La penosa condición de la cristiandad
El hambre espiritual se extiende mientras las iglesias medran
Puede que las iglesias se desborden de nuevos miembros, pero no se ha satisfecho el hambre de alimento espiritual. Asola a la cristiandad un hambre espiritual; se extiende e intensifica a pesar de que aumenta el número de concurrentes a las iglesias. Esto debe hacer que algunas personas se pongan a pensar. Y así pasa. Un artículo iluminador del News-Journal de Mansfield, Ohío, del 18 de septiembre de 1955, llevaba el encabezamiento: “Célebre autor de Mansfield da una mirada a las iglesias, a la religión.” Decía el escritor:
“Una de las reacciones extraordinarias de nuestro tiempo, según mi parecer, es el hambre creciente de grandes números de gente, no sólo aquí en los EE. UU., sino por dondequiera en ciertas partes del mundo, hambre por algo alrededor de lo cual amoldar la vida. . . . Por más raro que parezca, las iglesias aparentemente no están proporcionando lo que se necesita. . . . De vez en cuando recibo cartas absurdas y ridículas con las protestas de algunos clérigos. . . . La esencia de estas cartas es, cosa rara también, casi unánime. Los escritores asumen que porque ellos son predicadores o sacerdotes se hallan en un estado especial y saben más acerca de Dios que cualquier ciudadano decente y benigno. Esto es algo que yo dudo muchísimo. Si se juzga por unas cuantas de estas cartas, algunos de los escritores no sólo demuestran deficiencia intelectual y espiritual, sino que aparentemente son verdaderamente malos. Es cosa segura que a los únicos a quienes ellos pudieran dar consuelo y seguridad sería a los más aterrorizados e ignorantes. . . . Todo esto es un fenómeno de lo más interesante, el cual está aumentando más bien que disminuyendo en fuerza.”
Se confiesa el cautiverio a Babilonia
Las iglesias rurales de los EE. UU. están medrando, en lo que se refiere a dinero y miembros. Como resultado, según dice el clérigo Gibson Winter, de Brighton, Míchigan: “Las secciones rurales han introducido en el mismo centro de la vida de iglesia su concepto de lo que consta feliz éxito.” ¿Qué ha hecho para la gente el “concepto de lo que consta feliz éxito” de la población rural? El episcopal Winter declara, según informó la revista Time del 10 de octubre de 1955:
“Sólo en raras ocasiones se encuentra la fe bíblica en las secciones rurales a pesar de que aumenta el número de miembros de iglesia y también la actividad. . . . A pesar de que hay un fondo de iglesia en nombre, ésta es una masa de gente no convertida y no entrenada que hace que el problema de ser miembro de una iglesia sea semejante a lo que era el problema en el tiempo de Constantino, cuando el cristianismo vino a ser una institución reconocida de la sociedad romana. . . . La tarea de las iglesias como testigos del señorío de Cristo . . . ha sido hundida. . . . La prueba de toda empresa parroquial es si resultará en progreso monetario y numérico. . . . El cautiverio de la iglesia es una tragedia nacional del primer orden. . . . Bien puede ser la palabra de juicio divino sobre nosotros como iglesia de Dios. Por nuestras transgresiones y complacencia, se nos ha entregado a Babilonia.”