40 Entonces Elías les dijo: “¡Agarren a los profetas de Baal! ¡Que no escape ni uno!”. Enseguida los agarraron, y Elías los bajó al arroyo* de Cisón,+ donde los mató.+
20 No. Lo que quiero decir es que las cosas que las naciones sacrifican, se las sacrifican a demonios y no a Dios;+ y no quiero que ustedes participen de nada con los demonios.+