Nota
d La enfermedad espiritual no es excusa cuando se comete un pecado grave. El pecador es completamente responsable de sus malas decisiones y acciones, y debe rendir cuentas a Jehová (Rom. 14:12).
d La enfermedad espiritual no es excusa cuando se comete un pecado grave. El pecador es completamente responsable de sus malas decisiones y acciones, y debe rendir cuentas a Jehová (Rom. 14:12).