¿Prefiere la zona de “No fumadores”?
EN SU número del 10 de febrero de 1989, The Journal of the American Medical Association (JAMA) informó lo siguiente: “La Academia Nacional de Ciencias revisó los datos sobre los fumadores pasivos [...], con referencia específica al ambiente que se respira dentro de las cabinas de los aviones”. Su recomendación fue “que se prohíba fumar en todos los vuelos comerciales nacionales por cuatro importantes razones: para minimizar las irritaciones, para reducir los peligros para la salud, para reducir los peligros de incendio y para conseguir que la calidad del aire de la cabina reúna los requisitos que se exigen en otros espacios cerrados”.
El profundo estudio que efectuó la academia reveló lo siguiente: “En los vuelos que utilizaron monitores para medir la exposición de las personas a la nicotina, se vio que dicha exposición es variable y que los niveles alcanzados en algunas zonas de no fumadores eran comparables a los de las zonas de fumadores. El personal asignado a trabajar en las zonas de no fumadores también estaba expuesto al humo”.
El estudio indicó que “los niveles de nicotina que había en el aire eran muy variables, y en algunas zonas de no fumadores eran superiores a los de algunas zonas de fumadores”, por lo que recordó a los lectores que “entre los efectos adversos que el fumar pasivo, o involuntario, tiene en la salud de los no fumadores, están el cáncer de pulmón y las enfermedades respiratorias”.
Este mismo número de JAMA informó sobre un estudio que estableció el poder de adicción de la nicotina, y que dijo: “En el caso de las personas que buscan tratamiento para la drogodependencia, su necesidad de fumar cigarrillos y su dificultad para dejar de hacerlo son tan fuertes o más que para las sustancias que constituyen su principal problema [el alcohol, la cocaína, la heroína]”.
En 1987 Canadá prohibió fumar en los vuelos de dos horas de duración o menos. Las dos líneas aéreas canadienses más importantes fueron más allá: prohibieron fumar en todos sus vuelos por América del Norte. En Estados Unidos, la ley federal ha prohibido fumar en los vuelos cortos, y “una línea aérea estadounidense ha prohibido por su propia cuenta fumar en todos los vuelos nacionales, con la excepción de los que van y vuelven de Hawai”. Cuando más líneas aéreas adopten medidas similares, se ayudará a reducir los peligros que implica volar.