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El hacer valer uno su independencia de Dios resulta en calamidadLa Atalaya 1972 | 1 de diciembre
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El hacer valer uno su independencia de Dios resulta en calamidad
“Bien sé yo, oh Jehová, que al hombre terrestre no le pertenece su camino. No le pertenece al hombre que está andando siquiera dirigir su paso.”—Jer. 10:23.
1. ¿Cuándo es correcto que una persona escoja la independencia? Ilustre.
AL NACER los humanos no pueden hacer absolutamente nada de por sí y, por años después, siguen dependiendo de otros. Pero esto no resulta en daño para ellos. Si los niños han de llegar a ser adultos equilibrados, preparados para encargarse de las responsabilidades que tienen que ser asumidas por los que dejan a sus padres para establecer una existencia independiente, necesitan dirección, atención y disciplina. Dice el proverbio: “La vara y la censura son lo que da sabiduría; pero el muchacho que se deja a rienda suelta le estará causando vergüenza a su madre.” (Pro. 29:15) Por otra parte, el depender enteramente de los padres sería del todo indeseable y contranatural en el caso de hijos e hijas adultos que pueden desempeñar adecuadamente sus responsabilidades en el arreglo matrimonial. La dependencia en este caso también estaría fuera de armonía con lo que Dios declaró cuando instituyó el matrimonio: “El hombre dejará a su padre y a su madre y tiene que adherirse a su esposa y tienen que llegar a ser una sola carne.” (Gén. 2:24) Es obvio, entonces, que las necesidades y circunstancias del individuo determinan si puede escoger correctamente el ser independiente respecto de otra persona.
2. ¿Puede una persona seguir correctamente un derrotero de independencia con referencia a Dios?
2 Mientras que lo correcto de la independencia en la edad adulta y la dependencia completa en la infancia se ven desde luego, a muchos les parece difícil aceptar el hecho de que deben someterse a Dios. Desean seguir sus propias normas. Pero, ¿son sus circunstancias tales que puedan seguir correctamente un derrotero de independencia en cuanto al Creador? Las palabras del profeta Jeremías suministran una respuesta a esta pregunta: “Bien sé yo, oh Jehová, que al hombre terrestre no le pertenece su camino. No le pertenece al hombre que está andando siquiera dirigir su paso.”—Jer. 10:23.
EL DEPENDER DE DIOS ES RAZONABLE Y APROPIADO
3. ¿Quién tiene el derecho absoluto de determinar cómo debería comportarse el hombre, y por qué?
3 En virtud de ser el Creador, Dios, no la criatura hombre, tiene el derecho absoluto de fijar la norma por la cual deben dirigir sus pasos sus criaturas inteligentes. Preguntas que hacen pensar, suscitadas muchos siglos atrás, enfatizan este hecho, a saber: “¿Se encarecerá el hacha sobre el que corta con ella, o se engrandecerá la sierra sobre el que la mueve de acá para allá, como si el bastón moviera de acá para allá a los que lo levantan en alto, como si la vara levantase en alto al que no es leño?” (Isa. 10:15) “Oh hombre, ¿quién, pues, eres tú realmente para que repliques contra Dios? ¿Acaso la cosa moldeada dirá al que la moldeó: ‘¿Por qué me hiciste de esta manera?’ ¿Qué? ¿No tiene el alfarero autoridad sobre el barro para hacer de la misma masa un vaso para uso honroso, otro para uso deshonroso?” (Rom. 9:20, 21) Es el colmo de la presunción el que ‘hombres de barro’ insistan en hacer valer su independencia de Dios. Es tan irrazonable como sostener que un fabricante no tiene derecho de dar instrucciones en cuanto al uso de sus productos.
4. ¿Por qué medio grabó Dios en la mente de Adán el hecho de que el hombre no puede pasar por alto sin peligro la norma divina de lo bueno y lo malo?
4 Al mismísimo primer hombre, Adán, Dios indicó que el desatender la norma divina acerca de la conducta correcta conduciría a la muerte. Jehová Dios le dijo a Adán: “De todo árbol del jardín puedes comer hasta quedar satisfecho. Pero en cuanto al árbol del conocimiento de lo bueno y lo malo no debes comer de él, porque en el día que comas de él positivamente morirás.” (Gén. 2:16, 17) Puesto que evidentemente no había nada perjudicial en el fruto prohibido mismo, la prohibición de Dios acerca de él era la única cosa que hacía malo el participar de él. Por consiguiente, la desobediencia de parte de Adán habría significado que se ponía de parte de su esposa en comer de ese fruto. Se unió a su esposa, la cual hizo valer una independencia de Dios, el determinar por uno mismo lo que era bueno y lo que era malo en vez de acatar el juicio de Dios en este asunto.
5. ¿Por qué era correcto que Adán fuera sumiso?
5 Debe notarse que no había nada irrazonable en cuanto al mandato de Dios, y por eso no había nada indeseable acerca de que Adán permaneciera sumiso a su Creador. No estaba aguantando opresión insoportable que hubiera hecho parecer que la independencia y la muerte eran preferibles a la dependencia y la vida. El mandato de Dios no había obligado a Adán a entrar en una situación difícil. Había muchos otros árboles frutales de los cuales podía comer hasta quedar satisfecho. Todas las cosas que Adán tenía —su vida, trabajo productivo y el hermoso hogar-jardín que compartía con su esposa— eran dones de Dios y expresiones del amor de Dios para él. De las obras creativas a su alrededor Adán fácilmente podía ver que la sabiduría de Jehová Dios era muy superior a su propia sabiduría. Sobre la base de lo que su Dios sabio y amoroso había hecho, Adán podía estar seguro de que al acatar la decisión de su Creador tocante a lo bueno y lo malo resultaría en su felicidad y bienestar continuos.
NINGUNA CRIATURA INTELIGENTE PUEDE HACER VALER SIN PELIGRO SU INDEPENDENCIA DE DIOS
6, 7. (a) ¿Qué hizo que Eva pensara que la independencia de Dios era deseable? (b) ¿Por qué le creyó Eva a la serpiente?
6 Como su esposo Adán, Eva tenía toda razón para permanecer sumisa a Dios. Compartía las mismas bendiciones. Pero Eva fue la primera humana a quien se le hizo creer que el desobedecer a Dios era el derrotero mejor. En una ocasión, mientras no estaba en compañía de su esposo, oyó una voz. No era la voz de su esposo ni la de Dios, sino la voz de una serpiente. Eva no se alejó atemorizada, pues Dios con anterioridad les había dado a ella y a su esposo dominio sobre la creación animal, incluso las serpientes. (Gén. 1:28) De modo que ella escuchó. La serpiente preguntó: “¿Es realmente el caso que Dios dijo que ustedes no deben comer de todo árbol del jardín?” Eva contestó correctamente, porque estaba informada cabalmente acerca del fruto prohibido y de la pena de muerte asociada con él. Pero la serpiente contradijo a Dios, sugiriendo que Eva estaba siendo mantenida en ignorancia y que Dios no pondría en vigor su ley ejecutando al transgresor.—Gén. 3:1-5.
7 Completamente engañada, Eva cedió a la ambición egoísta de ser como Dios en cuanto a determinar por sí misma lo que era bueno y lo que era malo, y comió el fruto prohibido. Evidentemente dos cosas hicieron que Eva pensara que la serpiente estaba diciendo la verdad: (1) Según los sentidos de ella era evidente que el fruto del árbol era bueno para alimento, y (2) la extremada cautela de la serpiente hizo parecer que esta criatura no podría ser fuente de información incorrecta. Evidentemente no habiendo experimentado efectos adversos como resultado de su transgresión, Eva confiadamente abordó a su esposo y lo convenció de comer el fruto.—Gén. 3:1, 6.
8. ¿Quién hizo parecer que la serpiente hablaba?
8 Contrario a lo que Eva esperaba, el derrotero de independencia de Dios resultó ser calamitoso. Resultó en vergüenza, en la pérdida de un hermoso hogar paradisíaco, en dolor físico y emocional, y finalmente en la muerte. (Gén. 3:7, 16-19) Las palabras de la serpiente resultaron ser una mentira maliciosa. Dado que ésta es la primera mentira registrada, el que dijo esa mentira, no la serpiente literal sino el que hizo parecer que estaba hablando la serpiente, sería el padre u originador de las mentiras. El Hijo de Dios, Cristo Jesús, reveló la identidad de éste cuando dijo a los que trataban de matarlo: “Ustedes proceden de su padre el Diablo, y quieren hacer los deseos de su padre. Ese era homicida cuando principió, y no permaneció firme en la verdad, porque la verdad no está en él. Cuando habla la mentira, habla según su propia disposición, porque él es mentiroso y el padre de la mentira.” (Juan 8:44) En el libro bíblico de Revelación, se refiere a esta criatura espíritu invisible como el “gran dragón, la serpiente original, el que es llamado Diablo y Satanás.” (Rev. 12:9) Se le describe simbólicamente como un “dragón grande de color de fuego, con siete cabezas y diez cuernos y sobre sus cabezas siete diademas; y su cola arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo.”—Rev. 12:3, 4.
9. ¿Qué es significativo acerca del hecho de que la cola del dragón arrastra la tercera parte de las estrellas?
9 El hecho de que la cola del dragón arrastra la tercera parte de las estrellas del cielo indica que el Diablo evidentemente tuvo éxito en influir en un número considerable de ángeles, “estrellas de la mañana” (Job 38:7), para que se rebelaran contra Dios. La evidencia bíblica muestra que esto sucedió en los días de Noé, un descendiente lejano de Adán. En aquel tiempo la mayoría de la humanidad rehusó someterse a la voluntad de Dios, y numerosos ángeles, en oposición al propósito divino respecto a ellos, “abandonaron su propio y debido lugar de habitación” en los cielos y materializaron cuerpos humanos para poder tener relaciones sexuales con hermosas mujeres en la Tierra. (Jud. 6; Gén. 6:1, 2) Al hacer valer su independencia de esta manera, estos ángeles emprendieron un derrotero que condujo a desastre.
10, 11. ¿Qué les sucedió a los ángeles desobedientes después de haberse desmaterializado?
10 Cuando Jehová Dios causó un diluvio que destruyó a todos los humanos salvo a Noé y a siete miembros de su familia inmediata, estos ángeles fueron obligados a desmaterializarse y regresar a la región de los espíritus. Pero no recobraron la posición que habían abandonado. Dios los degradó a una condición muy baja, llamada “Tártaro.” Respecto a esto la Biblia nos dice: “Dios no se contuvo de castigar a los ángeles que pecaron, sino que, echándolos en el Tártaro, los entregó a hoyos de densa oscuridad para ser reservados para juicio; y no se contuvo de castigar a un mundo antiguo, pero guardó en seguridad a Noé, predicador de justicia, con otras siete personas cuando trajo un diluvio sobre un mundo de gente impía.” (2 Ped. 2:4, 5) “A los ángeles que no guardaron su posición original, sino que abandonaron su propio y debido lugar de habitación, los ha reservado con cadenas sempiternas bajo densa oscuridad para el juicio del gran día.” (Jud. 6) En vez de conseguir libertad por su desobediencia, estos ángeles llegaron a estar bajo una forma de restricción. Es por eso que el apóstol Pedro al hablar de ellos dice que son “los espíritus en prisión, que en un tiempo habían sido desobedientes cuando la paciencia de Dios estaba esperando en los días de Noé, mientras se construía el arca, en la cual unas pocas personas, es decir, ocho almas, fueron llevadas a salvo a través del agua.” (1 Ped. 3:19, 20) Evidentemente es en vista de esta forma de encarcelamiento que ya no pueden materializarse y vivir como esposos con mujeres.
11 El registro de Génesis no revela si Noé y su familia conocían estos detalles acerca del castigo que se les dio a los ángeles desobedientes. Pero la destrucción del mundo rebelde de la humanidad dio testimonio amplio al hecho de que ninguna criatura inteligente podría hacer valer su independencia de Dios sin sufrir calamidad.
INDEPENDENCIA DE DIOS LLEVA A DEGRADACIÓN
12. ¿Cómo comenzó de nuevo la rebelión después del Diluvio?
12 Apenas se puede creer que alguien haya buscado independencia de Dios después de eso. Sin embargo eso es exactamente lo que sucedió. Satanás el Diablo halló un instrumento anuente en la persona de Nemrod, un bisnieto de Noé. Refiriéndose a Nemrod, el registro de Génesis declara: “Él dio comienzo a lo de hacerse un poderoso en la tierra. Él se exhibió poderoso cazador en oposición a Jehová. . . . Y el principio de su reino llegó a ser Babel y Erec y Acad y Calne, en la tierra de Sinar.” (Gén. 10:8-10) Puesto que Babel estuvo incluida en el dominio original de Nemrod, debe haber sido bajo su dirección que se comenzó la edificación de la ciudad y su torre. Se emprendió este proyecto en desafío de Dios, pues el propósito divino era que la humanidad se esparciera por todas partes de la Tierra. Jehová Dios frustró los planes de los edificadores al confundir su lenguaje. Ya no pudiendo entenderse unos a otros, gradualmente abandonaron la edificación de la ciudad, y fueron esparcidos.—Gén. 11:1-9.
13. ¿Qué evidencia hay de que los individuos que se unieron a Nemrod en la rebelión contra Dios no estaban ignorantes de Sus actividades?
13 Puesto que Noé vivió por 350 años después del diluvio (Gén. 9:28), se desprende lógicamente que todavía vivía cuando los esfuerzos de su bisnieto Nemrod quedaron frustrados en Babel. Por lo tanto, la dispersión de la gente debe haber acontecido en un tiempo cuando se conocía la verdad acerca de acontecimientos más tempranos, como el Diluvio. Indica esto el hecho de que las mitologías de los antiguos hacen eco al relato bíblico, pero en una forma politeísta, tergiversada. Los mitos hablan de amoríos que tuvieron dioses y mujeres terrestres, evidentemente aludiendo así a lo que hicieron los ángeles desobedientes antes del Diluvio. Casi no hay una sola nación en la Tierra que no tenga una leyenda acerca de un diluvio global. Además, en los mitos se encuentran rasgos del incidente de la edificación de la torre.
14. ¿A qué prácticas degradantes llevó a la gente la rebelión post-diluviana?
14 Todo esto sugiere que los pueblos esparcidos sabían acerca del Dios verdadero y sus actividades. Sin embargo, puesto que se habían rebelado contra él, ellos, por su propia selección, se hallaban sin Su dirección y guía. ¿Obró esto para su beneficio? Los hechos de la historia contestan que No. La gente esparcida y sus descendientes comenzaron a hacer dioses idolátricos de madera, piedra y otro material. Se postraban ante estas imágenes y pedían ayuda a dioses sin vida. En relación con la adoración de estas deidades comenzaron a participar en prácticas repugnantes como la prostitución ceremonial, sacrificio de niños, borrachera y autolaceración hasta el grado de hacer que fluyera sangre. (Compare con 1 Reyes 14:24; 18:28; Jeremías 19:3-5; Oseas 4:13, 14; Amós 2:8.) La degradación a la que los hombres alejados de Dios se hundieron la describe bien el apóstol Pablo en el siguiente pasaje de su carta a los romanos (Rom. 1:21-31):
“Aunque conocieron a Dios, no lo glorificaron como Dios ni le dieron gracias, sino que se hicieron tontos en sus razonamientos y se les oscureció su corazón fatuo. Aunque afirmaban que eran sabios, se hicieron necios y tornaron la gloria del Dios incorruptible en algo semejante a la imagen del hombre corruptible y de aves y de cuadrúpedos y de criaturas que se arrastran.
“Por lo tanto, en conformidad con los deseos de sus corazones, Dios los entregó a la inmundicia, para que se deshonrasen sus cuerpos entre sí, aun a los que cambiaron la verdad de Dios por la mentira y veneraron y rindieron servicio sagrado a la creación más bien que a Aquel que creó, que es bendito para siempre. Amén. Por eso es que Dios los entregó a apetitos sexuales vergonzosos, porque sus hembras cambiaron el uso natural de sí mismas a uno que es contrario a la naturaleza; y así mismo hasta los varones dejaron el uso natural de la hembra y se encendieron violentamente en su lascivia unos para con otros, varones con varones, obrando lo que es obsceno y recibiendo en sí mismos la recompensa completa, que se les debía por su error.
“Y así como no aprobaron el tener a Dios en conocimiento exacto, Dios los entregó a un estado mental desaprobado, para que hiciesen las cosas que no son apropiadas, llenos como estaban de toda injusticia, iniquidad, codicia, nocividad, estando llenos de envidia, asesinato, contienda, engaño, genio malicioso, siendo susurradores, difamadores solapados, odiadores de Dios, insolentes, altivos, presumidos, inventores de cosas perjudiciales, desobedientes a los padres, sin entendimiento, falsos en los acuerdos, sin tener cariño natural, despiadados.”
15. ¿Todavía existen las prácticas degradantes que describió el apóstol Pablo?
15 Hoy no hay necesidad de que se nos recuerde que las mismísimas cosas que mencionó el apóstol Pablo todavía existen y han creado un ambiente de temor y desconfianza. Todos los días el desprecio a la norma divina de lo bueno y lo malo amenaza a la vida, la felicidad y el bienestar de otros. El robo, la violación y el asalto a manos de criminales, delincuentes y pervertidos son acontecimientos comunes. La inmoralidad sexual ha resultado en la propagación de repugnantes enfermedades venéreas, ha desbaratado familias, ha privado a niños de necesaria guía paternal y ha contribuido a la destrucción de vida por medio de los abortos. Daño físico, emocional y mental está en evidencia entre los que han hecho caso omiso del Creador. El desenvolvimiento de la ley inmutable de Dios se ve claramente: “Cualquier cosa que el hombre esté sembrando, esto también segará.”—Gál. 6:7.
BENEFICIOS DE OBEDIENCIA A DIOS
16, 17. ¿Qué beneficios resultan de la obediencia a la ley de Dios?
16 Por otra parte, beneficios duraderos resultan de adherirse fielmente a la ley de Dios. Esto se debe a que el Todopoderoso, siendo un Dios de amor (1 Juan 4:8) e infinitamente sabio (Rom. 16:27), ha dado solo las leyes que servirían los mejores intereses del hombre. Estas leyes están diseñadas para proteger de daño al hombre y para encargarse de que reciba el bien. Todas las leyes divinas que gobiernan las relaciones humanas se basan en el amor al prójimo. Como escribió el apóstol Pablo: “No deban a nadie ni una sola cosa, salvo el amarse los unos a los otros; porque el que ama a su semejante ha cumplido la ley. Porque el código de la ley: ‘No debes cometer adulterio, No debes asesinar, No debes hurtar, No debes codiciar,’ y cualquier otro mandamiento que haya, se resume en esta palabra, a saber: ‘Tienes que amar a tu prójimo como a ti mismo.’ El amor no obra mal al prójimo.”—Rom. 13:8-10.
17 Ciertamente ninguna persona razonable puede negar que se beneficiaría si los hombres en todas partes manifestaran amor genuino al prójimo. Sí, solo es por sujetarse a la ley de Dios que los hombres pueden tener felicidad, paz y seguridad. Un cuidadoso estudiante de ley, el jurisconsulto inglés William Blackstone, fue impelido a concluir: “[Dios] ha conectado tan íntimamente, ha entretejido tan inseparablemente las leyes de la justicia eterna con la felicidad de cada individuo, que ésta no se puede alcanzar salvo observando las primeras; y, si las primeras se obedecen con exactitud, eso no puede menos que inducir la última.” Sabiendo que la ley de Dios es para nuestro provecho, debemos sentirnos impulsados a expresar aprecio por ella, como lo hizo el salmista con estas palabras: “Siete veces en el día te he alabado a causa de tus justas decisiones judiciales. Paz abundante pertenece a los que aman tu ley, y no hay para ellos tropiezo.”—Sal. 119:164, 165.
PERMANECIENDO SUMISO A DIOS
18. ¿Por qué es esencial tener un conocimiento cabal de la Biblia para que una persona agrade a Dios?
18 Por supuesto, si un individuo ha de disfrutar de las bendiciones que provienen de adherencia fiel a la norma de Dios de lo bueno y lo malo, es preciso que tenga un conocimiento cabal de esta norma según se revela en la Biblia. Obviamente, una persona que jamás ha examinado la norma divina o que simplemente ha aceptado la palabra de alguna otra persona respecto a ella no puede estar segura de que se está comportando correctamente desde el punto de vista de Dios. Dice el proverbio: “Existe un camino que es recto ante el hombre, pero los caminos de la muerte son su fin después.”—Pro. 14:12.
19. (a) ¿Por qué no basta el conocimiento de por sí para que uno siga siendo un siervo aprobado de Jehová? (b) ¿Qué se necesita además de conocimiento?
19 Sin embargo, el conocimiento no basta para que una persona continúe siendo sumisa a su Creador. Adán, por ejemplo, sabía que el participar del fruto prohibido significaría muerte para él; él “no fue engañado.” (1 Tim. 2:14) No obstante, Adán transgredió deliberadamente la ley de Dios. ¿Por qué? Porque consideró de mayor valor su relación con su esposa pecaminosa que su relación con su Creador. Esto ilustra que un individuo puede ser y seguir siendo un siervo aprobado de Dios solo si tiene un amor inquebrantable a su Creador, un amor que sobrepuja todo otro afecto. Esto significa que estaría anuente a sacrificar todo, aun su propia vida, por permanecer obediente a Dios cuando premuras exteriores dificultaran mucho el proceder así. ¿Tiene usted semejante amor? Su bienestar duradero depende de tenerlo y mantenerlo. Como dijo Cristo Jesús: “El que tiene afecto a su alma la destruye, pero el que odia su alma en este mundo a resguardará para vida eterna.”—Juan 12:25.
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Abandonando el derrotero de independenciaLa Atalaya 1972 | 1 de diciembre
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Abandonando el derrotero de independencia
“‘Vuelvan a mí,’ es la expresión de Jehová de los ejércitos, ‘y yo volveré ustedes.’”—Zac. 1:3.
1. ¿Qué clase de obediencia desea Jehová de parte de sus criaturas inteligentes?
JEHOVÁ DIOS jamás ha obligado a alguien a que le sirva. Desea obediencia voluntaria de sus criaturas inteligentes, obediencia basada en amor a él y en un aprecio por lo que ha hecho a favor de ellas. (Deu. 30:11-16; 1 Juan 4:8-10; 5:2, 3) Como les dijo Moisés a los israelitas en las llanuras del desierto de Moab: “De veras tomo yo los cielos y la tierra como testigos contra ustedes hoy, de que he puesto delante de ti la vida y la muerte, la bendición y la invocación de mal; y tienes que escoger la vida a fin de que te mantengas vivo, tú y tu prole, amando a Jehová tu Dios, escuchando su voz y adhiriéndote a él; porque él es tu vida y la longitud de tus días, para que mores sobre el suelo que Jehová juró a tus antepasados Abrahán, Isaac y Jacob que les daría.”—Deu. 30:19, 20.
2. ¿Cómo reaccionan los ángeles cuando las personas se someten voluntariamente a Jehová Dios, y por qué?
2 Mucho antes que el hombre fuera creado, millones de ángeles se deleitaban en servir a Jehová Dios y continúan haciéndolo. (Job 38:4-7; Dan. 7:10; Heb. 12:22) Sus sentimientos son parecidos a los que expresaron los veinticuatro ancianos que el apóstol Juan vio en visión, los cuales decían: “Digno eres tú, Jehová, nuestro Dios mismo, de recibir la gloria y la honra y el poder, porque tú creaste todas las cosas, y a causa de tu voluntad existieron y fueron creadas.” (Rev. 4:11) Reconociendo que la obediencia a Dios es el único derrotero correcto y que resulta en bendiciones duraderas, los ángeles fieles se complacen en ver a los humanos abandonar el derrotero de independencia y someterse voluntariamente al Creador. Dijo Cristo Jesús: “Surge gozo entre los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.”—Luc. 15:10.
3. ¿Cómo mostró Jehová Dios que quería que el Israel infiel volviera a él?
3 El regocijo de los ángeles está en pleno acuerdo con los propios sentimientos de Dios en el asunto. Vez tras vez Jehová pidió a los israelitas desobedientes que abandonaran sus caminos inicuos: “Busquen a Jehová mientras pueda ser hallado. Clamen a él mientras resulte estar cerca. Deje el inicuo su camino, y el hombre perjudicial sus pensamientos; y vuélvase a Jehová, quien tendrá misericordia de él, y a nuestro Dios, porque él perdonará en gran manera.” (Isa. 55:6, 7) “No me deleito en la muerte del inicuo, sino en que alguien inicuo se vuelva de su camino y realmente siga viviendo. Vuélvanse, vuélvanse de sus malos caminos, pues ¿por qué es que deberían morir, oh casa de Israel?” (Eze. 33:11) “‘Vuelvan a mí, y yo volveré a ustedes,’ ha dicho Jehová de los ejércitos.”—Mal. 3:7.
4. ¿Estaban limitadas al Israel de la antigüedad las oportunidades para abandonar la injusticia?
4 Las oportunidades para evitar la ejecución de la venganza divina abandonando la maldad no estaban limitadas a la nación de Israel. Por medio del profeta Jeremías, Jehová declaró: “En cualquier momento que yo hable contra una nación y contra un reino para desarraigarla y para derruirla y para destruirla, y esa nación realmente se vuelva de su maldad contra la cual hablé, yo también ciertamente sentiré pesar por la calamidad que había pensado ejecutar en ella.” (Jer. 18:7, 8) De modo similar, el apóstol Pedro recordó a los cristianos: “No es lento Jehová respecto a su promesa, según lo que algunos consideran lentitud, sino que es paciente para con ustedes porque no desea que ninguno sea destruido, sino desea que todos alcancen el arrepentimiento.”—2 Ped. 3:9.
LA ACTITUD DE LAS PERSONAS JUSTAS EN SU PROPIA ESTIMACIÓN
5. ¿Qué actitud han adoptado a menudo los humanos para con los que se han arrepentido de su maldad?
5 Sin embargo, los humanos imperfectos a menudo no han imitado a Jehová Dios y a los santos ángeles en cuanto a regocijarse a causa de los que abandonaron el derrotero de independencia y llegaron a ser hacedores de la voluntad divina. Durante el ministerio de Cristo Jesús y de su precursor Juan el Bautista, por ejemplo, prevaleció una actitud inclemente entre los líderes religiosos del judaísmo justos en su propia estimación. Cuando recaudadores de impuestos y personas que tenían la reputación de ser pecadoras, como las rameras, se arrepentían de sus transgresiones contra Dios y eran sumergidas por Juan el Bautista, estos líderes religiosos no se regocijaron ni fueron impelidos a creer a Juan. (Mat. 21:32; Luc. 3:12; 7:29, 30) Más tarde, cuando Cristo Jesús rindió ayuda espiritual a recaudadores de impuestos y pecadores despreciados, los escribas y fariseos expresaron su desaprobación.—Luc. 5:27-31.
6. ¿Cómo corrigió Jesús el punto de vista incorrecto de los escribas y fariseos?
6 En una ocasión recaudadores de impuestos y pecadores seguían acercándose a Jesús para oír lo que decía. “Por consiguiente, tanto los fariseos como los escribas seguían murmurando, diciendo: ‘Este hombre recibe con gusto a pecadores y come con ellos.’” Contestando la queja de ellos, Jesús dio tres ilustraciones, cada una de ellas relatando el recobro de lo que se había perdido y el regocijo que resultaba del recobro. (Luc. 15:1-10) La última de estas ilustraciones gira en torno de tres personajes principales, un padre y sus dos hijos. El padre representa a Jehová Dios; el hijo mayor, a los escribas y fariseos, y el hijo más joven, a los pecadores y recaudadores de impuestos. Dado que eran judíos, los pecadores, los recaudadores de impuestos, los fariseos y los escribas todos eran hermanos y miembros de una nación que estaba en relación con Dios. Pero los judíos no habían guardado perfectamente la ley de Dios y, por lo tanto, todos ellos, incluso los fariseos y escribas santurrones, necesitaban arrepentirse y entrar en una relación correcta con Dios aceptando a Cristo Jesús. (Compare con Hechos 2:38; Romanos 3:9-12.) La ilustración de Jesús reflejó así circunstancias reales y mostró lo que se requería para conseguir el perdón de Dios. Teniendo presente esto, podemos leer las palabras de Jesús, según se hallan en Lucas, capítulo 15, versículos 11 al 32 (New World Translation):
7. ¿Qué hizo el hijo más joven de la ilustración de Jesús, y cómo le fue como resultado?
7 “Cierto hombre tenía dos hijos. Y el más joven de ellos dijo a su padre: ‘Padre, dame la parte que me corresponde de la hacienda.’ Entonces él les dividió su medio de vivir. Más tarde, no muchos días después, el hijo más joven juntó todas las cosas y viajó al extranjero a un país lejano, y allí malgastó su hacienda viviendo una vida disoluta. Cuando lo hubo gastado todo, ocurrió una severa hambre por todo aquel país, y él comenzó a padecer necesidad. Hasta fue y se colocó con uno de los ciudadanos de aquel país, y éste lo envió a sus campos a guardar puercos. Y deseaba saciarse de las algarrobas que comían los puercos, y nadie le daba nada.
8. (a) ¿Qué decisión tomó el hijo más joven cuando recobró el juicio? (b) ¿Cómo lo recibió su padre?
8 “Cuando recobró el juicio, dijo: ‘¡Cuántos asalariados de mi padre tienen pan en abundancia, mientras yo aquí perezco de hambre! Me levantaré y haré el viaje a mi padre y le diré: “Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo. Hazme como uno de tus asalariados.”’ De modo que se levantó y fue a su padre. Mientras estaba él todavía lejos, su padre alcanzó a verlo y se enterneció, y corrió y se echó sobre su cuello y lo besó tiernamente. Entonces le dijo el hijo: ‘Padre, he pecado contra el cielo y contra ti. Ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo. Hazme como uno de tus asalariados.’ Pero el padre dijo a sus esclavos: “¡Pronto! saquen una ropa larga, la mejor, y vístanlo con ella, y pónganle un anillo en la mano y sandalias en los pies. Y traigan el torillo cebado, degüéllenlo y comamos y gocemos, porque este mi hijo estaba muerto y volvió a vivir; estaba perdido y fue hallado.’ Y comenzaron a gozar.
9. ¿Cómo reaccionó el hijo mayor a la bienvenida que se le extendió a su hermano menor?
9 “Bueno, su hijo mayor estaba en el campo; y a medida que venía y se acercaba a la casa oyó un concierto de música y danzas. De modo que llamó a sí a uno de los sirvientes e inquirió qué significaban estas cosas. Él le dijo: ‘Tu hermano ha venido, y tu padre degolló el torillo cebado, porque lo recobró en buena salud.’ Pero él se airó y no quiso entrar. Entonces salió su padre y se puso a suplicarle. En respuesta, dijo él a su padre: ‘Hace ya tantos años que trabajo para ti como un esclavo y ni una sola vez transgredí tu mandamiento, y no obstante, a mí ni una sola vez me diste un cabrito para que gozara con mis amigos. Mas luego que llegó este tu hijo que se comió tu medio de vivir con las rameras, le degollaste el torillo cebado.’ Entonces él le dijo: ‘Hijo, tú siempre has estado conmigo, y todas las cosas que son mías son tuyas; pero simplemente teníamos que gozar y tener regocijo, porque este tu hermano estaba muerto y llegó a vivir, y estaba perdido y fue hallado.’”
LA CONDICIÓN DE LOS QUE SE HAN EXTRAVIADO
10. ¿Cómo son muchos hoy día semejantes al hijo más joven de la ilustración de Jesús?
10 Un considerable número de personas han emprendido hoy día un derrotero muy semejante al del hijo más joven cuando dejó la casa de su padre.a Algunos, para evitar maltrato o persecución temporero de parte de amigos, parientes u otros, han abandonado la adoración verdadera. Otros han preferido el derrotero de independencia de Dios a causa de querer participar en las mismísimas cosas que él condena, incluso inmoralidad sexual, latrocinio y borrachera. (1 Cor. 6:9, 10) Todavía otros, creyendo que el servir a Jehová quita demasiado tiempo de la búsqueda de placer o que le impide a uno adelantar en el mundo, han dejado de estudiar la Biblia. Sin importar qué otras razones haya, los que se han retraído de hacer la voluntad divina o que han dejado de hacerla muestran que para ellos hay algo más importante o de más valor que el servir fielmente a su Creador.
11, 12. ¿Cuál es la condición de los que se han extraviado?
11 Todas esas personas tienen hambre espiritual y están muy alejadas de Jehová Dios, como si estuvieran en un país lejano. Son parte del mundo de Satanás y están en esclavitud a él, pues “el mundo entero está yaciendo en el poder del inicuo.” (1 Juan 5:19) En comparación con el servicio del Creador, su esclavitud a Satanás y su mundo no es más remuneradora que lo que hubiera sido el trabajo de guardar puercos (animales que eran inmundos según las estipulaciones de la ley mosaica) para un judío en el tiempo del ministerio terrestre de Jesús. Los que han optado por llevar una vida corrompida como adúlteros, fornicadores, homosexuales, ladrones y cosas semejantes, se encuentran en un estado de ruina y degradación espirituales.
12 Aunque muchos que ya no se asocian con el pueblo de Dios quizás no estén llevando una vida corrompida, no obstante, han perdido mucho. Desprovista de espiritualidad, su vida a menudo es una de frustración constante. Muy frecuentemente su deseo de adelantarse en el mundo los lleva a adoptar prácticas comerciales que carecen de honradez. (Compare con Proverbios 28:20.) A menudo dedican tanto tiempo y energía para mantener una posición en el mundo que sus hijos se quedan sin guía y disciplina necesarias. Como resultado muchos con el tiempo tienen que aguantar el dolor que proviene de ver a sus hijos emprender un derrotero descarriado y arruinar sus vidas. La experiencia de los que se han envuelto en cosas materiales al grado de excluir la adoración verdadera, se resume bien por el apóstol Pablo como sigue: “Los que están determinados a ser ricos caen en tentación y en un lazo y en muchos deseos insensatos y dañinos, que precipitan a los hombres en destrucción y ruina. Porque el amor al dinero es raíz de toda suerte de cosas perjudiciales, y haciendo esfuerzos por realizar este amor algunos han sido descarriados de la fe y se han acribillado con muchos dolores.”—1 Tim. 6:9, 10.
REGRESANDO A JEHOVÁ
13. ¿Qué pueden hacer los que se ven en la posición del hijo pródigo para mejorar su situación?
13 Sin embargo, no es necesario que los que se ven en la posición del hijo pródigo permanezcan en esta condición desdichada. Pues, lo mismo que el hijo pródigo, pueden esforzarse por regresar a la casa de su Padre y a Su servicio. Esto incluye arrepentimiento sincero, abandonando su derrotero independiente y pidiendo a Dios perdón de su pecado. Esto concuerda con las palabras del profeta Jeremías acerca de los que no habían experimentado el perdón de Dios, sino su juicio adverso por no arrepentirse de sus transgresiones: “De veras escudriñemos nuestros caminos y explorémoslos, y volvámonos, sí, hasta Jehová. Levantemos nuestro corazón junto con las palmas de nuestras manos a Dios en los cielos: ‘Nosotros mismos hemos transgredido, y nos hemos portado rebeldemente.’”—Lam. 3:40-42.
14. ¿Qué sentimientos pueden tener algunos acerca de regresar a Jehová?
14 A muchos que ya no participan en el servicio de Jehová quizás el camino de regreso les parezca muy difícil. Avergonzados y temiendo que no sean aceptados de manera amorosa, quizás les dé miedo pensar en tener que enfrentarse a personas que han continuado sirviendo fielmente a Jehová. Posiblemente los que se han extraviado no hayan orado a Jehová por largo tiempo y, en vista de lo que han hecho, quizás les parezca que no son dignos de vivir y que jamás podrían obtener el perdón de Dios. ¿Son justificados tales temores? De ninguna manera. La ilustración de Jesús y los muchos casos históricos en que Jehová perdonó las transgresiones de su pueblo son ejemplos que muestran que su misericordia se extiende a todas las personas que regresan a él con un corazón completo.
15. ¿Cómo ilustra el caso de Manasés que Jehová perdona en gran manera?
15 Un caso a propósito es el de Manasés, rey de Judá. El registro bíblico acerca de sus pecados dice: “Pasó a edificar altares a todo el ejército de los cielos en dos patios de la casa de Jehová. E hizo pasar a su propio hijo por el fuego, y practicó la magia y buscó agüeros e hizo mediums espiritistas y pronosticadores profesionales de sucesos. Hizo en gran escala lo que era malo a los ojos de Jehová, para ofenderlo. Y hubo también sangre inocente que Manasés derramó en grandísima cantidad, hasta que hubo llenado a Jerusalén de extremo a extremo.” (2 Rey. 21:5, 6, 16) Finalmente, cuando Manasés se halló cautivo en Babilonia, se arrepintió y siguió orando a Jehová. A pesar de la conducta anterior de Manasés, Jehová “oyó su petición de favor y lo restauró a Jerusalén a su gobernación real.” (2 Cró. 33:11-13) Pocas personas han obrado tan inicuamente como el rey Manasés y, sin embargo, sobre la base de su arrepentimiento, llegó a ser recipiente de la misericordia de Jehová.
16. ¿Puede extenderse el perdón de Dios a cristianos ungidos por espíritu que llegan a envolverse en maldad seria?
16 Siglos más tarde, un cristiano ungido por espíritu en la congregación de Corinto, Grecia, practicó inmoralidad sexual con la esposa de su padre. La presencia de este hombre incestuoso puso en peligro el bienestar espiritual de la congregación entera y, por lo tanto, el apóstol Pablo mandó que fuera expulsado. (1 Cor. 5:1, 7-13) Sin embargo, este hombre no fue cortado de la asociación con la congregación para siempre. Evidentemente respecto a este hombre, después de haberse arrepentido, leemos: “Esta reprensión dada por la mayoría es suficiente para tal hombre, de modo que, al contrario ahora, deben perdonarlo bondadosamente y consolarlo, para que de un modo u otro tal hombre no sea tragado por estar demasiado triste. Por lo tanto les exhorto que confirmen su amor para con él.” (2 Cor. 2:6-8) Ese malhechor arrepentido siguió siendo un cristiano engendrado por espíritu, con la esperanza de conseguir la vida en los cielos.
17. ¿Por qué sería incorrecto el que alguien desplegara una actitud como la del hijo mayor en la ilustración de Jesús?
17 El caso del rey Manasés y el del cristiano innominado en la congregación corintia indican que la maldad no cancela automáticamente la oportunidad que uno tiene de recobrar una buena posición ante Jehová Dios. El que se ha hecho culpable de transgresión seria todavía puede orar a Dios y, si está sinceramente arrepentido, sus oraciones por perdón serán contestadas. (Compare con Isaías 1:15-19.) Ciertamente si Jehová puede ser tan perdonador, nadie que afirma ser siervo suyo querría reflejar la actitud inclemente del hijo mayor en la ilustración de Jesús.
EVITE EL ABUSAR DE LA MISERICORDIA DE DIOS
18, 19. ¿Por qué es peligroso abusar de la misericordia de Dios?
18 Por supuesto, esto no significa que una persona puede abusar de la misericordia de Dios y continuar en un derrotero descarriado. Cuando los israelitas, en el tiempo de Jeremías, se endurecieron tanto en la iniquidad que no había posibilidad de que se arrepintieran, Jehová declaró: “Si Moisés y Samuel estuviesen de pie delante de mí, mi alma no estaría para con este pueblo. Habría un despedirlos de delante de mi rostro, para que se salieran.” (Jer. 15:1) No habiendo base alguna para extender misericordia a la nación no arrepentida, Jehová, al ejecutar su juicio, permitió que los babilonios desolaran a Judá y Jerusalén. (Lam. 1:3-5) Durante esta calamidad no escuchó las oraciones por ayuda. Es por eso que el profeta Jeremías lamentó: “Has obstruido el acceso con cólera, y continúas siguiendo tras nosotros. Has matado; no has mostrado compasión. Has obstruido el acceso a ti mismo con una masa de nubes, para que no pase la oración.”—Lam. 3:43, 44.
19 El individuo que resulta infiel a Jehová Dios está en una posición muy seria, en una posición que merece la muerte. Si permanece en un estado no arrepentido, no puede evitar la ejecución del juicio adverso de Dios. A los cristianos hebreos se les dijo: “Si practicamos el pecado voluntariosamente después de haber recibido el conocimiento exacto de la verdad, no queda ya sacrificio alguno por los pecados, sino que hay cierta horrenda expectativa de juicio y hay celo ardiente que va a consumir a los que se oponen. Cualquiera que ha desatendido la ley de Moisés muere sin compasión, por el testimonio de dos o tres. ¿De cuánto más severo castigo piensan ustedes que será considerado digno el que ha pisoteado al Hijo de Dios y que ha estimado como de valor ordinario la sangre del pacto por la cual fue santificado, y que ha ultrajado con desdén el espíritu de bondad inmerecida? Porque conocemos al que dijo: ‘Mía es la venganza; yo recompensaré’; y otra vez: ‘Jehová juzgará a su pueblo.’ Es cosa horrenda caer en las manos del Dios vivo.”—Heb. 10:26-31.
20. ¿Por qué no hay razón para que alguien se endurezca en un derrotero pecaminoso?
20 Pero no hay razón para que alguien llegue a estar tan endurecido en un camino malo que no haya posibilidad de que se arrepienta jamás. Tal como Jehová Dios no ha obligado a nadie a que le sirva, así jamás ha compelido a nadie a permanecer de parte de su adversario, Satanás el Diablo. Al contrario, Jehová ha hecho posible que individuos le pidan perdón sobre la base del sacrificio de rescate de Jesús. Cualesquiera que rehúsen aprovecharse de esta provisión y continúen andando según sus propias normas, más bien que las del Creador, son malhechores deliberados. Por su proceder, rechazan la aplicación de los beneficios del sacrificio de Jesús a favor de ellos. En consecuencia sus transgresiones subsisten contra ellos, puesto que no hay otro sacrificio con valor expiatorio de pecados. De modo que tienen que pagar la pena por sus transgresiones... destrucción completa en la ejecución de la venganza de Dios.
21. ¿Qué bendiciones reciben los que regresan de manera arrepentida a Jehová?
21 Sin embargo, en el ínterin por medio de su Palabra, Jehová pide afectuosamente a todos los que lo han abandonado que regresen a él como su Dios. El que una persona responda a esa invitación resulta en bendiciones duraderas... libertad de esclavitud al mundo y a su dios Satanás el Diablo, el fin de la condición de hambre espiritual, contentamiento, felicidad, asociación agradable con siervos leales de Jehová, y una vida con verdadero propósito en el servicio de un Padre celestial amoroso y misericordioso. En la Tierra, los siervos de Jehová confirmarán su amor a cualquiera que de manera arrepentida regrese a él y, en los cielos, se regocijarán los ángeles. Si usted es uno de los que se han extraviado, no vacile en responder a la invitación de Jehová dirigida originalmente a los israelitas: “Vuelvan a mí, y yo volveré a ustedes.”—Mal. 3:7.
[Nota]
a Esto aplica en principio. Para el significado profético de la ilustración de Jesús, vea La Atalaya del 15 de diciembre de 1965, págs. 750 a 756 y del 1 de enero de 1966, págs. 5 a 19.
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La bondad tiene poderLa Atalaya 1972 | 1 de diciembre
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La bondad tiene poder
¿NO ES un placer estar entre personas que son bondadosas y consideradas? Sí, la bondad tiene un buen efecto en otros. Los testigos cristianos de Jehová han descubierto que por seguir la exhortación de la Biblia de ser bondadosos para con todos muchos han sido ayudados a llegar a un conocimiento exacto de la verdad.—Rom. 12:20; Col. 3:12.
Esta fue la experiencia de una joven Testigo en Hong Kong. Disfrutaba de jugar a la pelota con sus condiscípulas en la escuela, pero notó que una de ellas no podía participar en los juegos debido a un impedimento físico. Compadeciéndose de su condiscípula, la joven Testigo trajo un libro que la muchacha con el impedimento físico podía leer durante los juegos. El libro era una ayuda para el estudio bíblico intitulado “La verdad que lleva a vida eterna.” La acción bondadosa y considerada le agradó a la muchacha con el impedimento físico. Leyó con interés las promesas de Dios acerca de un nuevo sistema, donde los impedimentos físicos serán una cosa del pasado. Ahora esta muchacha disfruta de asistir a las reuniones de los testigos de Jehová.
Durante unas vacaciones en Francia, un Testigo de Bélgica vio la bondad producir resultados inesperados. Mientras estaba en un campamento, observó que una muchacha musulmana estaba teniendo dificultad en sacar agua de una bomba. Un grupo de personas que estaban en el balcón de una sala de baile en vez de ofrecerle ayuda a la muchacha se burlaba de ella. El Testigo se acercó a ella y le mostró cómo usar la bomba. Su actitud le impresionó tanto a la muchacha que ésta se detuvo junto a su tienda para darle las gracias, añadiendo: “Usted es tan diferente de los otros. ¿Por qué?” El Testigo y su esposa explicaron que, como cristianos, su amor no estaba limitado. La muchacha regresó de prisa a su tienda para contarle a su familia lo que había sucedido.
Media hora después, acompañada de sus hermanos, hermanas y amigos, la muchacha volvió a la tienda del Testigo, extendiéndole una invitación a él y a su esposa para que pasaran una velada con ellos. Después de eso, por un período de dos semanas, el Testigo, en repetidas ocasiones, habló a esas personas acerca de la Biblia. Entonces se perdió el contacto, pues ellos se mudaron a otro campamento más lejos. Sin embargo, se había efectuado un intercambio de direcciones y, por lo tanto, con el tiempo el Testigo supo lo que resultó de su acción bondadosa.
En el campamento más lejano la familia musulmana tenía a testigos de Jehová como vecinos y por lo tanto pudieron aprender más aún acerca de las Santas Escrituras. Según información reciente, dos hijos y la hija ya están participando en el ministerio de casa en casa de los testigos de Jehová. Los padres están a punto de querer hacer lo mismo.
El poder de mostrar bondad a los que se oponen a la verdad de la Biblia se ilustra en lo que le sucedió a un Testigo en Honduras. Hace algún tiempo un sargento del ejército trataba de obligarlo a que ingresara en el ejército, hasta amenazándolo con matarlo. Con el tiempo este sargento perdió su puesto y se vio obligado a buscar trabajo. Fue empleado como ayudante en una de las operaciones mineras locales. Sucedió que el Testigo a quien había maltratado estaba empleado en el mismo trabajo seglar. No conociendo los acontecimientos pasados, el patrón asignó a este hombre a trabajar bajo la dirección del Testigo.
El ex-sargento se atemorizó mucho, pues creía que el Testigo le pagaría con mal. Pero el Testigo trató a su ex-perseguidor con bondad, compartiendo su almuerzo con él. Esto impresionó mucho al hombre. Se le hizo muy extraño el que lo tratara bondadosamente alguien cuya vida había amenazado. Gradualmente esto lo movió a interesarse verdaderamente en la Biblia. Ahora la gente a quien anteriormente despreciaba son sus amigos y estudia las Escrituras con ellos.
El hecho de que la bondad puede efectuar transformaciones como éstas en la gente da testimonio de su poder. También debe servir de incentivo para prestar atención al consejo que da la Biblia de manifestar bondad.
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