La Asamblea “Sociedad del Nuevo Mundo” de los testigos de Jehová—Parte 2
EN EL número anterior de La Atalaya se comenzó un informe sobre la Asamblea “Sociedad del Nuevo Mundo” celebrada por los testigos de Jehová en el estadio Yanqui de Nueva York durante los días del 19 al 26 de julio. Habiendo considerado los principales puntos de interés en las sesiones celebradas del domingo 19 al viernes 24, y parte de los del sábado 25, continuamos con lo presentado en la noche del sábado y el resto de la asamblea.
Más de la mitad del programa de la noche se usó para presentar más informes de Europa, después de los cuales el tercer grupo de discursos del día presentados bajo un encabezamiento, a saber, “Sus modales ministeriales,” trajo unos excelentes consejos a todos los convencionistas. El siervo de distrito J. W. Stuefloten amonestó: Los modales correctos no son heredados sino que hay que cultivarlos mediante la aplicación de la Palabra de Dios y mucho entrenamiento y disciplina. O. L. Pillars, siervo de circuito, habló francamente acerca del debido comportamiento entre los sexos. Es correcto que se asocien unos con otros, pero hay que evitar toda apariencia de mal.
Vívido consejo que, juzgando por la manera en que se recibió, dió en el blanco vez tras vez, fué dado por U. V. Glass respecto al lugar que ocupa la mujer en la organización. En la Sociedad del Nuevo Mundo la mujer tiene que reconocer sus limitaciones. Ella no tiene autoridad para criticar a los siervos de la congregación ni debe ella resentirse porque le den consejo. Si sirve fielmente dentro de su propia esfera ganará el respeto de todos. El siervo de distrito C. W. Bárber trató del tema de la validez de la ordenación de los testigos de Jehová y señaló que los correctos modales ministeriales incluyen el ser amoroso, humilde y enseñable. N. Kovalak, también un siervo de distrito, escogió como su tema ‘contendiendo vigorosamente por la fe.’ Se hace necesario pelear tan vigorosamente debido a la imperfección en nosotros, debido a los humanos maliciosos en nuestros alrededores y debido a los demonios. El contender vigorosamente significa estudiar con regularidad, asistir fielmente a las reuniones y salir al servicio.
DÍA DE LAS ISLAS DEL PACÍFICO
El domingo por la mañana, 26 de julio, el día final, se oyeron informes interesantes procedentes de las Islas del Pacífico, donde en 13 islas hay 31,304 ministros de Jehová haciendo discípulos de todas las naciones.
Entonces habló el hermano Franz, conmoviendo a su auditorio a medida que reveló, en el desenvolvimiento de su discurso “Llenando la casa con gloria,” que “el Deseado de todas las naciones” mencionado en Aggeo 2:7 que había de venir no era, como pensábamos en un tiempo, el reino de Dios y ni siquiera Cristo Jesús, sino los hombres de buena voluntad que ahora están asociándose con el resto del cuerpo de Cristo y que ahora mismo éstos están cumpliendo la profecía relativa a ‘forjar espadas en rejas de arado.’—Isa. 2:2-4.
John O. Groh, siervo de convención, entonces dió “Algunos datos sobresalientes sobre la asamblea.” Repasó la tremenda actividad que antecedió a la convención, dió estadísticas interesantes respecto a la Ciudad de Trailers y los diferentes departamentos de la convención, e hizo notar la excelente publicidad que dió la prensa. En conclusión expresó su agradecimiento a los 15,000 a 20,000 trabajadores voluntarios por su maravillosa cooperación y también hizo expresión de aprecio a la policía de la ciudad de Nueva York y a los departamentos de sanidad y saneamiento, los sindicatos y los gerentes del estadio Yanqui por su cooperación.
Entre las sesiones en inglés de la mañana y la tarde, se celebró una reunión en que R. M. González, vicepresidente de la Torre del Vigía en Cuba, pronunció un discurso público en español en cierta sección del estadio. Un auditorio de 4,075 concurrentes oyó la conferencia “Es tiempo de dar consideración al camino de Dios,” y después recibió el folleto El camino de Dios es el de amor. En otras tres sesiones en español celebradas antes se presentaron las siguientes nuevas publicaciones en español: ¿Qué ha hecho la religión para la humanidad?, un libro de 384 páginas; Cánticos de alabanza a Jehová, un cancionero con música de 92 páginas; La evolución contra el Nuevo Mundo, un folleto de 64 páginas, y cuatro tratados: Esperanza para los muertos, La trinidad—¿misterio divino o mito pagano?, ¿Cuán valiosa es la Biblia? y Vida en un nuevo mundo.
A las 3:15 se presentó un programa musical en que se destacaron unos arreglos excelentes de cánticos del Reino tocados hermosamente por una orquesta de 77 instrumentos bajo la hábil dirección de V. R. Duncombe del Canadá, el director de música de la convención, y selecciones vocales. A las 4:00 el presidente de la asamblea, Percy Chapman, presentó al conferenciante de la tarde, N. H. Knorr, quien hablaría sobre el tema: “Después del Armagedón—el Nuevo Mundo de Dios.”
Con el tono deliberado debido y vigor sostenido el conferenciante lógica y bíblicamente desarrolló su tema, recibiendo aplausos al pronunciar las primeras dos oraciones. El Armagedón no había de ser simplemente un conflicto político o internacional sino la guerra de Jehová, guerra de proporciones universales. (Apo. 16:14, 16) Ya está en progreso la marcha hacia el Armagedón. No se trata ahora de, ¿Cuál bloc cederá?, sino, ¿Cederán las naciones al Rey de los reyes? Después del Armagedón el nuevo mundo de Dios tomará posesión de todo, trayendo consigo salud, vida eterna y aun la resurrección de los muertos. Al concluir instó: “Prepárense ahora para esa eternidad de toda cosa nueva, para vivir en ella y ser feliz para siempre. ¡Prepárense ahora para vivir DESPUÉS DEL ARMAGEDÓN en EL NUEVO MUNDO DE DIOS!”
Se regalaron gratis dos ejemplares del folleto que contiene esta conferencia a cada uno de los concurrentes. La cuenta oficial mostró que 91,562 personas habían atestado el estadio Yanqui, 25,240 oyeron el discurso en las tiendas de campaña provistas alrededor del estadio para los que no pudieran entrar y 49,027 oyeron en la Ciudad de Trailers, haciendo un total de 165,829 oyentes. WBBR difundió el discurso a otros miles.
Poco a poco el sol fué bajando detrás de la tribuna al oeste. Los últimos momentos de la asamblea venían rápidamente. Sólo un breve intermedio, y entonces la convención levantó su voz en cánticos de acción de gracias a Jehová, después de lo cual se oyeron las “Observaciones de conclusión por el presidente.” Durante la hora que siguió éste dió amonestación sincera, basándose en el Salmo 145, en cuanto a alabar a Jehová, y en el transcurso de la hora anunció que el texto del año para 1954 sería Salmo 145:2: “¡Cada día te bendeciré, y alabaré tu nombre por los siglos y eternamente!”
Hablando entonces informalmente, el hermano Knorr contó de los planes que se habían hecho para que los hermanos Franz, Hénschel y él visitaran a los hermanos de Centro y Sur América. Alabó a la asamblea por su buen comportamiento, y anunció que durante 1954 se celebrarán asambleas de distrito y en 1955 una serie de convenciones que se extenderá a través de los Estados Unidos de América del Norte desde la costa occidental y llegando hasta Inglaterra y al interior de Europa. Luego, con canción y oración de gracias a Jehová se terminó la asamblea más grandiosa jamás celebrada por cristianos.
EN CONCLUSIÓN
En realidad, éste es un pueblo separado y distinto, la sociedad del Nuevo Mundo que se basa en los principios que se exponen en la Biblia. Sus principios dan resultados, porque los que estaban en el estadio Yanqui podían mirar alrededor de ellos todos los días y ver a veintenas de miles de personas, todas dedicadas a Jehová y viviendo en conformidad con esos principios. ¡Verdaderamente el mundo presenció en acción una poderosa demostración del espíritu de Jehová!
[Ilustración de la página 656]
Arriba: Vista desde las graderías de una sesión de la tarde
[Ilustración de la página 657]
Abajo: El estadio Yanqui durante el discurso público, el 26 de julio