Asamblea de Distrito de 1986 “Paz Divina”
1 Los testigos de Jehová esperan con gran interés las Asambleas de Distrito de 1986 “Paz Divina” programadas para este verano. En La Atalaya del 1 de febrero de 1986 se suministró una lista de las 130 asambleas programadas para los Estados Unidos. Todos querremos hacer planes para asistir.
2 Desde tiempos antiguos los siervos de Jehová se han reunido en asambleas. Por ejemplo, mientras los israelitas estaban en Egipto, Moisés y Aarón reunieron a los ancianos para darles instrucción especial. (Éxo. 4:27-31.) Después, según ordenó Dios, los israelitas se reunieron al pie del monte Sinaí. En dicha ocasión presenciaron la impresionante demostración del poder de Jehová y recibieron sus mandamientos. (Éxo. 19:10-19.) Más tarde, cuando se construyó el templo, Salomón reunió al pueblo en Jerusalén para la dedicación de ese edificio. La asamblea duró muchos días, y cuando la gente regresó a sus hogares, estaba ‘gozosa y sintiéndose bien en el corazón por el bien que Jehová había ejecutado para con David y para con Salomón y para con Israel su pueblo’. (2 Cró. 5:1–7:10.) El pueblo siguió reuniéndose regularmente para observar las fiestas anuales y, como resultado, experimentó muchas bendiciones.
3 Los cristianos primitivos siguieron este mismo modelo establecido. En muchas ocasiones se juntaron grandes multitudes para escuchar a Jesús hablar. ¡Imagínese las bendiciones que recibieron los que tuvieron el privilegio de estar presentes cuando Jesús pronunció su Sermón del Monte! (Mat. 5:1–7:29.) Después de la muerte de Jesús, sus seguidores continuaron reuniéndose, como en el día del Pentecostés de 33 E.C. cuando se derramó el espíritu santo. (Hech. 2:1-4.) El apóstol Pablo amonestó: “Considerémonos unos a otros para incitarnos al amor y a las obras excelentes, sin abandonar el reunirnos, como algunos tienen por costumbre, sino animándonos unos a otros, y tanto más al contemplar ustedes que el día se acerca”. (Heb. 10:24, 25.)
4 También en tiempos recientes las asambleas ocupan un lugar especial en nuestro arreglo teocrático. No son meramente ocasiones sociales, sino que tienen el propósito de instruir y unir a los siervos de Jehová. Todos los presentes reciben la misma instrucción al mismo tiempo. Esto promueve paz y unidad. Se lee y considera la Palabra de Dios y se da guía clara. Tales reuniones resultan en ricas bendiciones espirituales y son ocasiones de gran gozo.
ASISTA A TODAS LAS SESIONES
5 Las asambleas programadas para este verano destacarán el tema “Paz Divina”. Jehová es el Dios de paz, y él ha bendecido a su pueblo con paz también. (Sal. 29:11.) Cada día se hará resaltar un aspecto diferente de este tema.
6 Haga todo esfuerzo posible para asistir los cuatro días. La sesión de apertura comenzará el jueves a la 1.30 de la tarde. Esto permitirá tiempo suficiente para que la mayoría de los hermanos viajen el jueves por la mañana a la ciudad donde se celebre la asamblea.
7 De nuevo se recomienda enfáticamente que asista a la asamblea a la cual su congregación ha sido asignada y que siga las instrucciones suministradas en el suplemento de Nuestro Ministerio del Reino de enero de 1986. Sin embargo, reconocemos que quizás haya circunstancias atenuantes, tales como planes hechos de antemano para vacaciones que no puedan cambiarse o la necesidad de ayudar a parientes que vivan en otra zona. En todo caso, sírvase cooperar estrechamente con las instrucciones dadas por el coordinador de asamblea de su localidad.
ARREGLOS PARA EL BAUTISMO
8 El bautismo siempre es uno de los aspectos sobresalientes de una asamblea de distrito. En la mayoría de las asambleas, el discurso para los que piensan bautizarse se pronunciará el sábado por la mañana. De acuerdo con las instrucciones suministradas en el libro Nuestro ministerio, páginas 173-175, los ancianos de la localidad deberían haber repasado las preguntas con los que piensan bautizarse. Todo el que planea bautizarse debe traer consigo un traje de baño modesto y una toalla.
9 Sírvase notar que la Sociedad desea que todos los que piensan bautizarse permanezcan de pie en la sección reservada para ellos y canten el cántico seleccionado para concluir la sesión que incluye el discurso de bautismo, a excepción del último verso. Los acomodadores asignados ayudarán a los candidatos a salir en fila mientras se canta el último verso. El auditorio debería permanecer para cantar el cántico completo, facilitando así la salida de los que piensan bautizarse. Se apreciará mucho su cooperación en seguir estas instrucciones.
SEA UN BUEN OYENTE
10 Todos deseamos ser buenos oyentes. En el Israel antiguo se dio el siguiente mandamiento: “Congrega al pueblo, los hombres y las mujeres y los pequeñuelos [...] a fin de que escuchen y a fin de que aprendan”. (Deu. 31:12.) Nos reunimos con el propósito de ser enseñados por Jehová. Proverbios 1:5 declara: “El sabio escucha y absorbe más instrucción”.
11 En La Atalaya del 1 de febrero de 1986, página 30, se suministró excelente consejo con relación a lo necesario que es escuchar cuidadosamente mientras asistimos a la asamblea. En parte decía: “Para muchos, asistir a la asamblea significa invertir mucho tiempo y dinero. Entonces, seamos puntuales y cuidemos nuestro estado físico. Esto significa no comer ni beber en demasía, ni permanecer levantados hasta tarde en la noche. Más bien, procuremos ser moderados y acostémonos a una hora apropiada para estar descansados y listos, a fin de aprovechar todo el alimento espiritual que se nos presente. Mientras el programa esté en curso, mantengámonos sentados y atentos, no dando paseos ni conversando [...] Hagamos esto antes o después de las sesiones. Vayamos a la asamblea firmemente determinados a edificarnos espiritualmente”. ¿Nos esforzaremos por poner en práctica este excelente consejo?
12 Nos complace que, en su mayoría, los delegados a las asambleas sí hacen un esfuerzo determinado por escuchar atentamente el programa. Se ha observado que las familias se sientan juntas, toman notas significativas y siguen la lectura de los textos bíblicos en sus ejemplares personales de la Biblia. Un periodista que asistió a una de nuestras asambleas en Nairobi, Kenia, hizo el siguiente comentario: “Todos parecían reverenciar a Jehová. Todos, incluso los niños, escuchaban pacientemente a un orador tras otro. Estuvieron sentados desde la 1.30 hasta las 5.10 de la tarde”. Nuestros hermanos de África nos suministran un ejemplo excelente que deberíamos seguir. Un periódico de Argentina dijo que el “orden, limpieza y un marcado silencio” de los que asistieron caracterizó la asamblea de distrito que se realizó recientemente en Buenos Aires. Nuestros hermanos de ese país especialmente aprecian el privilegio de reunirse juntos, puesto que nuestra obra en ese país estuvo proscrita por muchos años.
13 Como se mencionó anteriormente, no deseamos distraer a otros mediante hablar, caminar o usar innecesariamente los baños durante el programa. Un anciano de los Estados Unidos que asistió a una asamblea grande el verano pasado informó que al comienzo de cada sesión tanto a él como a su esposa se les hizo difícil oír debido al movimiento, la conversación y el buscar asientos por parte de los que llegaron tarde. Él dijo que aun durante el resto del programa hubo constante movimiento y mucha conversación en las tribunas y en los pasillos.
14 Los padres querrán asumir la responsabilidad de supervisar adecuadamente a sus familias, asegurándose de que sus hijos escuchen y aprendan. Se sugiere que los cabezas de familia repasen con su familia los consejos suministrados en este suplemento antes de asistir a la asamblea. Después, todos querrán poner en práctica la información. Esto suministrará un buen ejemplo para otros, especialmente para las familias que recientemente se estén asociando con los testigos de Jehová. En una asamblea se observó que un grupo de hermanas adolescentes se sentaron juntas, separadas de sus padres. No prestaron atención al programa; ni siquiera participaron en los cánticos ni las oraciones. Más bien, hablaron entre sí y comieron bocadillos durante toda la sesión, mostrando poco interés en lo que se presentaba desde la plataforma. Su comportamiento distrajo en gran manera a los que estaban sentados alrededor de ellas. Esto ilustra los problemas que pueden desarrollarse cuando los padres son permisivos y no se sientan con sus hijos ni los controlan.
EL RESERVAR ASIENTOS
15 En Nuestro Ministerio del Reino de mayo de 1985 se hicieron algunos ajustes con relación a reservar asientos. En la página 5 del suplemento decía: “PUEDEN RESERVARSE ASIENTOS SOLO PARA LOS MIEMBROS DE SU FAMILIA CERCANA Y PARA CUALQUIERA DEL GRUPO QUE VIAJE EN EL AUTOMÓVIL DE USTED”. Sírvase no colocar, en ningún momento, artículos adicionales en los asientos. Esto hará posible que los que buscan asientos desocupados los hallen con facilidad. Se apreció que muchos se esforzaron por poner en práctica este consejo. Este año, de igual manera, querremos interesarnos no solo por nuestras necesidades personales sino también por las de otros. (Gál. 6:10; 1 Cor. 13:5.)
16 Lamentamos el hecho de que aún se siguen recibiendo informes negativos. Se informa que en un lugar de asamblea ciertos individuos, vestidos con ropa de dormir, entraron al auditorio aproximadamente a las 4.30 de la mañana el domingo y colocaron toallas, sábanas, y cordones de extensión en centenares de asientos. Esto se hizo a pesar de que había suficientes asientos disponibles para todos los que asistieran. En otro lugar de asamblea —una que se realizó en un estadio abierto— un hermano informa que ciertos delegados establecieron derechos territoriales por medio de colocar toldos sobre secciones enteras de asientos. Muchos de estos asientos no se usaron. Algunos estuvieron ocupados durante las sesiones por cestas para el almuerzo y termos para bebidas. Entre tanto, muchas personas, algunas de ellas de edad avanzada, buscaban asientos y no pudieron hallarlos.
17 ¿No nos entristecen estos relatos? ¿Cómo nos comportamos nosotros y los miembros de nuestra familia al respecto? ¿Tomamos la delantera en mostrar humildad, comprensión y compasión? (Luc. 14:7-11; Fili. 2:3; 1 Ped. 3:8.)
NUESTRA VESTIMENTA Y ARREGLO
18 Prescindiendo del lugar que se utilice, este llega a ser nuestro “Salón del Reino” durante la asamblea, y, por lo tanto, debemos actuar y vestirnos en armonía con esto. Nuestros hermanos y hermanas han hecho muy bien al respecto, y, como resultado, se ha dado un excelente testimonio. Note la siguiente experiencia del Canadá: Una hermana, en camino a la asamblea, esperaba para encontrarse con un pariente. Notó que una señora que estaba parada cerca de ella observaba atentamente a los asambleístas mientras se dirigían al estadio. Luego, esta señora se volvió hacia la hermana y dijo: “Estas personas sobresalen por su manera de vestir para ir a una asamblea. Visten tan bien, de manera nítida y limpia. Es asombroso ver cómo lucen sus jóvenes. ¡Entre ellos no se ve ni siquiera un par de “jeans”! Esto es sorprendente en vista de que son jóvenes”. Esta señora aceptó de buena gana una invitación a la asamblea. Quedó impresionada por lo que vio.
19 Nuestra vestimenta no solo debería ser modesta y de buen gusto sino también práctica para la ocasión. Por ejemplo, si el lugar de asamblea tiene aire acondicionado, sería bueno llevar consigo una chaqueta o un suéter. Si se usa un estadio u otra instalación al aire libre, sería bueno usar prendas de vestir de manga larga, sombrero, y así por el estilo, para protegerse del sol y del clima. Se recomienda tener a mano impermeables y paraguas en caso de que llueva. Esto requiere que hagamos planes por adelantado.
20 ¿Pero qué hay de nuestra apariencia personal cuando estamos en el lugar de hospedaje o mientras nos desplazamos en la ciudad de asamblea? Un superintendente viajante notó que, cuando algunos hermanos regresaban a sus alojamientos, se cambiaban rápidamente y se ponían ropa que los hacía lucir como si fueran de excursión o a una comida campestre. Algunos hasta usaron vestimenta inmodesta y muy a la moda que hacía difícil identificarlos como testigos de Jehová. Querremos ser discretos para no dar causa alguna para tropiezo. (2 Cor. 6:3.)
NUESTRA CONDUCTA EN LA CIUDAD DE ASAMBLEA
21 Todos debemos estar alerta para mantener una norma de conducta cristiana excelente mientras nos hospedamos en los hoteles y moteles de la ciudad de asamblea. En vez de estar en un estado de ánimo social y festivo, debemos manifestar una disposición espiritual y comportarnos como ministros.
22 Se han informado algunos problemas. Un grupo de Testigos adolescentes que se hospedaban en un motel pasaron mucho tiempo en las canchas de tenis y en los corredores, y bailando el “break-dance” al son de música sumamente alta. Una hermana empleada en otro motel también informó que se sentía avergonzada debido a la conducta dudosa de algunos testigos de Jehová que se hospedaron allí. Parece que hubo quienes bebieron en exceso, y algunas habitaciones quedaron muy desaseadas. La gerencia del hotel se quedó con una mala impresión. Aunque estos pudieran ser incidentes aislados, nos ayudan a ver la necesidad de ser cuidadosos con relación a nuestra conducta personal y la impresión que causamos en otros.
23 Debemos recordar también que como cristianos tenemos que comportarnos honradamente en todo tiempo. No deberíamos llevarnos la lencería u otros “recuerdos” de los moteles, puesto que esto sería robar; tampoco debemos ser mentirosos con relación a cuántas personas van a quedarse en la habitación cuando hacemos reservaciones. La fidelidad a las justas normas de Jehová, aun en cosas pequeñas, resultará en un buen testimonio. (Luc. 16:10.)
24 Mientras estemos fuera de nuestro hogar quizás comamos en restaurantes o recibamos servicios por parte del personal de hoteles y moteles. Los suplementos de Nuestro Ministerio del Reino de junio de 1980 y 1981 suministraron información útil con respecto al dar propinas. Aunque en los negocios que se especializan en la preparación y el despacho rápido de alimento no hay servicio de camarero o camarera y no hay que dar propina, en restaurantes donde se provee tal servicio, normalmente se tiene por costumbre dar una propina generosa y apropiada. (Pro. 11:25.) Para la persona que rinde estos servicios, puede que las propinas sean la fuente principal de ingresos. Si usted no está seguro de lo que deba hacer, pudiera preguntar al respecto. No queremos dar por sentado tales asuntos o mostrar desconsideración, lo cual pudiera perjudicar al pueblo que lleva el nombre de Jehová.
ARREGLOS PARA EL SERVICIO DEL CAMPO
25 Generalmente, las personas que viven en la ciudad donde se celebrará la asamblea están al tanto de ella mediante los medios publicitarios. A veces esto despierta su interés y tienen muchas preguntas. Por lo tanto, a menudo podemos dar un testimonio no solo por nuestra conducta excelente, sino también por medio de hablar directamente con las personas. Busque oportunidades para testificar informalmente mientras esté de compras, cuando viaje al lugar de asamblea o cuando regrese, y así sucesivamente.
26 Además, de nuevo se harán arreglos en cada asamblea para participar en el servicio del campo el viernes, después de concluir la sesión a las 3.00 de la tarde. Esto nos dará la oportunidad de participar por una hora o dos en el servicio. Sírvanse traer consigo un suministro de revistas actuales para usarlas en esta actividad. También se sugiere, si es posible, que con anticipación se obtenga un territorio y que se hagan arreglos con relación a los grupos que viajen en su auto. El hacer esto aumentará su aprecio por la asamblea.
SERVICIO VOLUNTARIO
27 Se requiere mucho trabajo para el funcionamiento de una asamblea y para atender las necesidades de los que asisten. Se necesitan muchos trabajadores voluntarios. El coordinador de asamblea de su congregación recibirá información acerca de los departamentos que necesiten voluntarios, y hará saber esto a la congregación. Mediante él, usted puede hacer arreglos para servir de voluntario. Los jóvenes menores de 16 años de edad deben trabajar con sus padres o con otro adulto en todo tiempo. Animamos a los padres y a sus hijos a que, siempre que sea posible, sirvan de voluntarios y trabajen juntos.
28 A última hora se necesitarán algunos voluntarios. Si desea ayudar, sírvase dirigirse al departamento de Servicio Voluntario cuando llegue al lugar de asamblea. Su servicio se agradecerá muchísimo, y este ayudará a que la asamblea funcione con éxito. (Sal. 110:3.)
NECESIDADES DE ALIMENTACIÓN
29 De nuevo se están haciendo arreglos especiales para cuidar de nuestras necesidades físicas. Las provisiones de alimento y bebidas serán semejantes a las que se han suministrado en las asambleas de distrito en los últimos años. ¿No apreciamos la ardua labor de nuestros hermanos en el Departamento de Alimentos a medida que nos suministran alimento adecuado a un costo razonable?
30 Los boletos para obtener alimentos y bebidas en la asamblea se podrán conseguir en hojas de diez boletos por valor de $1,00. Se sugiere que los compre por adelantado en su congregación. Compre suficientes boletos para suplir a su familia el alimento que necesitará durante los primeros dos o tres días de la asamblea. Podrá adquirir boletos adicionales en la asamblea.
CONCLUSIÓN
31 Que nosotros y nuestras familias estemos resueltos a asistir a todas las sesiones de la Asamblea de Distrito de 1986 “Paz Divina” y a concentrarnos en el programa. No quedaremos desilusionados. Estemos conscientes de las necesidades de nuestros hermanos y hermanas, haciendo todo lo posible por mostrar interés y amor cristiano. (Gál. 6:10.) En un mundo lleno de contienda y violencia, ¡qué grandioso privilegio tenemos de poder adorar al Dios de paz y reunirnos pacíficamente con nuestros hermanos! Que siempre sigamos ‘observando la unidad del espíritu en el vínculo unidor de la paz’. (Efe. 4:3.)
[Recuadro en la página 6]
Recordatorios para la asamblea de distrito
ALOJAMIENTO: Se aprecia mucho la cooperación de ustedes en usar la lista de alojamientos que la organización de asamblea les proveyó para que seleccionen sus habitaciones. Si piensa alojarse en la ciudad en que se celebrará la asamblea y todavía no ha hecho la reservación ni ha enviado el depósito, es preciso que lo haga inmediatamente. Si por alguna razón tiene que cancelar el alojamiento que seleccionó de la lista, debe escribir o telefonear directamente al hotel o motel con tanta anticipación como sea posible. Si ha hecho reservaciones dobles con el fin de escoger la habitación que más le guste al llegar al lugar de asamblea, sírvase cancelar una de estas inmediatamente. El hacer reservaciones dobles y no cancelar la reservación que no se va a usar perjudica nuestra reputación y nuestra relación con los gerentes de moteles que nos dan tarifas especiales.
El coordinador de asamblea de la congregación debe cerciorarse de que los formularios de alojamiento para los que tienen necesidades especiales (Special Needs Room Request Form) se hayan enviado prontamente a la dirección de la oficina de la asamblea correspondiente. Si tiene que cancelar un alojamiento que haya conseguido mediante el arreglo para los que tienen necesidades especiales, debe notificar tanto al amo de casa o al propietario del hotel o motel como al Departamento de Alojamiento de la asamblea para que se pueda asignar la habitación a otra persona.
Si usted la pide, el Departamento de Alojamiento de la asamblea le proveerá la información que tenga sobre cualquier instalación comercial para casas remolques y para acampar que haya en la zona de la asamblea. Con su solicitud, sírvase adjuntar un sobre con su dirección y una estampilla.
COCHECITOS PARA NIÑOS: En muchos estados no se permiten los cochecitos para niños en lugares públicos de reunión. Los reglamentos contra incendios prohíben el dejarlos en los corredores, los pasillos o entre las filas de asientos. Puesto que grandes muchedumbres causan congestiones, los cochecitos para niños son peligrosos, no solo para el niño, sino también para cualquiera que pudiera tropezar o dar un traspié con estos. Sin embargo, se permiten las sillas para infantes o las que se utilizan en los automóviles para sentar a los niños, puesto que estas pueden sujetarse a los asientos al lado de los padres. Agradecemos su cooperación al respecto.
HORARIO DEL PROGRAMA: El que estemos en nuestros asientos desde el comienzo del programa es el proceder sabio y muestra aprecio. En la mayoría de las asambleas este comenzará a la 1.30 de la tarde el jueves, a las 9.20 de la mañana el viernes y a las 9.30 de la mañana sábado y domingo. Desplegamos las mismas cualidades excelentes si hacemos arreglos para quedarnos hasta el fin de cada una de las sesiones. El jueves el programa concluirá con cántico y oración a las 5.10 de la tarde. Se apartará el viernes por la tarde para hacer un esfuerzo especial por participar en el servicio del campo después del cántico y la oración de conclusión a las 3.00 de la tarde. El sábado el cántico y la oración de conclusión serán a las 5.00 de la tarde, y el domingo a las 4.00 de la tarde.
REUNIONES PARA LOS INTERESADOS EN EL SERVICIO DE BETEL Y LA ESCUELA DE GALAAD: El viernes se celebrará una reunión para los precursores entre los 20 y 40 años de edad que estén interesados en asistir a la Escuela de Galaad con el fin de recibir entrenamiento para el servicio misional. El sábado habrá una reunión para cualquier publicador dedicado entre los 19 y 35 años de edad que sea residente de los Estados Unidos y desee emprender el servicio de Betel. Para saber las horas exactas de estas reuniones y dónde se celebrarán, sírvase ver el programa de asamblea para la ciudad correspondiente.
IDENTIFICACIÓN DE PRECURSOR: Todos los precursores regulares y especiales, así como los superintendentes viajantes, deben traer a la asamblea su tarjeta de Identificación y Asignación de la Watchtower (S-202-S). Los que hayan estado en la lista de precursores por seis meses al tiempo de la asamblea de distrito a la que asistan pueden recibir $18,00 en boletos para la asamblea al presentar su tarjeta de Identificación de la Watchtower en esa asamblea solamente. Trate la tarjeta con tanto cuidado como si fuera dinero en efectivo. No se la puede reemplazar en el lugar de asamblea. Los precursores podrán obtener gratuitamente cualquier publicación nueva u otra literatura a tarifa de precursor con solo mostrar su tarjeta de Identificación de la Watchtower en el mostrador de literatura. Los que sirven en Betel pueden obtener estas mismas provisiones al mostrar su tarjeta de identificación de Betel.
TARJETAS PARA LA SOLAPA: Estas tarjetas se proveen para anunciar la asamblea y para que se pueda identificar fácilmente a nuestros hermanos y a nuestras hermanas en la concurrencia. Con este fin, sírvanse usar la tarjeta para la solapa, que se ha diseñado especialmente para la ocasión, durante la asamblea y en los viajes de ida y vuelta al lugar donde se celebra esta. La tarjeta no solo es un medio de identificarnos, sino que a menudo contribuye a dar un excelente testimonio mientras viajamos. Deben obtenerse mediante la congregación, pues no estarán disponibles en las asambleas. Las tarjetas para la solapa son a dos centavos cada una. (La Sociedad ya ha enviado a cada congregación las tarjetas para la solapa, pero la congregación debe hacer su pedido de portatarjetas plásticos.)
DOS PALABRAS DE ADVERTENCIA: Prescindiendo del lugar donde estacione su vehículo, debe cerrarlo en toda ocasión y nunca debe dejar dentro de este artículos a la vista. Si es posible, guarde sus pertenencias dentro del portaequipaje de su automóvil. Además, esté alerta, pues las muchedumbres reunidas atraen a los ladrones y carteristas. Incluso, no deje nada de valor en los asientos del local de asamblea si no va a haber alguien que los cuide. Además, se ha informado que el riesgo de caer en las escaleras y las rampas es mayor para las hermanas que usan zapatos de tacón alto.