él se sienta más tranquilo si su esposa no está presente para el estudio, por un tiempo, por lo menos. Que las circunstancias gobiernen esto. Pero, ¡póngase a pensar! Si usted muestra este sincero interés cristiano, algún día quizás esta persona esté instruyendo a otros con la “palabra de vida,” participando con usted y su propio cónyuge en proclamar las buenas nuevas eternas. ¡Qué magnífica expectativa!—Rev. 14:6; Fili. 2:16.

23. ¿Qué cualidad debe ejercerse en el matrimonio? ¿Por qué prestar atención a los recordatorios de Jehová?

²³ Después de considerar los recordatorios de Jehová, entonces, ¿qué puede decirse del matrimonio? Que de veras, el matrimonio en la sociedad del nuevo mundo puede producir felicidad verdadera. Sin embargo, si surgen problemas determínese a resolverlos con amor aplicando principios bíblicos. Trabaje para conservar lo que Dios ha unido bajo un yugo. Dé ayuda sincera a los cónyuges incrédulos. Y adorne su matrimonio con amor, porque ninguna cualidad lo eclipsa. “Muchas aguas mismas no pueden extinguir el amor, ni los ríos mismos pueden arrastrarlo con ellos.” (Cant. de Sal. 8:7) Como esposo y esposa unidos en matrimonio, continúen exhibiéndose amor uno al otro mediante palabras y hechos. Presten atención a los recordatorios de Jehová. Entonces serán felices. ¡Y cuán espléndido es el matrimonio cristiano cuando predomina el amor y cuando la Biblia es la guía!

Pesando el matrimonio en estos últimos días

“También el que da su virginidad en matrimonio hace bien, pero el que no la da en matrimonio hará mejor.”—1 Cor. 7:38.

1. ¿Por qué el escoger una esposa no fue problema para Adán?

PARA Adán, el primer hombre, el escoger una esposa no fue ningún problema en absoluto. Ella fue hecha para él. El hombre había nombrado a los muchos animales, pero para él “no se halló un ayudante como complemento de él.” “Por lo tanto,” se nos dice en el relato bíblico, “Jehová Dios hizo que cayera un sueño profundo sobre el hombre y, mientras dormía, tomó una de sus costillas y luego cerró la carne sobre su lugar. Y Jehová Dios procedió a construir de la costilla que él había tomado del hombre una mujer y a traerla al hombre.” ¡Imagínese el gozo de Adán a causa de esto! Se vio impulsado a exclamar: “Esto por fin es hueso de mis huesos y carne de mi carne. Esta será llamada Mujer, porque del hombre fue tomada ésta.” Con razón el hombre se adheriría a su esposa. En su estado impecable, esta mujer era su complemento perfecto.—Gén. 2:18-25.

2. Muestre bíblicamente qué es la voluntad de Jehová para los cristianos que optan por casarse.

² Hoy, entre los humanos imperfectos, un problema al que se enfrentan algunos cristianos es el de escoger a un cónyuge. En esto un siervo dedicado de Jehová prestará atención de manera sabia a la exhortación inspirada del apóstol Pablo de que