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    La Atalaya 1965 | 15 de octubre
    • en un madero de tormento. (Heb. 12:2) En su Sermón del Monte este gran retenedor de integridad prometió que sus seguidores fieles igualmente compartirían este gozo. “Felices son los que han sido perseguidos por causa de la justicia, puesto que a ellos pertenece el reino de los cielos. Felices son ustedes cuando los vituperen y los persigan y mentirosamente digan toda suerte de cosa inicua contra ustedes por mi causa. Regocíjense y salten de gozo, puesto que grande es su galardón en los cielos; porque de esa manera persiguieron a los profetas antes de ustedes.” A esto agrega el escritor Santiago: “Considérenlo todo gozo, mis hermanos, cuando se encuentren en diversas pruebas. Feliz es el varón que sigue aguantando la prueba, porque al llegar a ser aprobado recibirá la corona de la vida, que Jehová prometió a los que continúan amándolo.”—Mat. 5:10-12; Heb. 10:34; Sant. 1:2, 12.

      EVITE LOS PELIGROS DE PERDER EL GOZO

      19. Diga cómo algunos en tiempos pasados perdieron su gozo.

      19 Cuando Caín vio a su hermano Abel preferido por encima de él mismo perdió su gozo. Dios lo amonestó pero Caín pasó por alto la amonestación. Coré, María y otros en el desierto permitieron que la envidia les robara su gozo, y para su propio daño. Judas Iscariote, a causa de una mala condición de corazón, también permitió que el gozo se le escapara y finalmente acabó suicidándose.

      20. (a) ¿Cómo puede la fe impedir que perdamos nuestro gozo? (b) ¿De qué depende la fe en gran parte?

      20 El retener nuestro gozo requiere fe. La fe depende mucho del estudio bíblico personal así como de la asistencia regular a las reuniones de congregación del pueblo de Jehová. La fe nos ayudará a vencer uno de los mayores obstáculos para el gozo, a saber, la preocupación. En vez de preocuparnos, hagamos lo que podamos para rectificar las cosas, y, si no hay nada más que podamos hacer, oremos acerca de ello y luego dejemos el asunto en las manos capaces de Jehová.

      21. ¿Cómo puede el aprecio de lo que Dios ha hecho por uno resultar una salvaguarda contra el perder la fe?

      21 Debemos tener aprecio también, aprecio por lo que Dios ha hecho por nosotros, si vamos a retener nuestro gozo. Con tal aprecio no permitiremos que ninguna forma de injusticia, como la discriminación o la parcialidad, nos robe nuestro gozo. En vez de permitir que el mal nos endurezca, dejaremos que nos suavice. ¿Se discrimina contra nosotros a causa de nacionalidad, cultura, educación o color de la piel? Entonces recordemos que, con todo este desequilibrio, estamos aún en mejores circunstancias que las personas contra las cuales no se discrimina pero que no tienen la Verdad ni conocimiento de los propósitos de Jehová; así como en el día de Jesús un esclavo que era cristiano estaba mucho más bendecido que uno que fuera libre y que no fuera creyente. Si usted es una persona introversa y se inclina a tenerse lástima a causa de ser mal comprendido, no permita que tal disposición lo desangre de su gozo. Más bien, trate de entender las razones por las cuales no se le comprende, y, si usted no puede, recuerde que Jehová entiende.

      22. ¿Cómo podemos impedir que la enfermedad física o mental nos robe nuestro gozo?

      22 O, ¿es su problema de enfermedad, o está usted impedido física o mentalmente? No permita que tales cosas le roben su gozo. ¡Mejor están los que son ciegos físicamente que los que están ciegos espiritualmente! ¿Es usted pobre en posesiones materiales? Recuerde lo que Jesús dijo en cuanto a la blanca de la viuda. Pablo también escribió que nuestras contribuciones a la causa de Dios son aceptas de acuerdo con lo que tenemos y no de acuerdo con lo que no tenemos. Si estamos dando 100 por ciento, entonces, sin importar cuán poco sea, estamos contribuyendo a la vindicación del nombre de Jehová en total, y tendremos la aprobación de Jehová y ganaremos la vida eterna en su nuevo orden de cosas. Por eso, ¡no permita que el sufrir por impedimentos físicos o económicos le robe a usted su gozo! “De toda manera nos recomendamos a nosotros mismos como ministros de Dios . . . como apesadumbrados mas siempre regocijados, como pobres mas enriqueciendo a muchos, como no teniendo nada y sin embargo poseyendo todas las cosas.” ¡Por eso, regocíjese con acción de gracias de que sus impedimentos no sean espirituales!—2 Cor. 6:4, 10; Luc. 21:1, 2.

      23. ¿Qué estímulo provechoso nos da el apóstol Pablo en este respecto?

      23 O quizás tengamos debilidades de la carne que tienden a robarnos nuestro gozo. Sin embargo, no permita que estas cosas lo desalienten. Recuerde que el apóstol Pablo tuvo que luchar con las debilidades de la carne. “Lo bueno que deseo no lo hago, mas lo malo que no deseo es lo que practico. . . . cuando deseo hacer lo que es correcto, lo que es malo está presente conmigo. ¡Hombre desdichado que soy!” No obstante, ¡esto no le robó a Pablo su gozo! Porque continúa: “¿Quién me librará del cuerpo que está padeciendo esta muerte? ¡Gracias a Dios por medio de Jesucristo nuestro Señor!” Lo que hay que hacer es no rendirse en la lucha, sino, más bien, continuar tratando severamente al cuerpo y conduciéndolo como a esclavo a la voluntad de Dios.—Rom. 7:19, 21, 24, 25; 1 Cor. 9:27.

      24. Bajo las premuras de los tiempos, ¿qué otras sugerencias se ofrecen para impedir la pérdida del gozo?

      24 Además de las sugerencias susodichas también será provechoso para permanecer gozosos todo el día el que tengamos buen juicio, hagamos planes apropiados y ejerzamos gobierno de nosotros mismos al llevar a cabo tales planes. Haga un inventario de lo que usted tiene a su disposición a modo de tiempo, energía, dinero e influencia personal. Considere en oración exactamente lo que usted puede hacer a modo de estudio privado así como servicio ministerial en el campo. Luego haga un presupuesto y determínese en su corazón a persistir en ello. Al mismo tiempo no sea fanático ni extremista. La gente que nunca puede hacer lo suficiente y que quiere ser demasiado meticulosa a menudo acaba teniendo una postración nerviosa, y esto ciertamente no es la manera de ser gozoso todo el día. Use el espíritu de buen juicio. Sea moderado en los hábitos.—1 Tim. 3:2, 11; 2 Tim. 1:7.

      25. Explique cómo el contentamiento puede impedir que uno pierda el gozo.

      25 Para que dure nuestro gozo también tenemos que tener contentamiento. No solo debemos apreciar lo que tenemos, también debemos estar contentos al pasarla sin algunas cosas. Pablo aprendió esta lección, diciendo: “He aprendido, en cualesquier circunstancias que esté, a bastarme con lo que tengo.” “Teniendo, pues, sustento y con qué cubrirnos, estaremos contentos con estas cosas.” La devoción piadosa junto con el bastarse con lo que uno tiene proporciona el gozo agradable del contentamiento libre de inquietud. “A la vez que echan sobre él toda su inquietud, porque él se interesa por ustedes.”—Fili. 4:11; 1 Tim. 6:6, 8; 1 Ped. 5:7.

      26. ¿Qué otra cosa se necesita para permanecer gozoso?

      26 Otro factor importante para retener el gozo es la humildad y la sumisión al gobierno teocrático. Si creemos que se nos pasa por alto en cuanto a determinado privilegio de servicio, no permitamos que la desilusión nos robe nuestro gozo. Jamás olvide el hecho de que Jehová está dirigiendo su organización, y es Él quien pone a los miembros en sus lugares como le agrada al Creador, no a la criatura. El ascenso no es de ninguna otra fuente que de Jehová. (1 Cor. 12:15-30; Sal. 75:6, 7) Por eso, asegúrese de no tener el espíritu de rebelión, porque los rebeldes jamás están gozosos. Es mejor dar gracias y regocijarse en cuanto a los privilegios de servicio que uno tiene, prescindiendo de cuán aparentemente pequeños parezcan. Los hijos humildes del levita Coré declararon: “He escogido estar de pie al umbral en la casa de mi Dios más bien que moverme de acá para allá en las tiendas de la maldad.”—Sal. 84:10.

      27. ¿Contra qué otros peligros debemos estar en guardia si queremos permanecer gozosos?

      27 También tenemos que estar en guardia contra el permitir que el rencor o el resentimiento se abrigue en nuestro corazón, porque simplemente no podemos guardar rencor o resentimiento y al mismo tiempo estar gozosos. Más bien, cultive cariño fraternal. Que nadie le robe a usted su gozo, prescindiendo de lo que digan o hagan. Como está escrito: “No te apresures en tu espíritu a sentirte ofendido, porque el ofenderse es lo que descansa en el seno de los estúpidos.”—Ecl. 7:9.

      28. En contraste con el mundo de la humanidad, ¿cuál es la porción bendita de los testigos de Jehová, y por qué?

      28 Ciertamente el mundo de la humanidad hoy día se halla sin gozo debido a que ha abandonado a Jehová y sus leyes justas. Por otra parte, el gozo de los siervos de Jehová es sumamente grande, todo porque tienen fe firme, muestran aprecio intenso, usan buen juicio al planear su actividad, se bastan con lo que tienen y están contentos con su porción en la vida, son mansos y humildes y sumisos y se muestran amor fraternal y cariño tierno unos a otros.

      29. En repaso, ¿cuáles son algunas de las cosas principales por las cuales se regocijan los siervos de Dios?

      29 Jehová, a su vez, da a sus siervos muchas cosas por las cuales se regocijan todo el día. Tienen la verdad, la verdad acerca de Jehová y de sus propósitos y la voluntad para ellos. Ven el cumplimiento de las profecías bíblicas y tienen la esperanza brillante del Reino. Tienen la provisión del sacrificio de rescate de Cristo. Tienen al esclavo fiel y discreto como una junta administrativa. Gozan de gran prosperidad y privilegios de servicio en asociación con la sociedad del nuevo mundo. Sobre todo, están participando en el privilegio singular de contribuir hacia la santificación y vindicación del precioso nombre de Jehová.

      30. ¿Por qué razón superlativa se regocijan los testigos de Jehová, como se predijo hace mucho tiempo?

      30 Expresado brevemente, los siervos de Jehová se regocijan y están llenos de exultación todo el día porque Jehová está con ellos, en su mismísimo medio, para bendecirlos y sostenerlos en su fidelidad e integridad. Esto es exactamente como dijo el profeta Sofonías que sería entre los siervos de Jehová en este tiempo del fin. “Regocíjate y alborózate con todo el corazón,” porque “Jehová tu Dios está en medio de ti. . . . Él se alegrará por ti con regocijo. . . . Él se hará gozoso sobre ti con gritos de felicidad.”—Sof. 3:14, 17.

  • ¡Aumente su alabanza a Jehová!
    La Atalaya 1965 | 15 de octubre
    • ¡Aumente su alabanza a Jehová!

      “Jehová es grande y debe ser alabado muchísimo.”—Sal. 145:3.

      1. ¿Qué ha sucedido desde la II Guerra Mundial que muchas personas piensan que cumple profecía bíblica?

      CON interés variado muchas personas han observado cómo, desde la II Guerra Mundial, muchos millares de judíos han regresado a la tierra de Palestina. Este hecho, junto con el aumento de la fuerza económica y militar de ese país, el reconocimiento de la soberanía de Israel por todas las grandes potencias del mundo, y el sentarse la República de Israel como miembro de la augusta organización de las Naciones Unidas, lo aclaman muchas personas, tanto judías como no judías como algo que sucede en cumplimiento de profecía bíblica. Por lo tanto, examinemos algunas de las profecías sagradas para ver si los hechos justifican tal conclusión.

      2. Entre otras cosas, ¿qué predijeron Sofonías y Jeremías que les sucedería a los cautivos de Judá e Israel?

      2 Hace más de 2,600 años Dios inspiró a su profeta Sofonías a escribir: “‘Salvaré a la que cojea, y a la que está dispersa la juntaré. Y las colocaré como alabanza y

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