las tumbas memorialescas por medio de resucitarlos a la vida sobre la tierra durante los mil años del reinado de Cristo. Teniendo en cuenta todas estas cosas, aquí, en verdad, desde 1919 hay una “salvación por él,” tal salvación que las buenas nuevas acerca de ella merecen contarse “de día en día.” Es un privilegio intensamente conmovedor unirse a los salvados y participar en decirlas.

Diciendo las buenas nuevas de día en día

1. Debemos emplear los esfuerzos más grandes para hacer ¿qué cosa durante este “corto período de tiempo”?

UN “CORTO período de tiempo” queda antes de la guerra universal del Armagedón. Durante este período se ofrece la oportunidad de traer a tantas personas de buena voluntad como sea posible a la condición salva que Jehová Dios provee ahora. Necesitamos emplear los esfuerzos más grandes que nos sean posibles antes de que expire el período que se da para informar a la gente en todas partes de que su salvación eterna sólo puede venir de Jehová el gran Salvador. Principalmente depende de él. ¿Por qué?

2, 3. ¿Por qué hay que dar a conocer a Jehová, y quiénes aprecian que hay muchísimo por qué alabarlo?

² “Porque grande es Jehová y merece que se le alabe muchísimo. Él ha de ser temido más que todos los otros dioses. Porque todos los dioses de los pueblos son dioses inútiles. Pero en cuanto a Jehová, él ha hecho los mismísimos cielos. Dignidad y esplendor se hallan ante él, fortaleza y belleza se hallan en su santuario.”—Sal. 96:4-6, NM.

³ Como fué en los días del apóstol Pablo, así es hoy: Jehová es el “Dios no conocido” para con la vasta mayoría de la población de la tierra. (Hech. 17:23) Pero él merece ser conocido por todos. Hay que darlo a conocer, si ha de haber salvación alguna. Se le dará a conocer a todos los vivos. Él jura esto por su mismísima existencia: “Por vida mía, toda la tierra será llenada de la gloria de Jehová.” (Núm. 14:21, NM) Los que rehusan conocerlo ahora en amistad serán obligados a conocer su poder destructivo en el Armagedón. Hablando de esa guerra final, él declara: “Me haré glorificar, y me haré santificar, y seré conocido a los ojos de muchas naciones; y sabrán que yo soy Jehová.” (Eze. 38:23) Esto completará el conocimiento de él que sus testigos sobre la tierra han estado tratando con ahinco de dar a la gente durante toda esta generación. Estos testigos están aprendiendo más y más a conocer cuán grande es Jehová. Al aumentar su propio conocimiento aprecian más que Él merece que se le alabe muchísimo. Todo acerca de él ha de ser alabado. Tal como hay toda razón para condenar a Satanás el Diablo el dios de este sistema de cosas, hay toda razón para alabar a Jehová el Dios del nuevo mundo.

4, 5. (a) ¿A quiénes sobre la tierra teme la gente? (b) ¿Por qué es urgente despertar a la gente al temor de Jehová?

⁴ Hoy en todas partes de la tierra existe