Ponderando las noticias
Escasean los comestibles
● A nadie hay que decirle que hay un alza vertiginosa en el precio de los comestibles. Aumentó en aproximadamente 20 por ciento en los Estados Unidos el año pasado, y todavía sigue en rápido ascenso. Si esta situación existe en uno de los países más prósperos del mundo, ¿cuán serias son realmente las escaseces de alimento en otros lugares?
El economista agrícola Lester Brown advierte que la seguridad alimentaria mundial pende de un hilo. Hay muy poco abastecimiento de granos. Si el tiempo malo perjudica las siembras de este año, como lo hizo en 1972, las consecuencias serían desastrosas. ¡El Dr. Norman E. Borlaug, ganador del Premio Nobel de la Paz en 1970 y preeminente perito agrícola, prevé que la inanición matará hasta a 50 millones de personas!
Ya un sinnúmero de miles de personas han muerto de inanición en una enorme sección del África. Y el secretario-general de las Naciones Unidas, Kurt Waldheim, advierte: “Si no se toma suficiente acción dentro de los próximos meses, países podrían desaparecer de la faz del mapa.”
¿A qué se deben esas escaseces en este siglo veinte con su agricultura mecanizada, científica? Esta situación es significativa. El libro bíblico de Revelación predijo hace mucho que un simbólico “caballo negro” sería cabalgado, y que precios altos y escasez de alimento marcarían la senda que seguiría. Y Jesucristo profetizó que “escaseces de alimento” señalarían la “conclusión del sistema de cosas.” En los acontecimientos recientes muchas personas ven un cumplimiento de estas profecías bíblicas. ¿Lo ve usted?—Mat. 24:3, 7; Rev. 6:5, 6.