Manifieste su aprecio
1 Cuando uno aprecia genuinamente algo bueno, ¿no lo muestra por su actitud y acciones? Con respecto a la benevolencia y la bondad amorosa que Jehová nos concede por medio de Jesús, el apóstol Pablo exclamó: “A Dios vayan las gracias por su indescriptible don gratuito.” (2 Cor. 9:15) Pero piense, ¿era eso meramente habla de parte de Pablo? De ningún modo. De muchísimas maneras manifestó su profundo aprecio a Dios. Las acciones de Pablo, la manera en que vivió su vida, pusieron de manifiesto gratitud para con Dios.
2 ¿No tenemos nosotros también mucho por lo cual estar agradecidos? Jehová nos ha dado vida ahora, así como la esperanza de vivir para siempre en el paraíso. Aun ahora el andar en el camino de la verdad nos ha traído las inapreciables bendiciones de paz mental, mucha seguridad en una relación estrecha con compañeros cristianos y la seguridad de que nuestras necesidades materiales serán satisfechas. La mayoría de la humanidad continúa mostrándose desagradecida los unos para con los otros. Lo que es aún peor, no muestran gratitud alguna para con Dios. (2 Tim. 3:2) En contraste, nuestro aprecio genuino debe impulsarnos a expresar nuestro agradecimiento gozosamente.—Sal. 107:21, 31.
UNA OPORTUNIDAD PARA MOSTRAR APRECIO
3 La declaración pública de nuestra esperanza suministra una evidencia sumamente convincente de nuestro aprecio por Dios. Manifiesta nuestro intenso amor a Dios y al prójimo. Tales muestras de gratitud agradan mucho a Jehová. (Sal. 147:1, 11) Cualquier esfuerzo razonable por aumentar esa declaración pública seguramente recibe su bendición. El agradecimiento debe impulsarnos a servir de toda alma, haciendo lo mejor que podemos. Ese punto de vista a menudo hace que muchos piensen seriamente en cuanto a cómo pudieran emprender el servicio de precursor.
4 El meditar un poco en este asunto puede hacer que usted considere que sus circunstancias le permiten servir de precursor. Pregúntese: ¿Estoy convencido de que mi esfuerzo actual es todo lo que puedo hacer? Puesto que verdaderamente deseo manifestar mi aprecio por Dios y ver a otros salvarse, ¿hay algún modo en que puedo llegar a ser precursor? Le sería provechoso hablar con un precursor experimentado o con el superintendente de circuito, quienes quizás puedan darle sugerencias útiles en cuanto a cómo programar su tiempo, hallar trabajo de tiempo parcial o hallar a alguien con quien trabajar.
5 Los jóvenes tienen una razón especial para considerar esto ahora. Para que la vida tenga significado y propósito, es necesario ponerse metas que valgan la pena y esforzarse por alcanzarlas en la juventud. ¿Cómo quieres usar tu vida? ¿Qué carrera puedes escoger que resulte ser la más satisfactoria y produzca beneficios duraderos? ¿Pudiera ser el servicio de precursor la respuesta? Al igual que muchos jóvenes que han emprendido esta actividad, es posible que halles que esta carrera ofrece un gozo y paz mental que no han obtenido los que van en pos de metas que se basan en deseos materiales. Esto ciertamente sería una manera excelente de expresar tu aprecio por Dios.
OPORTUNIDADES PARA TODOS
6 Algunos hermanos y hermanas tienen que reconocer de modo realista que, a pesar de lo mucho que les gustaría hacerlo, su situación no les permite servir de precursores regulares. Aun así, el aprecio les infunde el mismo espíritu de servir de toda alma. Para muchos de ellos, los días festivos, las vacaciones y los despidos temporeros se convierten en oportunidades selectas para servir de precursores temporeros. Algunas familias aúnan sus recursos, ayudando a uno o más miembros de la familia a servir de precursores. De vez en cuando otros pueden aumentar su actividad como publicadores de congregación, programando de vez en cuando días enteros de servicio. Quizás de vez en cuando puedan acompañar a un precursor en el servicio por todo un día.
7 Muchas personas nuevas están asistiendo a las reuniones, y las buenas cosas que están aprendiendo, combinadas con el interés amoroso que se muestra en su bienestar, quizás hayan hecho brotar sentimientos de gratitud en su corazón. La esperanza que han adquirido recientemente quizás esté tratando de expresarse por medio de la declaración pública. (Rom. 10:10) Aquellos de entre nosotros que los conocemos bien podemos animarlos y ayudarlos. Si tienen el deseo y califican para ello, sin falta extiéndanles una invitación afectuosa para que se nos unan en expresar aprecio a Dios por medio del servicio del campo.
8 Lo que se ha declarado nos anima a pensar en hacer más en el servicio de Jehová. Es semejante a la amonestación que Pablo dio a sus hermanos de que ‘siguieran haciéndolo más plenamente.’ (1 Tes. 4:1) ¿Por qué razón? No para compilar un registro impresionante de servicio del campo. Ni tampoco por razones de orgullo personal o para compararse con otros. Es debido a que la gratitud por las provisiones maravillosas de Jehová hace que nuestro corazón reboce de agradecimiento.
9 Debido a que manifestaban su aprecio con celo, Pablo encomió a sus hermanos por “su fiel obra y su amorosa labor y su perseverancia debida a su esperanza.” (1 Tes. 1:3) ¿Puede usted ver alguna manera de demostrar su aprecio más cabalmente?
Persistan en “actos santos de conducta” y “hechos de devoción piadosa.”