La iglesia no tiene valor para hablar la verdad
Si algo debe poder hacer una iglesia que dice ser cristiana debe ser decirle a su gente qué cosa es correcta y qué no es correcta. Uno que se queja de que la iglesia bautista de Escocia no puede hacer esto respecto a la cuestión de la guerra porque no tiene el valor para hacerlo es Juan McKendrick, que se cuenta entre sus clérigos. Según dice él, la guerra es algo absolutamente opuesto a los propósitos de redención de Cristo, y su iglesia no entrará en la plenitud de su poder sino hasta que tenga el valor de decir lo que debe decir respecto a la guerra. Declaró adicionalmente: “Yo he ejercido un ministerio—un ministerio en que salgo a los hombres y en que se incluye actividad al aire libre—y vez tras vez sucede que tengo que decir irónicamente que la Iglesia no tiene ninguna palabra que decir en este asunto. Me da pena saber que el informe de nuestro comité de servicio social esté saliendo sin ninguna palabra acerca de la situación actual.” Tal vez Juan McKendrick se sentiría más cómodo en la sociedad del nuevo mundo de los testigos de Jehová, ¡pues a ésta ciertamente no le falta valor para hablar francamente concerniente a lo que la Biblia dice respecto a las guerras!—Herald de Glasgow del 25 de octubre de 1957.