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“Unificaré su corazón”La adoración pura de Jehová: ¡por fin restaurada!
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“Me complaceré en ustedes”
23, 24. ¿Cómo y cuándo comenzaron “los tiempos de la restauración de todas las cosas”?
23 Gracias a nuestro estudio de la Biblia sabemos que en 1914 este sistema malvado entró en su etapa final, sus últimos días. Con todo, los siervos de Jehová no somos pesimistas; al contrario, pues la Biblia indica que 1914 marca el comienzo de una etapa emocionante, a saber, “los tiempos de la restauración de todas las cosas” (Hech. 3:21). ¿Y cómo llegamos a esa conclusión? Tomando en cuenta lo que ocurrió en los cielos ese año: Jesucristo ocupó el trono y fue nombrado Rey Mesiánico. ¿En qué sentido implicó eso una restauración? Recordemos que Jehová le había prometido al rey David que el reinado en manos de su descendencia duraría para siempre (1 Crón. 17:11-14). Ese reinado, sin embargo, quedó interrumpido en el año 607 antes de nuestra era, cuando los babilonios destruyeron Jerusalén y terminaron con la sucesión de reyes de la familia de David.
24 Jesús, como ser humano o “Hijo del Hombre”, era descendiente del rey David y, por lo tanto, tenía derecho a heredar el trono (Mat. 1:1; 16:13-16; Luc. 1:32, 33). Jehová le otorgó a Jesús el trono celestial en 1914, año en que comenzaron “los tiempos de la restauración de todas las cosas”. A partir de entonces, Jehová usaría a ese Rey perfecto para que continuara con la obra de restauración.
25, 26. a) ¿Cuándo terminó el exilio en Babilonia la Grande? ¿Cómo lo sabemos? (Vea también el recuadro “¿Y por qué 1919?”). b) ¿Qué empezó a cumplirse a partir de 1919?
25 Una de las primeras acciones que Cristo, ya como Rey, realizó junto a su Padre fue la de inspeccionar la adoración pura en la Tierra (Mal. 3:1-5). Tal como Jesús había predicho en su parábola del trigo y la mala hierba, por mucho tiempo fue imposible distinguir entre el trigo (los verdaderos cristianos ungidos) y la mala hierba (los cristianos falsos).b Pero en 1914 llegó “la temporada de la cosecha”, y entonces la diferencia se hizo clara. Durante las décadas anteriores a 1914, los fieles Estudiantes de la Biblia fueron sacando a la luz los graves pecados de la cristiandad y empezaron a separarse de esa organización contaminada. Para Jehová ya era el momento de restaurar la adoración pura. Así que, a principios de 1919, al poco de comenzar “la temporada de la cosecha”, el pueblo de Dios fue liberado por completo del cautiverio en Babilonia la Grande (Mat. 13:30). ¡Adiós al exilio!
26 Las profecías de restauración registradas en el libro de Ezequiel empezaron a cumplirse a una escala mucho mayor que en los días del antiguo pueblo de Dios. Ahora veamos cómo las cinco promesas que hemos analizado antes se han ido cumpliendo.
27. ¿De qué manera abandonó la idolatría el pueblo de Dios?
27 PROMESA 1. El fin de la idolatría y otras prácticas religiosas repugnantes. A finales del siglo diecinueve y principios del veinte, los cristianos fieles se reunían en grupos pequeños y empezaron a abandonar las prácticas de la religión falsa. Entre las enseñanzas que rechazaron por tener sus raíces en la religión falsa y no en la Biblia estaban la trinidad, la inmortalidad del alma y el infierno. Además, pusieron al descubierto que usar imágenes para adorar a Dios es pura idolatría. Poco a poco, el pueblo de Dios comprendió que usar la cruz en su adoración también es idolatría (Ezeq. 14:6).
28. ¿Cómo fue regresando el pueblo de Dios a su tierra espiritual?
28 PROMESA 2. De vuelta a la tierra espiritual del pueblo de Dios. A medida que los cristianos fieles salían de las religiones de Babilonia la Grande, entraban en la tierra espiritual que Dios les había asignado: una situación privilegiada, un ambiente donde jamás volverían a padecer hambre espiritual (lea Ezequiel 34:13, 14). Como veremos en el capítulo 19 de este libro, Jehová ha bendecido esa tierra, una tierra que está produciendo más alimento espiritual que nunca (Ezeq. 11:17).
29. ¿Cómo fue que cobró mayor impulso la predicación en 1919?
29 PROMESA 3. Ofrendas de nuevo en el altar de Jehová. A los cristianos del siglo primero se les dijo que ya no tenían que presentar sacrificios animales, sino un tipo de ofrendas mucho más valiosas: sus alabanzas a Jehová y el mensaje de predicación acerca de él (Heb. 13:15). Durante los siglos de exilio espiritual, no hubo un sistema organizado para presentar esas ofrendas. Pero, casi al final del exilio, el pueblo de Dios ya ofrecía sacrificios de alabanza. Estaban concentrados en predicar y en alabar con entusiasmo a Dios en sus reuniones. A partir de 1919, “el esclavo fiel y prudente” le dio todavía más importancia a la predicación y empezó a organizarla más a fondo (Mat. 24:45-47). Para entonces, el altar de Jehová estaba repleto de sacrificios: las ofrendas de un grupo cada vez mayor de siervos suyos que alababan su santo nombre.
30. ¿Qué hizo Jesús para que sus ovejas tuvieran buenos pastores?
30 PROMESA 4. Libres de los pastores malvados. Cristo libró al pueblo de Dios de los falsos pastores de la cristiandad, líderes egoístas y sin escrúpulos. Y, si en el rebaño de Cristo algún pastor hacía las cosas como esos falsos pastores, se le quitaba de su puesto (Ezeq. 20:38). Jesús, en su papel de Pastor Excelente, se aseguró de que sus ovejas estuvieran bien cuidadas. En 1919 nombró a su esclavo fiel y prudente. Este grupito de fieles cristianos ungidos se encargó de alimentar espiritualmente a los siervos de Dios, de modo que todos estuvieran bien atendidos. Tiempo después, se capacitó a ancianos para colaborar en el cuidado del “rebaño de Dios” (1 Ped. 5:1, 2). La descripción de Ezequiel 34:15, 16 se utiliza a menudo para recordarles a los pastores cristianos las pautas que Jehová Dios y Jesucristo establecieron para cuidar a las ovejas.
31. ¿Por qué decimos que Jehová ha cumplido la profecía de Ezequiel 11:19?
31 PROMESA 5. Unidad entre los adoradores de Jehová. En el transcurso de los siglos, la cristiandad se ha fragmentado en miles de confesiones religiosas, de las que a su vez salen infinidad de grupos y sectas que están totalmente divididos. En contraste, Jehová ha hecho un verdadero milagro con el pueblo que sacó del cautiverio. Realmente se ha cumplido de forma asombrosa la promesa que Dios hizo mediante Ezequiel: “Unificaré su corazón” (Ezeq. 11:19). Alrededor del mundo, Cristo tiene millones de discípulos que provienen de una gran diversidad de grupos étnicos y religiosos, así como de toda posición social y económica. Aun así, todos recibimos el mismo conjunto de enseñanzas y realizamos la misma obra en total armonía. La última noche de su vida en la Tierra, Jesús le suplicó a Dios que sus seguidores estuvieran unidos (lea Juan 17:11, 20-23). En la actualidad, Jehová ha cumplido esa petición de la manera más asombrosa.
32. ¿Qué siente usted al ver el cumplimiento de las profecías de restauración? (Vea también el recuadro “Profecías sobre el cautiverio y la restauración”).
32 ¿No cree que es emocionante vivir en esta época y presenciar la restauración de la adoración pura? En cada faceta de nuestra adoración a Jehová, estamos viendo cómo se cumplen las profecías de Ezequiel. Podemos estar seguros de que Jehová está muy contento con su pueblo; y es que él había predicho: “Me complaceré en ustedes” (Ezeq. 20:41). Tenemos el honor de formar parte de un pueblo unido y bien alimentado en sentido espiritual, un pueblo que, tras siglos de cautiverio, está alabando a Jehová por toda la Tierra. ¿Verdad que somos unos privilegiados? Y eso no es todo; también esperamos ver un cumplimiento mayor de algunas de las profecías de restauración.
“Como el jardín de Edén”
33-35. a) ¿Qué significó la profecía de Ezequiel 36:35 para los judíos exiliados? b) ¿Qué significa esa profecía para el pueblo de Dios de la actualidad? (Vea también el recuadro “Los tiempos de la restauración de todas las cosas”).
33 Como ya vimos, “los tiempos de la restauración de todas las cosas” comenzaron cuando Jesús fue entronizado en 1914 (Ezeq. 37:24). A continuación, Jehová le dio autoridad a Cristo para que restaurara la adoración pura del pueblo de Dios tras muchos siglos de cautiverio espiritual. ¿Acabó ahí la obra de restauración de Jesús? Ni mucho menos. En el futuro seguirá realizándola de forma espectacular, y las profecías de Ezequiel nos revelan detalles que nos entusiasman.
34 Reflexionemos, por ejemplo, en estas palabras: “La gente dirá: ‘La tierra desolada ha llegado a ser como el jardín de Edén’” (Ezeq. 36:35). ¿Qué significó esa promesa para Ezequiel y los demás judíos exiliados? Seguro que ellos no esperaban un cumplimiento literal, como si la tierra restaurada fuera a ser igualita al Paraíso, el primer jardín que Jehová mismo preparó (Gén. 2:8). Sin duda, lo que ellos entendieron fue que Jehová les estaba garantizando que restauraría su tierra hasta convertirla en un lugar fértil y hermoso.
35 Y para nosotros, ¿significa lo mismo esa promesa? Nosotros no esperamos un cumplimiento literal en medio de este mundo malvado, donde gobierna Satanás. Entendemos que esas palabras tienen un cumplimento espiritual en nuestros días. De hecho, los siervos de Jehová vivimos en una tierra espiritualmente restaurada, es decir, un paraíso espiritual, donde todos somos personas de provecho y llevamos vidas que giran en torno al servicio sagrado. Esta tierra espiritual es cada vez más y más paradisiaca.
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Jehová cumple sus promesas | En la actualidadLa adoración pura de Jehová: ¡por fin restaurada!
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RECUADRO INFORMATIVO 9C
Jehová cumple sus promesas | En la actualidad
1. Adoración sin idolatría
2. No más hambre espiritual
3. Sacrificios de alabanza a Jehová
4. Dirección a cargo de hombres fieles
5. Unidos para adorar a Dios por todo el mundo
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