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Estudiemos regularmente la Palabra de Dios en familiaLa Atalaya 1999 | 1 de julio
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Estudiemos regularmente la Palabra de Dios en familia
“No de pan solamente debe vivir el hombre, sino de toda expresión que sale de la boca de Jehová.” (MATEO 4:4.)
1. ¿Qué dice la Biblia en cuanto a la responsabilidad de los cabezas de familia de enseñar a sus hijos los caminos de Jehová?
EN EL pasado Jehová Dios recordó con frecuencia a los cabezas de familia la responsabilidad que tenían de enseñar a sus hijos. Tal enseñanza no solo los prepararía para esta vida, sino también para la vida futura. Un ángel que habló en nombre de Dios señaló a Abrahán su responsabilidad de enseñar a su casa a fin de que esta ‘guardara el camino de Jehová’ (Génesis 18:19). A los padres israelitas se les mandó que explicaran a sus hijos cómo Dios había liberado a Israel de Egipto y le había dado su Ley en el monte Sinaí, situado en Horeb (Éxodo 13:8, 9; Deuteronomio 4:9, 10; 11:18-21). A los cabezas de familia cristianos se les exhorta a criar a sus hijos “en la disciplina y regulación mental de Jehová” (Efesios 6:4). Incluso si solo uno de los padres sirve a Jehová, debe hacer cuanto pueda por enseñar los caminos de Dios a sus hijos (2 Timoteo 1:5; 3:14, 15).
2. ¿Es necesario el estudio de familia si no hay niños en la casa? Explique.
2 Lo anterior no significa que el estudio de familia sea únicamente para hogares con hijos. Aunque no haya niños en la casa, el que esposo y esposa tengan un estudio de familia demuestra su aprecio por los asuntos espirituales (Efesios 5:25, 26).
3. ¿Por qué es importante que el estudio de familia se celebre con regularidad?
3 La enseñanza ha de ser constante para que produzca el máximo provecho, en armonía con la lección que Jehová enseñó a Israel en el desierto: “No solo de pan vive el hombre, sino que de toda expresión de la boca de Jehová vive el hombre” (Deuteronomio 8:3). En función de sus circunstancias, algunas familias pueden programar un estudio a la semana, y otras pueden tener sesiones diarias más cortas. Sin importar el método que escoja, no deje el estudio a la casualidad. ‘Compre el tiempo’ que sea necesario; es una buena inversión. La vida de su familia está en juego (Efesios 5:15-17; Filipenses 3:16).
Objetivos que ha de tener presentes
4, 5. a) ¿Qué importante objetivo al enseñar a sus hijos puso Jehová ante los padres israelitas mediante Moisés? b) ¿Cómo puede lograrse ese objetivo en nuestros tiempos?
4 El estudio de familia producirá los mejores resultados si tiene presentes objetivos claramente definidos. Veamos algunas posibilidades.
5 Procure infundir amor por Jehová Dios en cada estudio. Cuando Israel se hallaba congregado en las llanuras de Moab, antes de entrar en la Tierra Prometida, Moisés dirigió la atención del pueblo a lo que Jesucristo más tarde reconoció como “el mandamiento más grande de la Ley”. ¿Cuál fue? “Tienes que amar a Jehová tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma y con toda tu fuerza vital.” (Mateo 22:36, 37; Deuteronomio 6:5.) Moisés exhortó a los israelitas a que grabaran dicho mandato en su propio corazón y lo enseñaran a sus hijos. Para ello, haría falta que se lo repitieran y que destacaran las razones que tenían para amar a Jehová y para combatir las actitudes y conducta que pudieran estorbar la expresión de ese amor, así como los motivos por los que habían de demostrarlo en su propia vida. ¿Necesitan la misma clase de enseñanza nuestros hijos? Claro que sí. Y también precisan ayuda para ‘circuncidarse el corazón’, es decir, para librarse de cuanto pudiera obstaculizar su amor a Dios (Deuteronomio 10:12, 16; Jeremías 4:4). Uno de esos obstáculos pudiera consistir en desear lo que el mundo ofrece y las oportunidades de entregarse por completo a sus actividades (1 Juan 2:15, 16). El amor a Jehová debe impulsarnos a actuar, motivarnos a vivir de tal modo que agrademos a nuestro Padre celestial (1 Juan 5:3). Para que el estudio de familia produzca beneficios perdurables, las sesiones deben dirigirse de manera que fortalezcan ese amor.
6. a) ¿Qué se requiere para impartir conocimiento exacto? b) ¿Cómo recalcan las Escrituras la importancia del conocimiento exacto?
6 Imparta conocimiento exacto de los requisitos de Dios. ¿Qué se requiere para lograr este objetivo? Implica más que ser capaz de leer una respuesta en una revista o un libro. Por lo general, se precisa que dialoguemos para cerciorarnos de que las palabras clave y las ideas principales se entiendan bien. El conocimiento exacto desempeña un papel fundamental en lo que tiene que ver con vestirnos de la nueva personalidad, centrarnos en lo que realmente es importante al afrontar los problemas de la vida y, por consiguiente, hacer lo que de verdad agrada a Dios (Filipenses 1:9-11; Colosenses 1:9, 10; 3:10).
7. a) ¿Qué preguntas pueden ayudar a la familia a ver cómo aplicar lo que se estudia? b) ¿Cómo ponen de relieve las Escrituras el valor de este objetivo?
7 Ayude a ver cómo aplicar lo que se aprende. Para lograr este objetivo, pregunte en cada estudio de familia: “¿Qué efecto debe tener en nuestra vida esta información? ¿Requiere que efectuemos algún cambio respecto a lo que estamos haciendo ahora? ¿Por qué deberíamos estar dispuestos a hacer cambios?” (Proverbios 2:10-15; 9:10; Isaías 48:17, 18). Prestar la debida atención a cómo aplicar lo aprendido contribuirá mucho al crecimiento espiritual de la familia.
Dé buen uso a los instrumentos docentes
8. ¿Qué instrumentos para el estudio de la Biblia ha suministrado la clase del esclavo?
8 “El esclavo fiel y discreto” nos ha equipado con muchos instrumentos útiles para el estudio. La revista La Atalaya, concebida para estudiarla junto con la Biblia, se publica en 131 idiomas. También existen libros para el análisis de las Escrituras en 153 diferentes lenguas, folletos en 284, casetes en 61, videocintas en 41, e incluso un programa informático de búsqueda bíblica disponible en nueve idiomas (Mateo 24:45-47).
9. ¿Cómo podemos seguir los consejos de los textos bíblicos que se citan en este párrafo al estudiar La Atalaya en familia?
9 En muchos hogares se aprovecha el estudio de familia para la preparación del artículo de La Atalaya que se comenta en la congregación. Esa costumbre puede ser muy provechosa, pues La Atalaya contiene el principal alimento espiritual cuyo propósito es edificar al pueblo de Jehová por todo el mundo. Cuando estudie La Atalaya con su familia, no se contente con que se lean los párrafos y se contesten las preguntas impresas. Haga cuanto pueda para que se entienda la información. Dedique el tiempo necesario a buscar los textos bíblicos que se citan pero no están copiados, y anime a su familia a señalar qué relación guardan con las ideas del párrafo. Trate de llegar al corazón (Proverbios 4:7, 23; Hechos 17:11).
10. ¿Qué podemos hacer para que los niños se interesen por el estudio y que este sea una ocasión de la cual disfruten?
10 Si hay niños en la casa, ¿cómo puede lograr que el estudio no les parezca una simple rutina familiar, sino una ocasión edificante, interesante y feliz? Procure mantener su interés, de modo que la atención se dirija a la información que se estudia. Si es posible, encárguese de que todos ellos tengan su propia Biblia y la revista que se va a estudiar. Si alguno es de corta edad, el padre o la madre puede imitar la ternura de Jesús sentándose junto a él, tal vez rodeándolo con el brazo (compárese con Marcos 10:13-16). El cabeza de familia puede pedir a un jovencito que explique algún grabado que aparezca en la información. A los niños pequeños se les puede asignar de antemano la lectura de algún texto bíblico, y a los mayores se les puede encargar que indiquen ocasiones en las que poner en práctica la información que se estudia.
11. ¿Qué otros instrumentos se han suministrado, y cómo pueden utilizarse provechosamente en el estudio de familia si están a nuestro alcance?
11 Aun si utiliza La Atalaya como la base de su estudio, no se olvide de los demás instrumentos, los cuales están disponibles en muchos idiomas. Si necesita datos sobre un contexto histórico o la explicación de alguna expresión bíblica, la obra Perspicacia para comprender las Escrituras puede ayudarle. Asimismo, podrá hallar la respuesta a otras preguntas en el Índice de las publicaciones Watch Tower o en el programa informático de búsqueda que la Sociedad ha producido. Si estos instrumentos están disponibles en su idioma, será muy conveniente utilizarlos en su estudio de familia. Con objeto de estimular el interés de los más pequeños, pudiera hacer que parte del estudio consista en ver un fragmento de alguna de las instructivas videocintas de la Sociedad, o escuchar la grabación en casete de alguna porción de un drama, y luego conversar sobre ello. El empleo adecuado de tales instrumentos puede contribuir a que el estudio sea interesante y provechoso para toda la familia.
Adapte el estudio a las necesidades de su familia
12. ¿Cómo puede ayudarnos el estudio de familia a abordar las necesidades apremiantes de la familia?
12 Es posible que la lección semanal de La Atalaya sea por lo común la materia que estudian juntos. Sin embargo, esté pendiente de los problemas y opiniones actuales de su familia. Si la madre no tiene un trabajo seglar, podría pasar algún tiempo todos los días con los hijos cuando vuelven de la escuela. Algunas situaciones pueden tratarse en esos momentos; otras quizá requieran más atención. Cuando se presenten necesidades apremiantes, no las pase por alto (Proverbios 27:12). Estas no solo pudieran relacionarse con problemas escolares, sino con otras situaciones. Seleccione la información adecuada y diga de antemano a la familia lo que van a estudiar.
13. ¿Por qué puede ser provechoso que la familia converse sobre cómo afrontar la pobreza?
13 Por ejemplo, dado que una gran parte de la Tierra se halla sumida en la pobreza, en muchos lugares pudiera ser necesario analizar cómo afrontarla. ¿Se beneficiaría su familia de un estudio que examinase situaciones de la vida real y algunos principios bíblicos? (Proverbios 21:5; Eclesiastés 9:11; Hebreos 13:5, 6, 18.)
14. ¿Qué situaciones pueden hacer oportuno que la familia converse sobre cómo ve Jehová la violencia, la guerra y la neutralidad cristiana?
14 Otro tema que debe tratarse es la violencia. El punto de vista de Jehová debe estar bien grabado en la mente y el corazón de todos nosotros (Génesis 6:13; Salmo 11:5). El estudio en familia de este tema puede ser una ocasión propicia para hablar de cómo tratar a los abusones en la escuela, de si aprender o no artes marciales y de cómo seleccionar el entretenimiento adecuado. Los conflictos violentos se han hecho frecuentes; las guerras civiles, las luchas políticas o étnicas o los enfrentamientos entre bandas afectan a la mayoría de los países. Por ello, es posible que su familia tenga que hablar sobre cómo mantener una conducta cristiana en medio de facciones beligerantes (Isaías 2:2-4; Juan 17:16).
15. ¿Cómo se ha de instruir a los hijos en cuanto a la sexualidad y el matrimonio?
15 Conforme los hijos crecen, hay que darles información adecuada a su edad sobre la sexualidad y el matrimonio. En algunas culturas, muchos padres nunca hablan de asuntos sexuales con sus hijos. La ignorancia puede hacer que estos adopten los puntos de vista deformados de otros jóvenes, y los resultados pueden ser desastrosos. ¿No es mejor que imitemos a Jehová, quien en la Biblia nos aconseja sobre esta cuestión con franqueza y buen gusto a la vez? Los consejos divinos ayudarán a nuestros hijos a que no pierdan su autoestima y traten con dignidad a las personas del sexo opuesto (Proverbios 5:18-20; Colosenses 3:5; 1 Tesalonicenses 4:3-8). Incluso si ya ha hablado con ellos al respecto, no dude en volver a hacerlo. La repetición es esencial para que afronten las nuevas situaciones que se presenten.
16. a) ¿Cuándo se efectúa el estudio de familia en diferentes hogares? b) ¿Cómo ha vencido usted los obstáculos para tener un estudio de familia con regularidad?
16 ¿Cuándo puede efectuarse el estudio de familia? En muchos hogares se celebra el lunes por la noche, siguiendo así el ejemplo de las familias Betel de todo el mundo. Pero las situaciones varían. Una familia argentina de once miembros —los padres y nueve hijos— se levantaba todos los días a las cinco de la mañana para estudiar junta, pues los distintos horarios de trabajo lo hacían imposible en cualquier otro momento. Aunque no fue fácil, esa costumbre grabó la importancia del estudio de familia en la mente y el corazón de los hijos. Cierto anciano cristiano de las Filipinas celebraba regularmente el estudio de familia con su esposa y sus tres hijos conforme estos crecían. A fin de que hicieran suya la verdad, los padres también estudiaban con cada uno de ellos durante la semana. En Estados Unidos, una hermana cuyo esposo no es Testigo camina todos los días con sus hijos hasta la parada del autobús escolar. Mientras esperan, pasan unos diez minutos leyendo y comentando alguna información adecuada basada en la Biblia, y luego ella hace una breve oración antes de que sus hijos suban al autobús. En la República Democrática del Congo, una mujer cuyo esposo incrédulo abandonó a la familia tiene que esforzarse mucho para estudiar debido a su limitada educación. Su hijo mayor visita a la familia todas las semanas para dirigir un estudio del que se benefician tanto sus hermanos menores como su madre. Esta pone un magnífico ejemplo por su preparación diligente. ¿Existe alguna situación que dificulte que su familia estudie junta con regularidad? No se rinda. Pida a Jehová de todo corazón que bendiga su esfuerzo por tener un estudio de la Biblia regular (Marcos 11:23, 24).
Las recompensas de la perseverancia
17. a) ¿Qué se requiere para tener un estudio de familia que sea regular? b) ¿Qué experiencia ilustra el valor de enseñar constantemente a la familia los caminos de Jehová?
17 Es preciso que hagamos planes. Se requiere perseverancia. Pero los beneficios de un estudio de familia regular bien valen la pena (Proverbios 22:6; 3 Juan 4). En Alemania, Franz y Hilda criaron una familia de once hijos. Años más tarde, su hija Magdalena afirmó: “Lo que hoy considero de mayor importancia es que no pasaba un solo día sin que se nos diera alguna forma de instrucción espiritual”. Cuando el espíritu del nacionalismo cobró intensidad con el mandato de Adolf Hitler, el padre de Magdalena utilizó la Biblia con objeto de preparar a su familia para las pruebas que él comprendía que les esperaban. Algún tiempo después se llevaron a los más pequeños a un reformatorio, y a otros miembros de la familia los arrestaron y encerraron en prisiones y campos de concentración. Algunos fueron ejecutados. La fe de todos ellos se mantuvo firme durante la feroz persecución, y en el caso de los que sobrevivieron, también durante los años posteriores.
18. ¿Cómo se han visto recompensados los esfuerzos de padres que han criado solos a sus hijos?
18 Muchos padres solos o cuyos cónyuges no comparten su fe han dado instrucción bíblica a sus hijos con regularidad. Una viuda de la India que crió sola a sus dos hijos puso todo su empeño en infundir en ellos amor por Jehová. Sin embargo, el que su hijo se apartara del pueblo de Dios le partió el corazón. Le suplicó a Jehová que la perdonara por cualquier deficiencia en la educación que había dado a su hijo. Sin embargo, este en realidad no olvidó lo que había aprendido. Al cabo de más de una década volvió, progresó en sentido espiritual y llegó a ser anciano de la congregación. En la actualidad, tanto él como su esposa son ministros precursores de tiempo completo. Qué agradecidos se sienten aquellos padres que han tomado en serio el consejo de Jehová y su organización, y han suministrado instrucción bíblica con regularidad a su familia. ¿Sigue usted ese consejo en su hogar?
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Familias, alaben a Dios con Su congregaciónLa Atalaya 1999 | 1 de julio
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Fortalezca el corazón
3. ¿Por qué debe ponerse especial empeño en fortalecer el corazón durante el estudio de familia, y qué se requiere para ello?
3 El estudio de familia no debe limitarse a llenar la cabeza de conocimiento; también ha de fortalecer el corazón. Para ello se requiere estar al tanto de los problemas que afrontan quienes componen la familia, así como tener un interés amoroso en cada uno de ellos. Jehová es el “examinador del corazón” (1 Crónicas 29:17).
4. a) ¿Qué significa ser “falto de corazón”? b) ¿Qué implica ‘adquirir corazón’?
4 ¿Qué ve Jehová cuando examina el corazón de nuestros hijos? La mayoría de ellos diría que ama a Dios, lo que es encomiable. Sin embargo, los jóvenes y los que recientemente han empezado a conocer a Jehová tienen poca experiencia en Sus caminos. Por ese motivo, alguien en esa condición pudiera ser, por emplear la expresión bíblica, “falto de corazón”. Es posible que no todos sus motivos sean malos, pero alcanzar la condición de corazón que realmente agrada a Dios toma tiempo. Implica hacer que los pensamientos, deseos, afectos, emociones y metas en la vida estén en armonía con lo que Dios aprueba en la medida de lo posible para seres humanos imperfectos. Cuando uno logra amoldar su persona interior de manera piadosa, “adquiere corazón” (Proverbios 9:4; 19:8).
5, 6. ¿Cómo pueden contribuir los padres a que sus hijos ‘adquieran corazón’?
5 ¿Pueden contribuir los padres a que sus hijos ‘adquieran corazón’? Es cierto que ningún ser humano puede implantar una buena condición de corazón en otra persona. Todos estamos dotados de libre albedrío, y mucho depende de aquello a lo que dediquemos nuestro pensamiento. Sin embargo, el discernimiento ayudará a los padres a conseguir que sus hijos se expresen y así saber qué alberga su corazón y qué atención necesitan. Haga preguntas como “¿Qué opinas al respecto?” y “¿Qué te gustaría hacer realmente?”. Entonces escuche con paciencia y no reaccione de forma exagerada (Proverbios 20:5). Si quiere llegar al corazón de su hijo, es importante que se respire un ambiente de bondad, comprensión y amor.
6 A fin de reforzar las inclinaciones sanas, converse a menudo con su familia sobre cada aspecto del fruto del espíritu y trabajen juntos en cultivarlo (Gálatas 5:22, 23). Infunda en ella amor a Jehová y a Jesucristo, no limitándose a decir que debemos amarlos, sino mostrando las razones por las que los amamos y cómo podemos demostrarlo (2 Corintios 5:14, 15). Fortalezca el deseo de hacer lo que es correcto razonando sobre los beneficios que reporta este modo de actuar. Fomente en la familia la voluntad de rechazar los pensamientos, el habla y la conducta impropios recordando las malas consecuencias que acarrean (Amós 5:15; 3 Juan 11). Muestre que los pensamientos, el habla y la conducta repercuten —para bien o para mal— en nuestra relación con Jehová.
7. ¿Qué se puede hacer para ayudar a los hijos a afrontar los problemas y a tomar decisiones de tal manera que se mantengan cerca de Jehová?
7 Cuando un hijo afronte un problema o una decisión importante, podríamos preguntarle: “¿Qué crees que piensa Jehová sobre ello? ¿Qué sabes de Jehová que te lleva a esa conclusión? ¿Le has orado al respecto?”. Comenzando lo antes posible, ayude a sus hijos a seguir un patrón de vida en el que siempre procuren determinar cuál es la voluntad de Jehová para entonces ponerla por obra. Cuando tengan una relación estrecha y personal con Jehová hallarán satisfacción en caminar en sus sendas (Salmo 119:34, 35). Esa relación infundirá en ellos un sentimiento de aprecio por el privilegio de formar parte de la congregación del Dios verdadero.
La preparación para las reuniones de la congregación
8. a) ¿Qué puede ayudarnos a hacer lugar en el estudio de familia para todos los asuntos que hay que tratar? b) ¿Cuánta importancia tiene el estudio de familia?
8 Dado que en las sesiones de estudio en familia hay tantos asuntos que tratar, ¿cómo puede hacer lugar para todos ellos? Aunque es imposible abarcar todo a la vez, quizá le resulte útil preparar una lista (Proverbios 21:5). De vez en cuando, repásela y determine qué precisa más atención. Interésese en el progreso de todos los miembros de su casa. La provisión del estudio de familia constituye una parte importante de nuestra educación cristiana, pues nos prepara para la vida presente y para la vida eterna venidera (1 Timoteo 4:8).
9. ¿Qué metas relativas a la preparación para las reuniones se pueden ir alcanzando en los estudios de familia?
9 ¿Incluye su estudio de familia la preparación para las reuniones? Hay algunos objetivos que se pudieran ir alcanzando al estudiar juntos. Es posible que algunos de ellos tomen semanas, meses o hasta años. Considere estas metas: 1) que todos los miembros de la familia estén preparados para comentar en las reuniones de la congregación; 2) que procuren hacerlo en sus propias palabras; 3) que citen textos bíblicos en los comentarios, y 4) que al estudiar la información piensen en cómo aplicarla personalmente. Todos estos objetivos pueden contribuir a que cada uno de ellos haga suya la verdad (Salmo 25:4, 5).
10. a) ¿Cómo podemos prestar atención a cada una de las reuniones de congregación? b) ¿Por qué merece la pena hacerlo?
10 Aun en el caso de que su estudio de familia se base en la lección semanal de La Atalaya, no pase por alto la importancia de prepararse individualmente o en familia para el Estudio de Libro de Congregación, la Escuela del Ministerio Teocrático y la Reunión de Servicio. Estas son también parte esencial del programa mediante el que se nos enseña a andar en el camino de Dios. Es posible que periódicamente puedan preparar las reuniones en familia. Sus aptitudes para el estudio se acrecentarán si lo efectúan unidos, y ello redundará en que obtengan más provecho de las reuniones mismas. Entre otras cosas, analicen los beneficios de preparar con regularidad esas reuniones y la importancia de reservar un tiempo fijo para ese propósito (Efesios 5:15-17).
11, 12. ¿De qué provecho será que nos preparemos para cantar con la congregación, y cómo podemos hacerlo?
11 En las asambleas “Andemos en el camino de Dios” se nos animó a prepararnos para otro rasgo de nuestras reuniones: el canto. ¿Hemos seguido ese consejo? Si lo hacemos, las verdades bíblicas podrán grabarse en nuestra mente y corazón y, al mismo tiempo, disfrutaremos más de las reuniones de la congregación.
12 Si cuando nos preparamos leemos algunos cánticos programados y analizamos el significado de las letras, nos será más fácil cantar con el corazón. En el antiguo Israel, los instrumentos musicales ocupaban un lugar destacado en la adoración a Dios (1 Crónicas 25:1; Salmo 28:7). ¿Alguien de su familia sabe tocar alguno? Podrían utilizarlo para ensayar y cantar juntos algún cántico programado para la semana. Otra posibilidad es poner una grabación de los cánticos. En algunos lugares, nuestros hermanos cantan maravillosamente sin acompañamiento musical alguno. A menudo disfrutan de cantar los cánticos programados para las reuniones de congregación de esa semana mientras andan por los caminos o faenan en los campos (Efesios 5:19).
La preparación en familia para el servicio del campo
13, 14. ¿Por qué son valiosas las conversaciones en familia que nos preparan el corazón para el ministerio del campo?
13 Un aspecto importante de nuestra vida consiste en dar testimonio a otras personas respecto a Jehová y su propósito (Isaías 43:10-12; Mateo 24:14). Seamos jóvenes o mayores, la preparación nos permitirá disfrutar más de esa actividad y obtener mejores resultados. ¿Cómo podemos hacerlo en familia?
14 Al igual que con todos los demás asuntos que son parte de nuestra adoración a Dios, es importante que preparemos nuestro corazón. No solo hemos de examinar lo que vamos a hacer, sino por qué vamos a hacerlo. En los días del rey Jehosafat se instruyó al pueblo en la ley divina, pero la Biblia dice que este “todavía no había preparado su corazón”. Esa condición los dejó a merced de las tentaciones que podían apartarlos de la adoración verdadera (2 Crónicas 20:33; 21:11). Nuestro objetivo no es simplemente informar las horas que hemos pasado en el servicio del campo ni se limita a distribuir publicaciones, sino que debe ser una expresión de nuestro amor a Jehová y a las personas que necesitan tener la oportunidad de escoger la vida (Hebreos 13:15). Es una actividad en la que somos “colaboradores de Dios” (1 Corintios 3:9). ¡Qué privilegio! Cuando participamos en el ministerio cooperamos con los santos ángeles (Revelación [Apocalipsis] 14:6, 7). No pudiera haber mejor ocasión de infundir aprecio por esa obra que cuando la familia conversa, ya sea al efectuar el estudio semanal o al analizar un texto apropiado del folleto Examinando las Escrituras diariamente.
15. ¿Cuándo podemos prepararnos en familia para el servicio del campo?
15 ¿Dedica de vez en cuando algún tiempo del estudio de familia a ayudar a los miembros de su casa a prepararse para su participación semanal en el servicio del campo? Esa costumbre puede ser muy provechosa (2 Timoteo 2:15). Los ayudará a lograr que su servicio tenga propósito y sea fructífero. En ocasiones pudiera dedicar toda una sesión del estudio a esa preparación, y más a menudo, tratar algunos aspectos del ministerio del campo de forma más breve al final del estudio de familia o en otro momento de la semana.
16. Explique por qué es tan provechoso cada uno de los pasos que se enumeran en el párrafo.
16 Las sesiones podrían centrarse en una serie de pasos, como por ejemplo: 1) Preparar una presentación bien ensayada en la que se lea un texto de la Biblia si hay oportunidad. 2) Ver que todos tengan, si es posible, su maletín o bolso para el servicio del campo, una Biblia, un cuaderno de notas y un bolígrafo o lápiz, además de tratados y otras publicaciones en buen estado. El maletín o el bolso no tienen por qué ser caros, pero sí estar limpios y ordenados. 3) Ver en qué lugares pudiéramos predicar informalmente y la manera de hacerlo. Complementen cada etapa de esta preparación saliendo juntos al servicio del campo. Ofrezca sugerencias prácticas, pero no trate de corregir demasiados puntos a la vez.
17, 18. a) ¿Qué preparación en familia puede contribuir a que nuestro ministerio del campo sea más productivo? b) ¿Qué aspecto de esa preparación podría efectuarse semanalmente?
17 Una parte primordial de la obra que Jesucristo encomendó a sus seguidores consiste en hacer discípulos (Mateo 28:19, 20). Este aspecto supone más que predicar. Requiere que enseñemos. ¿De qué modo puede contribuir el estudio de familia a ser eficaces en este campo?
18 Analicen juntos a qué personas convendría revisitar. Entre ellas pueden estar quienes han aceptado alguna publicación o quienes simplemente han escuchado. Es posible que las hayamos encontrado en la obra de casa en casa o predicando de modo informal en el mercado o la escuela. Déjense guiar por la Palabra de Dios (Salmo 25:9; Ezequiel 9:4). Determinen a qué personas van a visitar cada uno de ustedes esa semana. ¿De qué se hablará? Tratar estos asuntos en familia ayudará a todos a prepararse. Anoten textos bíblicos específicos que se puedan mostrar a quienes tienen interés, así como puntos apropiados del folleto ¿Qué exige Dios de nosotros? o del libro El conocimiento que lleva a vida eterna. No traten de abarcar demasiado en una sola ocasión, y dejen al amo de casa una pregunta pendiente para la próxima visita. ¿Por qué no planean juntos semanalmente las revisitas que cada uno va a efectuar, cuándo las hará y lo que espera lograr? De ese modo, el servicio del campo de toda la familia será más productivo.
Siga enseñándoles el camino de Jehová
19. ¿Qué han de sentir los miembros de la familia para que sigan andando en el camino de Jehová, y qué contribuye a ello?
19 En este mundo perverso, ser cabeza de familia supone un reto. Satanás y sus demonios tratan por todos los medios de arruinar la espiritualidad de los siervos de Jehová (1 Pedro 5:8). Además, en la actualidad los padres se ven sometidos a muchas presiones, sobre todo los que crían solos a sus hijos. Resulta complicado hallar tiempo para todo lo que les gustaría hacer. Pero aunque solo puedan poner en práctica una sugerencia a la vez y así mejorar poco a poco su programa de estudio en familia, el esfuerzo merece la pena. Ver a sus seres más allegados andar con lealtad en el camino de Jehová es una recompensa alentadora. Para que los miembros de la familia logren andar del modo que a Jehová le agrada, han de sentir gozo cuando asisten a las reuniones de la congregación y cuando salen al ministerio del campo. Para ello se requiere preparación, el tipo de preparación que fortalece el corazón y aporta lo que cada uno de ellos necesita para participar con propósito en estas actividades.
20. ¿Qué permitirá a un mayor número de padres sentir el gozo que se expresa en 3 Juan 4?
20 Respecto a quienes había ayudado en sentido espiritual, el apóstol Juan escribió: “No tengo mayor causa de sentir agradecimiento que estas cosas: que oiga yo que mis hijos siguen andando en la verdad” (3 Juan 4). Los estudios de familia que se realizan con objetivos claros pueden contribuir en gran medida a que todos compartan ese gozo, como también pueden hacerlo los cabezas de familia que, con un espíritu bondadoso y servicial, se ocupan de las necesidades individuales de los suyos. Los padres que cultivan aprecio por el camino de Dios ayudan a su familia a disfrutar del que es, sin duda alguna, el mejor modo de vivir (Salmo 19:7-11).
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