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  • Camerún dice “¡No!” a la libertad de cultos
    La Atalaya 1971 | 1 de enero
    • para obligar a cristianos a violar su conciencia entrenada por la Biblia.

      Hay gran pérdida de consuelo espiritual e instrucción para la gente, dado que los Testigos le han llevado estas mismísimas cosas, y también han participado activamente en enseñar a los camerunenses a leer y escribir.

      La acción de proscribir a los Testigos ha privado a la gente de corazón sincero y honrado del Camerún de las oportunidades de celebrar provechosas consideraciones bíblicas. J. P. Bayemi comenta sobre esta pérdida en L’Effort Camerounais del 14 de junio de 1970:

      “Confesemos esto, por lo menos, a favor de ellos: que de su propia manera han tenido éxito en quitar el monopolio que los temas acerca de dinero, mujeres, hombres o bebidas habían grabado para sí en las conversaciones de los hogares, vecindades y lugares públicos y el transporte, antes de la autorización de los testigos de Jehová. ¡Ah, sí! hubo un tiempo en que era acontecimiento sumamente raro alcanzar a oír a cristianos hablar sobre un tema bíblico.”

      Nada puede elevar más la moralidad de un país que los principios de la Palabra de Dios, la Biblia. Los Testigos dedican gran esfuerzo al desarrollo moral y espiritual de todos los que desean tener más conocimiento de la Biblia. ¡Qué pérdida para el Camerún ahora que no pueden enseñar libremente estas elevadas normas morales los testigos de Jehová!

      USTED PUEDE EXPRESARSE

      ¿Qué le parece a usted este cruel trato de cristianos pacíficos? Su actividad de predicar está proscrita. Hasta el considerar la Biblia privadamente está prohibido. Preciosas libertades personales han sido echadas a un lado. Los testigos de Jehová y otras personas de todas partes del mundo que aman la libertad de cultos no pasan por alto esta acción arbitraria guardando silencio.

      Si usted quisiera añadir su voz a las expresiones de justa indignación provocadas por la acción del gobierno de Camerún contra cristianos amadores de la paz, entonces escriba al embajador del Camerún en el país donde usted vive o en el más cercano, o a los funcionarios encumbrados del gobierno del Camerún alistados en la página anterior.

      Muestre la desilusión que le ha causado esta acción arbitraria. Explique que los Testigos no se meten en la política en ningún lugar y que las acusaciones son infundadas. Haga llamamiento sobre la base del respeto de ellos a la dignidad del hombre y a la libertad de cultos que la Constitución del Camerún garantiza. Haga llamamiento a los funcionarios sobre la base del respeto de ellos al buen nombre de su país y del África. ¿No debe ayudárseles al presidente del Camerún y sus funcionarios encumbrados a darse cuenta de que el resto del mundo toma nota cuando se abusa cruelmente de cristianos inocentes? ¿No deben darse cuenta de que los funcionarios gubernamentales del Camerún no se han hecho más populares con su propio pueblo ni con personas de corazón recto en otras partes del mundo por la manera en que han tratado a cristianos que procuran con empeño la paz?

      Que el llamamiento escrito de usted ayude a restaurar un “Sí” a la libertad de cultos en el Camerún.

  • ‘¡Estoy tan agradecida de su visita!’
    La Atalaya 1971 | 1 de enero
    • ‘¡Estoy tan agradecida de su visita!’

      LA SOCIEDAD Watch Tower de Brooklyn, Nueva York, recibió esta carta de aprecio de una señora que vive en Nueva Zelanda:

      “Estoy escribiendo esta carta para expresar mi aprecio por su maravillosa organización. Tengo veinticinco años y soy madre de tres muchachos. Por algún tiempo quise entender la Santa Biblia. Mi esposo era bautista, y yo no tenía ningún antecedente religioso en absoluto. Cuando él me dio una Biblia comencé a ir a la iglesia con él, pero no aprendía nada acerca de la Biblia allí. Después de nacer nuestros hijos no pudimos ir a la iglesia, y nos sentimos demasiado tímidos para tratar de comunicarnos con los bautistas de la nueva zona adonde nos mudamos.

      “Un día una joven vino a preguntarnos si nos gustaría matricular a nuestros muchachos en la escuela dominical. Concordamos y ella nos dijo que nos notificarían cuando llegara el tiempo para llevarlos. Nunca lo hicieron. Simplemente no estaban interesados a ese grado en nosotros. Los testigos de Jehová nos habían visitado, pero nunca les había escuchado. Aceptaba su literatura, pero jamás la leía. Me parecía que no eran más que unos chiflados.

      “Después de nuestra desilusión con los bautistas, no sabíamos qué hacer. Yo no sabía cómo hallar la religión verdadera y no podía verme yendo a cada iglesia. ¡Eso era imposible! Un día nos sentíamos tan desesperados por entender la Biblia que oramos a Dios pidiendo que nos mostrara la verdad. Tres días después alguien tocó a la puerta y allí estaba un señor que dijo: ‘Soy estudiante de la Biblia.’ Quedé tan emocionada que sencillamente lo halé para que entrara. Acepté con entusiasmo su oferta de ayudarme a aprender la Biblia. No fue sino hasta después de irse que comprendí que era testigo de Jehová, y esto me hizo recelar un poco. Pero comencé a estudiar la Biblia y más tarde también lo hizo mi esposo.

      “Con el transcurso del tiempo sabíamos que habíamos hallado la fe verdadera. Y el día más feliz de mi vida fue cuando ambos nos bautizamos en la Asamblea ‘Paz en la Tierra’ de 1969. Me arrodillo y le doy gracias a Jehová Dios por haber contestado nuestras oraciones aquel día. Sí, le doy gracias porque sus Testigos nos visitaron con regularidad. Sin importar el tiempo que hiciera, venían a ayudarnos. Sí, estaban genuinamente interesados en nosotros.

      “Si aquel Testigo estimado no hubiera salido a predicar aquella mañana, quizás hoy no tuviéramos la verdad de Dios. Los testigos de Jehová nos trajeron el mayor don que cualquier hombre podría traer... la esperanza de vivir con nuestros hijos para siempre en el nuevo orden de Dios.”

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    La Atalaya 1971 | 1 de enero
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      ¿QUÉ LE ESTÁ PASANDO A LA HUMANIDAD?

      ¡La delincuencia está aumentando, la moralidad va desapareciendo, los jóvenes están rebelándose, las organizaciones eclesiásticas desmoronándose, el desembolso para armamentos está ascendiendo, la contaminación del aire y el agua está arruinando la Tierra! ¿Cuál es el significado de todo esto? ¿Continuará el hombre en el camino que lo lleva a su propia destrucción? ¿Hay esperanza alguna para el futuro?

      Lo que le está pasando a la humanidad es significativo porque fue predicho hace mucho en la Biblia junto con el remedio seguro que da Dios. Con la ayuda de la revista La Atalaya usted puede enterarse del significado de todo esto. La Atalaya también suministra consejo edificante basado en las Santas Escrituras para ayudarle a hacerle frente a problemas personales.

      La Atalaya puede llegar a su hogar dos veces al mes por el correo con artículos bíblicos animadores, por solo un dólar al año. Usted puede suscribirse a ella por medio de los testigos de Jehová, quienes estarán ofreciéndola en su ministerio de casa en casa desde enero hasta el fin de abril. O, si desea, puede escribir directamente a la Sociedad Watch Tower. Vea las direcciones en la segunda página de esta revista. Junto con su suscripción usted recibirá gratis los siguientes folletos de treinta y dos páginas: El régimen del hombre está por ceder al régimen de Dios, Salvando a la raza humana... a la manera del Reino y El camino de Dios es el de amor.

      ESTUDIOS DE “LA ATALAYA” PARA LAS SEMANAS

      31 de enero: Los siervos de Jehová son diferentes. Página 9. Cánticos que se usarán: 37, 42.

      7 de febrero: ¿Está perplejo el mundo por el proceder de usted?... ¡Debe estarlo! Página 15. Cánticos que se usarán: 77, 73.

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