Ponderando las noticias
Vendiendo sermones
● La revista “Parade” informa: “Para ministros que están enfermos, que son perezosos o no están dispuestos a producir sermones actualizados los domingos, hay un servicio de sermones vendidos que ha estado medrando por años.” Este servicio de sermones se puede obtener por suscripción de Eric Thomas, pastor de la Iglesia Anglicana de Sta. María en Alverstoke, Inglaterra. Él dice que ha vendido unos 1.000 sermones a gente de “todas las sectas religiosas por todo el mundo.”
El pensar en recibir con regularidad por suscripción sermones preparados, para usarlos desde el púlpito, quizás les parezca atractivo a algunos clérigos, y sin duda les ahorra tiempo y esfuerzo. Pero ¿cómo podrían dichos sermones reflejar su conocimiento de la Biblia o de sus propios sentimientos sinceros? No hay ninguna probabilidad de que esos sermones pudieran hacer tal cosa. Tampoco podría esperarse que los ministros que los usaran pudieran manifestar así el mismo aprecio intenso a otros que desplegó el apóstol cristiano Pablo. Él pudo decir a los ancianos de la congregación de Éfeso que, mientras estuvo con ellos, estuvo “sirviendo como esclavo al Señor con la mayor humildad de mente y con lágrimas y con las pruebas,” mientras que ‘no se había retraído de decirles todo el consejo de Dios.’ (Hech. 20:17-20, 26, 27) Ciertamente Pablo habló de una manera sincera que honraba a Jehová Dios y ayudaba a otros.
¿“Lenguaje predispuesto a lo masculino”?
● El “Times” de Nueva York del 5 de junio de 1977 informó: “La nueva edición de la Versión Normal Revisada [en inglés] de la Biblia, cuya publicación se ha fijado para mediados de los años ochenta, puede lograr mucho en cuanto a eliminar el lenguaje predispuesto a lo masculino, pero no completamente, según el Dr. Bruce M. Metzger, docto en asuntos bíblicos y profesor de lenguaje y literatura del Nuevo Testamento en el Seminario de Princeton.”
El comité de revisión, que consta de veinticuatro doctos con el Dr. Metzger como presidente, se propone retener la palabra “hombre” en varios lugares. Sin embargo, en otros lugares se eliminará la fraseología masculina.
El eliminar de la Biblia lo que algunos quizás llamen “lenguaje predispuesto a lo masculino” pudiera serle atractivo a ciertos individuos. Pero el hacer esto para buscarse el favor de éstos puede resultar en el grave error de cometer violencia contra la Palabra inspirada de Dios. Más de una vez, las Escrituras advierten contra el hacer añadiduras o quitar partes a la Palabra de Jehová Dios. (Deu. 4:2; 12:32; Rev. 22:18, 19) Ciertamente reflejan una actitud en armonía con lo aceptable a Dios para con las Escrituras las palabras: “Todo dicho de Dios es refinado.”
‘Absténganse de la sangre’
● El periódico brasileño “Folha de S. Paulo” informa: “Se pueden transmitir varias infecciones por medio de transfusiones de sangre y plasma. . . . La hepatitis viral, la sífilis, el paludismo y la enfermedad de Chagas son las más comunes. La enfermedad de Chagas causada por la transfusión de sangre no es una excepción, pues de ella se informa con regularidad en las publicaciones médicas. . . . muchos casos de esta índole no se dan a conocer por diversas razones, como las de indiferencia, encubrimiento, falta de diagnóstico. Sin embargo, este tema está obteniendo atención enfática ahora, por lo menos en São Paulo, puesto que hay amplia evidencia de que la infección por la transfusión de sangre ocurre en un número significativo de personas.”
Cuando el parásito que produce la enfermedad de Chagas se establece en la fibra muscular del corazón, puede producir una inflamación fatal del miocardio. La muerte puede ser súbita, pero, si no lo es, la persona infectada rara vez vive más allá de los cincuenta años de edad.
Los cristianos verdaderos no se abstienen de la sangre principalmente por razones médicas. Se abstienen por mandato divino. (Gén. 9:3, 4) No obstante, se recibe el beneficio asociado de proteger uno su salud cuando se obedece la ley de Dios que dice: “Sigan absteniéndose de . . . sangre.”—Hech. 15:28, 29.