iniquidad y muerte. Este nuevo mundo le ofrece todo. Vale la pena asirse fuertemente de él, porque es lo que el reino celestial de Dios ahora está procediendo a efectuar. No deseche toda la evidencia. Sea prudente, sensato. Usted ha oído el testimonio de la Palabra de Dios, la Biblia. No cuesta nada salvo un poco de tiempo de parte suya el hacer una investigación meditativa, cuidadosa. Sea usted católico o protestante, judío, o lo que sea, estudie la Palabra de Dios, entérese de sus propósitos. ¿Por qué confiar más en los hombres? Han resultado ser falsos respecto a sus puntos de vista acerca del reino de Dios. ¿Por qué adherirse a las doctrinas antiguas, gastadas y falsas ofrecidas por el mundo y sus caudillos religiosos? Use la mente que Dios le ha dado a usted y, a la luz de su Palabra, determine por sí mismo lo que es correcto y lo que es incorrecto. (Sal. 119:105; Juan 17:17, NM) Se ha probado que el mundo no tiene puntos de vista correctos acerca del reino de Dios. Su reino ha llegado, y los caudillos mundiales están dormidos a su presencia. Despréndase de los muchos puntos de vista erróneos y note los muchos hechos en cumplimiento de la profecía bíblica. (Salmo 2; Dan. 2:44) No importa dónde viva usted, los testigos de Jehová tendrán gusto en ayudarle a aprender más acerca de esto. Y entonces cuando usted aprenda más acerca del reino de Dios, exprese su amor por su prójimo hablándole acerca del Reino, para que él también pueda aprender de él. Si hace esto, obtendrá usted muchas bendiciones bajo el reino de Dios que ha llegado y que pronto arrasará de toda la tierra a la organización inicua de Satanás, visible e invisible. “Los ojos altivos del hombre serán abatidos, y la soberbia de los hombres será humillada, y Jehová solo será ensalzado en aquel día.”—Isa. 2:11.

La Biblia—pero sólo las partes convenientes

● Por mucho tiempo los clérigos de la cristiandad han sido culpables de rechazar las partes de la Biblia que no les gustan. Aun los fundamentalistas hacen esto con relación a las declaraciones bíblicas de que el alma muere y que Jesús y su Padre no son uno en una trinidad. (Ezequiel 18:4, 20; Hechos 3:23; Juan 14:28) Ahora se ve que los comunistas están haciendo la misma cosa. El Siglo cristiano del 14 de enero informó del sermón por Ch’ieng Ch’u Ku que se publicó en la Nueva iglesia del 16 de octubre, en el cual se dijo que ya se han realizado los nuevos cielos y la nueva tierra en la nueva China, gracias a la reforma agraria. “Ya hay más de 4 millones de agricultores que son dueños de su propio terreno, edifican sus propias casas, comen los frutos que ellos cosechan.” Esto también incluía los proyectos fluviales, los ferrocarriles y la reforma eclesiástica. “Somos los amos de nuestra propia iglesia. Jamás volveremos a ser confundidos con la visión imperialista del fin del mundo. . . . Tenemos que levantarnos y trabajar, demostrando que las gentes son los amos de los nuevos cielos y de la nueva tierra.” ¡Qué egotismo! ¡Los hombres amos de la iglesia y de los cielos! Ninguna necesidad de averiguar lo que Dios espera, ni de enterarse de lo que él ha dicho que únicamente él puede hacer. De todos modos, este clérigo precipitadamente clasifica a Dios con los imperialistas, puesto que Su Palabra habla del fin del mundo, el fin de las democracias así como también de los gobiernos comunistas, el fin de todo el inicuo sistema de cosas y el establecimiento de justicia y paz que durarán para siempre. Pero eso no le importa a Ch’ieng Ch’u Ku. A él le interesa más la propaganda política así como a los clérigos de Occidente les interesa promover la que ellos prefieren; ambos tomando de la Biblia sólo lo que les conviene y rechazando lo demás.