ZACARÍAS
1 En el octavo mes, en el segundo año de Darío,+ el profeta Zacarías*+ —hijo de Berekías, hijo de Idó— recibió estas palabras de Jehová: 2 “Jehová se indignó muchísimo con sus padres.+
3 ”Diles: ‘Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: “‘Vuelvan a mí —afirma Jehová de los ejércitos—, y yo volveré a ustedes’,+ dice Jehová de los ejércitos”’.
4 ”‘No se vuelvan como sus padres, a quienes los profetas anteriores les proclamaron: “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Por favor, abandonen* sus malos caminos y sus malas acciones’”’.+
”‘Pero ellos ni escucharon ni me prestaron atención’,+ afirma Jehová.
5 ”‘¿Dónde están ahora sus padres? ¿Y acaso los profetas vivieron para siempre? 6 Sin embargo, las palabras y los decretos que les ordené proclamar a mis siervos, los profetas, alcanzaron a sus padres, ¿no es cierto?’.+ Así que ellos volvieron a mí y dijeron: ‘Jehová de los ejércitos nos ha tratado según nuestra conducta y nuestras acciones, tal como él había decidido hacer’”.+
7 El día 24 del undécimo mes, es decir, el mes de sebat,* en el segundo año de Darío,+ el profeta Zacarías —hijo de Berekías, hijo de Idó— recibió las palabras de Jehová. 8 “Por la noche tuve una visión. Había un hombre montado en un caballo rojo, y estaba quieto entre los mirtos del barranco. Detrás de él había caballos de color rojo, castaño rojizo y blanco”.
9 Así que pregunté: “¿Quiénes son estos, mi señor?”.
El ángel que hablaba conmigo me respondió: “Te mostraré quiénes son”.
10 Entonces el hombre que estaba quieto entre los mirtos dijo: “Estos son los que Jehová ha enviado para que recorran la tierra”. 11 Y ellos le dijeron al ángel de Jehová que estaba de pie entre los mirtos: “Hemos recorrido la tierra, y resulta que toda la tierra está tranquila y en paz”.+
12 De modo que el ángel de Jehová preguntó: “Oh, Jehová de los ejércitos, ¿hasta cuándo les negarás tu misericordia a Jerusalén y a las ciudades de Judá,+ con las que has estado indignado estos 70 años?”.+
13 Al ángel que hablaba conmigo, Jehová le respondió con palabras amables y de consuelo. 14 Entonces el ángel que hablaba conmigo me dijo: “Proclama lo siguiente: ‘Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: “Actuaré a favor de Jerusalén y Sion con celo, con gran celo.+ 15 Estoy indignado, muy indignado, con las naciones que viven tranquilas,+ porque, cuando estaba apenas un poco indignado,+ ellas agravaron la calamidad”’.+
16 ”Por lo tanto, esto es lo que dice Jehová: ‘“Volveré a Jerusalén con misericordia,+ y mi propia casa será construida en ella+ —afirma Jehová de los ejércitos— y un cordón de medir se extenderá sobre Jerusalén”’.+
17 ”Proclama también lo siguiente: ‘Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: “Mis ciudades volverán a rebosar de cosas buenas; y Jehová volverá a consolar a Sion+ y a elegir a Jerusalén”’”.+
18 Entonces levanté la vista y vi cuatro cuernos.+ 19 Así que le pregunté al ángel que hablaba conmigo: “¿Qué son esos cuernos?”. Él respondió: “Son los cuernos que dispersaron a Judá,+ Israel+ y Jerusalén”.+
20 Jehová después me mostró cuatro artesanos. 21 Yo le pregunté: “¿Y ellos qué vienen a hacer?”.
Él contestó: “Estos son los cuernos que dispersaron a Judá hasta tal punto que nadie se atrevía a levantar la cabeza. Estos artesanos vendrán a aterrorizarlos, a echar abajo los cuernos de las naciones que levantaron sus cuernos contra la tierra de Judá para dispersar a sus habitantes”.
2 Y levanté la vista y vi a un hombre que llevaba en la mano un cordón de medir.+ 2 Así que le pregunté: “¿Adónde vas?”.
Él respondió: “A medir Jerusalén para ver cuánto mide de ancho y cuánto de largo”.+
3 Entonces el ángel que estaba hablando conmigo salió, y otro ángel vino a su encuentro. 4 Luego le dijo: “Ve allí corriendo y dile a ese joven: ‘“Jerusalén será habitada+ como si fuera campo abierto,* de tantos hombres y ganado que habrá en ella.+ 5 Y yo —afirma Jehová— llegaré a ser para ella un muro de fuego a su alrededor+ y llegaré a ser la gloria en medio de ella”’”.+
6 “¡Vengan! ¡Vengan! Huyan de la tierra del norte”,+ afirma Jehová.
“Porque los he dispersado por los cuatro vientos de los cielos”,+ afirma Jehová.
7 “¡Ven, Sion! Escapa, tú que vives con la hija de Babilonia.+ 8 Porque esto es lo que dice Jehová de los ejércitos, quien después de ser glorificado* me envió a las naciones que los saqueaban:+ ‘Quien los toca a ustedes toca la niña de mis ojos.*+ 9 Pues ahora yo voy a levantar mi mano contra ellos, y se convertirán en botín para sus propios esclavos’.+ Y ustedes sin falta sabrán que Jehová de los ejércitos me ha enviado.
10 ”Da gritos de alegría, oh, hija de Sion;+ porque estoy llegando+ y residiré en medio de ti+ —afirma Jehová—. 11 Muchas naciones se unirán a Jehová en ese día+ y llegarán a ser mi pueblo; y yo residiré en medio de ti”. Y tendrás que saber que Jehová de los ejércitos me ha enviado a ti. 12 Jehová tomará posesión de Judá como su propiedad en el suelo santo y elegirá de nuevo a Jerusalén.+ 13 Que toda la humanidad* guarde silencio delante de Jehová, porque él está actuando desde su santo lugar de residencia.
3 Y me mostró al sumo sacerdote Josué,+ que estaba de pie delante del ángel de Jehová, y a su derecha estaba Satanás+ de pie para oponerse a él. 2 Entonces el ángel de Jehová le dijo a Satanás: “¡Que Jehová te reprenda, Satanás!+ ¡Sí, que te reprenda Jehová, el que ha elegido a Jerusalén!+ ¿No es este hombre un leño arrebatado del fuego?”.
3 Y Josué, que llevaba prendas de vestir sucias, estaba de pie delante del ángel. 4 El ángel les dijo a los que estaban de pie delante de él: “Quítenle la ropa sucia”. Luego le dijo a él: “Mira, te he quitado tu error,* y se te vestirá con ropa buena”.*+
5 Así que dije: “Pónganle en la cabeza un turbante especial limpio”.+ Y le pusieron el turbante limpio en la cabeza y lo vistieron con la ropa; y el ángel de Jehová estaba de pie allí cerca. 6 Entonces el ángel de Jehová le declaró a Josué: 7 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Si andas en mis caminos y cumples con tus responsabilidades delante de mí, serás juez en mi casa+ y cuidarás de* mis patios; y te daré libre acceso entre estos que están aquí de pie’.
8 ”‘Oh, sumo sacerdote Josué, escucha, por favor, tú y tus compañeros que se sientan delante de ti, porque estos hombres sirven de señal. ¡Miren, voy a traer a mi siervo+ llamado Brote!+ 9 ¡Miren la piedra que he puesto delante de Josué! En esta única piedra hay siete ojos; y voy a hacer una inscripción en ella —afirma Jehová de los ejércitos—, y en un solo día me llevaré la culpa de esa tierra’.+
10 ”‘Ese día —afirma Jehová de los ejércitos—, cada uno de ustedes invitará a su vecino a pasar un rato debajo de su vid y debajo de su higuera’”.+
4 El ángel que había estado hablando conmigo regresó y me despertó como se despierta a alguien que está dormido. 2 Entonces me preguntó: “¿Qué ves?”.
Respondí: “Lo que veo es un candelabro, todo de oro,+ con un tazón encima. Tiene siete lámparas,+ sí, son siete; y las lámparas, que están encima, tienen siete tubos. 3 Y junto a él hay dos olivos,+ uno a la derecha del tazón y otro a su izquierda”.
4 Luego le pregunté al ángel que hablaba conmigo: “¿Qué representan estas cosas, mi señor?”. 5 Así que el ángel que hablaba conmigo dijo: “¿No sabes lo que representan estas cosas?”.
“No, mi señor”, le contesté.
6 Entonces me dijo: “Este es el mensaje* de Jehová para Zorobabel: ‘“Ni con una fuerza militar ni con poder,+ sino con mi espíritu”,+ dice Jehová de los ejércitos. 7 Oh, gran montaña, ¿quién eres tú? Delante de Zorobabel+ te convertirás en una tierra llana.*+ Y él sacará la piedra de remate* entre gritos de “¡Qué maravilla! ¡Qué maravilla!”’”.
8 Recibí de nuevo las palabras de Jehová. Me dijo: 9 “Las manos de Zorobabel colocaron los cimientos de esta casa,+ y sus propias manos la terminarán.+ Y tendrás que saber que Jehová de los ejércitos me ha enviado a ustedes. 10 Y es que ¿quién ha despreciado el día de los comienzos humildes?*+ Porque ellos se llenarán de alegría y verán la plomada* en la mano de Zorobabel. Estos siete son los ojos de Jehová, que están recorriendo toda la tierra”.+
11 Entonces le pregunté: “¿Qué representan estos dos olivos que están a la derecha y a la izquierda del candelabro?”.+ 12 Y le hice una segunda pregunta: “¿Qué representan los manojos de ramas* de los olivos que vierten el líquido dorado por los dos tubos de oro?”.
13 Me dijo: “¿No sabes lo que representan estas cosas?”.
“No, mi señor”, le contesté.
14 Él dijo: “Estos son los dos ungidos que están de pie al lado del Señor de toda la tierra”.+
5 Volví a levantar la vista y vi un rollo que volaba. 2 Él me preguntó: “¿Qué ves?”.
Yo contesté: “Veo un rollo volando, que mide 20 codos* de largo y 10 codos de ancho”.
3 Luego me dijo: “Esta es la maldición que se extiende por la superficie de toda la tierra porque todo el que roba+ ha quedado sin castigo, como está escrito en uno de los lados del rollo, y todo el que hace un juramento falso+ ha quedado sin castigo, como está escrito en el otro lado del rollo. 4 ‘Lo he enviado —afirma Jehová de los ejércitos—, y va a entrar en la casa del ladrón y en la casa del que hace un juramento falso en mi nombre; y se quedará en esa casa y la consumirá, con su madera y sus piedras’”.
5 Entonces el ángel que hablaba conmigo se acercó y me dijo: “Levanta la vista, por favor, y mira lo que está apareciendo”.
6 Así que pregunté: “¿Qué es eso?”.
Contestó: “Lo que está apareciendo es un recipiente de efá”.* Y añadió: “Este es el aspecto de ellos por toda la tierra”. 7 Y vi que la tapa redonda de plomo fue levantada, y había una mujer sentada dentro del recipiente. 8 Él dijo: “Esta es la Maldad”. Entonces la empujó de nuevo hacia dentro del recipiente de efá, y después tapó con fuerza la boca del recipiente con la pesa de plomo.
9 Luego levanté la vista y vi que se acercaban dos mujeres que volaban llevadas por el viento. Tenían alas como de cigüeña. Y levantaron el recipiente entre la tierra y el cielo. 10 Y le pregunté al ángel que hablaba conmigo: “¿Adónde se llevan el recipiente de efá?”.
11 Él respondió: “A la tierra de Sinar*+ para construirle una casa a la mujer; y, cuando la casa esté lista, ella será puesta allí, en su debido lugar”.
6 Entonces levanté la vista otra vez y vi cuatro carros que salían de entre dos montañas, y las montañas eran de cobre. 2 El primer carro tenía caballos rojos, y el segundo carro, caballos negros.+ 3 El tercer carro tenía caballos blancos, y el cuarto carro, caballos moteados y caballos con manchas.+
4 Le pregunté al ángel que hablaba conmigo: “¿Qué son estos, mi señor?”.
5 El ángel me respondió: “Estos son los cuatro espíritus+ de los cielos que salen después de haber ocupado su puesto delante del Señor de toda la tierra.+ 6 El* de los caballos negros va hacia la tierra del norte;+ los blancos van más allá del mar, y los moteados, hacia la tierra del sur. 7 Y los caballos con manchas están impacientes por salir a recorrer la tierra”. Entonces dijo: “Vayan, recorran la tierra”. Y empezaron a recorrer la tierra.
8 Entonces él me llamó y dijo: “Mira, los que van hacia la tierra del norte han hecho que el espíritu de Jehová descanse en la tierra del norte”.
9 Y de nuevo recibí las palabras de Jehová. Me dijo: 10 “Toma de Heldái, Tobiya y Jedayá lo que trajeron del pueblo en el destierro; y ese día tienes que entrar en la casa de Josías hijo de Sofonías junto con estos que vinieron de Babilonia. 11 Tienes que tomar plata y oro, hacer una corona* y ponerla en la cabeza de Josué+ hijo de Jehozadac, el sumo sacerdote. 12 Y dile:
”‘Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: “Aquí está el hombre que se llama Brote.+ Desde su propio lugar brotará, y él construirá el templo de Jehová.+ 13 Él es quien construirá el templo de Jehová, y él es quien recibirá la majestad. Se sentará en su trono y gobernará, y en su trono será también sacerdote,+ y habrá armonía entre los dos.* 14 Y la corona* quedará en el templo de Jehová en memoria* de Hélem, Tobiya, Jedayá+ y Hen hijo de Sofonías. 15 Y los que están lejos vendrán y participarán en la construcción del templo de Jehová”. Y ustedes tendrán que saber que Jehová de los ejércitos me ha enviado a ustedes. Esto sucederá si de verdad escuchan la voz de Jehová su Dios’”.
7 En el cuarto año del rey Darío, Zacarías+ recibió las palabras de Jehová el día cuatro del noveno mes, es decir, el mes de kislev.* 2 La gente de Betel envió a Sarézer y a Réguem-Mélec con sus hombres a suplicarle a Jehová su favor* 3 y a decirles a los sacerdotes de la casa* de Jehová de los ejércitos y a los profetas: “¿Tendré que llorar y dejar de comer en el quinto mes+ como lo he hecho por tantos años?”.
4 Y de nuevo recibí las palabras de Jehová de los ejércitos. Me dijo: 5 “Dile a toda la gente de la tierra y a los sacerdotes: ‘Cuando por 70 años+ ustedes ayunaban y se lamentaban en el quinto mes y en el séptimo mes,+ ¿de verdad ayunaban por mí? 6 Y, cuando comían y bebían, ¿no comían y bebían por ustedes? 7 ¿Acaso no debían obedecer las palabras que Jehová proclamó mediante los profetas anteriores,+ cuando Jerusalén y las ciudades vecinas estaban habitadas y en paz, y cuando el Négueb y la Sefelá estaban habitados?’”.
8 Zacarías recibió de nuevo estas palabras de Jehová: 9 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Juzguen con verdadera justicia+ y trátense unos a otros con amor leal+ y misericordia. 10 No cometan fraude contra la viuda ni el huérfano*+ ni el extranjero+ ni el pobre,+ y no tramen nada malo unos contra otros en su corazón’.+ 11 Pero ellos siguieron negándose a prestar atención;+ eran tercos, daban la espalda+ y se tapaban los oídos para no oír.+ 12 Volvieron su corazón duro como un diamante*+ y no obedecieron la ley* ni las palabras que Jehová de los ejércitos había enviado por medio de su espíritu usando a los profetas anteriores.+ Por eso Jehová de los ejércitos se indignó muchísimo”.+
13 “‘Tal como ellos no escucharon cuando yo llamé,*+ yo no escuché cuando ellos llamaron+ —dice Jehová de los ejércitos—. 14 Y con una tempestad de viento los dispersé por todas las naciones que antes no conocían,+ y la tierra que dejaron atrás quedó desolada, sin que nadie fuera ni viniera por ella;+ porque convirtieron la tierra deseable en motivo de horror’”.
8 Recibí de nuevo las palabras de Jehová de los ejércitos. Me dijo: 2 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Actuaré a favor de Sion con gran celo,+ y con gran ira actuaré a favor de ella’”.
3 “Esto es lo que dice Jehová: ‘Volveré a Sion+ y residiré en Jerusalén;+ Jerusalén será llamada la ciudad de la verdad,*+ y la montaña de Jehová de los ejércitos será llamada la santa montaña’”.+
4 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Hombres y mujeres mayores volverán a sentarse en las plazas de Jerusalén, cada uno con su bastón en la mano debido a su avanzada edad.*+ 5 Y las plazas de la ciudad estarán llenas de niños y niñas jugando’”.+
6 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Aunque a los que queden de este pueblo en esos días les pueda parecer demasiado difícil, ¿debería parecerme demasiado difícil a mí también?’, dice Jehová de los ejércitos”.
7 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Voy a salvar a mi pueblo sacándolo de las tierras del este y del oeste.*+ 8 Los traeré y vivirán en Jerusalén;+ ellos serán mi pueblo y yo seré su fiel* y justo Dios’”.+
9 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Sean valientes,*+ ustedes que ahora oyen estas palabras de boca de los profetas,+ las mismas palabras que se dijeron el día en que se pusieron los cimientos de la casa de Jehová de los ejércitos para que se construyera el templo. 10 Porque antes de aquel tiempo no se pagaba ningún salario ni a hombre ni a animal,+ y debido a los enemigos no era seguro ir y venir, porque yo había puesto a todos los hombres unos contra otros’.
11 ”‘Pero ya no trataré a los que quedan de este pueblo como lo hice en el pasado+ —afirma Jehová de los ejércitos—. 12 Porque se sembrará la semilla de la paz; la vid dará su fruto, y la tierra, su producto,+ y el cielo dará su rocío; y haré que los que queden de este pueblo hereden todas estas cosas.+ 13 Y, tal como ustedes se convirtieron en objeto de maldición entre las naciones,+ oh, casa de Judá y casa de Israel, así se convertirán en una bendición,+ porque yo los salvaré. ¡No tengan miedo!+ Sean valientes’.*+
14 ”Porque esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘“Así como había decidido mandarles una calamidad debido a que sus antepasados hicieron que me indignara —dice Jehová de los ejércitos— y no sentí pesar,+ 15 ahora he decidido tratar bien a Jerusalén y a la casa de Judá.+ ¡No tengan miedo!”’.+
16 ”‘Estas son las cosas que ustedes deben hacer: decirse la verdad unos a otros,+ y que los juicios en sus puertas promuevan la verdad y la paz.+ 17 No planeen nada malo unos contra otros en su corazón+ ni amen ningún juramento falso;+ porque yo odio todas esas cosas’,+ afirma Jehová”.
18 Y de nuevo recibí las palabras de Jehová de los ejércitos. Me dijo: 19 “Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘El ayuno del cuarto mes,+ el ayuno del quinto mes,+ el ayuno del séptimo mes+ y el ayuno del décimo mes+ serán ocasiones en las que la casa de Judá estará radiante y feliz; serán fiestas alegres.+ Así que amen la verdad y la paz’.
20 ”Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘Va a llegar el día en que los pueblos y los habitantes de muchas ciudades vendrán; 21 y los habitantes de una ciudad irán y les dirán a los de otra ciudad: “¡Vamos! Vayamos a suplicarle a Jehová su favor* y a buscar a Jehová de los ejércitos. Yo también voy a ir”.+ 22 Y muchos pueblos y naciones poderosas vendrán a buscar a Jehová de los ejércitos en Jerusalén+ y a suplicar el favor* de Jehová’.
23 ”Esto es lo que dice Jehová de los ejércitos: ‘En esos días, 10 hombres de todos los idiomas de las naciones+ se agarrarán, sí, se agarrarán con firmeza de la túnica* de un judío* y dirán: “Queremos ir con ustedes,+ porque hemos oído que Dios está con ustedes”’”.+
9 Una declaración:
“El mensaje* de Jehová es contra la tierra de Hadrac,
—porque los ojos de Jehová están sobre la humanidad+
y sobre todas las tribus de Israel—,
2 y contra Hamat,+ que limita con ella,
3 Tiro se construyó una fortaleza.*
Acumuló plata como polvo
y oro como el barro de las calles.+
4 ¡Miren! Jehová le quitará sus posesiones
y derrotará a su ejército en el mar;+
y el fuego la consumirá.+
5 Asquelón lo verá y le dará miedo;
Gaza se angustiará mucho;
Ecrón también, porque su esperanza se convertirá en vergüenza.
Gaza perderá a su rey
y Asquelón no será habitada.+
6 Un hijo ilegítimo se asentará en Asdod,
y yo acabaré con el orgullo del filisteo.+
7 Le quitaré de la boca las cosas manchadas de sangre
y de entre sus dientes las cosas repugnantes,
y se le dejará permanecer para nuestro Dios;
él llegará a ser como un jeque* en Judá,+
y Ecrón, como el jebuseo.+
8 Acamparé como un guardia* para defender mi casa+
de cualquiera que vaya o que venga,
y ningún capataz* volverá a pasar por allí,+
porque ahora he visto eso* con mis ojos.
9 Alégrate mucho, oh, hija de Sion.
Grita en triunfo, oh, hija de Jerusalén.
¡Mira! Tu rey viene hacia ti.+
Es justo y trae salvación,*
es humilde+ y va montado en un burro,
en un burrito, la cría de una burra.+
10 Eliminaré de Efraín el carro de guerra
y de Jerusalén el caballo.
El arco de batalla será eliminado.
Y él les hablará de paz a las naciones;+
su dominio se extenderá de mar a mar
11 Y, por medio de la sangre de tu pacto, oh, mujer,
liberaré a tus prisioneros del hoyo seco.+
12 Regresen a la fortaleza, prisioneros llenos de esperanza.+
Hoy te anuncio:
‘Oh, mujer, te recompensaré con una porción doble.+
13 Porque tensaré* a Judá como mi arco;
Efraín será la flecha del arco.
Y despertaré a tus hijos, oh, Sion,
contra tus hijos, oh, Grecia,
y te haré* como la espada de un guerrero’.
14 Se verá a Jehová sobre ellos,
y su flecha saldrá como un rayo.
El Señor Soberano Jehová tocará el cuerno+
y avanzará con las tempestades de viento del sur.
15 Jehová de los ejércitos los defenderá,
y ellos devorarán y pisarán las piedras de la honda.+
Beberán y estarán alborotados como por el vino;
y quedarán llenos como el tazón,
como las esquinas del altar.+
16 Jehová su Dios los salvará en ese día
como a su rebaño, su pueblo;+
porque serán como las piedras preciosas de una corona* que brilla sobre su suelo.+
17 ¡Qué grande es su bondad+
y qué grande es su belleza!
El grano hará prosperar a los jóvenes,
y el vino nuevo, a las vírgenes”.+
10 “Pídanle lluvias a Jehová en la época de las lluvias de primavera.
Es Jehová quien forma las nubes de tormenta,
quien les da lluvia abundante a los hombres+
y vegetación del campo a todos.
2 Porque los ídolos domésticos* han dicho cosas engañosas*
y los adivinos han tenido visiones falsas.
Hablan de sueños que no sirven para nada
y en vano intentan dar consuelo.
Por eso la gente andará de acá para allá como ovejas,
sufrirá por no tener pastor.
3 Estoy enfurecido con los pastores
y les pediré cuentas a los líderes opresivos;*
porque Jehová de los ejércitos se ha fijado en su rebaño,+ en los de la casa de Judá,
y los ha hecho como su majestuoso caballo en la batalla.
4 De él* viene el hombre clave,*
de él, el gobernante que los apoya,*
de él, el arco de batalla;
de él sale todo supervisor,* todos ellos juntos.
5 Y se harán como guerreros
que pisan el barro de las calles en la batalla.
6 Haré superior a la casa de Judá
y salvaré a la casa de José.+
Los haré volver,
porque les mostraré misericordia;+
y será como si yo nunca los hubiera rechazado;+
porque yo soy Jehová su Dios, y les responderé.
7 Los de Efraín se harán como un poderoso guerrero,
y su corazón se pondrá contento como por el vino.+
Sus hijos verán esto y se alegrarán;
su corazón estará feliz gracias a Jehová.+
8 ‘Les silbaré para reunirlos;
porque los rescataré*+ y llegarán a ser muchos,
y seguirán siendo muchos.
9 Aunque los disperse como a semilla entre los pueblos,
se acordarán de mí en los lugares lejanos;
revivirán con sus hijos y regresarán.
10 Los traeré de vuelta desde la tierra de Egipto
y los reuniré desde Asiria;+
los llevaré a la tierra de Galaad+ y al Líbano,
y no habrá espacio suficiente para ellos.+
11 Atravesará el mar causando angustia,
y en el mar golpeará las olas;+
todas las profundidades del Nilo se secarán.
El orgullo de Asiria será rebajado
y el cetro de Egipto se alejará.+
12 Yo haré que gracias a mí, Jehová, sean superiores,+
y ellos andarán en mi nombre’,+ afirma Jehová”.
11 “Abre tus puertas, oh, Líbano,
para que un fuego consuma tus cedros.
2 ¡Laméntate, enebro, porque el cedro ha caído;
los árboles majestuosos han sido destruidos!
¡Laméntense, robles de Basán,
porque el espeso bosque ha sido derribado!
3 ¡Escuchen! Los pastores se lamentan
porque su majestuosidad ha quedado devastada.
¡Escuchen! Los leones jóvenes* rugen
porque los densos matorrales a lo largo del Jordán han sido arrasados.
4 ”Esto es lo que dice Jehová mi Dios: ‘Pastorea a las ovejas que están destinadas al matadero.+ 5 Los que las compran las matan,+ y no se les considera culpables. Los que las venden+ dicen: “Alabado sea Jehová, porque me voy a hacer rico”. Y sus pastores no sienten ninguna compasión por ellas’.+
6 ”‘Porque no volveré a mostrarles compasión a los habitantes del país —afirma Jehová—. Así que haré que todos los hombres caigan en manos de su prójimo y de su rey; y destrozarán el país, y no los rescataré de su mano’”.
7 Y comencé a pastorear al rebaño destinado al matadero;+ lo hice por ustedes, oh, afligidos del rebaño. De modo que tomé dos bastones: a uno lo llamé Bondad* y al otro lo llamé Unión,+ y me puse a pastorear al rebaño. 8 Me deshice de tres pastores en un solo mes, porque perdí la paciencia con ellos; y ellos me detestaban también. 9 Así que dije: “No voy a seguir pastoreándolas. La que se está muriendo, que se muera; la que va a perder la vida, que la pierda; y las que queden, que cada una devore la carne de la otra”. 10 Entonces tomé mi bastón Bondad+ y lo partí en pedazos, y así rompí el pacto que había hecho con todos los pueblos. 11 Quedó roto aquel día, y los afligidos del rebaño que estaban observándome supieron que era un mensaje* de Jehová.
12 Entonces les dije: “Si les parece bien, denme mi salario; pero, si no, quédense con él”. Y me pagaron* mi salario: 30 piezas de plata.+
13 Después Jehová me dijo: “Arrójalo en el tesoro... el magnífico precio con el que me valoraron”.+ De modo que tomé las 30 piezas de plata y las arrojé en el tesoro de la casa de Jehová.+
14 Luego partí en pedazos mi segundo bastón, Unión,+ rompiendo así la hermandad entre Judá e Israel.+
15 Y Jehová me dijo: “Ahora toma los utensilios de un pastor inútil.+ 16 Porque permitiré que surja un pastor en el país. No cuidará a las ovejas que se estén muriendo;+ no buscará a las crías ni sanará a las heridas+ ni alimentará a las que se puedan tener en pie.+ En vez de eso, devorará la carne de las ovejas gordas y les arrancará las pezuñas.+
17 ¡Ay de mi pastor inútil,+ que abandona al rebaño!+
Una espada le golpeará el brazo y el ojo derecho.
Su brazo se secará completamente
y su ojo derecho se quedará totalmente ciego”.*
12 Una declaración:
“Las palabras de Jehová acerca de Israel”, afirma Jehová,
el que extendió los cielos,+
colocó los cimientos de la tierra+
y creó el espíritu* del hombre dentro de él.
2 “Voy a hacer de Jerusalén una copa* que haga tambalearse a todos los pueblos vecinos; y habrá un cerco contra Judá y también contra Jerusalén.+ 3 Ese día haré de Jerusalén una piedra pesada para todos los pueblos. Todos los que la levanten sin falta acabarán gravemente heridos;+ y todas las naciones de la tierra serán reunidas contra ella.+ 4 Ese día —afirma Jehová— sembraré el pánico entre todos los caballos y volveré locos a sus jinetes. Tendré los ojos puestos en la casa de Judá, pero haré que todos los caballos de los pueblos se queden ciegos. 5 Y los jeques* de Judá dirán en su corazón: ‘Los habitantes de Jerusalén son para nosotros la fuerza que viene de Jehová de los ejércitos, su Dios’.+ 6 Ese día haré que los jeques de Judá sean como un brasero en medio de leña y como una antorcha encendida en una hilera de grano cortado,+ y devorarán a todos los pueblos vecinos, a la derecha y a la izquierda;+ y los habitantes de Jerusalén volverán a vivir en su ciudad,* en Jerusalén.+
7 ”Y Jehová salvará primero las tiendas de Judá, para que la belleza* de la casa* de David y la belleza* de los habitantes de Jerusalén no sean demasiado grandes en comparación con la de Judá. 8 Ese día Jehová será una defensa alrededor de los habitantes de Jerusalén;+ ese día el más débil* entre ellos será como David, y la casa de David, como Dios, como el ángel de Jehová que va delante de ellos.+ 9 Y ese día, sin duda, exterminaré a todas las naciones que ataquen a Jerusalén.+
10 ”Derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén el espíritu de aprobación y de súplica, y mirarán al que traspasaron,+ y se lamentarán por él como se lamentarían por un hijo único, y llorarán por él amargamente como llorarían por un primogénito. 11 Ese día el lamento en Jerusalén será tan grande como el lamento de Hadadrimón en la llanura de Meguidó.+ 12 Y el país se lamentará, cada familia por su lado: la familia de la casa de David por su lado, y sus mujeres por separado; la familia de la casa de Natán+ por su lado, y sus mujeres por separado; 13 la familia de la casa de Leví+ por su lado, y sus mujeres por separado; la familia de los simeítas+ por su lado, y sus mujeres por separado, 14 y todas las familias que queden, cada familia por su lado, y sus mujeres por separado.
13 ”Ese día se abrirá un pozo para que la casa de David y los habitantes de Jerusalén sean purificados del pecado y de la impureza.+
2 ”Ese día —afirma Jehová de los ejércitos— borraré del país los nombres de los ídolos,+ y ya no serán recordados; y eliminaré del país a los profetas+ y el espíritu de impureza. 3 Y, si un hombre volviera a profetizar, su padre y su madre —que causaron su nacimiento— le dirán: ‘Tú no vivirás, porque has dicho mentiras en el nombre de Jehová’. Y su padre y su madre —que causaron su nacimiento— lo traspasarán por profetizar.+
4 ”Ese día todos los profetas se avergonzarán de su visión cuando profeticen; y no usarán la prenda de vestir oficial de pelo+ para engañar. 5 Y cada uno de ellos dirá: ‘No soy profeta. Soy un hombre que cultiva la tierra, porque un hombre me compró cuando yo era joven’. 6 Y, si alguien le pregunta ‘¿Qué son esas heridas que tienes entre los hombros?’,* contestará ‘Son heridas que me hicieron en casa de mis amigos’”.*
7 “Oh, espada, despierta contra mi pastor,+
contra el hombre que es mi compañero —afirma Jehová de los ejércitos—;
hiere al pastor,+ y que el rebaño sea dispersado;*+
y volveré mi mano contra los que son insignificantes”.
8 “Y en todo el país —afirma Jehová—
dos partes serán eliminadas, morirán;
y la tercera parte quedará.
9 Y haré pasar a la tercera parte por el fuego;
los refinaré como se refina la plata
y los examinaré como se examina el oro.+
Ellos invocarán mi nombre
y yo les responderé.
Yo diré ‘Ellos son mi pueblo’+
y ellos dirán ‘Jehová es nuestro Dios’”.
14 “¡Miren! Viene el día, un día que le pertenece a Jehová, en el que se repartirán en medio de ti* tus posesiones como botín. 2 Y reuniré a todas las naciones para que hagan la guerra contra Jerusalén; tomarán la ciudad, saquearán las casas y violarán a las mujeres. Y la mitad de la ciudad irá al destierro, pero los que queden del pueblo no serán eliminados de la ciudad.
3 ”Jehová saldrá y guerreará contra esas naciones+ como cuando combate en un día de batalla.+ 4 Ese día sus pies estarán sobre el monte de los Olivos,+ que está enfrente de Jerusalén, al este; y el monte de los Olivos se partirá por la mitad, de este* a oeste,* formando un valle muy grande; la mitad de la montaña se moverá hacia el norte, y la otra mitad, hacia el sur. 5 Ustedes huirán al valle de mis montañas, porque el valle de las montañas llegará hasta Azel. Tendrán que huir como huyeron debido al terremoto de los días del rey Uzías de Judá.+ Y Jehová mi Dios vendrá, y todos los santos estarán con él.+
6 ”Ese día no habrá ninguna luz preciosa:+ las cosas estarán congeladas.* 7 Y ese día se llegará a conocer como el día de Jehová.+ No habrá día ni habrá noche; y al anochecer habrá luz. 8 Ese día fluirán aguas vivas+ desde Jerusalén:+ la mitad hacia el mar del este*+ y la otra mitad hacia el mar del oeste.*+ Esto pasará en verano y en invierno. 9 Y Jehová será Rey de toda la tierra.+ Ese día Jehová será el único*+ y su nombre será el único.*+
10 ”Todo el país, desde Gueba+ hasta Rimón,+ al sur de Jerusalén, se volverá como el Arabá;+ y Jerusalén se elevará y será habitada en su lugar,*+ desde la Puerta de Benjamín+ hasta donde está la Primera Puerta, hasta la Puerta de la Esquina, y desde la Torre de Hananel+ hasta los lagares de vino* del rey. 11 Será habitada y jamás volverá a ser condenada a la destrucción,+ y en Jerusalén se vivirá en seguridad.+
12 ”Y este es el azote con el que Jehová castigará a todos los pueblos que hayan guerreado contra Jerusalén:+ su carne se pudrirá mientras todavía estén de pie, los ojos se les pudrirán en las cuencas y la lengua se les pudrirá en la boca.
13 ”Ese día Jehová sembrará entre ellos un caos generalizado; cada uno agarrará la mano de su prójimo y levantará su mano contra la de su prójimo.*+ 14 Judá también participará en la guerra en Jerusalén; y se recogerán las riquezas de todas las naciones vecinas: oro, plata y una gran cantidad de ropa.+
15 ”Y también vendrá un azote como ese contra los caballos, las mulas, los camellos, los burros y todos los animales de esos campamentos.
16 ”Los que queden de todas las naciones que hayan atacado a Jerusalén subirán cada año+ a inclinarse ante el* Rey, Jehová de los ejércitos,+ y a celebrar la Fiesta de las Cabañas.*+ 17 Pero, si alguna persona de entre las familias de la tierra no sube a Jerusalén a inclinarse ante el Rey, Jehová de los ejércitos, la lluvia no caerá sobre ella.+ 18 Y, si la familia* de Egipto no sube y no entra allí, tampoco tendrá lluvia. Más bien, recibirá el azote con el que Jehová castigará a las naciones que no suban a celebrar la Fiesta de las Cabañas. 19 Ese será el castigo por el pecado de Egipto y el pecado de todas las naciones que no suban a celebrar la Fiesta de las Cabañas.
20 ”Ese día las palabras ‘¡La santidad le pertenece a Jehová!’+ estarán escritas en los cascabeles* de los caballos. Y las ollas*+ de la casa de Jehová serán como los tazones+ delante del altar. 21 Y todas las ollas* en Jerusalén y en Judá serán santas y le pertenecerán a Jehová de los ejércitos, y todos los que estén haciendo sacrificios entrarán y usarán algunas para cocinar. Ese día ya no habrá más cananeos* en la casa de Jehová de los ejércitos”.+
Que significa ‘Jehová ha recordado’.
O “vuélvanse de”.
Ver apén. B15.
Es decir, sin murallas que la cerquen.
Lit. “después de la gloria”.
O “toca mi pupila”, “toca el globo de mi ojo”.
Lit. “toda carne”.
O “culpa”.
O “de ceremonia”.
O “estarás a cargo de”, “vigilarás”.
Lit. “la palabra”.
O “una llanura”.
O “la piedra clave”, “la última piedra”.
O “las cosas pequeñas”.
Lit. “la piedra, el estaño”.
Es decir, ramas de olivo cargadas de frutos.
Un codo equivalía a 44,5 cm (17,5 in). Ver apén. B14.
Lit. “el efá”. Aquí se refiere a un recipiente o canasta usado para medir un efá. Un efá equivalía a 22 L (20 dry qt). Ver apén. B14.
Es decir, Babilonia.
Es decir, el carro.
O “magnífica corona”.
Es decir, entre sus papeles de gobernante y de sacerdote.
O “magnífica corona”.
O “recuerdo”.
Ver apén. B15.
O “ablandar el rostro de Jehová”.
O “del templo”.
O “huérfano de padre”.
O quizás “una piedra dura”, como una piedra de esmeril.
O “instrucción”.
Lit. “él llamó”.
O “fidelidad”.
Lit. “por la multitud de días”.
O “de la tierra del naciente y de la tierra del poniente”.
O “verdadero”.
O “Que sus manos sean fuertes”.
O “Que sus manos sean fuertes”.
O “ablandar el rostro de Jehová”.
O “ablandar el rostro”.
O “al borde de la ropa”.
Lit. “varón judío”.
Lit. “La palabra”.
Lit. “lugar de descanso”.
O “un antemural”.
Un jeque era un jefe tribal.
O “una avanzada”.
O “ningún opresor”.
Al parecer, se refiere al sufrimiento de su pueblo.
O “y victorioso”, “y salvado”.
Es decir, el río Éufrates.
Lit. “pisaré”.
Al parecer, se refiere a Sion.
O “diadema”.
O “dioses domésticos”. Lit. “terafim”.
O “misteriosas”, “sobrenaturales”.
Lit. “los machos de las cabras”.
O “De Judá”.
Lit. “la torre de la esquina”, imagen aplicada a un hombre fundamental o importante; un jefe.
Lit. “la clavija”, imagen aplicada a alguien que es un apoyo; un gobernante.
O “superintendente”, “capataz”.
O “redimiré”.
O “leones jóvenes con melena”.
O “Agradabilidad”.
Lit. “la palabra”.
Lit. “pesaron”.
Lit. “oscuro”.
O “aliento”.
O “un tazón”.
Un jeque era un jefe tribal.
O “legítimo lugar”.
O “el esplendor”.
O “los descendientes”.
O “el esplendor”.
O “el que tropieza”.
Lit. “entre las manos”. Es decir, en el pecho o en la espalda.
O “de los que me aman”.
O “que las ovejas sean dispersadas”.
Es decir, de la ciudad mencionada en el versículo 2.
O “del naciente”.
Lit. “hacia el mar”.
O “inmovilizadas”, como si estuvieran rígidas por el frío.
Es decir, el mar Muerto.
Es decir, el mar Mediterráneo.
O “uno solo”.
O “uno solo”.
O “legítimo lugar”.
O “las tinas de lagar”.
O “y un hombre atacará a otro”.
O “adorar al”.
Se refiere a refugios temporales.
O “el pueblo”.
O “las campanillas”.
O “las ollas de boca ancha”.
O “las ollas de boca ancha”.
O quizás “comerciantes”.