿Por qué es tan importante el celo en el ministerio cristiano?

      12 El celo por el ministerio cristiano da más peso a las palabras del superintendente viajante. De hecho, cuando él y su esposa dan un ejemplo de celo en la obra de evangelización, los ancianos, sus esposas y el resto de la congregación se sienten animados a participar celosamente en el ministerio. “Sean celosos en el servicio”, instó un superintendente de circuito. Y añadió: “He visto que, generalmente, cuanto más celosa es una congregación en el ministerio, menos problemas tiene”. Otro superintendente de circuito observó: “Creo que el que los ancianos prediquen con los hermanos y los ayuden a disfrutar del ministerio, redunda en tranquilidad de ánimo y gran satisfacción al servir a Jehová”. El apóstol Pablo ‘cobró denuedo para hablar las buenas nuevas de Dios a los tesalonicenses con mucho luchar’. No extraña que ellos guardaran un grato recuerdo de su visita y predicación, y anhelaran verlo de nuevo. (1 Tesalonicenses 2:1, 2; 3:6.)

      13. ¿Qué toma en consideración el superintendente viajante cuando predica con sus compañeros cristianos?

      13 Cuando el superintendente de circuito trabaja con sus compañeros cristianos en el ministerio del campo, toma en consideración las circunstancias y limitaciones de estos. Aunque pueda tener sugerencias útiles, sabe que algunos se sienten nerviosos cuando predican con un anciano experimentado. En ciertos casos, por lo tanto, es posible que sea más útil el ánimo que el consejo. Cuando acompaña a los publicadores o a los precursores a un estudio bíblico, puede que estos prefieran que él lo dirija. Así pueden aprender cómo mejorar sus métodos docentes.

      14. ¿Por qué puede decirse que el celo de los superintendentes viajantes es contagioso?

      14 El celo de los superintendentes viajantes es contagioso. Un superintendente de circuito de Uganda viajó una hora por un bosque espeso para acompañar a un hermano a un estudio bíblico que no progresaba mucho. Durante el viaje llovió tanto que llegaron totalmente empapados. A los seis miembros de la familia les impresionó saber que el visitante era un superintendente viajante. Sabían que los ministros de su Iglesia nunca mostrarían tal interés en el rebaño. Al siguiente domingo asistieron a su primera reunión y expresaron el deseo de ser testigos de Jehová.

      15. ¿Qué buena experiencia tuvo un superintendente de circuito de México?

      15 En el estado mexicano de Oaxaca, un superintendente de circuito hizo algo que realmente no se esperaba de él. Durmió en la celda de una prisión cuatro noches para visitar a un grupo de siete reclusos que se habían hecho publicadores del Reino. Por varios días acompañó a estos presos predicando de celda en celda y dirigiendo estudios bíblicos. Debido al interés que se suscitó, algunos de estos estudios se extendieron hasta altas horas de la noche. “Al final de la visita, los reclusos y yo sentimos mucho gozo como consecuencia del estímulo mutuo”, escribe este celoso superintendente de circuito.

      16. ¿Por qué es tan provechoso que los superintendentes viajantes y sus esposas den ánimo?

      16 Los superintendentes viajantes intentan dar ánimo. Cuando Pablo visitó las congregaciones de Macedonia, ‘las animó con muchas palabras’. (Hechos 20:1, 2.) Las palabras de ánimo pueden ser muy útiles para encauzar tanto a los jóvenes como a los mayores hacia metas teocráticas. En una sucursal grande de la Sociedad Watch Tower, una encuesta extraoficial puso de manifiesto que los superintendentes de circuito habían animado a casi un 20% de los trabajadores voluntarios a emprender el servicio de tiempo completo. El ejemplo excelente de la esposa del superintendente viajante como proclamadora del Reino de tiempo completo, también es una gran fuente de ánimo.

      17. ¿Qué piensa un superintendente de circuito de edad avanzada en cuanto a su privilegio de ayudar a otros?

      17 Los mayores y los deprimidos tienen una necesidad especial de recibir ánimo. Un superintendente de circuito de edad avanzada escribe: “La faceta de mi obra que me produce un gozo interno inenarrable es el privilegio de ayudar a los inactivos y a los débiles del rebaño de Dios. Las palabras de Romanos 1:11, 12 tienen un significado especial para mí, pues obtengo mucho ánimo y fortaleza cuando ‘imparto algún don espiritual a estos hermanos a fin de que se les haga firmes’”.

      Recompensas por su obra gozosa

      18. ¿Qué objetivos bíblicos tienen los superintendentes viajantes?

      18 Los superintendentes viajantes se interesan sinceramente por ayudar a sus compañeros creyentes. Quieren fortalecer a las congregaciones y edificarlas espiritualmente. (Hechos 15:41.) Un superintendente de circuito se esfuerza por “animar, confortar y avivar el deseo de cumplir con el ministerio y seguir viviendo la verdad”. (3 Juan 3.) Otro intenta estabilizar a sus compañeros de creencia en la fe. (Colosenses 2:6, 7.) Recuerde que el superintendente viajante es un “genuino compañero de yugo”, no un amo sobre la fe de otros. (Filipenses 4:3; 2 Corintios 1:24.) Su visita es una ocasión de ánimo y de más actividad, así como una oportunidad para que el cuerpo de ancianos repase el progreso que se ha logrado y analice futuras metas. Los publicadores, los precursores, los siervos ministeriales y los ancianos de la congregación, pueden esperar que las palabras y el ejemplo del superintendente viajante los edifique y estimule para acometer el trabajo que tienen por delante. (Compárese con 1 Tesalonicenses 5:11.) Por lo tanto, apoye de todo corazón las visitas del superintendente de circuito y obtenga el máximo provecho del servicio que rinde el superintendente de distrito.

      19, 20. ¿Cómo son recompensados los superintendentes viajantes y sus esposas por su servicio fiel?

      19 Los superintendentes viajantes y sus esposas reciben muchas recompensas por su fiel servicio, y pueden tener la confianza de que Jehová los bendecirá por el bien que hacen. (Proverbios 19:17; Efesios 6:8.) Georg y Magdalena, un matrimonio de edad avanzada, sirvieron por muchos años en la obra itinerante. En una asamblea que se celebró en Luxemburgo se acercó a Magdalena una persona a quien esta había dado testimonio más de veinte años atrás. Las publicaciones bíblicas que Magdalena le ofreció despertaron en esta mujer judía el interés por la verdad, y con el tiempo se bautizó. A Georg se le acercó una hermana espiritual que recordaba que él había visitado su hogar hacía casi cuarenta años. Su entusiástica presentación de las buenas nuevas hizo que con el tiempo tanto ella como su esposo aceptaran la verdad. Ni que decir tiene que Georg y Magdalena no cabían en sí de contentos.

      20 El fructífero ministerio de Pablo en Éfeso le produjo gozo y es posible que lo motivara a citar las palabras de Jesús: “Hay más felicidad en dar que en recibir”. (Hechos 20:35.) Ya que en la obra itinerante hay que dar constantemente, los que participan en ella experimentan felicidad, especialmente cuando constatan los buenos resultados de su labor. Un superintendente de circuito que había ayudado a un anciano desanimado recibió una carta que decía: “Has sido un ‘socorro fortalecedor’ en mi vida espiritual, más de lo que piensas. [...] Nunca serás plenamente consciente de lo mucho que has ayudado a un Asaf del día moderno cuyos ‘pies casi se habían desviado’”. (Colosenses 4:11; Salmo 73:2.)

      21. ¿Por qué diría que 1 Corintios 15:58 es aplicable a la actividad de los superintendentes viajantes?

      21 A un cristiano de edad avanzada que fue muchos años superintendente de circuito le gusta reflexionar en 1 Corintios 15:58, donde se recoge la exhortación de Pablo: “Háganse constantes, inmovibles, siempre teniendo mucho que hacer en la obra del Señor, sabiendo que su labor no es en vano en lo relacionado con el Señor”. No cabe duda de que los superintendentes viajantes tienen mucho que hacer en la obra del Señor. Y nosotros estamos muy agradecidos de que sirvan con tanta alegría como mayordomos fieles de la bondad inmerecida de Jehová.

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