22 JONATÁN
Necesitó valor para ser leal
DOS hombres armados iban escalando una montaña rocosa y empinada. ¿Cuál era su objetivo? Atacar a toda una tropa de soldados filisteos. Al frente iba Jonatán, el hijo de Saúl, el primer rey de Israel. Detrás iba su valiente escudero, a quien Jonatán había fortalecido con las siguientes palabras: “A Jehová no hay nada que le impida salvar, ya sea valiéndose de muchos o de pocos”. Y Jehová no tardó en demostrar que Jonatán tenía razón. Con su ayuda, aquellos 2 hombres consiguieron derrotar a 20 soldados. Al final, esto desencadenó una victoria todavía mayor para el pueblo de Dios.
Este relato deja claro que Jonatán tenía mucho valor. ¿Pero de qué otras maneras demostró esta cualidad? Pues bien, él era muy leal, ¿y verdad que para ser leal muchas veces hay que ser valiente? Por ejemplo, Jonatán era leal a su padre. Pero, cuando Saúl se volvió malo y desobedeció a Dios, Jonatán necesitó valor para poner su lealtad a Jehová por encima de la lealtad a su padre.
Cuando Jonatán tenía cerca de 50 años, se hizo muy amigo de un joven llamado David, que era unos 30 años menor que él. Todo empezó el día en que ese joven mató a Goliat, un gigante filisteo. Seguro que Saúl y todo el pueblo quedaron encantados con David. ¿Cómo reaccionó Jonatán? ¿Se puso celoso? ¡Para nada! De hecho, le regaló su armadura y su arco. Este era un regalo muy especial, porque al parecer Jonatán era famoso por ser muy buen arquero. Y, aunque se llevaban muchos años, los dos hicieron un pacto de amistad que ningún hombre pudo romper jamás.
Aunque Jonatán era leal a su padre, tuvo que poner en primer lugar su lealtad a Dios
Al principio, Saúl quería mucho a David. Pero poco después ese cariño se convirtió en celos, rencor y odio. Saúl esperaba que su hijo sintiera lo mismo. Pero Jonatán siguió siendo leal a su amigo aunque Jehová no lo había escogido a él, sino a David, para que fuera el siguiente rey de Israel. Un día, Saúl dijo que quería matar a David. Pero entonces Jonatán dio la cara por su amigo. Eso requirió mucho valor. ¿Por qué? Porque aunque Saúl ya era mayor seguía siendo un guerrero poderoso. En cierta ocasión, Jonatán volvió a dar la cara por su amigo, y de repente Saúl agarró su lanza y trató de matar a su propio hijo. Aunque no alcanzó a darle con la lanza, lo hirió en lo más profundo de su ser. Luego Jonatán fue a ver a David y le contó lo que quería hacer su padre, y así demostró su lealtad. También le pidió a David que se hiciera cargo de su familia por si algo le pasaba en el futuro.
Por culpa de Saúl, David tuvo que vivir como un fugitivo. El rey incluso usó a su ejército para perseguirlo. Así que David tuvo que estar huyendo y escondiéndose todo el tiempo. ¿Estuvo Jonatán entre aquellos que persiguieron a David? La Biblia no dice nada al respecto, pero eso parece imposible. En cierta ocasión, Jonatán se enteró de dónde estaba escondido David, así que fue a ver a su amigo. ¿Para qué? La Biblia dice que “lo ayudó a fortalecer su confianza en Jehová”. Le dijo: “No tengas miedo, porque mi padre Saúl no te encontrará. Tú vas a ser rey de Israel, y yo voy a ser el segundo después de ti”. Así, los dos amigos se despidieron y nunca más volvieron a verse.
Después, Jonatán luchó lealmente al lado de su padre contra los filisteos, los verdaderos enemigos del pueblo de Jehová. Pero, como Saúl se había vuelto apóstata y hasta había recurrido al espiritismo, Jehová no estaba con él. En la batalla, los filisteos hirieron al rey. Y al final él mismo se quitó la vida. Aquel mismo día también murieron tres de sus hijos, entre ellos Jonatán.
Tras la noticia, David quedó destrozado. Compuso una canción de duelo para expresar su tristeza y el cariño que sentía por su amigo. La llamó “El arco”, probablemente en honor al regalo que Jonatán le había hecho años atrás. Parte de la letra decía: “Estoy angustiado por ti, hermano mío, Jonatán; te quería tanto”. David cumplió el pacto que había hecho con su amigo. Cuando llegó al trono, se puso a buscar si quedaba vivo algún familiar de Jonatán. Y encontró a uno de sus hijos, Mefibóset, que estaba lisiado. Como vivía lejos, hizo que lo llevaran a Jerusalén, y lo cuidó de ahí en adelante.
Lea el relato bíblico
¿Qué diría?
¿De qué maneras demostró valor Jonatán?
Investigue un poco más
1. ¿Quiénes eran los filisteos? (w95 1/2 31).
2. ¿Cómo demuestra la palabra “pim” —que aparece en 1 Samuel 13:21— que la Biblia es exacta y confiable? (w05 15/3 29). A
Imagen A: Un pim, una piedra usada como medida de peso.
3. ¿Por qué pudo haber sido difícil para Jonatán cruzar el desfiladero de Micmash, y qué debió ayudarle a conseguirlo? (it “Micmás, Micmash” párr. 4). B
Todd Bolen/BiblePlaces.com
Imagen B: Posible ubicación del desfiladero de Micmash.
Imagen B: Posible ubicación del desfiladero de Micmash.
Todd Bolen/BiblePlaces.com
4. ¿Cómo cumplió David su promesa de cuidar a la familia de Jonatán? (it “Mefibóset” núm. 2 párr. 1).
Piense en las lecciones
Jonatán era leal a su padre, pero puso por encima su lealtad a Jehová. ¿En qué situaciones parecidas podría ponerse a prueba nuestra lealtad a Jehová? C
Imagen C
¿Qué le enseña la historia de Jonatán y David sobre...
... la amistad?
... la humildad?
... la lealtad?
¿De qué otras maneras puede usted copiar el ejemplo de valor de Jonatán?
Vea el cuadro completo
¿Qué me enseña este relato sobre Jehová?
¿Cómo se relaciona este relato con el propósito de Jehová y el tema principal de la Biblia?
¿Qué me gustaría preguntarle a Jonatán cuando resucite?
Para saber más
¿Por qué eran tan amigos Jonatán y David? ¿Y cómo podemos cultivar amistades parecidas?
Vea con sus hijos algunos episodios de la vida de Jonatán y lo que nos enseñan.