¿Por qué necesitamos el Estudio de Libro de Congregación?
1. ¿Cuáles fueron los orígenes del Estudio de Libro de Congregación?
1 En 1895, los grupos de estudio de los Estudiantes de la Biblia, como se llamaba entonces a los testigos de Jehová, recibieron el nombre de Círculos de la Aurora para Estudios Bíblicos. Estas reuniones, en las que se analizaban los tomos de la obra Millennial Dawn (La Aurora del Milenio), pasaron a denominarse posteriormente Círculos Bereanos para Estudios Bíblicos (Hech. 17:11). Por lo general consistían en un grupo pequeño de personas que se reunían en casas particulares una noche conveniente para todas ellas. Estas reuniones fueron las precursoras del Estudio de Libro de Congregación.
2. ¿Cómo contribuimos a “un intercambio de estímulo” en el estudio de libro?
2 Ánimo y ayuda. Debido a que el tamaño de los grupos de estudio se mantiene reducido, los asistentes cuentan con más oportunidades de expresar su fe públicamente. Como resultado se produce “un intercambio de estímulo [...] cada uno mediante la fe del otro” (Rom. 1:12).
3, 4. ¿Cómo nos ayuda el estudio de libro a efectuar nuestro ministerio?
3 Observando la forma de enseñar del superintendente de estudio de libro aprenderemos a “maneja[r] la palabra de la verdad correctamente” (2 Tim. 2:15). Fíjese en cómo el hermano destaca la base bíblica de la información. Si la publicación que se está estudiando lo permite, tal vez resalte los puntos clave con un repaso final, valiéndose solo de la Biblia. Su buen ejemplo puede ayudarnos a mejorar nuestra enseñanza en el ministerio cristiano (1 Cor. 11:1).
4 Además de dirigir el estudio semanal, el superintendente de estudio de libro toma la iniciativa en la predicación. Junto con el superintendente de servicio, programa horarios prácticos para el servicio del campo. Trata de ayudar a todo el grupo a cumplir su responsabilidad cristiana de predicar las buenas nuevas y hacer discípulos (Mat. 28:19, 20; 1 Cor. 9:16).
5. ¿Qué ayuda personalizada puede obtenerse mediante el estudio de libro?
5 El superintendente de estudio de libro está interesado en el bienestar espiritual de todos los miembros del grupo. Tal interés lo demuestra en las reuniones de congregación y mientras acompaña a otros en el servicio del campo. Además, aprovecha las visitas que hace a los publicadores en sus hogares para impartirles ánimo espiritual. Nadie debería retraerse de acudir al superintendente de estudio de libro cada vez que necesite ayuda espiritual (Isa. 32:1, 2).
6. a) ¿Cómo ha fortalecido a nuestros hermanos de ciertos países reunirse en grupos más pequeños? b) ¿Cómo le ha beneficiado a usted personalmente el estudio de libro?
6 Nos fortalecemos unos a otros. En países donde se ha restringido la obra del pueblo de Dios, los hermanos se reúnen habitualmente en grupos más pequeños. Cierto hermano recuerda: “Aunque nuestras actividades cristianas estaban prohibidas, siempre que era posible celebrábamos las reuniones semanales en grupos de entre diez y quince personas. El estudio de la Biblia y el rato que pasábamos juntos al concluir la reunión nos proporcionaban fortaleza espiritual. Al comparar nuestras experiencias, nos dábamos cuenta de que todos teníamos la misma lucha” (1 Ped. 5:9). Nosotros podemos fortalecernos unos a otros de la misma manera apoyando sin reservas el Estudio de Libro de Congregación (Efe. 4:16).