fin. ¿Se desea pan, y otros productos del campo? Los “labradores” se encargarán de que se satisfagan los vigorosos apetitos. Los viñadores podrán suministrar los mejores vinos para alegrar el corazón de los hombres. El progreso que habrá logrado la “grande muchedumbre” en restaurar el paraíso en la Tierra deleitará los ojos de todos los que sean resucitados de entre los muertos y demostrará el cuidado que de antemano ha tenido para todos esos redimidos el Sumo Sacerdote. A pesar de todo esto, la “grande muchedumbre” no descuidará el rendir servicio sagrado a Jehová Dios por medio de Jesucristo regularmente en el patio terrestre del templo espiritual de Dios. En esto llevarán la delantera y darán excelente ejemplo a todos los que sean resucitados de entre los muertos.—Luc. 23:43.

Causa para estar gozosos y alborozarnos en Dios

1. ¿Por qué rebosa de gozo hoy día el resto de israelitas espirituales en cumplimiento de Isaías 61:10?

HAY gozo inexpresable en que a uno se le libere del cautiverio y el aprisionamiento en Babilonia la Grande, el imperio mundial de la religión falsa. Hay razón para alborozo en que a uno se le restaure al favor y buena voluntad del Dios de la religión verdadera. Mientras el resto ungido de israelitas espirituales hoy contempla la manera en que Él los ha liberado y restaurado, rebosan de gozo. Isaías el profeta inspirado pone las palabras en la boca de ellos cuando dice: “Sin falta yo me alborozaré en Jehová. Mi alma estará gozosa en mi Dios. Porque me ha vestido con las prendas de vestir de la salvación; con la vestidura sin mangas de la justicia me ha envuelto, como el novio que, a manera sacerdotal, se pone una prenda sobre la cabeza, y como la novia que se engalana con sus cosas ornamentales.”—Isa. 61:10.

2. ¿Lleva todavía el resto ungido las “prendas de vestir de la salvación”? ¿Por qué nunca serán desterrados del paraíso espiritual?

² Desde el año posbélico de 1919 en adelante Jehová ha producido “salvación” para el resto ungido de israelitas espirituales al librarlos de Babilonia la Grande y de los amantes mundanos de ésta. A pesar de toda la persecución religiosa que se ha experimentado desde entonces, el resto ungido todavía se encuentra vestido con “las prendas de vestir de la salvación.” El resto está resuelto a seguir llevando estas prendas de vestir identificadoras hasta el