Pase adelante con la organización de Jehová
1. (a) ¿Por qué debería esperarse que la organización de Dios en la Tierra estuviese adelantando? (b) ¿Qué demuestra la eficacia de la organización?
TODO en el universo de Dios está en movimiento. Moción sin conmoción es el principio fundamental. Los planetas giran en torno del Sol, los soles giran en sus galaxias, las galaxias giran en torno de otras agrupaciones, y las agrupaciones giran en torno de agrupaciones aún más grandes, ad infinitum, en lo que toca a las investigaciones de los astrónomos. Por eso debe esperarse que la organización de Dios en la Tierra esté en movimiento. Y es verdad. Ha pasado adelante con el progreso más asombroso. La prensa pública a menudo comenta sobre lo que probablemente sea la fase más reconocida de su actividad de organización, su arreglo de asambleas. Puesto que su Dios es el Dios de la economía, él hace que se efectúe el mayor trabajo con el menor gasto de energía. Un rasgo asombroso de la organización, en vista de todo el trabajo que logra, es el hecho de que la gran masa de sus miembros se compone de predicadores de tiempo parcial, aunque están dedicados de todo corazón a Jehová y le sirven de tiempo cabal. Pero tienen familias, tienen obligaciones, y la mayoría de ellos trabajan parte del tiempo en trabajo seglar y no pueden pasar todo su tiempo directamente en la obra de la organización.
LO QUE SIGNIFICA PASAR ADELANTE
2, 3. (a) ¿Qué significa el pasar adelante con la organización de Jehová? (b) ¿Cuál es la relación entre el adelantar y el estar en la organización por largo tiempo?
2 En la organización de Jehová, el pasar adelante no es asunto de ir delante de otros. No es como en las organizaciones mundanas, donde el adelantar a menudo significa reemplazar a otra persona y dejarla sin trabajo; significa pasar adelante con la organización, encajar, satisfacer las necesidades y poder asumir responsabilidades aumentadas. Pues, debido a la rápida expansión de la organización, continuamente hay demanda de personas de esta clase.
3 El pasar adelante con la organización no significa simplemente ser un asociado inactivo. Los que están en la verdad siempre deben adelantar más rápidamente a medida que transcurra el tiempo. Pablo dijo a los cristianos hebreos, en Hebreos 5:12: “Aunque deberían ser maestros en vista del tiempo, de nuevo necesitan que alguien les enseñe desde el principio las cosas elementales de las sagradas declaraciones formales de Dios; y han venido a ser como quienes necesitan leche, no alimento sólido.”
4. Cómo muestra la ilustración del cuerpo humano la necesidad de adelantar, y cómo estimula el apóstol a adelantar?
4 Pablo también asemejó la organización a un cuerpo humano: “No obstante, Dios compuso el cuerpo, dando más abundante honra a la parte que le hacía falta, para que no hubiese división en el cuerpo, sino que sus miembros tuvieran el mismo cuidado los unos de los otros. Y si un miembro sufre, todos los otros miembros sufren con él; o si un miembro es glorificado, todos los otros miembros se regocijan con él.” (1 Cor. 12:24-26) Cada uno que está en la organización tiene su lugar y ha de ser un miembro útil en ese lugar. No puede seguir siendo un bebé espiritual por largo tiempo. Algunas partes del cuerpo humano no se quedan infantiles mientras el resto del cuerpo crece. Es el espíritu incorrecto, el espíritu del mundo, no querer adelantar. Hoy en día la actitud del mundo es: ‘Hacer tan poco como se pueda, solo lo suficiente para pasarla.’ Pero el apóstol dice, en 1 Timoteo 3:1: “Si algún hombre está haciendo esfuerzos por obtener un puesto de superintendente, está deseoso de una obra excelente.” De modo que hay estímulo para adelantar, para prepararse a fin de asumir responsabilidad. Hay necesidad de personas que asuman responsabilidad.
5. ¿Qué hacen los hombres para alcanzar una meta humana, y cómo debería incitarnos esto?
5 Póngase a pensar en los esfuerzos que hacen los hombres del mundo para lograr su meta. Acerca de tales personas a menudo oímos la expresión de que son “hombres dedicados.” Estudian por años; quizás pasen muchos años en la universidad; quizás se inicien en una organización en un puesto muy bajo; pero trabajan, y su vista constantemente está fija en las metas que se han establecido. No permiten que ninguna otra cosa los desvíe o les estorbe. Aun después de conseguir puestos de responsabilidad superior, no aflojan la mano. Hasta son más vigorosos que nunca... todo esto por una meta humana. ¡Cuánto más celosos, entonces, debemos ser para pasar adelante con una organización que es más grande que la más grande corporación o aun la más grande nación, una organización formada y bendecida por el Creador del universo, y que él usará a través de la eternidad!
6. ¿Qué principio aplica al adelantar, y qué efecto tiene en otros el adelantar en el camino correcto?
6 De modo que ahora estamos siendo entrenados para cosas más grandes, y aplica el principio de que el que es fiel en las cosas pequeñas será fiel en las cosas más grandes. (Luc. 16:10; Mat. 25:21) Nos corresponde ser fieles en todas las cosas, mostrarnos ministros de Dios verdaderamente dedicados, adelantar en el camino correcto, el camino que él bosqueja. Para adelantar así uno no se empuja a costa de otros, sino, más bien, trae consigo a otros también. Considere como ejemplos excelentes las obras que efectuó Jesús al adelantar, y las obras y escritos de Pablo. En virtud de su adelanto se ha ayudado a centenares de miles de personas a adelantar.
7. ¿Se requiere gran habilidad para pasar adelante con la organización? ¿Por qué?
7 Pero hay algunos que no adelantan. ¿A qué se debe esto? Bueno, algunos, por temor de que implique demasiado, evitan el asumir responsabilidades. Les parecen una montaña. Pero en realidad, el pasar adelante con la organización es sencillo. De hecho, es más sencillo adelantar, si vamos a permanecer con la organización, que el seguir tratando de evadir la responsabilidad. Por supuesto, si no adelantamos del todo, con el tiempo nos hallaremos fuera de la organización. No es habilidad sobresaliente, o personalidad, o logro lo que se requiere. El desafío de Satanás a Jehová Dios no fue que no podía hacer criaturas capacitadas, sino que él no podría hallar a ninguna de sus criaturas cuyo corazón fuese plenamente recto hacia Él, que le sirviera de todo corazón y que retuviera plenamente la integridad a Él bajo toda clase de condiciones. No, no es lo que tenemos, sino cómo usamos lo que tenemos, lo que vale para con Dios.
OBEDIENCIA, EL FACTOR BÁSICO
8. ¿Qué se requiere de nosotros para adelantar, y qué suministra el poder para hacerlo?
8 ¿Hay una fórmula “secreta” para pasar adelante con la organización? No. Pero hay una cosa básica que debemos tener. Quizás se haga más claro esto mediante una ilustración. Cuando consideramos el universo nos asombramos por su complejidad. Nos causa temor reverente. No obstante, vemos muchísimo orden. Esto guió a los científicos a creer que hay alguna fórmula sencilla y básica en ello. Descubrieron que toda la materia del universo visible se compone de energía, y esta relación entre la energía y la materia se puede expresar mediante la fórmula sencilla E = mc2. La energía de un determinado pedazo de materia es igual a la masa multiplicada por la velocidad de la luz elevada al cuadrado. ¿Cuál, podemos decir, es el principio básico o fundamental del movimiento de la organización viviente de Jehová? Se puede expresar con una sola palabra: OBEDIENCIA. Obediencia amorosa procedente del corazón es todo. Esta es la fórmula básica sobre la cual descansa y opera la organización. El poder para adelantar proviene por espíritu de Jehová, el cual él derrama abundantemente sobre Su organización de acuerdo con su obediencia a Él. Esto no se debe a la eficacia de los miembros de la organización. La Biblia nos da muchos ejemplos excelentes de esto. Uno es el de Gedeón. Gedeón no fue un hombre famoso por acaudillamiento ni por habilidad sobresaliente. Era agricultor. Pero fue obediente a Jehová Dios, y Jehová lo usó de manera milagrosa para efectuar una gran liberación para Israel.—Jue. 6:15, 16, 27; 7:20-22.
9. ¿Por qué es el adelantar realmente asunto de nuestra relación con Jehová?
9 De modo que el pasar adelante no es proceder de una manera fría y calculada. Es asunto de acercarse más a Jehová, de perfeccionar la obediencia, de buscar y recibir el espíritu de Jehová. Estamos dedicados a él, no a la organización. Él nos coloca en la organización donde nos es propio, y podemos estar bien colocados en ella mediante la obediencia.
10. ¿Cómo puso Jesús el ejemplo de obediencia?
10 Considere el ejemplo excelente de Jesús. Nadie en los cielos salvo Jehová mismo tenía mayor poder y habilidad para efectuar las cosas. Pero con obediencia “se despojó a sí mismo y tomó la forma de esclavo y vino a estar en la semejanza de los hombres. Más que eso, hallándose en figura de hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, sí, muerte en el madero de tormento.” (Fili. 2:7, 8) Aun en la Tierra adelantó, como se expresa: “Aprendió la obediencia por las cosas que sufrió.”—Heb. 5:8.
SE NECESITA ESFUERZO CON ACTITUD POSITIVA
11. ¿Qué cuatro factores perfeccionarán la obediencia en nosotros?
11 Por supuesto, se necesita esfuerzo. Hay cuatro cosas que tenemos que hacer para perfeccionar la obediencia que nos hará adelantar: (1) Estudio de la Palabra de Dios; (2) celo y esfuerzo para aplicar las verdades aprendidas a nuestra vida y nuestro ministerio; (3) el continuamente buscar y seguir la guía del espíritu santo de Jehová; (4) recibir ayuda de otros hermanos de la organización. No hay atajos.
12. (a) ¿Cómo nos ayuda la organización en el asunto de estudio? (b) ¿Cómo puede uno impedir que el estudio sea como un trabajo penoso?
12 ¿Cómo pondremos en vigor estas cuatro cosas? Primero, el estudio: Quizás pensemos en el estudio como trabajo duro, como que envuelve investigación pesada. Pero en la organización de Jehová no hay que gastar mucho tiempo y energía en la investigación, porque hay hermanos en la organización que están asignados a hacer esa mismísima cosa, para ayudarle a usted que no tiene tanto tiempo para esto, y éstos preparan el buen material de La Atalaya y otras publicaciones de la Sociedad. Pero, ¿no estudia usted lo suficiente? Acepte esta sugerencia: A menudo el estudio mejor y más provechoso que uno hace es el que se hace cuando uno lee un número nuevo de La Atalaya o ¡Despertad! o un nuevo libro con el gozo de obtener las nuevas verdades y un punto de vista fresco. Usted recuerda los puntos. Usted habla de manera entusiástica a otros acerca de ellos. Por eso pruebe esto: Tome cada número de La Atalaya o ¡Despertad! al llegar y léala, solo por el gozo y placer que proporciona. Recuerde, usted no se está sentando para estudiar, solo para gozar de la información. Esto aumentará su gozo de la lectura y le dará estímulo para estudio más definido y organizado. Jehová quiere que usted goce de su estudio. Él no quiere que sea trabajo penoso para usted. Él es el Dios feliz, que se complace en proveer todo este rico alimento espiritual.—1 Tim. 1:11; Hech. 20:35.
13. ¿Cómo debemos enfrentarnos al problema de aplicar a nuestra vida las verdades aprendidas, y con qué punto de vista sobre nuestras asignaciones?
13 Segundo, ¿cómo tendrá usted éxito en aplicar a su vida y ministerio las cosas aprendidas? Quizás usted crea que su problema es la excepción. Pero todos tienen obligaciones y responsabilidades. Adopte la actitud positiva. Siéntese y decida cuáles son sus responsabilidades principales. Luego ponga en primer lugar las cosas primeras. Esto calmará su conciencia. Ahora bien, si usted tiene asignaciones en la Escuela del Ministerio Teocrático, conferencias públicas, arreglo de ayuda u otras, cumpla con ellas según les corresponda. No siga aplazándolas. Considérelo un privilegio. Es tan importante para Jehová el que usted cumpla con este privilegio como es el que nuestros hermanos que están en campos de concentración sean fieles. De hecho, esta clase de privilegio es una oportunidad para usted, no solo de ser fiel bajo prueba, sino, además, de edificar a otros para que adelanten. Acepte cada asignación como un escalón para pasar adelante con la organización de Jehová.
14, 15. ¿Cómo abordaría y cumpliría uno, por ejemplo, con una asignación de la escuela del ministerio?
14 Digamos, por ejemplo, que usted tiene una asignación en la Escuela del Ministerio Teocrático. ¿Puede usted efectuar un trabajo verdaderamente bueno con sus propias fuerzas? Por supuesto que no. Aquí aplica el importante requisito tercero. Ore a Jehová pidiendo que su espíritu vigorice su mente. Dios se interesa personalmente en que usted pase adelante. “Terminará [Dios] mismo el entrenamiento de ustedes, él los hará firmes, él los hará fuertes.” (1 Ped. 5:10) Sabiendo que usted tiene su respaldo, póngase a trabajar. ¡Hágalo AHORA! El momento presente es precioso. Una vez que se pierde, no puede recobrarse. Ponga su mente a trabajar. La preocupación acerca de las cosas que no se hacen es mucho más pesada que el hacerlas. De modo que empiece a escribir sus pensamientos, prescindiendo de cuán esparcidos le parezcan. Ahora tiene algo con lo cual trabajar; comienza a sentir que la carga es más ligera. El tema cobra forma en su mente. Muchas veces hemos tenido asignaciones que hallamos difíciles. No sabíamos dónde comenzar. Pero nos pusimos a trabajar; comenzamos a dar los primeros pasos. Pronto, nos enfrascamos en nuestro asunto y descubrimos que, ¡no solo era más fácil de lo que habíamos pensado, sino que realmente era deleitable! El espíritu de Dios cooperó con nuestro espíritu anuente.
15 Cuando usted realmente ha aplicado su mente y esfuerzo a cualquier trabajo, si usted descubre que se necesita ayuda adicional, éste es el tiempo para recurrir a la cuarta provisión, la ayuda de otros. Siguiendo este procedimiento, usted puede cumplir con cualquier asignación teocrática. La aparente montaña llega a ser como un montón de piedras pequeñas.
16, 17. (a) ¿Cómo podemos hacer que las reuniones sean una fuerza que nos ayude a adelantar? (b) Al hallar debilidades en nuestra actividad, ¿qué consejo suministra disciplina oportuna?
16 Los que adelantan son los que se interesan en la congregación. En toda reunión, en todo arreglo, hay algo que promueve el progreso. Asista, escuche, asóciese y participe. Al hacerlo, hágase un autoexamen y vea cómo le va. ¿Se está usted debilitando en uno o más rasgos del servicio de Jehová? Trabaje para vencer esta debilidad. Haga esto y progrese; la madurez y los privilegios aumentarán más aprisa de lo que usted se imaginó alguna vez. Acepte la disciplina del sabio:
17 “Pasé junto al campo del individuo perezoso y junto a la viña del hombre falto de corazón. Y, ¡mira! todo ello producía mala hierba. Ortigas cubrían su mismísima superficie, y su mismo muro de piedra había sido demolido. De modo que procedí a contemplar, yo mismo; empecé a ponerlo en mi corazón; vi, tomé la disciplina: Un poco de dormir, un poco de dormitar, un poco de cruzar las manos para estar acostado, y cual salteador de caminos tu pobreza ciertamente vendrá y tu carencia cual hombre armado.”—Pro. 24:30-34.
UNA NORMA PARA ADELANTAR
18, 19. ¿Qué norma establece Pablo por la cual debemos regirnos, y cómo podemos examinarnos y proceder de acuerdo con esa norma?
18 Pablo establece la norma apropiada para adelantar, en Filipenses 3:13-16: “Olvidando las cosas que quedan atrás y extendiéndome hacia adelante a las cosas más allá, estoy prosiguiendo hacia la meta para el premio de la llamada hacia arriba, llamada de Dios por medio de Cristo Jesús. Nosotros, pues, cuantos somos maduros, seamos de esta actitud mental; y si mentalmente se inclinan ustedes de otro modo en sentido alguno, Dios les revelará la actitud mencionada. De todos modos, hasta donde hemos progresado, sigamos andando ordenadamente en esta misma rutina.”
19 Si nos esforzamos Dios está dispuesto a ayudarnos y a revelarnos la actitud apropiada, la actitud que tuvieron Cristo y Pablo. Y podemos usar el consejo del apóstol para examinar a qué grado hemos progresado. Podemos hacernos la pregunta: ¿En qué he progresado que considero como progreso verdadero? ¿Ha sido en el mundo seglar?, ¿en trabajo que he efectuado?, ¿en dinero que he ganado? ¿Es en una educación universitaria? Exactamente, ¿en qué es? Los testigos de Jehová contestarán: ‘Es en el progreso que he logrado en el servicio de Jehová y en el adelanto que he logrado con su organización.’ ¿Puede usted pronunciar un sermón a las puertas? Eso es adelanto. ¿Cumple usted con sus asignaciones en la Escuela del Ministerio Teocrático o en la reunión de servicio? ¿Es usted un siervo o un auxiliar? ¿Da usted conferencias públicas? Cualquiera de estas cosas es adelanto verdadero. Pablo dice que consideremos a qué grado hemos adelantado, luego que sigamos andando ordenadamente en esta misma rutina, para conservarlo.
20. (a) Si usted cree que no está adelantando, ¿a quién debe examinar? (b) ¿Cómo se ilustra la necesidad de tener paciencia, y cómo puede resultar provechoso para nosotros más tarde el aceptar la disciplina con paciencia?
20 En la organización de Jehová usted no se asciende. Dios es Quien promueve. (Sal. 75:6, 7) Si usted no cree que está adelantando, entonces considérese, examínese usted mismo, no a otra persona. No crea que otra persona lo está deteniendo, que otra persona tiene la culpa, quizás ciertos siervos. Además, sea paciente. No necesariamente son los puestos en la congregación lo que denota progreso, sino las bendiciones de Jehová. Esto aplica particularmente a las hermanas, que no tienen el privilegio de ocupar los puestos que tienen los hermanos en la congregación, pero que reciben bendiciones maravillosas en su trabajo de predicar y ayudar a otros, incluso a sus familias. Piense en Moisés. Después de cuarenta años de entrenamiento bíblico y seglar creyó que era hora de que librara a Israel de la esclavitud. Pero el propósito de Dios fue entrenarlo por otros cuarenta años. (Hech. 7:25, 29, 30) David fue ungido rey por Samuel cuando David solo era un “cachorro,” un jovencito; no obstante, tuvo ante sí años de pruebas severas antes de llenar los requisitos para asumir la gobernación real sobre la nación de Dios, Israel. (Gén. 49:9) Jesús, a fin de llenar los requisitos para la gobernación real celestial del reino de Dios, recibió el más severo entrenamiento y la más severa prueba de todas. Por eso sea paciente, esté dispuesto a recibir el entrenamiento y disciplina de Jehová. (Heb. 12:11) Recuerde, él conoce la formación de nosotros. (Sal. 103:13, 14) Sabe lo que necesita cada uno de nosotros individualmente; a veces nosotros no sabemos que lo necesitamos. El entrenamiento ahora puede salvarnos de errores muy serios después. Deje que el entrenamiento rehaga su personalidad.—Efe. 4:23, 24; Col. 3:9, 10.
AYUDE A OTROS A ADELANTAR
21. (a) ¿Cómo tenemos que ensancharnos, y cómo nos beneficia esto? (b) ¿Cómo podemos desplegar una actitud positiva hacia la actividad de la congregación?
21 Una de las cosas más importantes en el progreso cristiano es que usted no puede adelantar si no se interesa en que otros adelanten. Pedro nos dice: “Ténganle amor a toda la asociación de hermanos.” (1 Ped. 2:17) Por eso, interésese en el progreso de la congregación, pero no solo en el de la congregación... también del circuito y de la entera organización; en nuestro amor tenemos que ‘ensancharnos.’ (2 Cor. 6:12, 13) Manténgase vivo al aspecto mundial de la organización. Practique la verdad; es un modo de vivir. Los que se interesan en otros llegan a conocer muy bien a los hermanos; conocen sus necesidades y problemas; desarrollan empatía. Adelantan a medida que ayudan a otros a pasar adelante con la organización. Esfuércese por un ambiente amistoso en el Salón del Reino y en los lugares de reunión para estudio de libro. Al hablar de las reuniones, del servicio del campo, hágalo con gozo. Tenga la actitud positiva, no la negativa. En Efesios 4:29 se nos aconseja utilizar “todo dicho que sea bueno para la edificación según haya necesidad, para que imparta lo que sea favorable a los oyentes.”
SIERVOS, AYUDEN A OTROS
22, 23. ¿En promover qué en la congregación pueden participar grandemente los siervos, y cuáles son algunas maneras de hacer esto?
22 Los siervos pueden participar grandemente en ayudar a otros a adelantar. Haga cuanto pueda para promover el espíritu correcto en la congregación. En 1 Tesalonicenses 5:23 leemos: “Y sano en todo sentido sea conservado el espíritu y alma y cuerpo de ustedes los hermanos de manera intachable al tiempo de la presencia de nuestro Señor Jesucristo.” De modo que una congregación tiene espíritu, actitud mental, inclinación espiritual. Usted puede discernir este espíritu cuando visita una congregación. Ayude a la congregación a desarrollar la actitud de Cristo.
23 Algunas de las maneras en que se puede hacer esto son: Cuando la asistencia a las reuniones es buena, elogie a la congregación. Hable acerca de las bendiciones, los gozos y los beneficios cuando tantos se reúnen. Si el comentar es bueno, exprese aprecio por la excelente participación y la evidencia de buena preparación. Cuando se mejoran ciertos rasgos de la actividad del servicio, elogie a la congregación y haga comentarios de aprecio en cuanto a ello.
24. ¿Cómo pueden los siervos ayudar a los individuos a adelantar?
24 Muestre interés personal en el progreso de los individuos. Dé a cada uno mayores privilegios según llene los requisitos. Acuérdese de las tres clases de entrenamiento que necesitan los hermanos: Primero, entrenamiento en el servicio del campo; segundo, entrenamiento de organización; tercero, entrenamiento para tratar amorosa y prudentemente con los hermanos.
25. ¿Qué provecho principal obtenemos por adelantar de la manera correcta?
25 Si adelantamos en el camino señalado de Jehová para su organización, estaremos agradando, no a hombres, sino a Aquel que cuenta, nuestro Dios. Su sonrisa significa felicidad y vida. Pablo dijo a los cristianos hebreos: “Ahora bien, que el Dios de paz . . . los equipe con toda cosa buena para hacer su voluntad, efectuando en nosotros, por medio de Jesucristo, lo que es muy agradable a su vista.”—Heb. 13:20, 21.
26. ¿Qué significa el pasar adelante con la organización en cuanto a las perspectivas para el futuro?
26 Haciendo esto, edificaremos un fuerte baluarte de madurez para las pruebas que vengan. Se dará un testimonio más grande. Tendremos un sentimiento de logro y mayor fe en Jehová para asignaciones adicionales. Tendremos abundante gozo, el gozo de ayudar a otros a adelantar, con la gloriosa esperanza de vida en el nuevo orden de cosas, y de ser útiles en una capacidad mucho mayor, cuando se alcance la perfección.