significará el magullar a la “serpiente original en la cabeza, para destrucción de ésta. (Rev. 20:7-10; Gén. 3:14, 15; Rom. 16:20) Significa el dar a los hombres la oportunidad de tener vida sin fin en felicidad bajo un gobierno perfecto y piadoso sobre una Tierra transformada al fin en un paraíso de placer para habitación perdurable de la humanidad. La preciosa oportunidad para esto no se limita a las personas temerosas de Dios en la Tierra que vivan a través de la guerra del Armagedón y el atar y aprisionar a Satanás el Diablo y sus demonios. No; esta grandiosa oportunidad abarca a gente para la cual Jesucristo fue ‘magullado en el talón’ y murió como sacrificio de rescate hace mil novecientos años.—1 Tim. 2:5, 6; Mat. 20:28.

61. (a) ¿Cómo será posible eso? (b) Así, ¿cuándo finalmente ‘llegarán a vivir’ “los demás de los muertos,” y cómo?

⁶¹ ¿Cómo será posible eso? Ah, habrá una resurrección de los que están muertos en la sepultura común. (Hech. 24:15) No todos a la vez, pero para el fin de los mil años la sepultura común de la humanidad habrá sido vaciada de todos ellos. Todos los obedientes que pasen la prueba decisiva de su devoción a Dios al fin de los mil años conseguirán que sus nombres sean escritos en el libro de la vida de Dios o mantendrán sus nombres allí. Así ‘llegarán a vivir’ en la plenitud perfecta de la vida al fin del reinado de mil años de Cristo. Los que fallen en aquella prueba final serán destruidos para siempre junto con Satanás y sus demonios, por medio de los cuales Dios permitirá que venga la prueba final sobre todos los habitantes de este Paraíso terrestre.—Rev. 20:5, 7-15.

62. ¿Cómo podemos orar para la realización de estas benditas expectativas?

⁶² ¡Qué expectativas exquisitas, por lo tanto, realizará la humanidad después que se ate y aprisione a Satanás y sus demonios! Oremos constantemente por la pronta realización de esas benditas expectativas por medio de continuar ofreciendo a nuestro Padre celestial la oración que el Señor dio: “Venga tu reino. Efectúese tu voluntad, como en el cielo, también sobre la tierra.”—Mat. 6:9, 10.

¿Lee usted su Anuario?

Por muchos años el Anuario de los testigos de Jehová se ha venido publicando solamente en inglés, pero ahora está disponible en alemán y español. Un Testigo de Florida escribe, en aprecio por el Anuario en español: “Siento algo muy especial al tener el privilegio de leerlo en mi propia lengua. A medida que leo en español las experiencias de países lejanos, siento una sensación de unidad con los hermanos de esos lugares. Considero el Anuario como una de las provisiones más maravillosas que ha provisto la organización de Dios. He hablado con varios hermanos y todos ellos me han expresado lo mismo; esto es, la felicidad, la edificación y el conocimiento que han recibido de lo que han leído hasta ahora. El Anuario en español es para todos los hermanos de habla hispana por todo el mundo uno de los medios más eficaces que Jehová ha usado para mantenernos al día con el progreso de su organización visible.” ¿Está leyendo usted su Anuario?